El Incubo del Internado 35
Jay sigue afrontando los peligros eróticos del internado, pero con horror verá que algo pasó sin que se diera cuenta….
Advertencia: este relato es completamente Ficticio, no tiene nada de real y solo esta para entretener con una buena de dosis de morbo a todos los lectores que gusten…
Capitulo 35
Todo seguía muy tranquilo, así me gustaba, pero sabía que las cosas podrían cambiar si me relajaba, en su momento se hizo un reportaje de la escuela internado, que gran oportunidad fue, según Kim, pues el edificio tenía mucha tradición, y a días del evento deportivo era una gran publicidad, estábamos cerca a la primavera, todo parecía ir de maravilla, a mi poco me importaba eso, me preocupaba la idea de que las cámaras tomaran a las chicas quienes empezaban a coquetear por influencia del incubo, pues se iba notando su influencia con el aumento de temperatura, revelando los uniformes mas cortos, enseñando un poco más de piel, de hecho las maestras, también se iban volviendo más fogosas, presumiendo como Miss Holly sus hermosos pechos, incluso Miss Sage intentaba seducir, pero no le era tan fácil, por suerte, solo lo hacía conmigo, las tenia bien puestas, en un especie de romance intimo que me permitía disfrutar de ambas , incluso empezaba a proponer un trió, lo cual aceptaban, logrando mejorar mis noches, pues despertaba con ambas mujeres desnudas conmigo, así mismo mantenía el romance con Kim, cogiéndome cada que podía, y notaba como en veces su hija se infiltraba en la dirección para ver a su madre convertida en mi mujer, era una delicia. Por mi parte apenas me importaba el evento porque iría con algunos niños para una presentación del grupo de Box, siendo mi oportunidad para sobresalir, cosa que le fastidiaba al maestro de educación física, ya no era el macho alfa, y cada que deseaba recuperar el lugar lo dejaba noqueado en el suelo, eso resultaba divertido, y las porristas me veían casi en celo, buscándome con la mirada, casi podía oler sus aromas, aunque yo solo tenía ojos para mi linda Elisa, quien siempre terminaba cerca, encelando un poco a mis Holly. Ahora bien las cosas se empezaron a mostrar difíciles cuando alguien al ver el blog donde se vio el reportaje reconoció el lugar con el de muchas fotografías de la revista y videos, creando algo de alboroto en las redes así los de la editorial al saber de esto no se quedaron callados, pronto me contactaron para preguntar si era cierto, lo que me obligaría a confrontarlos de frente, algo que si me fastidiaba.
Con que eras el guardia – dijo el jefe gordo al reunirnos en una cafetería – de haberlo sabido.
¿Por? – cuestione serio, a la defensiva.
Tranquilo hombre, es que nos hubiera ayudado mucho, la revista se ha vuelto popular por muchas fotos tuyas, así como reportajes de aliens, me creerías que en un campamento seres extraterrestres violaron a las campistas pero el gobierno lo oculta – dijo el gordo libidinoso.
Sí, porque no – dije serio recordando algo de eso.
Oye, vamos, entonces sabes más de ese lugar, cuando fuimos nos dimos cuenta, es una joya, de hecho esta ciudad está llena de misterios, escuelas con fantasmas, apariciones, monstruos locales, dicen que en una hay un demonio – declaró feliz el hombre.
He oído de eso – dije serio sin darle importancia.
Vamos, cuéntanos y te podrías ver beneficiado – dijo ansioso el gordo.
Sólo te contaría las leyendas locales, lo mejor es que no te metas de más o lo vas a pagar – dije tan serio como pude.
Vamos, no seas así, tú has sacado mucho de nosotros, no querrás que eso acabe – dijo con malicia.
Yo les vendí lo que conseguía, pero tengo un trabajo y si saco de más la lengua podría perderlo, ambos nos beneficiamos, pero si insistes yo pierdo más de lo que gano – dije severo.
Oh, es eso, y que te parecería si te consigo un mejor trabajo, pareces tener suerte en esto de lo sobrenatural, así que podrías salir mejor si te nos unes, estamos pensando en poner una editorial aquí en el pueblo, digo ciudad, está llena de cosas sobrenaturales, es una mina de oro para nosotros, que dices – agregó el gordo avaricioso.
No, si pierdo ese trabajo se va una fuerte cantidad de encuentros sobrenaturales para ustedes, aparte que mis ganancias no sólo son en dinero ahí, tengo otros beneficios, así que me niego, de hecho preferiblemente les advierto que si van a poner una editorial aquí se vayan con calma, las cosas pueden tornarse peligrosas – dije muy serio, casi una advertencia.
¿Nos adviertes? Mira muchacho, no porque hallas visto cosas moverse te sientas tan superior, yo me he topado con cosas extracorpóreas, eh oído cosas horribles, que ni te imaginas, así que no me asustas – dijo molesto el gordo.
Sólo eso – respondí como burla.
Claro que eso no agradó al gordo, pero antes que pudiera decir algo agregué.
Si tu vieras lo que hay aquí no te creerías tanto, pero veo que no tiene caso hablar contigo, ver y oír, eso es cosa de niños, muchas de las leyendas de este pueblo las eh confirmado, conozco secretos que te harían cagar del miedo, y por eso te lo advierto, si te quedas aquí mantén la calma, no trates de morder más de lo que puedes, porque de lo contrario buscaré más comprensión en tu remplazo – volví a advertir sin asustarme.
Oh, entonces sabes mucho, que interesante, no te vez tan rudo – dijo molesto el tipo.
Lo soy, ni siquiera necesito de drogas para calentar niñas o que se me pare el amigo sabes – añadí.
Y con esas palabras el tipo se quedó en blanco, no supo decir nada y bajo la cabeza, hice un movimiento terrible, prácticamente lo tenía vencido, pero al verlo así, sabía que buscaría vengarse, debía actuar antes y con algo contundente, más no me lo hice de frente, aunque eso no era mi estilo. Fui a una oficina con cierta mujer que sabía no me negaría nada, Sheila, esta al verme se sorprendió, incluso ignoró a su jefe, el arquitecto que lucía más patético que de costumbre y se abrazó a mí, dándome un candente beso, yo de inmediato le pedí hablar con sus amigas, pues tenía un trabajito para ellas, por suerte la secta se hallaba interesada en platicar conmigo, eso lo facilitaba, no había un líder en sí, era un conjunto de miembros antiguos quienes mandaban, en especial a aquellos que sobrevivían de la invocación de la súcubo en los 50s, que de hecho sólo eran unos 3 de todo el grupo, siendo mayores a los 80 años, a diferencia de las casas malditas, la secta era un grupo de personas más comunes, trabajando de forma clandestina, aunque eran evidentes sus facultades, ahí pude notar que había 3 tipos de personas en la ciudad, los miembros de los clanes que vivían en la cima, los de la secta que estaban buscando derribar a los primeros y la gente común que era manejada por ambos, cabe decir que yo entraba en una clasificación especial, como se darían cuenta, pues no era miembro todavía de nada, aunque hubiera acuerdos, pero todo eso es parte de cosas que no vienen al caso.
Entre palabras intimas, Sheila muy candente me dio algunas indicaciones, por lo que fui a un mercado de aspecto asqueroso, perdido en un barrio bajo, donde las ratas corrían libres, ahí llegué a un local de esotérica con muchas cosas interesantes, hasta me animé a comprar como si fuera un cliente más, unos cuarzos protectores, aunque al verme unos tipos no dudaron en buscar pleito, me habían visto acompañado de miembros de las casas (como simón) así que al entrar al local, ellos me siguieron, trataron de intimidarme, y yo los saqué a golpes, eran pésimos en pelea, aunque me llevé un par de moretones, pero estos salieron con huesos rotos, sin dientes, creo que hasta les rompí a uno el hombro, en ese momento una mujer madura, los detuvo, mandándoles que se largaran, y esta me dejó entrar, pues una de las brujas mayores quería hablarme, era una vieja espantosa de más de 90 años, parecía cadáver, con ella el dialogo era sencillo, querían las reliquias, me pagarían en especie, yo me negué pues no requería de ello, cosa que la molestó, pero no se detuvo, querían la acceso al lugar donde se llevó a cabo el ritual original, a eso yo estaba dispuesto a llevarlos, cosa que les agradó, pensaban en darme algo especial, pero les pedí un trabajito, pues indiqué lo que sabía de la revista, algo que a todos perjudicaba, así estuvieron dispuestos a ayudar, habíamos llegado a un acuerdo, sólo que antes me urgieron a mostrar el recinto, y para probar su autenticidad realizarían el trabajo ahí, eso se podía arreglar, quedamos el viernes en la noche, teníamos un trato y mientras ellas lo respetaran, yo también, cabe decir que me alcanzó Sheila, quien me llevó fuera, no sin problemas, pues de salida otros tipos quisieron golpearme, gran error, en serio en esa ciudad, había amantes y brujos, pero no peleadores, por eso les daba problemas el viejo, y ahora yo, pues incluso rompí una ventana con la cara de uno, o disloque algunos brazos más, era triste verlos pelear, sólo les ayudaban los números, pero hasta se notaban nerviosos al dar un golpe.
Una vez que me retiré sólo fue cuestión de esperar, claro estuvo que el tipo de la revista no se quedó quieto, muchas veces lo vi husmeando por la escuela, como se quedaban en el motel de enfrente no había problemas, pero en verdad su grupito me fastidiaba, pues no faltaba que molestaran a las alumnas viéndolas con ganas de coger, en especial a las del equipo de porristas, yo me quedé calmado, siendo una semana larga, pero llegado el viernes, sin el temor de ser descubierto, pues las únicas que me importarían eran Marón o Kim del cuerpo laboral, dejé entrar a Sheila con 3 de sus compañeras, una era la rubia sensual, otra fue la sexy morena pero también llegó una señora algo mayor, con al menos 50 años, no muy bien conservada, pero tenía una presencia bastante fuerte, las guié por la escuela, o más bien a la dirección donde muchas veces me cogí a Kim, y me dijeron que olía a sexo bueno, de ahí las pasé al cuarto oculto, tras una puerta que se perdía entre los muros, era la primera vez que regresaba a ese lugar desde la vez que entré por accidente, pero ahí estaba con unas brujas, era una habitación amplia sin ventanas, por lo que el aire apestaba a cerrado, tenía lugar para colocar antorchas, y dibujos que parecían hechos con sangre, pero estaba casi vacío, aunque debo decir que se sentía extraño, era una sensación desagradable. Una de las mujeres sacó un extraño cristal que de inmediato se tiño de negro, la vieja se quedó asombrada, casi riéndose a carcajadas, era lo que buscaban, no faltó mucho antes que con tiza en mano comenzaran a hacer unos dibujos en el suelo, también llevaban algo de sangre, hiervas que quemaron, lo que casi nos ahogaba, al parecer estaban conjurando, sacaron una esfera de vidrio la cual fue puesta en el centro, yo estaba muy pendiente, pero la sexy morena clara me sacó, aunque lo hizo de una manera que no pude resistirme, tras la túnica que llevaba sólo usaba una indumentaria de tacones, una micro falda que serian 2 tiras de tela sujetas por cordones y un top que apenas contenía sus redondas tetas, esta me encendía mucho, así que una vez fuera me invitó a disfrutarla, pensé por un momento en hacerlo ahí en la oficina, pero no quise, era mi lecho con Kim, la fui a sacar para hacerlo en pleno pasillo, frente al patio cívico:
Ni que decir que su poca ropa quedó hecha a un lado en unos instantes, el top salió volando y me pegué a sus tetas para lamerlas desesperadamente, por fin podría desquitarme de esa mujer, esta lo disfrutó con calma, dejándose satisfacer, lamí y con cierto gusto mordía levemente los pechos jalándolos un poco, ella solo gemía, se entregaba tranquilamente, aunque algo me molestaba en todo eso, al principio pensé que era que no la conocía de nada, así que le dije:
¿Cómo te llamas? – lo dije antes de besarnos.
Oblígame – apenas respondió antes de continuar con nuestro juego de lenguas.
La verdad es que lo hacía muy bien, casi me daba tentación porque me diera una mamada, pero la verdad no quería, ese juego de revelarse me hizo gracia, estaba cogiéndome a una sexy desconocida a mitad del pasillo del segundo piso de la escuela, donde cualquier trasnochado podría vernos, que excitante, primero la besuqueaba, pero después continúe comiéndome sus tetas, mientras mis manos se aferraban a su culo y muslos, alzándola un poco para qué no pensara en huir, por instantes hizo algo inesperado, se sentó en el borde del barandal de roca, abrió sus piernas, levantó su falda dejándome ver una diminuta tanga que apenas cubría su concha jugosa, luego movió la prenda para dejarme verla, y al hacerlo su aroma de hembra en celo me inundo los sentidos, para decirme con una sonrisa sensual mientras se mordía el labio:
Cómeme – se ofrecía la tipa su vulva lista para ser saboreada.
Sin perder tiempo me acerque a meterle la lengua en su concha, la cual estaba tan jugosa que me empapo la boca, la desgraciada estaba muy excitada y sus mieles sabían a gloria, me apresaba con sus muslos, yo con mis manos le agarré las tetas, masajeándolas con fuerza, ella las tomó para meter mis dedos en su boca, donde me lamio, como si fuera mi verga, que demonios, la verdad eso me estaba excitando demasiado, mi estaca estaba matándome, tenía una erección mortal, incluso sentía que la tenía más grande que nunca. Esta mujer no dejaba de gemir o correrse en mi boca, era increíble, soltaba tantos jugos que a veces me quería ahogar, debía tragarlos a como diera lugar, incluso mi playera se empapó tanto que terminaría escurriendo, esto era lo que deseaba, comencé a mamarle con más ganas, quería prácticamente penetrarla con la lengua, jugando con su pequeño botón, esta lo gozaba, pues no me dejaba alejarme en ningún momento, me apretaba con sus firmes muslos, incluso comenzó a decir:
Si papi, mm, dame mas, mm – decía entre suspiros.
No sé cómo o cuanto duré ahí, pero en su momento con una de mis manos, mientras gozaba logré soltarme un poco para acomodarme mejor, liberando mi estaca con dificultad, al tiempo que está perdida en el placer de un orgasmo, arqueaba la espalda hasta quedar casi al aire libre, así me mantuve saboreándola hasta lograría que se corriera sobre mí, por un segundo se desvaneció hasta casi caerse, pero la tenía bien sujeta de sus sexys piernas, no dejaría que se me escapara, más cansada la jalé con fuerza, y por su posición la terminé clavando de un estoque, no era como deseaba, pero ya la tenía bien ensartada, esta ahogo su grito por la sorpresa y en verdad yo sólo la tenia bien empalmada, por suerte por estar tan mojada fue placentero, pero estando así, era lo que más deseaba, ella me miró sorprendida, y le dije:
Ahora si ¿Cómo te llamas? – pregunté más decidido.
No te lo diré papi – respondió mientras se abrazaba.
Yo comencé a metérsela con fuerza, por fin liberaría toda la lujuria que me despertó ella en su momento, cuando la vi bailar desnuda en el bosque, la quería hacer sentir mía, esclava de mi verga, ese era mi plan, ya lo había hecho con Sheila, pensaba lo mismo con esta tipa y quizás la rubia exuberante, por desgracia Brandy se me escapaba, pero no importa, ahora estaba gozando a tan sexy hembra, logrando que se corriera con mucha facilidad, parecía estarse orinando sobre mí, pero su olor era prueba de lo contrario, y su vulva caliente me recibía con una presión deliciosa, la iba sometiendo, logrando que sus tetas se agitaran de forma cadenciosa a cada embestida, su cuerpo se llenaba de sudor, se quejaba, pude sentir desde atrás a sus compañeras, al parecer habían terminado con el ritual, yo continúe en lo mío mientras se retiraban, aunque la rubia sensual se quedo mirando unos segundos y juraría que también se ponía en celo, mientras que Sheila se quedaba cercas mojándose por la imagen que tenía enfrente, no tarde mucho en correrme, el sentirme observado cogiéndome a esa mujer fue tan estimulante, así que embestí más rápido, pronto alcanzaría el clímax, mientras la pobre apenas podía contenerme, estaba convertido en una fiera, más no tardé en soltarle toda la leche llenándole la concha y hasta una vez que se la saqué aun le lancé unas gotas en la cara, que la muy viciosa alcanzó con su lengua, ahí estaba desfalleciendo cuando le dije:
¿Cuál es tu nombre? Putita – dije como una burla.
Charlie – dijo vencida aferrándose a mí.
Así me gusta, ahora tu y yo nos llevaremos bien – dije mientras le acariciaba una teta.
Pronto terminó en el suelo soltando por su concha una mezcla de jugos con mi leche, estaba agotada, por lo que Sheila ayudó a Charlie a levantarse, luego la secretaria me beso apasionadamente y me dijo:
El ritual se realizó, todo está bien, pronto esos de la revista tendrán un accidente, como pediste no será algo que los mate, pero su vida será marcada, tendrán que largarse de aquí – dijo Sheila.
Perfecto, así me gusta – le dije contento tomándola del mentón para besarla.
Después tendrás que hablar con otra líder, ese es el lugar del ritual, no cabe duda, ahora querrán aprovecharlo, tiene un influjo fuerte, excelente para conjuros, aunque algo paso, es extraño pues el incubo no apareció, como sea, piensa en lo que desees a cambio para dejarnos pasar, ya sea a mí o a Charlie, incluso a otras, eso se podrá arreglar – señaló Sheila coqueta.
Perdón, pero ambas ahora son mías, así que cuando quieran las pienso disfrutar, si desean entrar ya pensaré en algo – dije dominante.
Si amo – dijo Sheila lamiéndose los labios.
Si ese es el caso, puede que te interese saber, que alguien esta contratándonos para ir contra ti, a través de quienes más te importan – añadió Charlie algo agotada.
Eso me heló la sangre, y un sentimiento de furia llenó mi interior, quería respuestas, y salí por ellas, afuera la vieja me esperaba, estaban en un vehículo que desentonaba con su imagen, la mujer al verme molesto dijo unas palabras que ni entendí, se asustó, mi cara lo decía todo, a su lado la exuberante rubia parecía estar a punto de arrancar, aunque esperaban a sus compañeras, con fuerza paté la puerta logrando agitarle, la mujer asustada me miró, no sé qué intento, pero fue inútil, yo abrí la combi y le agarré del cuello, exigiendo respuesta, ambas vieron a sus compañeras llegar, casi como si les hubiera traicionado, pero esa era su ultima preocupación:
¿Van tras de mí? – gruñí molesto, parecía una fiera.
La tipa lo entendió todo, y me pidió que le dejara respirar, la verdad ya la estaba poniendo roja por la falta de aire, así finalmente me dijo:
Con que te contaron, no es propio de nosotras, esa es una falta, pero ya el daño está hecho, muchacho no eres normal, me doy cuenta, la secta siempre ha tenido varios líderes, los más viejos, y entre estos hacen trabajos a quien pague el precio, no hace mucho llegaste, pero alguien se dio cuenta que eras prometedor, así que buscaron una forma de atarte, no tuvieron suerte por sus medios, por lo que nos “engañaron” para usar nuestra reliquia y apoyarlos, por suerte antes estuvo Brandy, aunque ha tomado distancia por alguna razón que desconocemos, ahora hagamos un trato, libre entrada aquí por revelarte la verdad – dijo la mujer buscando sacar provecho.
Ho eso cree usted, le daré el trato real, si no me cuenta lo que pasa ahorita mismo le abro la garganta, habló con mi “abuelo” para que me cubra pues luego iré a sacarle los ojos al resto de los suyos, entendió – dije molesto mientras sacaba un cuchillo militar que les sorprendió, pues lo tenía bien escondido.
Los colores de la mujer se fueron, se dio cuenta que estaba perdida y no debían jugar conmigo, así que tragando saliva asintió, me vino a jurar que mañana me darían respuestas, refiriéndose que me llevarían con su otro cliente, yo les advertí que no jugaran conmigo, pues si al viejo soldado le temían, conmigo sería peor, de eso no les quedó duda al verme tan molesto, así que se retiraron, aunque antes Sheila y Charlie me dijeron que me advertirían de cualquier trampa, más convencida la primera, pues la segunda se veía nerviosa, algo pasaba entre ellas pero no me interesaba, tenía mis prioridades, así que esperé, la noche se me haría larga, intenté hablar con Tesy y Giby, pero no hubo respuesta, mierda, las había descuidado demasiado por estar entre todas esas cosas de las familias y demás. A la mañana salí con los Búhos, llegué bastante molesto, y muchos se asustaron, el viejo me saludo sorprendido, me pidió que desayunara con él, antes había tratado de hablar con mi tía, tampoco me contesto, sin duda, ahora podía imaginar porque a últimas fechas siempre quería llevarse a mis hermanas, algo estaban tramando, así que le expliqué al anciano la situación, la molestia de este fue genuina, alguien había roto el pacto de alejarse de la secta, de hecho se indignó que yo hubiera tenido tratos, pero estaba libre de quejas pues todavía no era miembro de la familia, aparte que al explicarle la situación se mostró satisfecho, de hecho dijo que ya quería que embarazara a Tea, quien había salido de compras pues tuvo una visita familiar, después de eso, también me comuniqué con Simón, quien al decirle: “algo pasa con Tesi” no tardó en llegar, les mencioné las cosas como eran, iba a hacer algo estúpido, así que o estaban de mi lado o en contra, ellos como esperaba me darían su apoyo, sólo era cuestión de que llegara la hora, me iban a cubrir, ya pensaban en que excusa dar. Pasaron las horas, Sheila y Charlie llegaron a la residencia de los Búhos, se vieron extrañadas de estar ahí, pero no dudaron en guiarme, nuevamente fui al distrito pobre, donde olía a cloaca, las ratas jugaban en las calles y la basura llegaba hasta los talones, iba con mi mejor traje, el militar, listo para romper algunos huesos, aunque las brujas no me dejaron actuar libre una vez ahí, entramos por un pasillo estrecho, llegando a una casona derruida, al parecer su otro cliente pagó muy bien, pues estaban arreglando el lugar, como si me importara, pronto le faltarían dientes, de ahí me llevaron por pasajes de obra negra hasta llegar a un cuarto amplio cubierto de cortinas rojas, antes de pasarla me asomé a ver mejor, donde la primera imagen que vi me enojó tanto que apenas pude aguantar la rabia, ese tipo estaba muerto:
En medio de una sala se encontraba acostada Tesi, amarrada con cintos de cuero negro dejándola expuesta, sus piernas abiertas, sus manos atadas encima de su cabeza, su boca cerrada, una tira de debajo de sus pechos para que sobresalieran, notándose más grandes de lo que realmente eran, o tal vez le habían crecido desde la última vez, el cuarto tenía una fragancia bastante fuerte, me dolió la cabeza, su entrepierna había sido depilada, dejando ver sus redondos labios carnosos, que de vez en cuando eran mojados por una sustancia pegajosa color rosa, la misma que daba el olor al cuarto, con esta masajeaban el cuerpo de mi hermana logrando que tratara de gemir, perdida en su deseo carnal que la torturaba, pues hacia unos gemidos lastimosos, su mirada no apuntaba a nada, estaba en trance, o algo así, no supe cuanto tiempo había estado en esa posición o recibiendo ese acoso, su cabello se veía sudado, el tipo que la sometía usaba una toga que le cubría todo el cuerpo y una máscara de carnero, esos bastardos, este jugaba con el cuerpo adolecente de Tesi como si fuera un placer, le acaricio cada parte con el extraño aceite, amasándolo con cierta sensualidad, ponía énfasis en sus pezones o su vulva, logrando que se humedeciera, en todo momento trataba de gemir, estaba por salir a golpearlo cuando me detuvo una vieja, apenas la sentí detrás mío:
Espera, si sales así tu hermana lo pasará mal, deja que disfrute un orgasmo y después actúa – me susurro una anciana mientras me miraba aterrada.
No supe cuanto tiempo ese juego se mantuvo, cuando el tipo sacó una riata de caballo, eso si me enfermo, pues comenzó a pegarle de forma considerable, sus piel se enrojeció, pero nuevamente lejos de sufrir como esperaba mi hermana gemía ante ese castigo, como si disfrutara del dolor, no fueron muchos los golpes, después me desquitaría, como veía la estaban trabajando, convirtiéndola en un esclava sexual, los golpes eran leves para que gozara, el aceite nublaba los sentidos y estaba en alguna especie de trance el cual la sometía a recibir aquella tortura con gusto, pero no era suficiente para el tipo, quien sacó un consolador bastante largo y blando el cual unto en el liquido rosa, con sumo cuidado y su dedo meñique fue esparciendo esa cosa por su recto, antes de comenzar a penetrarla, por suerte no era tan gruesa, porque Tesi se comenzó a quejar hasta derramar unas lagrimas, pero si era bastante larga, fácilmente sería como virilidad de un caballo, y desde la distancia pude ver como esa cosa entraba por su ano, perdiéndose centímetro a centímetro, logrando que se retorciera ante la sensación, de la cual no podía escapar al estar fija a la mesa de piedra, como si fuera un sacrificio, con todo lo que pasaba me pregunte ¿Por qué no se corría? Ni que fuera actriz porno. Con rabia empecé a indagar cuantas veces le habrían hecho esto a Tesi sin que me diera cuenta, ella salió el día anterior a casa de mi tía, ¿Cuánto llevaba ahí? realmente estaba furioso, cuando un quejido me llamó la atención, finalmente le habían metido toda esa cosa por su culo, ella se quejaba, tratando de exhalar, pero le era imposible, nuevamente la azotaron por unos momentos, sensibilizando su cuerpo, luego volvieron a untarle el aceite que ya escurría por su cuerpo, logrando que gimiera perdida, en ese momento se detuvo, esperaba lo peor iba a violarla, pero lo que siguió fue algo peor, sacó otro largo consolador de doble cabeza que fue metiendo un poco dentro de Tesi, aunque solo la punta, no entendía lo que estaba por hacer cuando hizo un ademán, mandando llamar a alguien a quien no divisé antes, sabiendo que eran los carneros, imaginé que sería Steve, sin embargo me equivoqué, se trataba de mi pequeña Giby, quien igual de dominada por un conjuro, se metió a escena, ahí le untaron del mismo aceite logrando que la niña se excitara, comenzando a gemir por el contacto de esa sustancia en su cuerpo, la subieron sobre su hermana y colocaron la otra punta del consolador en su culito, pronto la obligaron a montarse entre ambas, usando esa porquería de plástico para violarse entre sí, las 2 parecían penetrarse desesperadamente logrando que sus jugos finalmente salieran, al tiempo que se masajeaba las tetas de la mayor, mientras el tipo ahora las azotaba a ambas, mientras se emocionaba en su perfidia, incluso hacía que la pequeña le mamara las tetas de vez en cuando, se estremecían con cada golpe, se volvían esclavas de la lujuria, su ritmo aumento, pronto tendrían un orgasmo, su ritmo aumentaba, sus quejidos cambiaban, sus ojos se ponían en blanco, finalmente el deseado orgasmo llegó, ahí las dejó de pegar, y el tipo dijo:
Así perras, córranse, son hermanas pero se están cogiendo, par de putas, no valen nada, pero bien entrenadas ganaran algo de valor, jajaja – decía el enmascarado.
Las pobres siguieron moviéndose pérdidas en ese maleficio, movidas por una fuerza ajena, estaban tan sensibles, gimiendo de manera dolorosa, sus cuerpos lucían preciosos, irresistibles por culpa de esa poción, además que se hallaban en una situación tan excitante, pero súbitamente se corrieron en un orgasmo, uno muy débil que las hacía desfallecer, era demasiado para ambas, pero el tipo estaba por hacer algo mas, cuando la vieja me detuvo de nuevo, iba a matarlo, solo que esta quería pasar primero, tenía algo que hablar con él antes:
Está contento – dijo la vieja entrando al cuarto.
Si, dejar al culto de lado fue un error, ustedes saben cómo hacer las cosas – se burlo el tipo enmascarado dando un golpe con la reata en el culo de Giby.
Pobres niñas, sabe que si su hermano se entera se meterá en problemas, no – dijo la vieja con mucha seriedad.
¿Pena? un momento usted no es la de siempre, como sea, todas las brujas son iguales, y el hermano de estas ni hombre es, solo es un estúpido que se siente mucho por tener buena suerte – dijo el tipo creído tocando a Tesi viéndole el coño.
No lo creo, antes tuvimos problemas con el soldado viejo, que por lesión no podía hacer mucho, aunque así nos mató a varios miembros, ninguno aquí es bueno en pelea, pero ahora este que llego si lo es, no debería tentar a su suerte – dijo la bruja como advertencia.
A mí y a muchos nos vale, si hasta antes mandamos a violar a la pequeña en casa de los Búhos, sólo que el imbécil no se controlo y tuvimos que matarlo en prisión, usted solo siga ordenes y verá, muchos dentro de las casas queremos que vuelvan, si nos sirven bien, arreglaremos un trato para que dejen de vivir en la mierda – sentenció el tipo.
Eso no pasara, el tiempo cambia, si queremos sobrevivir debemos quedarnos en el anonimato – advirtió la bruja.
Como sea, gracias a su otro ritual la mocosa tiene un nuevo himen, así que podremos vender su virginidad muy cara, les repito con nosotros les irá mejor – añadió el tipo.
Señor cliente, le agradecemos su contrato, pero la verdad tendremos que dejarlo hasta aquí, usted olvida que para todo hay consecuencias y esta es la suya – advirtió la anciana.
Con todo lo que había oído ya no me quedé afuera, con que eso esperaba la bruja, me cayó bien, salí de las cortinas para sorpresa del tipo quien no dio crédito a lo que tenía enfrente:
Teníamos un trato – dijo el tipo asustado.
Con otra jefa, no conmigo – advirtió la bruja maliciosa.
Te pagaré pero detenle – suplicó el tipo aterrado.
No puedo, antes lo intenté pero mi conjuro no sirve con él – agregó la bruja.
Eso no le gustó al tipo, yo me acerqué y le di un fuerte golpe, rompiéndole la máscara de hueso dejando a la vista su cara, era el abuelo de Steve, no me sorprende el chico es demasiado estúpido como para hacer algo tan elaborado, eso iba a ser más dulce, le quite la riata al anciano ahí lo golpe hasta que quede satisfecho, no supe cuanto fue pero estaba seguro que no se levantaría por un tiempo y menos su amiguito, incluso le metí sus juguetes por el culo, igual desde ahora tendría que orinar sentado el resto de su vida, nadie se mete con mi familia…
Excitante e interesante historia