El divorcio

Después de mi divorcio me quedo con mis dos hijas, quien sabe que podrá ocurrir.
Hola me llamo Maximiliano pero todos me dicen Max, tengo 35 años y estoy pasando por un proceso de divorcio, mi esposa se llama Roxana, tiene 34 años, éramos muy felices hasta que entró a trabajar a una constructora, ahí conoció a un ingeniero, un joven de 29 años, tuvieron una aventura y se la llevó de vacaciones a la playa un fin de semana, yo la descubrí y entonces me pidió el divorcio, tenemos dos hermosas hijas, Dayana y Perla de 15 y 10 años respectivamente, yo las amo mucho y temía que me las quitara, sorpresivamente ella decidió darme la custodia

Roxana: Max, Alan quiere llevarme a vivir a otro país, las niñas no tienen visa todavía, pero el no quiere hijos, se que eres buen padre y sabrás cuidarlas

Esas fueron las últimas palabras que escuche de ella, caí en depresión y me tiré a la bebida, una noche que llegue del bar mis niñas ya dormían o eso yo, me fui al estudio y me acosté en el sillón, entonces vi a Roxana, ahí parada frente a mi

Max: Roxana mi amor, volviste a mi

La abrace y la bese con pasión, la lleve al sillón y la empecé a desnudar, besaba su cuerpo, su pechos, su cuello, esa noche le hice el amor como nunca antes, ella gemia y gozaba, a la mañana siguiente desperté en el suelo del estudio, mi amada seguía a mi lado, estaba de espaldas, bese su cabello y ella despertó, me aterre al ver la realidad, no era Roxana, sino Dayana, le había hecho el amor a mi propia hija

Max: Dayana!!! Que está pasando aquí, donde está tu madre y porque estas desnuda

Dayana: papi, de que hablas, era yo, te escuché llegar y escuché como ibas tirando todo al caminar, baje porque me preocupe por ti y te vi en el sillón, fui para ayudarte a acostarte y me besaste, me decías Roxana Roxana, pensaste que era mi mamá, tenías semanas deprimido así que decidí darte una noche de felicidad papi

Max: pero mi amor, te desvirgue, te hice muchas cosas anoche, porque no me detuviste

Dayana: papi, yo te amo y quiero que seas feliz y me duele mucho verte así, y si esto te hace feliz quiero que me hagas tu mujer, yo sustituire a mamá en todo incluso en tu cama

Me fui a trabajar ese día, no podía pensar, solo recordaba lo que le había hecho a mi niña, al volver, Perla estaba con la hija de la vecina jugando, entre a la casa y vi a mi hija mayor haciendo de comer con un mandil puesto

Dayana: ni amor ya volviste, te hice de comer

Yo estaba confundido pero excitado al ver que Dayana no llevaba ropa salgo por el mandil, me acerque a ella y la contemple, era más hermosa que su madre, 1.68 de altura, cuerpo atlético, piernas torneadas, un culo muy firme y unos pechos redondos y firmes, grandes para una niña de 15, su pelo negro y largo hasta la espalda, su piel blanca, no pude soportar la lujuria que me poseyó y me fui sobre ella, la lleve al sillón de la sala de 3 plazas, la acosté y antes de iniciar le dije

Max: mi amor, mi niña, estás segura de esto? Quieres ser mi mujer?

Dayana: si papi, si mi amor, mi hombre, quiero complacerte en todo y quiero que me hagas tu mujer

Fue todo lo que ocupe para olvidarme de todos mis prejuicios, la bese en la boca, luego su cuello, le quite el mandil y me desvestí, besaba sus pechos, su abdomen, me di cuenta que tenía mejor figura que mi ex esposa, me pose sobre ella y la penetre, está ves estaba sobrio, lo hice con delicadeza, besandola en todo momento, sentía mi verga entrando por su vagina, era una sensación increíble, ella empezó a apretar sus músculos de la vagina, practicaba yoga y gimnasia así que tenía un control increíble de su cuerpo, hizo que rápido me viniera dentro de ella

Max: ahhh mi amor te amo! Quiero hacerte el amor todos los días de mi vida!

Dayana: lo harás amor mío, soy tuya, tu mujer, y mi cuerpo es tuyo a placer para que hagas lo que decides y como lo desees

Así inicio mi vida con mi hija, mi relación con mi nueva mujer, tenía 6 meses que había iniciado a hacerle el amor a mi hija, un día llegué del trabajo y la vi en la sala con Perla, veían la tele, en cuanto me vio le ordenó a Perla irse a la cama, que ya era tarde, entonces se fue a dormir, Dayana me acompaño al cuarto

Dayana: mi amor, te deje preparado el baño, nos bañamos juntos?

Nos metimos en la tina de baño, ella se sentó sobre mi, acariciaba sus pechos, sus caderas, su perfecto culito redondo, empecé a cogermela con amor, como siempre lo había hecho, ella se puso frente a mi, cabalgandome yo besaba sus labios, y la sujetaba de sus nalguitas deliciosas

Dayana: ahh mi amor, quiero todo tu semen adentro porfavor! Lo quiero todo!

La penetre más fuerte cada ves, ella apretó sus músculos para aprisionar mi miembro, y pude sentir toda mi descarga que la lleno

Max: ahh mi amor! Que rico! Lo haces mucho mejor que tú madre!

Sabía que eso le encantaba, sentirse más mujer que su madre la excitaba mucho, así pasaron las semanas y un día me llamaron de la escuela de Perla, tuve que ir a hablar con su maestra.

Llegué a la escuela y me recibió la maestra Lupita, me llevo a la oficina de la directora, donde están Perla

Directora: perla podrías salir con tu maestra porfavor?

Max: que está pasando aquí, porque me llamaron, perla es una buena niña

Directora: lo sé señor Maximiliano, pero su maestra me dijo que la encontró en el baño… masturbándose, con un plumón, sabe que ese comportamiento no es tolerado aquí, tiene que hablar con su hija porque si se le encuentra haciendo eso de nuevo la expulsare

Me lleve a mi hija a la casa, íbamos en silencio hasta llegar, en cuanto entramos a la casa ella me abrazó y empezó a llorar

Perla: papi perdón por que te llamarán, no volverá a pasar

Max: ni amor que paso, porque hiciste eso, quien te enseño esas cosas

Perla: es que los vi a ti y a mi hermana la otra noche, se vean felices y pues no sabía porque, vi tu cosita entrando en ella y quise probarlo con un plumón

No se porque pero solo me deje llevar

Max: amor, quieres saber cómo se siente?

Perla: siii papi por favor, quiero saber cómo se siente hacer esas cosas de adultos

Max: está bien, pero esperaremos a tu hermana a que llegue de la prepa

Esa tarde al llegar Dayana le expliqué la situación, no quería engañar a mi nueva mujer así que le pedí su opinión

Dayana: mi amor, papi, creo que esto debe pasar, mamá nos dejo, perdiste a una mujer así que es justo que ganes algo también, y es mejor que perla sepa lo que hacemos, al menos fue en con un plumón y no con un compañero peor un maestro, perla, lo que hagamos aquí dentro aquí se queda, no puedes decirle a nadie, ni a tu mejor amiga

Perla: lo prometo Dayis, no diré nada

Nos fuimos los tres a la cama, Dayana desvistió a Perla y luego nos desvestimos nosotros dos, acosté a Perla y empecé a lamer su pequeña y virgen vagina, ella empezó a arquear la espalda Dayana me hacía una mamada deliciosa y ahí están yo, un padre con sus dos hijas, con sus dos mujeres, le metí un dedo a Perla y lo estuve haciendo hasta que sentí que tuvo un orgasmo, me acosté boca arriba y Dayana me monto, perla me besaba, no sabía besar así que tuve que enseñarle, metí mi lengua, probé sus dientes y su lengua, perla están con el rostro caliente y rojo, Dayana gemia de placer, perla la veía como brincaba sobre mi miembro cuando Dayana tuvo un orgasmo, se acostó sobre mi

Perla: papi quiero hacer eso, quiero que me metas tu cosita en mi

Dayana: Perla dentro de la casa no le digas papi, dile mi amor o mi hombre, y se le dice coger

Perla: mi amor quiero que me cojas como a mi hermana

Me puse sobre ella y la hice que me diera un poco de sexo oral, su boca se sentía como el cielo, cuando estuve lo suficientemente lubricado empecé a metérla lentamente, no sentí su himen en ningún momento, pensé que con el plumón debió romperlo, ella me sujetaba fuerte de los brazos

Dayana: perla tranquila, el dolor pasará pronto y solo sentirás placer

Entonces para consolarla Dayana la beso en los labios perla lo correspondió, veía a la hijas besarse mientras yo se la metía a mi querida perlita, cuando sentí que me iba a venir le dije a Dayana que abriera las piernas, se la metí y en dos metidas pide sentir mi leche llenandola

Dayana: ahhhhhh mi amor que rico te vendiste!

Nos metimos a bañar y nos vestimos, bajamos a la sala a cenar algo y sentía que no podía ser más feliz, o eso crei

Dayana: Max, mi amor, perlita, tengo algo que decirles, tengo buenas noticias

Max: que paso amor, cuales noticias

Dayana: fui al médico está mañana y me dijo que estoy embarazada, mi amor vamos a ser papás

Yo la abrace y la bese, bese a perlita

Perlita: ay que bonito, hoy a tener un hermanito! Papi, yo también quiero darte bebés

Max: y lo harás mi amor, pero ya que tengas la edad de tu hermana, ahora todavía estás chiquita

Y fue así como perder a mi esposa me hizo el hombre más feliz del mismo, ahora tengo dos mujeres a las que les hago el amor cada día, un bebé en camino, a nuestros conocidos tuvimos que decirle que Dayana se había embarazado de un novio que la dejo, era mejor a decir que su bebé era producto del incesto con su padre, yo me límite a mandarle una carta a su madre solo para decirle que sería abuela, nunca recibí respuesta, es lo de menos, yo soy feliz con mi nueva vida.