El Incubo del Internado 17

Finalmente comienza la extraña fiesta, donde el incubo parece gobernar, así el dará una serie de sorpresas morbosas a todos….
Advertencia: este relato es completamente Ficticio, no tiene nada de real y solo esta para entretener con una buena de dosis de morbo a todos los lectores que gusten…

 

Capítulo 17

 

Tuve un sueño bastante erótico, donde me estaba cogiendo nuevamente a miss Holly, metiéndole toda la verga mientras ella estaba disfrazada de bruja ligero vestido negro con medias a juego y zapatos de tacón, gozando de su increíble cuerpo, los grandes pechos, las bellas piernas, su cintura estrellas, gemía como una puta perdida en el deseo, mientras le iba encajando mi estaca, pero llega a mi espalda la señorita Sage para unirse a la faena, usando una lencería blanca que resaltaba su cuerpo, encajando sus redondos pechos en mi espalda, restregándolos de manera sensual, mientras lamia mi cuello por ello tuve que prestarle un poco más de atención, así cuando me corrí inundando esa deliciosa vulva, mas al no perder rigidez, la tome para embestirla de a 4, si ella misma ofrecía su culo precioso para esa diversión, y como nos hallábamos en medio del patio cívico, solo estábamos los 3 cogiendo como animales, casi desnudos y en un salvajismo que me impulsaba a metérselas hasta que se corrieran, perdidas en la mayor de las depravaciones antes de acabar. Me desperté muy temprano, en apariencia todo estaba bien, pero sabía que hoy sería un día diferente, fui por un café a la tienda de autoservicio, aunque pedí otro para Kim, cuando llegué a mi celda ella estaba despertando, se hallaba confundida, por estar ahí con su hija, ambas desnudas, no podía culparla, entré silenciosamente, al verme suspiró tranquila, tomó el café y me hizo la pregunta:

¿Qué pasó anoche? – sonaba desconcertada, pero intuyendo algo.

Yo sin saber que decir comencé a contarle, muy vagamente lo que había estado viviendo desde que me contrataron, no le conté los detalles de las cámaras ocultas que grababan a maestros cogiéndose a las alumnas o lo de mis ganancias extras, si acaso los movimientos en las cosas, y como descubrí lo del incubo, ella me escuchó tranquila, tampoco trató de vestirse, parecía querer que la viera así, al final le dije lo del espectro, como las encontré en el jardín, que este las secuestró pues quería hacer un ritual para tomar el control del demonio fracasando pero también dije que este había violado a la niña, luego me di cuenta del terrible error que cometí, así que regresé a lo del ente dando explicaciones de lo que sabía a lo cual sólo añadí:

Por lo que sé es imposible saber qué hará y si es posible detenerlo para nosotros, aunque por algún medio que no conocemos, eh ahí el problema, según palabras de la doña – dije esperando poder calmar a mi hermosa jefa.

Kim me miró sorprendida, pensé que me despediría por decir todas esas locura, aparte estando ella desnuda, hasta yo me quedé pensando en que sonaba totalmente desquiciado, pero se quedó tan calmada oyéndome que me asustó y luego de sus ropas sacó una llave y me dijo que le trajera una maleta grande del carro, yo obedecí en enseguida, fui a traerla, no sabía que pensar,  quizás iba a llamar a la policía, o a un manicomio, al pensarlo me quedé nervioso, pero al volver, me di la suerte de verla usar mi regadera, se estaba quitando todo rastro de suciedad, viendo hasta como se tallaba con una esponja sus delicioso cuerpo, y como dejó la puerta abierta, podía ver todo con claridad, como si me invitara a verla, estaba perdido, deseando entrar con ella, quería sacarme el sudor, por eso dejé la maleta en mi celda, luego fui a su lado, ella al notar mi presencia me dijo:

Es muy extraña esta escuela verdad, no soy tonta, sé que pasan cosas extrañas, pero me es incapaz de decir algo al respecto, ahora sé que no estoy loca, digo, uno de los premios de ayer era un consolador enorme, sin embargo todos lo toman como si fuera normal, supongo que sabes más cosas ¿no? – me dijo Kim con una voz perdida entre la confusión y el deseo.

Puede, algo… – de hecho en ese momento desde la puerta la miraba hablar, esperando una invitación, aunque me daba la espalda, miraba su culo hermoso y redondo.

Qué buena visión tuve, esa mujer a pesar de ser como 10 años mayor que yo se mantenía muy bella, no era voluptuosa, pero tenía un fuerte encanto que me levantaba, y de repente me dijo:

Ya decía, además como un muchacho de 20 años se va a fijar en una vieja como yo – decía Kim un poco deprimida.

Eh, siendo franco, Kim, me pareces una mujer muy sexy, siempre me pregunto que tenía en la cabeza su marido para abandonarla, porque yo estoy muy ansioso de hacerla sentir mujer cada que se pueda – le dije con humor cargado de pasión.

En ese momento notó que la estaba mirando, pero lejos de ofenderse fue algo que le gusto, comenzando a frotarse el cuerpo con cierto toque sensual que disfrutaba, quedando en poses sugestivas, envidiaba a la espuma y jabón que acariciaban su piel mientras iba resbalando.

Hay Jay, eres un encanto, supongo que para todo hay gustos no, quieres entrar, y sentir mi cuerpo – decía perdiéndose un poco en el deseo.

Claro que sí, aún quiero poner algo en marcha contigo, jejeje – me burlaba listo para meter a empalarla, pues me gustaba ver ese culo redondo.

En ese momento la pequeña Laila se levantó, estaba adormilada y salió del cuarto siguiendo la voz de su madre, estaba desnuda pero no le importó, parecía seguir soñando, avanzó hasta llegar con ella aunque me encontraba a su lado, alcanzando la regadera, recibiendo una buena ración de agua fresca, así que se bañaron juntas, aunque para no tentar mi suerte tuve que cerrar la puerta. Al parecer todo estaba bien, no perdería mi trabajo, ciertamente algo raro pasaba, pero al menos Kim era de quienes entendían la situación, tratando de hallarle sentido, y no como otros que se aprovechaban, siendo Snape o el musculoso de gimnasia quienes sacaban provecho de ello, hoy era el gran día, tendría que usar el disfraz para la fiesta, así que en cuanto desocuparon la regadera madre e hija yo me fui a limpiar, dejando que ellas se vistieran, acabaron pronto, supongo que no querían verme desnudo, y así mismo parece que la niña no dijo nada de mi aventurilla con ella, o tal vez lo tomó como un sueño porque tampoco mencionó nada de los fantasmas, eso deseaba, yo por mi parte seguí con lo planeado, saqué mi disfraz, me quedó algo justo, pero fue excelente, era como guante, entre risas me dije: es un maldito disfraz de Batman modificado con cuernos de maléfica; no me importaba, lucia excelente en él, hasta tenia los pezones marcados, pero recordando la escuelita que era esta, eso me ayudaba mucho,  así que sin más salí como un incubo, lo primero que me encontré fue a Kim, me esperaba tranquila, se sorprendió al ver mi disfraz, aunque yo estaba más contento de verla, estaba usando un traje de bailarina de cancán como le sugerí, pero todo en negro, sombrero de bruja y unos accesorios, me puso el brazo y yo lo sujete para ir juntos a la zona del kínder, donde los niños se reunían.

Fiesta de Kinder

Ni que decir de esta, los niños se sorprendieron al verme, las actividades de juegos se realizaron una parte frente al salón, pero como estaba muy soleado en cierto momento se pasaron a la sub área donde vivo, ahí ya estaban algunos maestros quienes antes acomodaron sus cosas para continuar mientras se hacían juegos, ahí eligieron a los mejor disfrazados no tuvo gran ciencia, lo ganó un niño vestido de Jack lantern y la niña que terminó de Reina era una princesa oscura, aquí no tengo mucho que decir, si acaso las madres se presentaron tomando fotos, algunas de ellas eran mujeres muy sexys, lo vi por sus tetas rebosantes en sus ropas, culos apretados en pantalones entallados, pero otras eran muy fogosas, pues no faltó que me echaran miradas indiscretas, incluso una al comer helado casi me hacía ver cómo me daría una mamada, pero lo más llamativo fue ver a su niña al lado imitándola haciendo lo mismo, al final entre competencias, juegos, adivinanzas y demás la fiesta paso sin casi ningún accidente, si acaso las niñas separadas de los demás cantaron una canción que se parecía mucho a la de Freddy Cruger, pero con la letra algo cambiada:

1 2 ya viene por mí,

3 4 me mete a la cama,

5 6 asusta a los vecinos,

7 8 me roba unos gemidos,

9 10 a nadie lo cuentas…

Luego reían después de decir eso, no podía más que ver entre líneas como el incubo ya las estaba manipulando, siendo tan pequeñas, incluso Laila que estaba entre ellas hacia ese tipo de juegos, y de vez en cuando me miraban, incluso un par de nenas se acercaron a jugar, tocando mi disfraz en especial la área de mi estaca, sorprendiéndome un poco, realmente la influencia del incubo las estaba alterando pero no podía hacer mucho, y seguimos jugando hasta que todo termino.

 

Fiesta de Primaria

Por desgracia mi disfraz tenía un horrible problema, se calentaba como no tendría idea, así que me tuve que dar una enjuagada en las regaderas antes de seguir adelante, después volví para ver la fiesta de primaria, los niños estaban muy emocionados, la directora como de costumbre daba inicio a la festividad, sólo eran unas palabras, pero me ubicaba a su lado, como si fuera su guardia personal, los niños se sorprendieron al verme, y Beni llegó para felicitarme por el traje, aunque el también lucía impecable con su disfraz, un traje elegante con cuernos y cola, muchas niñas lo miraban coquetas. Al iniciar con las actividades, todo comenzó con un pequeño desfile, iban los alumnos saliendo por salones, caminaban alrededor del jardín enseñando sus disfraces, me dio gracia ver a la pequeña Laila con traje de brujita junto a su madre, se veía tan linda, iban a juego, de hecho el traje tenía una falda cortita, una faja, y una ligera telita sobre el pecho que parecía que en cualquier momento dejaría verle todo, usaba medias, realmente se lucia entre lo tierno y erótico, a su lado se hallaba Eve, de dama arácnida o algo así, la verdad era un vestido ajustado a su cuerpo, muy corto como de licra con detalles de araña, con diadema, capa de telaraña, botas hasta las rodillas, era muy linda, y lo entallado del traje hacia que se viera demasiado estimulante, como si fuera una segunda piel que hasta sus pequeños pezones sobresalían, escuchaba desde la distancia a las madres, decían: “vez a mi hija es la más linda si todos los niños babean por ella”, “a la pequeña en poco tiempo le saldrán las tetas pues ya se le notan”, “mira el culo de mi nena idéntico al mío en mis mejores años”, “pues mi niña heredo mi lindura seguro que más de un profe se la quiere tirar y solo tiene X años”, y uno que me sorprendió fue: “cuanto a que mi hija se logra meter con el diablo junto a la directora porque yo haría lo mismo ahorita”.

Ese maldito incubo jugaba con mis deseos, y viendo a la madre también me la tiraba yo, pero tenía que seguir trabajando, aunque disfrutaba de las vistas, los niños al desfilar jugaban como debían, uno que otro se notaba precoz, alguno hacia una demostración durante el desfile, a fin de cuentas subían a una tarima para acabar el recorrido teniendo así sus 10 segundos de fama, pero las niñas se mostraban muy coquetas, enseñando sus piernitas o posando, algunas hasta coqueteaban como si fueran más grandes, yo las ayudaba a bajar, aunque en más de una ocasión alcancé a ver o sentir de más, algún culito o teta en desarrollo, finalmente me tocó ver el grupo de mi hermanita, pero mi tía no estaba, la pobre se hallaba ocupada con la comida, y Pit faltó por estar trabajando, apenas llegaría a su fiesta, o eso dijo, así que me tocaba vigilar a mi prima también, no importaba, su desfile empezó, los disfraces comenzaron a ser más reveladores, algunos solo eran mallas con adornos y accesorios, las madres seguían con sus pláticas, los padres se comían a las niñas con la mirada, finalmente salió Giby, usando un trajecito de Caperucita, el que le había comprado antes, no se lo había puesto antes así que viéndola bien realmente llamaba la atención, desde sus zapatillas de tacón pequeño, subiendo por sus piernas envueltas en una medias hasta arriba de las rodillas que hacía ver sus piernas más exquisitas, su falda tan corta, no ocultaba mucho, usaba una licra para cubrir su redondo culito, su capa le daba aire de misterio, su vestido remarcaba su cintura, al fin se veía preciosa, dijo un viejo: una lolita lista para que el lobo se la coma; después le siguió Angie, iba de diablita, además que no se había puesto la falda que le dejé, realmente se veía linda o excitante, con sus botitas y medias remarcaba mucho sus piernitas, y como era algo culoncita su leotardo se quería meter entre sus nalgas, pero sólo lograba que se remarcara su conchita, en la parte de arriba sus pezones se notaban, era obvio que estaba excitada ante tantas vistas, ahí el mismo viejo rabo verde de antes dijo: mm quiero hacer diabluras con ella; estas subieron juntas a la tarima, y Giby hizo una pose tierna, que recibió aplausos, yo tomé una foto al igual que con Angie que con un trinche que llevaba hizo otra pose pero más feroz, que adorable, al final las ayude a bajar, ambas se sorprendieron al reconocerme y se me abrazaron dándome tiernos besos, a muchos les di envidia, quería preguntar por los otros disfraces que compré, pero en eso vi salir a Tammy, iba con el traje de porrista de Giby, que era de infarto, un conjunto negro con líneas blancas y rojas con un diablito bordado, pero a esa niña parecía que ya le estaban creciendo las tetas, porque 2 túmulos como limones se formaba, muy fáciles de ver con todo y pezones, la falda no cubría mucho así que su panti amarilla se veía sin problemas al caminar, creo que más de un hombre se corrió en seco, de hecho no vi al viejo mañoso decir nada, la niña llevaba pompones, así que en cuanto subió hizo una porra en que saltó y la escuela pudo verle todo, luego al irse se me lanzó y me abrazó, por un momento toqué su redondo culito aunque fue por accidente, otra vez fui envidiado, pero no sería la última vez, porque luego salió Sally, iba de vampira (el otro disfraz), el traje prácticamente era un leotardo con una micro falda que no ocultaba nada, si acaso tenía una capa, y unas botas, todo quedó tan bien en su cuerpito que robó miradas al pasar, incluso más de un padre tuvo un accidente, la niña lucia espectacular, pues resaltaba sus formas de manera increíble, sus muslos sobresalían, su carita bella, hasta se notaban sus nacientes pechos, además no lo mencione antes pero iban maquilladas, quien lo hizo fue listo, la pequeña sólo se paró de manera coqueta antes de lanzar un beso, mucho gritaron eufóricos, y al final como toda una damita me pidió que la bajara haciendo que la tomara de la cintura, después se marcharon las 4 juntas, pero al ir correteando llamando mucho la atención, después de ello no diré más, en verdad esas 4 se robaron la función.

Durante todos los eventos, en serio se me hicieron algo triviales pude ver a la señorita Brandy, se vistió justo como le sugerí, aún no creo que fuera bueno en algo como la moda, y llegué a pensar que estaba siendo usado por el incubo, pero la bibliotecaria prácticamente usaba un camisón de seda negro oscuro, no dejaba ver nada de piel, pero tan seductor que poco se me perdía a la vista, si acaso de accesorios estaban un sombrero, una capa y unos tacones que se amarraban al tobillo para completar el atuendo, no tuve tiempo antes para disfrutar de semejante mujer, pero al verla no podía evitar la idea tengo que poseerla, ella me miraba de reojo, no se me acercaba, el festejo se había vuelto un verdadero caos, comenzaba un nuevo evento, búsqueda de objetos, les daban una lista de cosas a los alumnos para conseguirlas y quien llegara con estas primero se ganaba un premio, sin duda se quebraban la cabeza con las actividades, esta era nueva, yo sólo quería ver como acercarme otra vez a la sexy bibliotecaria o al menos a las niñas, pero no se veía ninguna oportunidad, o eso creí cuando Sally me tomó del brazo, el juego se hacía por equipos, así que ese pequeño cuarteto buscaba 5 cosas: una calavera, una dama, un gallo, una araña y el diablo, después me di cuenta que algunos objetos de la búsqueda los sacaron de la tradicional lotería mexicana, pero lo que me sorprendió es que como dama llevaron a Brandy quien por los empujones de Tammy termino tropezando, apenas y la alcancé, pero en eso, pasaron 2 cosas: le vi perfectamente sus hermosas tetas pues no usaba sostén, además todos le vieron el hermoso y redondo culo, y los chiflidos no se hicieron esperar, las niñas llegaron de segundo lugar, la competencia se tardó un poco, lo suficiente como para que se diera la comida aparte que se realizaran las votaciones, pero eso no me importaba, aunque quería pasar tiempo con las niñas y alejar cualquier viejo rabo verde, terminé con algo igual de bueno.

Tras esa vergüenza, la bibliotecaria se retiró humillada, de hecho en un acto algo gracioso, gruñí y me la lleve cargando, como si fuera todo un espectáculo, que causó cierta gracia o envidia, fuimos hasta la sub área donde tengo mi celda, ella se quería morir de vergüenza, yo disfrutando de la vista que tenía, la directora llegó para ver como estaba, pero al verla así le dio permiso de faltar, como ese lugar estaba bajo mi vigilancia estuve con ella para “calmarla” pero aproveché quitándome el disfraz, por suerte era otoño, que el traje me estaba cocinando, y no sé porque pero eso llamó la atención de Brandy, quien parecía tener ganas de un poco de mí, yo la miré por un momento, y me dijo:

Pasa algo ¿Jay? – y Brandy estaba ruborizada.

Claro que sí – le respondí listo ante la acción.

Le dije y sin darle oportunidad me acerqué a besarla, ella se sorprendió, pero respondió de inmediato, fui acariciando su cuerpo mientras al hacerlo se retiraba su traje, al principio estábamos de pie, pero una vez que cayó su vestido, y abrí mi cremallera, bajamos a la cama, ella se dejaba hacer a mi gusto, realmente ardía, quería sentir cada parte de ella, aspiraba su perfume floral con cada caricia, disfrutaba en especial de su lencería negra, aunque sus senos estaban descubiertos, así que con un deseo implacable me aferré a ellos para chuparlos a mis anchas, los lamia saboreándolos, logrando que estos se hincharan, así Brandy soltó sus primeros gemidos, estaba demasiado inquieto mis manos recorrían sus muslos al igual que sus nalgas, ella con sus piernas se aferró a mí, entregándose a mis deseos, mis verga mientras tanto rosaba en su entrepierna, como si deseara entrar otra vez, pero su tanga negra nos separaba, ambos estábamos soltando nuestros jugos, de hecho casi sentía chispas por el frote, recorriendo mi cuerpo, era una locura indescriptible, incitándome a seguir adelante, imaginaba que era igual para ella, que decía:

Qué esperas sigue – me ordenó Brandy presionando con su vulva.

Por mi parte esas palabras me hacían querer tomarla más salvaje, la bese en sus labios, dejando que sus pezones se clavaran en mi pecho, no sé porque pero con mi mano derecha tome las suyas, dejándolas arriba de su cabeza, inmovilizándola, deseándola sentir más vulnerable, después con la izquierda hice a un lado su tanga negra, y con ello comencé a sentir un calorcito más embriagador a través de mi estaca que se iba mojando por sus jugos, estábamos en ese disfrute sólo con nuestro contacto, pero me dispuse a metérsela, ella hasta se escurría de la excitación, mientras me rosaba con sus piernas, finalmente se la metí de un golpe, pero no con lujuria desbordada, estaba disfrutando cada centímetro de la penetración, sintiendo como el lugar se llenaba con su olor, a sexo, nos movíamos juntos, en perfecto ritmo, ella jadeaba, mientras me aferraba a sus nalgas para penetrarla mejor, íbamos con un movimiento constante, disfrutando cada segundo, nuestros cuerpos resbalaban por el sudor, nos quedamos enfrascados en las embestidas, sintiéndonos mutuamente, incluso me clavo sus uñas, sus gemidos se hicieron más fuertes, los hacía en mi oído logrando que se me erizara la piel, le bese el cuello consiguiendo que se perdiera en el deseo, unas contracciones en su vientre me dieron la señal, empecé a darle con cierta bravura, ella comenzó a gemir fuerte pero la detuve al besarla, jugando con nuestras lenguas, no quería que nos escucharan aunque por el volumen de la música era difícil, en ese momento mientras me introducía hasta el fondo, fue cuando descargue, ella no sé qué le pasaba que tuvo ciertas convulsiones y tuvo un orgasmo múltiple, eso me encantaba de ella, era una sensación única, su útero me acaricio muy rico la verga como si me exprimiera toda la leche, se perdía en su lujuria, quedándose sin aire, era tan intenso que no podía hacer mucho después de tanta acción, al final algo cansado me levanté, una risilla se escuchaba desde lo lejos, pero no podía prestarle atención, así que deje a Brandy recostada, desecha en la cama con las piernas abiertas, su vagina soltaba algo de nuestros jugos, sin embargo no tenía tiempo de repetir, me fui a dar una enjuagada (baño torero) me volví a disfrazar y regresé rápido a la fiesta.

Ya de vuelta en el patio, me tocó ver algo extraño, el ambiente estaba viciado, los padres en su lugar comiendo, charlando, los niños jugando, parecía a simple vista algo normal, pero eran los detalles, los adultos miraban a las niñas con lujuria como si quisieran follarlas, las madres a los chiquillos lamiéndose los labios llenos de deseo, en ambos casos sus comentarios iban cargados de morbo: a esa niña ya le toca, está en edad de merecer, yo si me la llevo a la cama; mientras que las señoras se secreteaban y reían de forma pervertida; por su parte los chiquillos en sus juegos subían faldas o las molestaban, pero había algo extraño, no sabía a ciencia cierta que era, aunque no importaba, eso era normal en la escuela, estaba en eso cuando Giby y las demás llegaron conmigo, también ellas parecían notar algo extraño, así que se quedaron a mi lado, aunque parecía que a Tammy y Sally no les molestaba o incluso lo disfrutaban, me hicieron sentarme en su mesa, como si las protegiera o mejor dicho las reclamara para mí, ahí pude ver a mi tía trabajando como si nada, al saludarla esta parecía actuar como en trance, estaba seguro que luego tendría mucho que ver en las cámaras de video, pero poco me importó porque debía cuidar a esas 4, pues todos alrededor las miraban con un deseo de llevárselas a un rincón para cogérselas, cosa que no me sorprendía, si yo mismo estaba apenas soportando la tentación.

La fiesta se acabó, varios eventos se habían terminado muy rápido, todos estaban en la espera de algo que liberara la lujuria, pero afortunadamente eso nunca pasó, los alumnos finalizaron su festejo y los que no estaban sujetos al internado se fueron, pude ver como más de un padre de familia al salir se quedaba serio, como si lo que se vivió dentro fuera algo que se deseaba dejar atrás, sin saber porque se dijeron tantas cosas, los deseos carnales por algunas nenas quedaron como graves errores en sus caras, incluso el viejo rabo verde al pisar fuera parecía alguien distinto, y me quedé pensando si todo lo dicho era provocado por el incubo o este solo hacia surgir los deseos más pervertidos de uno, los que ocultamos de todos, si ese es el caso se entiende lo de los maestros y la fantasía con las alumnas, pero me dejo pensando cuales serían los sentimientos de Giby o Tesi, puesto que ya habíamos tenido apasionadas sesiones de sexo, en eso estaba cuando llegó a mi lado el profesor de gimnasia (el gordo) al parecer su hermano (el musculoso) y el Snape fueron a una fiesta privada de alumnos de secundaria como de bachiller, organizada por uno de los padres en una residencia, según mencionó, dejando a la escuela con sólo los del internado o hijos de trabajadores, haciendo al festejo más pequeño.

 

“Fiesta Final”

Aquel aviso no me lo esperaba, cuando regresé el número de alumnos era menor al esperado, aparte no había padres de familia, sólo un buen grupo de adolescentes listos para festejar y los niños que al ver la situación se negaron a irse pensando en alargar su fiesta, aparte como si todo pareciera acorde con la temática el cielo se ennegreció, dando la impresión de una tormenta, no importaba, rápidamente la directora nos pidió a los trabajadores que acomodáramos unas lonas para estas situaciones, las cuales no tomaron más de 30 minutos colocar, oscureciendo más el ambiente, de hecho pude notar como una leve lluvia caía, pero siendo exacto ahí el lugar estaba que ardía, lleno de un olor que parecía hipnotizar a todos. Una vez listo todo la fiesta se reanudó, la directora pensó que lo mejor sería continuar con los alumnos del internado, esperando que no ocurriera algo malo, por fortuna Beni, el gordito, otro profe que no sobresalían en nada , aparte las maestras: Sage, Holly, Amber se quedaron, pero nada más ellas, bueno aparte la directora y yo, así que nos las tendríamos que ingeniar, empezamos con el concurso de pasarela, para la reina de la secundaria y bachillerato, ya no me di cuenta por metérsela a Brandy, pero gano una niña en primaria con un traje de bailarina árabe del 5to grado, muy linda realmente, de piel tostada por el sol y figura bastante precoz, mientras que el rey fue un niño de 6to con un traje de gorila, bastante malo, se nota que lo eligieron por broma. Los chicos de secundaria fueron los primeros en salir, no había disfraces de héroes como ahora se acostumbra, hubo zombis, vampiros, fantasmas, botargas de este último fue el ganador, quien llevaba una de Godzilla, se lo mereció, pero lo importante eran las chiquillas, pronto desfilaron en distintos trajes, algunas altas, bajitas, llenitas, flacas, algunas muy precoces, otras no tanto, ver esos cuerpos que apenas se comenzaban a desarrollar, era un placer para muchos, caminaban coquetas por el patio, tratando de llamar la atención de los alumnos o maestros: una angelita, diablita, porrista, bruja, etc.; dicen que en Halloween hay 2 tipos de disfraces, aquí solo se presentaba de uno, eróticos, no tomó mucho antes que tocara el turno al grupo de Tesi, pero la primera en salir fue Lexy, sabía que tenía problemas con sus padres, imagine que iría de princesa, pero en vez de ello iba con el disfraz de enfermera que le dejé a mi hermana, era para infartarse, zapatilla y medias resaltaban sus bonitas piernas, la falda no ocultaba mucho de vez en cuando dejaba ver sus muslos o su tanga, morada, el traje aparte ajustado delineaba su vientre, no tenía mucha teta, pero en ella esa ropa lucia increíble, recibió chiflidos y muchos le tomaron fotos, subió a la tarima, los chicos enloquecieron al verla posar, casi podía oler su perfume natural diciéndome: Viólame; que suerte la mía que tropezó para caer en mis brazos, tuve que sacarla cargando para dejar el paso libre, y pude sentir sus piernas a pesar de ambos disfraces, al igual que la envidia de todos, luego siguió Tesi, la historia se repitió, iba de dama de la noche, pero el vestido tenía un escote hasta el ombligo, era sumamente entallado, la falda larga con aberturas a los lados que dejaban ver perfectamente las piernas, unos tacones y medias terminaban el conjunto, que preciosa, que gran vista, a muchos les encantó, la única razón por la que no se lanzaron como con Lexy es porque sabían que era mi hermana, pero ella al notarlo lo aprovecho y cuando iba a bajar se dio la media vuelta para dejarse caer, yo la atrape sin falta, a lo cual me respondió coqueta: mi héroe, dándome un pequeño beso cerca de la comisura del labio, esto molestó a todos los presentes, las vi retirarse mientras recordaba la niña que fue, pero ahora era una mujercita muy sensual.

No hare muy largo esto, al final gano una chica que iba de diablita con un leotardo negro y capa morada, el traje estaba casi pegado como una segunda piel, tenían que bailar, así que al godzilla le toco la suerte de ser su pareja y se notaba como sus manos nunca soltaron sus redondas nalgas, de igual forma los alumnos nunca dejaron de mirar, de hecho en ocasiones parecía amasar esa carne dejando ver el hilo de tela al igual que parte del ano, todos se relamían los labios, deseando sujetar esas masas tan grandes, redondas, deseables; además la chica una castaña rubia de ojos azules era un encanto, la más aventajada de su grupo, pero no de las mayores, una mezcla de niña con mujer, seguramente los padres eran igual de locos que los de Lexy y la tenían encerrada ahí, pensando que de esta forma los chicos no la tocarían, si la vieran en este momento se infartarían, ella disfrutaba de su manoseo, incluso su rostro parecía estar guardando unos gemidos, el aire estaba cargado de erotismo. Durante ese baile del terror pude ver a varios estudiantes ser bastante intrépidos, tratando de tocar de mas a las niñas, incluso algún valiente o pícaro se besaba con su pareja, también amasaban sus carnes, perecían estar controlados por una lujuria extraña, que los hacía ir más lejos, tratando de disfrutar de aquellas formas no completamente desarrolladas, esa sensualidad que solo esas nenas podían tener, y por qué no admitirlo, a mi poco me faltó para intentarlo, pero cuidar de Laila, la directora y mis hermanas, no me dejó que sentir a alguna de esas pequeñas diosas del sexo.

Como los planes cambiaron seguimos con el desfile de bachillerato, aquí no tengo mucho que decir, más que “putas”, así se veían las estudiantes, algunos trajes revelaban o mejor dicho no escondían nada, camisas o tops que eran apenas bikinis, tangas que se alcanzaban a ver bajo micro faldas, los alumnos iban con ropas comunes, pero con maquillaje para darse un tono aterrador, así estaba Simón con ropas de zombi, pero las alumnas casi se ofrecían deseosas de sexo, no mentiré que en más de una ocasión, durante el desfile alcancé a ver como algunos disfraces enseñaban más, pezones incluso coños rasurados, la fiesta tomaba un aire demasiado excitante, y como me tocaba ayudar en la pasarela pude disfrutar de cerca a cada participante. Para ese momento las mesas que ocuparon los padres de familia estaban siendo usadas por los otros alumnos, los más pequeños de primaria fueron retirados para ver películas, pero quienes siguieron ahí formaron sus grupitos, cabe decir que en una mesa estaban Tesi, Giby y sus amigas (incluida Angie), yo seguía en mi trabajo cuando me tocó ver a Tea salir a la pasarela, realmente se veía increíble, su traje era de dominatrix, de cuero ajustado botas, medias, liguero, guantes hasta los hombros, con alitas y cola, una súcubo, camino con seguridad, y a cada paso sus tetas se movían, realmente sobresalía de entre todas, además las poses fueron sugestivas, se daba a desear cuando estaba en el escenario, como si quisiera que la cogieran ahí, todos se la comían con la mirada, antes de bajar ella me pidió que subiera no sé porque lo hice, pero esta me beso apasionadamente sin importarle nada, coloco su pierna sobre mí, no pude evitarlo mis manos se aferraron a su culo, después de ello se soltó y bajo, hubo un silencio, pero la directora le dio avance, en la mesa donde estaban mis hermanas podía notar el sentimiento de celos. También hubo un poco de ello por parte de Drew y Michelle, quienes iban de sexys sirvientas con ligueros, faldas que apenas cubrían sus nalgas y escotes que no podrían contener sus pechos, o también vi como otras colegias sacaron trajes de infarto, pero al final gano un chico con disfraz de integrante de kiss volviéndose rey y por su parte Tea quedo como reina, pensé que bailarían juntos, cosa que me disgusto, pero para sorpresa de todos el alumno, un chico en su último grado fue tan osado para ir por la maestra Holly, esta no sé porque aceptó de inmediato, sin replicar nada, fue sujetada de la cintura y comenzaron a bailar, aunque el muchacho parecía interesado en sentir cada centímetro de la maestra, quien de vez en cuando me miraba, pero no hizo nada, más que dejarse sobar por el alumno, mientras que Tea nuevamente se lanzó a mis brazos deseando bailar conmigo, realmente era una chica erótica y hacíamos buena pareja, al menos por los disfraces, por suerte no se presentaría ningún otro tropiezo, aunque pude sentir su cuerpo con toda facilidad y por ser alto casi podía verle todo, idea que parecía gustarle, el baile siguió su curso, pero todo se volvería una erótica película de horror.

Las actividades continuarían, o casi, no había tantos alumnos como para seguir con algunas actividades, pero muchos de los presentes estaban puestos para la competencia de lo obsceno, así que con eso terminaríamos, antes bien nos reorganizamos y realizamos algunas competencias, incluso en juego se hacían algunas entrevistas a manera de broma, muchos alumnos aprovecharon para saber de los maestros, hasta yo salí perjudicado pues me preguntaron cosas.

Eres virgen, diablo – preguntó un alumno.

Claro que no – asegure haciendo voz gruesa.

Con quien fue tu primera – dijo una alumna gordita.

Mi primera ¿Qué? Porque mi primer experiencia y mi primera vez fueron diferentes y eso es secreto – dije de manera sugestiva, encendiendo los ánimos.

Vamos, al menos dinos si te “diviertes” con alguien aquí – dijo un alumno ansioso.

Si, lo hago, pero eso es privado – aseguré un poco serio.

Al escuchar eso todos aullaron de emoción, de muchos ahí era quien mejor respondía, pues a miss Holly no le sacaban muchos datos, aunque le hacían preguntas sumamente candentes, solo que parecía estar buscando un romance serio, mientras que mis Sage no se mostraba interesada en eso, la hicieron enojar y fue tan divertido, si supieran las cosas con ella, Beni curiosamente tenía novia, pero estaba fuera de la ciudad por una maestría, y en ese momento el gordo de física declaró que se casaría con Nancy de cocina. Era un buen ambiente, así mismo descansamos, ahí pude ver como mi tía convivio un poco antes de irse, además note con cierta gracia que hasta uno de los cuchillos que usaba parecía de utilería, la verdad prepararon un banquete que fue muy bien visto por los alumnos y maestros, sin duda se ganaron su bono, mientras eso ocurría veía la actitud picara de los estudiantes ir por todas partes, molestando a las compañeras, con toques que iban un poco más de lo permitido, recordaba a todos los chicos que decían desear intentar algo en la escuela, pero nada de eso ocurría, imaginé que estarían en la otra fiesta, y no podía más pensar que quizás fuera de la influencia del Incubo se calmarían un poco, o por lo menos eso deseaba. El tiempo continuaba, mi tía se había retirado y al parecer Pit no llegaría, habían puesto música y los estudiantes bailaban, hacían payasadas o demás cosas, muchas con tintes eróticos, no supe cuántas veces, los muchachos se pusieron detrás de las compañeras y restregaron sus miembros contra las nalgas, como si las estuvieran penetrando, o por el contrario las alumnas toqueteaban los paquetes de los chicos, no faltaron incluso los besuqueos a plena vista, miraba a los maestros y estos parecían estar en su mundo, ni siquiera la directora se notaba consciente de lo que pasaba, hasta que Beni se le acerco mostrándole la hora, así que de inmediato dio aviso para iniciar el ultimo evento, el esperado concurso de lo obsceno.

Qué cosas, se podía decir que era lo más esperado, y realmente fue algo de tomar en cuenta, pero para ese momento ya no importaba casi nada, las presentaciones se fueron dando, por suerte muchos de los que estaban ahí eran participantes del evento, creo que sólo los que están en el internado tienen el tiempo para prepararse, así comenzaron con un monologo donde un chico raro platico:

Era una noche oscura y tormentosa, una colegiala regresaba al internado, vestía con falda, blusa y medias hasta la rodilla, era tarde y no alcanzó ningún camión, así que con lo poco que tenía se acercó lo que pudo gracias a un taxi, para despistar al conductor se metió por el bosque, esperando que este no lo siguiera, pues se había dado cuenta que la miraba con lujuria, y tenía razón, al poco de salir del carro se dio cuenta que la estaba siguiendo, este era uno de esos viejo mal encarados que fumaba cigarros extraños, ella no quería acercársele, así que sabiéndose acechada corrió tanto como pudo, por suerte conocía mejor el lugar que este infeliz, quien se tropezaría para clavarse una rama en la cara, pero la chica no seguiría a salvo, pues es bien sabido que algo siniestro ronda por el área, así que cuando vio al chofer irse, se relajó, dejando que lo otro la alcanzara, una bestia extraña, algunos dicen salida del averno, está envuelta en oscuridad, la miraba, como sombra sin hacer ruido la atrapó cuando se hallaba a unos pasos de llegar a la entrada secreta del muro, ahí la derribo, mientras de su boca salía su lengua envuelta en baba, fue introduciendo está en su boca como si fuera tentáculo, pronto con sus garras la inmovilizo, las rasguñaba ligeramente, pero no intentaba cortarla, en realidad se fue deshaciendo de la ropa, dejando la bella figura de la chica, sus redondos pechos, su virginal gruta, la pobre muchacha quería huir, estaba tan asustada, pero no podía moverse, el miedo la detuvo, se hallaba agachada, apoyándose con sus manos, oliendo el hedor de la criatura, mientras sentía como algo extraño y baboso se iba formando frente a su virginidad, no sabía porque pero, pese a lo terrible de la situación su concha babeaba, lista para ser ultrajada, aunque su mente temblaba de miedo, pero todo pensamiento cesó cuando una terrible estaca de carne irrumpió dentro de ella, era enorme y fácilmente sobresalió de su cuerpo, estiraba su intimidad de forma exagerada, la metía con furia, la sacaba veloz, era una bestia, pero la joven siendo víctima de una lujuria sobrenatural aceptaba esa violación por culpa del demonio a su lado, este la embestía logrando que dejara salir fuertes gemidos que se volvían gritos de placer, su cuerpo se estremecía, pero no era suficiente para el monstruo que sin que la pobre chica pudiera predecirlo recibió el nuevo impacto de una nueva verga pero ahora en su culo, siendo violada por ambos huecos, la pobre se volvió presa de una lujuria infernal, y dicen que aunque esta criatura la dejó libre después de correrse tanto que casi la ahoga en su leche, está la siguió para volverse su esclava, y de esta manera es como ese monstruo permanece vigente en el bosque atacando a su siguiente víctima o pareja… 

Siguieron los chistes obscenos que decían: que era lo más sexi que podía ponerse una mujer en las orejas… pues las rodillas, cosas así.

Por su parte los maestros habían formado una especie de jurado, donde calificaban a los participantes, tomaban notas, no sé si había algún premio, sólo me contentaba con ver las actividades realizarse.

Así fueron presentándose y entre las más sobresaliente pasaron las chicas de una coreografía, que con música sensual hicieron un baile erótico, encantó a todos, al final hasta Simón hizo de las suyas, más de lo que uno quisiera, pues presentando su rutina cómica, en la que se disfrazó de bufón, haciendo cada peripecia, terminó por robarle un beso a la directora, cosa que sacó a todos de su lugar, nadie lo esperaba, pero algo pasaba, todo se enrareció a partir de eso, como si fueran posesionados, y más cuando un arlequín con una voz rara tomó el micrófono para dar un aviso, pues debían elegir los ganadores del disfraz entre el cuerpo de trabajo, todo parecía demasiado extraño, aún no terminaba el concurso, además lejos de votación ni nada el enrarecido Simón me apuntó a mí como Rey, por lo que recibí muchos aplausos, pero estos venían de personas que mostraban gestos que no reconocía, mientras que la reina sería miss Holly, quien parecía estar fuera de sí, muy confundida, y en vez de recibirlo como un honor, esta fue tomada por los estudiantes, para llevarla al centro del área, donde su vestido de bruja fue retirado a jalones desesperados, liberando sus enormes pechos, que de inmediato fueron toqueteados por todos los chicos, de hecho no había parte de ella que no fuera acariciada, la mujer se dejaba hacer, parecía atrapada en un placer carnal desconocido, eran principalmente alumnos de bachillerato, pero en ese momento el rey de prepa comenzó a ser más valiente en su toque, en menos de lo que se esperaba su mano ya había alcanzado el culo de la maestra, a la vista de todos, ella parecía estar contenta con eso, mientras el adolecente le tocaba a sus anchas, sintiendo cada centímetro de su piel, fue jugando por unos momentos con los bordes de la tanga (que aún se mantenía fija) hasta que finalmente fue haciéndola a un lado, se veían su dedo índice y menique sobresalir, pero anular y medio se perdían entre la carne, la maestra gemía con fuerza, sin embargo el chico estaba lejos de terminar, parecía estar a cargo de todo ese ataque, pues los compañeros se hicieron a un lado para dejarle a sus anchas, y si acaso mantenían inmóvil sujetándola, ahora el chico kiss con sus manos ocupadas pudo usar su boca para enterrarla entre las enormes tetas, a mordidas se abrió paso por el sostén para alcanzarlas, lamiéndolas desesperadamente, no podía dar crédito a lo que veía, comenzando a cogerse a la mujer mientras todos la mantenían en su lugar, de hecho algunos se sacaron sus estacas para empezar a masturbarse, pero el “rey” de preparatoria tendría el gusto principal, sacando las prendas íntimas al igual que su verga la encaminó para enterrarla dentro de la maestra liberando así un fuerte bufido mientras comenzaba a bombearla.

En ese momento me di cuenta que no era el único, todos a mi alrededor hacían algo obsceno, el maestro que ni recordaba el nombre se ponía una botarga para acosar a las alumnas, las tumbaba en el suelo, y de esta le salía un dildo con el cual fingía estarlas penetrando, pero por algunos “disfraces” se veía que alcanzaba a metérsela logrando verdaderamente una especie de violación, por otra parte la miss Amber era rodeada por los alumnos, sin que pudiera hacer nada la tomaron entre todos para atarla a una mesa, así indefensa con el traje de bruja, le sacaron la tanga y dejaron expuestas sus tetas, aunque dejaron su coño al borde para poder penetrarla libremente, el grupo estaba compuesto por alumnos de diferentes grados, desde los más grandes de primaria hasta los que estaban por ir a la universidad el siguiente año, aún así ella lo gozaba, volviéndose la “victima” de estudiantes que formando una fila empezaron a penetrarla tomando turnos, logrando sacarle gemidos por cada maquinación de su atacante de turno, por lo que la mordían, chupaban o besaban mientras la embestían y sólo cuando se corrían le daban tiempo de tomar aire, por su parte Beni estaba siendo presa de las estudiantes de primaria, niñas de 4to, 5to y 6to, con todo y su imagen de casto, había sido incapaz de detener nada, siendo desnudado por las chiquillas, quienes lo obligaban a comerle los coñitos, sentado en el pasto de una de las jardineras, había una fila para estar con él, las alumnas se colocaban de frente y se alzaban las falditas o hacían a un lado sus leotardos buscando que este les chupara, cosa que hacía con sumo cuidado, ellas gemían complacidas y en ocasiones lo empujaban contra sus partes, algunas incluso se agarraban sus nacientes tetitas en señal de disfrute, pero la verdad todas ya estaban muy calientes pues desde antes, se acariciaban desesperadas viendo a la de turno, aparte que no faltaba que alguna le comenzara a hacer una mamada, no supe cuántas veces terminó corriéndose, pero llegó un punto en que las niñas comenzaron a usarlo por completo para frotar sus pubis como si quisieran dejarlo impregnado de su olor. Por su parte la señorita Sage había sido sometida, estaba amarrada a una columna, era un grupo de chicos disfrazados de calaveras (aunque parecían faltarles miembros), que como todos unos rufianes sacaron unas navajas con las que deshicieron su ropa, sin miramientos comenzaron a violarla, la verdad se veía increíble la escena, pues sus pechos fueron liberados logrando que se menearan de forma exquisita, y su pubis al enseñarla se mostraba recién rasurada, ella al principio se quejaba, pero en cuanto sus tetas fueron acariciadas, o su pantaletas fue lanzada lejos liberando su aroma a hembra, la lujuria comenzó a vencerla, un par se aferraron a sus pechos para chuparlo, mientras que otro comenzó a lamerle el coño, se notaba su desesperación, su falta de tacto, pero aún así lograron que esta se calentara lo suficiente, todo su cuerpo era sometido a esos toques bruscos e inexpertos, pero que estaban cargados de lujuria, la cual logró hacerla mojarse, así el chico que encabezaba se escupió sobre su verga para clavarla, comenzó a penetrarla sin cuidado, parecía más un animal, pero se notaba el deseo, e indirectamente ella también, el gusto le duraría a la maestra, eran al menos 6 alumnos, mientras tanto había un enorme grupo de estudiantes, no supe en su momento que pasaba, pero después por las grabaciones me di cuenta que el profe gordo se cogía a su prometida, Nancy, y varios de primaria lo veían, algo que no quiero recordar, digo la masa de grasa casi aplastaba al voluptuoso cuerpo de la mujer, era algo erótico y repulsivo, por suerte estaban tan metidos en mirar esto que nadie se dio la tarea de grabarlo con el celular, por donde quiera que veía los alumnos hacían alguna locura, las parejitas se besaban de forma escandalosa, incluso se tocaban listos para tener sexo, haciendo a un lado sus disfraces, tapizando el suelo mientras un aroma sexual se fijaba, cuerpos jóvenes se enrollaban entre sí, sudando entre gemidos y caricias que traían consigo a la lujuria, comenzaban las primeras penetraciones dejando ver como algunas vulvas sangraban, por donde quiera se notaba como nacía una orgia, también llegue a ver a miss Kim, que sorpresa Simón se lanzó a ella besándola, primero en su boca pero gradualmente bajo a su entrepierna, incluso con sus manos alcanzó a tocarle las tetas, logrando que esta se corriera, al tiempo que algunos alumnos al verla así comenzaran a masturbarse a su alrededor, pues muchos notaron que la directora era más atractiva de lo que querían creer, eso me encelo un poco, estaba a punto de ir para reclamarla, pero en eso alguien me llamó a su lado:

Vamos Cariño, sigue así, párteme en 2 – rogaba Tea sintiendo su irresistible aroma sobre mí.

No sé cuándo pero ya estaba metiéndole toda la verga a mi colegiala favorita, estábamos  sentados en plena jardinera, su disfraz se hallaba a un lado tirado, o casi, las medias y botas, los guantes quedaban, mi mascara era lo único que no estaba, sus tetas se movían de un lado a otro en un cadencioso andar, su cuerpo cubierto de sudor, despidiendo un olor que me excitaba más, cada penetración era intensa, podía sentir perfectamente su interior acariciándome, mientras que sus jugos corrían libremente, mis manos se sujetaron a sus nalgas y al hacerlo ella se lanzó a besarme apasionadamente, jugamos con nuestras lenguas, al tiempo que sus tetas se clavaban en mi pecho, luego de unos momentos se soltó, solo para aferrarse a mí como si no quisiera que nadie le quitara su lugar, en eso volteé buscando a mi familia, vaya mi sorpresa, casi a mi lado estaba Giby junto a Angie, se estaban dando gusto ellas mismas, sus pequeñas manos acariciaban su intimidad, mi hermanita se había sacado la licra para acariciarse con más facilidad, dejando libres sus muslos, la blusa también estaba a un lado dejando ver sus nacientes pechos, que ya empezaban a tomar forma como de pequeños limones, en realidad diría que sus pezones estaban muy hinchados, se hallaba sentada sobre su capa, creo que para no ensuciarse, jugaba con su vulva de manera tímida, mientras acariciaba sus pechos, gemía mirándome coger a una chica que apenas conocía, su gesto celoso era un encanto, su cabello un desastre, sudaba tanto, por un momento se acercó a mi depositándome un pequeño beso antes de tomar distancia y seguir con sus tocamientos, pero casi al tiempo de hacerlo le siguió Angie, estaba casi a mi espalda, ella aún estaba vestida, sin embargo se restregaba su trajecito para frotarse su coñito, era tanta su ansia que se empapaba, llegando a mojar sus piernitas, había tenido un orgasmo en frente de mí, después de ello se sacó de un movimiento su disfraz, quedando casi completamente desnuda, seguía tallándose su parte, como si aquel orgasmo no fuera suficiente.

Estoy celosa hermanito – repentinamente me dijo Tesi.

Me distrajo mi otra hermana, y al girarme, ella está a mi lado, en una escena que me prendió más, si eso era posible, su traje estaba hecho a un lado, y encajaba su intimidad en la de Lexy, quien hacia pequeños movimientos para intensificar esa sensación, era exquisito verlas masturbándose una a la otra con ese contacto tan sensual.

Después de ella seguimos nosotras – era Lexy casi desnuda.

Lo decía como una súplica, mientras se notaba que sus medias se humedecían, ya se estaban corriendo, sólo faltaban Sally y Tammy, pero no las veía por ningún lado.

Acaba conmigo cariño – me pedía Tea mientras se clavaba ella misma, moviendo mas su culo para sentir más mi erección en su interior.

Tea se hallaba completamente celosa por prestarle más atención a las demás, no sé qué me paso, su gesto me encantó, sus ojos llenos de lujuria, sus mejillas rojas, su boquita lista para besarme, estaba dominada por el deseo, así que comencé a darle con más fuerza, al hacerlo ella se corrió de inmediato, ahogaba su propio gemido, aunque su intenso orgasmo lo pude sentir, pero lejos de caer se sujetó más a mi cuerpo, yo estaba por perder el equilibrio así que con un brazo me sostuve, aunque con el otro la agarré, y al hacerlo metí mi dedo en su culo, ella reaccionó en su lugar, sin quererlo le provocó un extraño respingón que me causo que le llenara por dentro su linda concha, ella se quedó abrazada a mi sonriente, diciendo:

Te pertenezco – me dijo Tea dejando ver un gesto tan sensual.

Sólo tras unos momentos en que me pude recuperar es que se soltó, luego la tomé y la dejé recostada a mi lado mientras veía como mi leche salía de su gruta, no sé qué me pasó, pero en vez de cuidar que nadie la tocara como debería me acerqué a mi hermana Tesi y su amiga Lexy, las acomodé una sobre otra, no sé cuántas veces se habían corrido, ignoraba las veces que lo había hecho yo, pero me sentía como un animal furioso, así que me dirigí y arranqué parte de sus medias, e hice a un lado sus pantis, ellas se dejaban manejar, me miraban deseosas de sentirme dentro suyo, pero antes de hacerlo frote de verga entre sus panochas, sin penetrar a ninguna, y al hacerlo con cierta fuerza agitaba sus clítoris, arrancándoles suspiros y comenzaron a mojarse, mientras recuperaba mi erección, y así me iba mojando con esos jugos que me revitalizaban; sus disfraces estaban de cierta forma intactos, pero no por mucho, las fui acariciando, sintiendo cada forma, sin duda Tesi aventajaba mucho a Lexy, sin embargo esta tenia cierto encanto que le ganaba a mi hermana, se podría decir que una era la linda chica deportista con cuerpo de infarto mientras que la otra era la dulce chica deseable a quien le dedicas tus deseos ocultos, y ahora las tenía para mí solo, aún seguía acariciándolas, aunque en la primera oportunidad alcance el zíper de Lexy y lo jale para sacarle el vestido, por lo menos en la parte de arriba, la alcé un poco, quería sentir esos pecho tan tibios, blandos, su cuerpo se sentía tan suave, mis manos fueron algo duras con su pequeña figura, sin embargo ella no estaba quieta pude notar como sus propias manos sobaban el busto de Tesi, lo había sacado de su disfraz, acariciándolo, jugando con sus pezones jalándolo, eso hacía que mi hermana diera unos leves quejidos , que trataba de ahogar con su mano derecha, pero en eso con la izquierda sujeto la mía y dijo:

Empieza conmigo – suplico Tesi casi ofreciendo su coño.

No me importó nada, sujetando a Lexi me acomodé, para ese momento había recuperado mi erección, así que encaje mi verga, la cual fue recibida sin problemas por la gruta de mi hermana, comenzando un lento vaivén, pero en eso la rubia dijo:

Te estás cogiendo a tu hermana – señaló Lexy sorprendida.

Importa – gruñí mientras comenzaba a embestirla.

Solo acaba pronto sigo yo, pervertido  – suplico Lexi ofreciendo su vulva.

Pervertido, tú eres una pequeña putita – Dije molesto y se la clave con más fuerza a Tesi.

Sí, pero soy tu putita – respondió lexy pérdida en su deseo antes de acomodarse para besarme.

En ese instante, mientras nuestras lenguas jugaban, tomábamos aire, pude ver a Angie y Giby, ambas seguían siendo masturbadas, pero en esta ocasión no era por ellas mismas, sino que Sally estaba detrás de mi hermana acariciándola lentamente, haciéndola gozar con fuertes movimientos logrando que callara unos grititos y Tammy detrás de mi prima, haciéndola gemir con más fuerza al acariciarle su botoncito con cierta malicia, no alcanzaba a verlas bien, creo que estaban desnudas, con un gesto de viciosas irresistible, mientras las niñas de mi familia eran manejadas al antojo de ambas chiquillas perversas que lograban con solo 2 dedos sacarles tremendos gemidos que hasta daba gusto oírlas, incluso con sus piernitas mantenían abiertas a las de las otras, como si las tuvieran atrapadas completamente, era una locura muy excitante, llenaron el ambiente con el olor de sus fluidos, logrando que me calentara aún más, eso lo notó Tesi que me dijo:

Hay hermanito, así – gimió tesi pues mi sangre ardía.

Termina que sigo yo – suplico lexy ofreciendo su coño.

Yo sólo me dedicaba a metérselas con más fuerzas, mientras mi estaca entraba y salía de mi hermana, quien lo gozaba soltando sus jugos, en eso mi mano izquierda se sujetó de su amiga introduciéndose en su intimidad, ella se mantenía gimiendo entre besos, a veces solo jugábamos con nuestras lenguas, que caliente estaba, su saliva era tan dulce, mis dedos resbalaban porque estaban empapados, su vagina era tan jugosa que chorreaba hasta el suelo, no supe cuándo pero caí sobre ambas mientras me corría dentro de Tesi, gozaba de lo lindo, pues al correrme ella logró su orgasmo, con el cual soltó sus jugos hasta escurrir, termino agotada con un gesto muy erótico, perdida en el placer, sin embargo no sentía que estuviera cansado, porque en vez de calmarme se la metí con fuerza a Lexy, quien chillo de la sorpresa, su interior estaba ardiendo, tan húmedo, no supe cómo pero continúe con el juego, ella lo gozaba, tanto que por un acto reflejo comenzó a besar a Tesi, jugando con su lengua, quien desfallecía, pero consiguió responder aletargada, mientras que yo al ver esto empezaba a metérselo con más fuerza, ella al sentirlo dijo:

Hay papi, no pensé que fuera tan brutal – me decía Lexy viéndome a los ojos.

No respondía nada, me sentía mudo, sólo quería disfrutar de su cuerpo, todo me calentaba, hasta su sudor, lo que la hacía verse, sentirse y oler irresistible, no pude durar mucho, ya llevaba demasiada acción, pero con todo eso me hervía la sangre tanto que con un bufido me volví a correr, ella se estremeció recibiendo toda mi carga, mientras lo hacía un tremendo orgasmo le dio, dejándola hecha un desastre, su cara estaba invadido por el deseo, incluso dio un sonoro gemido que muchos habrían oído.

Después de eso algo más ocurrió, voltee a ver dónde estaban Giby y las demás niñas, pero no se hallaba ninguna, todo a mi alrededores seguía como hasta ahora, los maestros ahora reclamaban su lugar, comenzando sus faenas, o casi, la maestra Amber seguía sometida por los alumnos, pero otros ya habían tomado el control de todo, comenzándose a dar gusto con los coños lampiños de las estudiantes, siendo el principio de una locura sexual. Por extraño que parezca, los maniquís de monstruos habían sido “poseídos” y tomaban a una víctima para jugar con ella, una de esas grotescas figuras con forma de vampiro había atrapado a una niña de tal vez 8 años, una rubiecita linda, con sus manos había retirado el disfraz de hada dejando libres sus inexistentes pechos, pellizcándolos casi dolorosamente, los jalaba logrando que chillara entre el placer y el dolor, mientras su otra mano hacía un trabajo increíble en su entrepierna hasta que sus mallas se traslucieran por sus jugos, esta cosa la tenía atrapada incapaz de siquiera tocar el suelo, aunque no daba la impresión de querer escapar, pues ella misma mantenía las piernitas abiertas y sus fluidos goteaban mojando el suelo, por otra parte una figura de una vampiresa atrapó a un chavito de tal vez 13 años, y le hacía una mamada tan fuerte que el pobre por el placer hacia viscos, su disfraz de zombi estaban hecho a un lado sus pantalones hasta los tobillos, el sólo sentía placer, y un sonoro gemido emitió cuando esta cosa le metió un dedo por su ano logrando que se corriera con fuerza, después de esto el chiquillo calló exhausto fuera de sí, muy sonriente, mientras la cosa esa atrapaba a un crio menor, de unos 7 años que pasaba por ahí, disfrazado de héroe, pero que eso no lo salvaría de ser chupado, por otra parte un maniquí con forma de bestia atrapaba a una chica de algunos 14 años, estaba disfrazada de porrista, muy linda pues su cuerpo era algo precoz, no supe cómo pero sintió entre sus piernas un pene que más parecía un dildo, le jaló su short de lycra para dejar a la vista su culito, el cual penetro dejando que la chica dejara salir un gritito de dolor al verse violada, luego fue sacudida por el clásico mete saca hecho de forma tan salvaje, manteniéndose así los alaridos, pero eso sólo al principio los lamentos se volvieron gemidos en poco tiempo, hasta que ella misma suplicaba por mas, aún con lágrimas en los ojos, pero tal vez lo más perturbador sería ver como un maniquí sin disfraz alguno, caminando como araña atrapaba a otra jovencita, la tiraba boca abajo en el piso, esta era mayor, posiblemente de prepa, no tenían como disfrutar, pero aplicó su mano para meterle 3 dedos en su ano, mientras con el resto de su cuerpo la sometía, por un momento, daba la impresión de que más que un brazo parecía un tentáculo, esa cosa realmente le estaba dando duro a la chica, quien lloraba al principio, tratando de liberarse, pero cuando se acostumbró, comenzó a dar pequeños quejidos que se volvieron más eróticos, hasta que dio la impresión que ella misma alzaba su culito para recibir mejor los embates de la cosa esa, pero también hubo alumnos que con sus novias habían empezado a tener sexo frente a todos, incluso me sorprendí al ver un par de primaria que venían con disfraces a juego tener su primer sesión de sexo, aunque la herramienta del chico era pequeña. Así se dieron más y más escenas, que si me pusiera a contarlas jamás acabaría, no podía creerlo, al final como nadie cuidó una soga, se desenredo y la lona que mantenía todo en cubierto se soltó dejando que todos se mojaran por la tormenta que se había desatado, apenas vi como reaccionaban tratando de escapar y aproveché para llevarme a Tesi junto a lexy a su cuarto, me seguía Tea, después de eso todo se volvió confuso en mi memoria y en las grabaciones el lugar quedó desolado, aquella lluvia nos sacó del influjo del incubo, al menos de momento, no sé bien que pasó con algunos maestros o con Kim, cuando volví estos se habían marchado, apenas y con más conciencia reparé un poco lo de la soga y me retiré a mi celda donde me quedé dormido, hasta varias horas después que desperté para revisar los videos.