El culo de mi hijastra 7
no tengas miedo, te voy a penetrar lentamente muy lentamente (le dije al oído mientras ella asentía con la cabeza).
-entonces quiero…
(un silencio casi eterno precedió a las palabras que estaba por decir)
-que es lo que querés hija?(pregunte casi deseperado)
-quiero que nunca más me llames hija (dijo en un tono grave y serio)
Su mirada se transformó y no podía traducir su significado, no entendía si eso era bueno o malo. De repente todo se me iba escapando de las manos?
-mirá, si ya nunca más te puedo llamar hija… no pasa nada. (Traté de exponer) pero no se como te voy a llamar entonces, clarifícame eso por favor.
-quiero que me enseñes a coger, quiero que me hagas mujer, quiero me llames amor. Quiero todo
Mi cabeza explotó en cincuenta mil pedazos, estaba viviendo un sueño sin siquiera haberla tocado. La tomé entre mis brazos y esta vez sí, mi verga pegó un salto mortal.
Mis hormonas dominaron cada parte de mi cuerpo, estaba en modo iron man.
-yo también quiero todo mi amor (le dije temblando de emoción), voy a ser tu mejor experiencia, tu mejor noche voy a darte algo único. Confiá en mi y hacé todo lo que te diga.
– soy tu invento, tu monstruo, tu creación(dijo con una emoción que contagiaba) cuídame mucho por favor.
Nos fundimos en un beso, parecía el último beso. Acaricié todo su cuerpo de la manera más tierna posible, bese cada centímetro conocido. Su cuerpo se tensaba se retorcía, sus pezones ganaron altura y dureza. Su mirada era deseo y súplica.
Comí sus pechos por primera vez (despierta) y sus suspiros y gemidos eran música para mis oídos.
Besé su ombligo y su piel se erizó violentamente, bajé a su vagina y le dediqué las mejores lamidas de mi vida. Jugué con sus labios ligeramente hinchados por la excitación intercalando mordisquitos mientras insertaba un dedo buscando su punto de explosion.
Pasé mi lengua desde su clítoris a su ano y el ohh!!! que salía de sus labios me animó a redoblar.
-ay si papi, me gusta mucho. No pares (decía sin saber que lo decía apretando sus párpados fuertemente)
Continué bebiendo de sus jugos mientras un dedo intruso comenzó a urgar sus esfínteres.
Mis fantasias desmedidas y el deseo por ese perfecto y hermoso culo de mi hijastra, me llevaron a convertirme en un prestidigitador que hábilmente transforma cualquier momento en un juego extremo y peligroso.
El primer orgasmo de mi princesa llegó sin avisar, mi boca se inundó de un mar de fluidos.
-Si papi (dijo temblando de placer) esto es increíble. Estoy volando.
Lubriqué mis dedos y lentamente fui perforado su pequeño ano que se había dilatado naturalmente.
-despacio pá, eso duele (suplicó)
-tranquila mi amor, confía en papi (le susurré de entre sus piernas) el dolor es pasajero.
La volteé en la cama y dejé sus rodillas en el piso y el resto de su cuerpo sobre la cama. Giró la cabeza en mi dirección con una expresión de placer y terror. Tomé un condón y me lo coloqué, comencé a frotar mi verga a lo largo de sus labios vaginales terminando sobre su precioso asterisco.
Cada vez que quedaba allí sus manos estrujaban las sábanas y su espalda se arqueaba.
-no tengas miedo, te voy a penetrar lentamente muy lentamente (le dije al oído mientras ella asentía con la cabeza)
Apoyé mi glande extremadamente hinchado sobre sus labios que parecían pequeñísimo y frágiles en comparación, la primer presión arrancó un pequeño gritito. A pesar de estar hecha una laguna de fluidos su estrechez dificultaba la penetración, volví a empujar y entró todo el glande.
Un quejido de tenue dolor suplicó mientras volvia a empujar dentro de ella, esta vez llegué hasta el himen. Esa hermosa mujer inexperta temblaba como una hoja en otoño.
-afloja el cuerpo y respira profundo(le dije con firmeza) te voy a hacer mujer.
Y sin darle tiempo a comprender aquellas palabras empujé rompiendo el himen y taladrando su virginidad llegando hasta el fondo. No emitió sonido alguno ni se movió, creí que se habría desvanecido. Así y todo comencé a dar marcha atrás para volver a entrar a una velocidad mínima
Un largo y gutural sonido salió de su boca, arqueó su espalda golpeando su cabeza contra mi pecho y como si se tratara de una criatura poseída gritó
-así se siente ser mujer? Hijo de puta!!! Me encanta!!!
Esas palabras me animaron a apurar mis movimientos y al tercer o cuarto bombeo estalló en su primer orgasmo de mujer, lágrimas de placer y felicidad caían de sus ojos al tiempo que comenzó a acompañar mis movimientos.
Salí lentamente y la puse boca arriba separé nuevamente sus labios y mientras la penetraba hasta el fondo froté sus pechos, mordí sus labios y con la lengua recorrí todo el interior de su boca. Acaricié suavemente su hinchado clítoris y nuevamente estalló en dos orgasmos seguidos que la dejaron con los ojos en blanco y la boca extremadamente abierta. Una legión de espermatozoides reclamaban su liberación inmediata y cuando no podía aguantar más salí violentamente de ella me quite el condón y acabe en innumerables chorros que terminaron en su boca su cara y sus pechos. Junte lo que caía por sus mejilla y lo deposite en su boca y así inerte como estaba comenzó a acabar a chorros como en el vídeo.
Pronunciaba palabras sin sentido y se acariciaba el semen sobre sus pechos. Se sentó con gran esfuerzo en la cama me miró con sus ojos completamente extraviados y dijo una sola palabra.
-Más…
Continuará
Que buen relato transmitises el semtimiento del momemto sin exagerar
Excelente muy excitante.