El hermano de mi amigo 2da parte y final

Así había terminado la 1ra parte del relato. Continuemos… En la primera parte les había comentado que después de que me saltara la leche por primera vez fui a contarle a mi amigo, y paso lo que ya relate. Lo cómico de todo esto es que al final por co.
El hermano de mi amigo 2da parte y final

 

Tenía pánico de que la madre vaya a contarles a mis padres lo que habíamos hecho con el nene. Pero supongo que por la vergüenza de tener que decir que nos íbamos a coger al nene y que se enteren todo que el más chico de los hijos era putito, no dijo nada a nadie.

Pasaron varios días sin vernos, ellos estaban castigados por lo que habían hecho y yo ni me animaba a acercarme a la casa, por miedo a que la madre me quiera matar jejeje.

 

Así había terminado la 1ra parte del relato. Continuemos…

En la primera parte les había comentado que después de que me saltara la leche por primera vez fui a contarle a mi amigo, y paso lo que ya relate.

Lo cómico de todo esto es que al final por como pasaron las cosas nunca vieron como me saltaba la leche.

Esa misma noche después de que pasara el miedo a que alguien se enterara, ya más tranquilo cuando me fui a dormir, vinieron las imágenes de lo que habíamos hecho a la tarde y me tuve que clavar 3 pajas para bajar la calentura.

Tuvieron que pasar más de 3 semanas para que los vuelva a ver en la calle, porque no los dejaban salir ni a la puerta. Según me conto Marcelo los cagaron a golpes por lo que habíamos hecho y recién los dejaban salir nuevamente.

En ese tiempo hablando con conocidos más grandes, pude averiguar que tendría que haber usado saliva o algo para que resbale la verga, nunca dije que me quise coger al hno. de un amigo, dije algo así, como que intente con una chica y le dolió jejeje.

Me dieron una explicación básica de cómo hacerlo, y me comentario que usara mucha saliva o algo que resbale, tipo aceite de bebé.

La verdad pensé que todo iba a quedar ahí, que nunca iba a pasar nada, hasta que Marcelo me dice…

M: para colmo de que me cagaron a palos e quede caliente

Yo: vos solo no, a la noche, me tuve que hacer la paja tres veces de la calentura, cada vez me sale más leche

M: todavía no te creo eso.

Yo: ¿me quieres ayudar vos?

M: estás loco, para eso está mi hno. Lástima que no podemos hacer nada, mi vieja no me deja que me vea con vos por lo que hicimos

Por esa época, por donde vivía, había muchos descampados, fábricas abandonadas, casas abandonadas. Así que por el lugar no sería tanto problema, solo había que encontrar la oportunidad de que ellos se puedan escapar de la casa y elegir el lugar.

En un momento de la charla Marcelo dijo algo que me descoloco…

M: ¡¡¡ahora mi hno. la chupa mejor!!!

Mis ojos se pusieron como platos…

Yo: ¿cómo que ahora la chupa mejor? ¿Te la hiciste chupar de nuevo?

M: jejeje, después de unos días de que nos cagaron a golpes, mi vieja nos manda a dormir la siesta, y como sabes, con mi hno. Dormimos juntos porque no hay espacio.

Yo: si, eso lo sé, ¿pero qué paso?

M: bueno, pasaron unos días, en la hora de la siesta me estaba haciendo una paja y se despertó mi hno. Cuando me vio me dijo.

J: ¿estás loco?, si te ve mama nos va a pegar de nuevo

M: no hagas ruido, así no se entera, ¿me quieres ayudar?

J: no, no quiero que me pegue de nuevo

M: dale, se vimos que te había gustado hacerlo

J: no, si nos ve de nuevo mama nos va a matar

M: dale. No seas malo, es un ratito, sabes que te gusta, si no hacemos ruido nadie se va a enterar

J: bueno, pero solo un ratito

La cuestión es que se pasó de cama, y se la metió en la boca, le agarre la cabeza para marcarle el ritmo y aprendió rápido me contaba.

Yo: hijo de puta, que suerte tenes

M: desde ahí todos los días a la siesta me la chupa un rato

Yo: cuéntame mas

M: las primeras veces, lo hacía porque yo se lo pedía, pero después ya venía solito a chuparla, solo me bajaba el pantalón me empezaba a pajera y venia solo a chuparla sin que lo llame

M: al principio le lastimaba con los dientes, pero ahora ya aprendió a hacerlo muy bien. Siempre me comenta que se quedo con ganas de verte como sacas la leche, porque a mi aun no me sale.

Yo: supongo que no va a faltar mucho para que salga

M: me sale un liquidito transparente

Yo: la mía es blanca y espesa

Yo: cuando quieran, buscamos algún lugar, ustedes se escapan y les muestro

Le conté lo que me habían contado mis conocidos, de cómo tenía que hacer para cogerlo, con saliva o algo que resbale y se quedó asombrado

M: ¿y vos no podés conseguir un poco de tu hermanito recién nacido?

Yo: tendría que encontrar un lugar donde ponerla, pero supongo que sí, cuando vos puedas escaparte con tu hno. Me avisas y yo consigo el aceite. Así nos cogemos al putito.

Estuvimos días planificando cuando y donde hacerlo, habíamos optado por una casa abandonada que estaba a unas cuadras de donde vivíamos. Tenía que ser por la tarde, como era un barrio de trabajadores, casi nunca había nadie en la calle a esas horas.

Acordamos para unos días más adelante, en la casa que comente, ellos se iban a escapar a la hora de la siesta.

Marcelo le comento a su hno. Que había habado conmigo y que se iban a escapar así me venían como me salía la leche, al nene le gustó la idea.

Llego el día y hora convenida, yo los esperaba en la puerta de la casa abandonada, nos saludamos y entramos.

Elegí un cuarto alejado de la calle y que tenía la única puerta, así si gritaba nadie se iba a enterar.

Yo: Javi, ¿viniste a ver cómo me salta la leche?

J: si, quiero ver como es, Marcelo me dice que es mentira, que no te salta

No hizo falta que dijera ni hiciera nada, la calentura que tenía con la sola idea de cogerlo y que me la chupe me tenía la verga como una piedra.

Me bajé los pantalones y le dije…

Yo: veni Javi, dame unos besitos en la verga, me dijo tu hermano que ahora te gusta hacerlo

J: si, es verdad, ahora me gusta, es rico. Se siente suave en mi lengua

Yo: bueno, proba la mía

El nene se agacho delante mío, me baje el short y se prendió como un borrego chupando una la teta de una vaca. No puedo explicar el placer que sentí, Marcelo se dio cuenta y me dijo…

M: viste que bien la chupa ahora, estuvo practicando jajaja

Yo: lo hace riquísimo, seguí, seguí no pares

Javi se la saca de la boca y dice…

J: ¿me vas a mostrar cómo te salta la leche verdad?

Yo: si, obvio, para eso vinimos

Y siguió chupando…

Marcelo se nos acercó y dijo…

M: yo también quiero que me la chupes

J: no voy a poder con las dos juntas

M: si, un ratito cada una, y cuando la sueltas pajeas al otros

J: pero yo quiero ver cómo le salta la leche

Yo: no te preocupes, hace lo que te dice, me va a saltar igual la leche

Y así lo tuvimos un buen rato chupando alternadamente, me chuapaba, y ajeaba al hno. Y viceversa.

Yo: porque no probamos lo del otro día, te a apoyo en la cola

J: nooooooooooo, me dolió mucho eso

Yo: no te preocupes, hoy traje aceite, así no te duele, solo te la apoyo y le chupas la pija tu hermano

J: no quiero, me va a doler, solo quiero ver cómo te salta la leche

Yo: pero de esa manera va a saltar más rápido

J: ¿seguro no me va a doler?

Yo: quizás al principio un poquito, pero se te va a pasar enseguida

No quería saber nada, pero después de insistir acepto. Se puso en cuatro, como la vez anterior le pedí que separara as nalgas, me puse aceite en la verga y un poquito en el ojete del culo.

Marcelo se puso frente a él y le puso a verga en la boca, el nene se prendió enseguida, venia como quería mirar de costado lo que yo estaba a punto de hacer. Apunté la cabeza al ojete, y se la empecé a pincelar por toda la raja. Parece que le empezó a gustar, porque no decía nada, solo se escuchaba el mummmmm como de placer.

Marcelo lo tenía agarrado de la cabeza marcando el ritmo de la chupada, le hice señas de que lo agarrara fuerte y llego el momento, apoye bien la cabeza de mi verga en el culo y presione. Conto un poco en que entre, era virgen, era chico y hacia fuerza para que no lo ensarte.

Empezó a tirar las manos para todos lados como intentando zafarse, se las agarre en la espalda y su hno. Lo tenía bien agarrado de a cabeza con la verga metida hasta el fondo.

Yo: si haces fuerza es peor, te va a doler más, ponete flojo, te va a doler un poquito, pero te aseguro que te va a gustar después.

En un momento se aflojo como queriendo respirar, aproveche el momento un empujón mas y entro la cabeza, ¡¡¡por favor!!! Lo que apretaba esa cola no tiene nombre.

Yo: tranquilo, ya entro la cabeza, era lo más difícil, lo demás es más fácil. Te va a gustar

Me quede quieto hasta que esa cola es acostumbre al invasor, me empecé a mover en cirulos como me habían explicado y cuando vi que ya no había casi resistencia, empuje hasta la mitad de la verga. El nene aun intentaba soltarse, pero era imposible, lo teníamos bien agarrado.

Pasados unos minutos comencé a bombear adentro y afuera, muy despacio, cuando e acostumbro al ritmo ya no hacia fuerza, al putito le estaba gustando, le solté la mano y siguió chupando la verga del hno.

Yo: viste putito que te iba a gustar ajajaja

No sé ni cuánto tiempo estuvimos así hasta que Marcelo pidió cambiar de lugar…

M: ahora me toca a mí cogerlo…

Yo: dale, mucho mas no voy a aguantar, así ve como me salta la leche, lo prometido es deuda jajaja

J: hijo de puta, me dolió mucho, ahora siento que en entra aire en la cola. Yo se las chupo, pero no me gusta eso, no lo hagan mas

M: no putito: ahora me toca a mí, después vemos

J: no enserio, me duele, yo te la chupo, pero eso no me gusta

Yo: que no te va a gustar, si cuando te solté las manos no quiste soltarte, ya vas a ver, después vas a pedir más, porque te vamos a seguir cogiendo seguido

J: no, esta es la única, no quiero mas

Yo: no interesa que no quieras, o preferís que le contemos a tu mama lo que hicimos, además de pegarte te va a mandar lejos.

J: no por favor, no le digan nada

Yo: entonces cállate y seguí chupando

Marcelo se fue detrás del hermano me miro y me dijo…

M: le dejaste el culo abierto y rojo boludo

Yo: ahora vos llénale el vacío jajaja

Le pase el aceite de bebe, se puso en la pija, otro poco en el culo abierto del hermano y se la mando a guardar. El pibe me soltó la verga y ego un grito de dolor.

J: ayyyyyyyyyyyy, sácala que me duele

Marcelo hizo caso omiso a los pedidos del hno., y le empezó a serruchar el ojete sin contemplaciones. El nene pegaba cada alarido, pero igual no nos importaba nada, nadie lo iba a escuchar.

Yo: dale Javi, seguí chupando que ya viene la leche, así vez como me salta la leche

Cuando se acostumbró a la cogida, agacho la cabeza y se tragó mi verga otra vez, eso ya lo hacía por puro placer suyo, le gustaba chuparla.

No aguante mucho más, le saque la pija de la boca, me aleje unos centímetros y le dije…

Yo: Mira fijo mi pija, ahora voy a soltar toda la leche

El nene se quedó mirando fijo mi pija esperando ver la leche que venía esperando hace rato, un par de sacudidas más y comenzó a brotar, el primer lechazo fue a parar a su cara, y los otros dos al piso, no fue la gran cosa, como dije recién me salía y no era mucho.

J: qué asco, me lo tiraste en la cara

Yo: jajaja. ¿No querías verlo?, más cerca no podía hacerlo

Se tocó la cara…

J: Es pegajoso, es un asco

Busque un trapo viejo en la casa, y se lo di para que se limpie, me tire en el piso a descansar mientras veía a Marcelo como le matraqueaba e ojete al hermano.

Estuvo un rato más con la matraca, hasta que se tensó tiro un ahhhhhhhh y se fue para atrás y se sentó en el piso.

Yo: viste como si me salto leche, te dije que no era mentira

Mi comentario le importo nada, solo dijo si con la cabeza y respiraba agitado.

Yo: ¿te gusto Javi?

J: al principio no, me dolió mucho, después como que me gusto un poco, sentía mariposas en la panza

Yo: acostúmbrate, porque esto lo vamos a hacer cada vez que podamos

M: hora ya es tarde, mejor nos cambiamos y nos vamos sino mama se va a enojar porque llegamos tarde.

Nos acomodamos la ropa y nos fuimos más que contentos, Javier, medio que rengueaba y decía que le dolía mucho el culo.

M: Cuando lleguemos a casa, si mama o alguien pregunta vos decís que te caíste de a hamaca o tobogán y te golpeaste. Si no nos va a matar y a vos te va a mandar lejos.

J: ok

Me volví ver con Marcelo semanas después siempre a escondidas porque tenía prohibido encontrarse conmigo. Me comento que el hno. seguía chupándole la verga todas las siestas, pero no se animaba a cogerlo en la casa.

 

Volvimos a repetir el trio varias veces, pero era complicado, a primera vez fue en vacaciones de verano y una vez que comenzaron las clases íbamos a turnos diferentes.

Con el tiempo además de por la prohibición de vernos y las cosas de la vida dejamos de vernos y de hacer cosas.

Hoy en día, creo que los dos están casados y con hijos, desconozco si ellos siguieron cogiendo

 

Hasta aquí, la 2da parte y final del relato. No me gusta estirar las historias, los polvos no varían mucho uno de otros

Si me quieren escribir, @eltecnico en telegram, [email protected] no importa la edad que tengan, charlo con todo el mundo. Mientras nadie obligue a nadie, todo está permitido. Total, solo es charlar