El juguete de los vecinos
Los nenes de 6 y 7 descubriendo el placer.
Hola qué tal, les contaré cómo descubrí que varios vecinos disfrutan de la inocencia de un par de nenes de 6 y 7 añitos.
Vivo en un lugar tranquilo y generalmente muy quieto y silencioso entre semana y solo los fines de semana se escuchan las voces y actividades de quienes toda la semana trabajan.
Cierto día, decidí tomarme unos días de descanso. Uno de esos días de flojera me desperté muy temprano y como estaba solo en casa, me preparé una taza de café y subí a la terraza, desde ahí podía ver casi todas las casas, ya que las construcciones iban hacia abajo, por lo que tenía visión completa, particularmente a la casa de mis vecinos y sus nenes de 6 y 7 añitos.
Mientras tomaba mi café no tenía más tema en mente que el de disfrutar el amanecer, me percaté que salieron mis vecinos, supongo que a trabajar, yo seguí contemplando el amanecer; todo estaba quieto, oscuro y en silencio, de pronto veo que en la casa de mis vecinos se encienden las luces, preste atención ya que acababa de verlos irse, pero me tranquilice al ver que eran los nenes que estaban ya despiertos y en puros calzoncitos dando vueltas por la casa. No preste mayor atención y seguí en mis cosas.
Luego escuché que tocaron a la puerta de los vecinos y vi a los niños correr a abrir, no vi quien entró ni nada pero después de eso las luces volvieron a apagarse y ya los perdí de vista. Termine de tomar mi café y ya no volví a ver a los nenes. Supuse que alguien los cuidaba.
Después de un par de días de tomar café, contemplar el amanecer, ver q mis vecinos salían a trabajar, los nenes corriendo en calzoncitos, el toque de puerta y el silencio nuevamente, me sentí un poco ocioso, así que abrí el computador portátil y comencé a buscar porno. Después de un rato de ver videos y de quedarme totalmente caliente y con ganas de deslecharme, vinieron a mi mente las imágenes de los nenes corriendo en pura ropa interior, ese solo pensamiento me puso más caliente y empecé a lubricar mucho, tanto que hasta mojé mi pijama.
Me levante, me bañé y me desleche mientras pensaba en lo rico que les rebotaban las nalgas a esos nenes mientras corrían por su casa. Saque muchísimo semen y aunque con culpa, ya que yo tenía hijos y el pensamiento impuro y morboso que me llevo a sacar gran cantidad de semen, me causaba culpa.
Salí del baño, me dormí un rato y después salí cuando escuché risas fuertes en la casa de mis vecinos. Me asomé de manera sigilosa (quería encontrarme a los nenes corriendo en su casa en calzones, ya no podía dejar de pensar en eso) y vi que los niños corrían de aquí para allá, después de unos minutos entendí que estaban jugando a las “escondidas” presté un poco de atención y cada que se escondían, uno de los nenes duraba un rato desparecido y después aparecía con los ojitos rojos y escupiendo y queriendo devolver.
Eso me llamo la atención y saque los binoculares para tener una mejor visión. Sabía que había alguien más en esa casa pero no lograba ver a nadie, solo los niños en calzones. Estaba entretenido en eso cuando uno de los nenes sale a esconderse al jardín, detrás de un gran matorral y al otro nene lo vi en la recámara de sus papas (yo conocía esa casa) después veo unas piernas de hombre, no veía más que de las rodillas hacía abajo.
Vi que este tipo estaba en pans gris, y se sentó en el borde de la cama de los papas del nene, abrió ls piernas y en medio de él se colocó el nene, no sabía que esperar de esa situación, quizá era el cuidador que estaba ayudando al nene a algo, cuando de pronto el hombre en pans aparta un poco al nene y se baja el pans hasta los tobillos. El nene se vuelve a acercar al sujeto como abrazándolo y después de unos minutos se aparta y repite esta acción varías veces. Mi mente giró al mil por hora imaginando lo que estaba pasando, pero no lograba entender quien era el tipo y si estaba forzando al nene a hacer lo que sea que estuviera haciendo. Después de un rato el nene que estaba en la recámara salió gustoso al jardín, y se dirigió al otro nene que aún estaba escondido, algo le dijo y el nene que antes había estado escondido, corrió a la recámara y ocupó el lugar de su hermanito.
Trataba de procesar todo lo que estaba pasando pero sin darme cuenta otra vez estaba erecto y con una tremenda ereccion. Seguí viendo lo que pasaba y después de un rato el nene 2 salió también corriendo al jardín y ambos nenes se quedaron ahí hasta que nuevamente sonó el timbre de su casa y abrieron. Esta vez si alcance a ver q era la abuela de los niños, quien los baño, les dio de comer y los dejo nuevamente solos. Al tipo que antes estaba en la recámara de mis vecinos con los nenes no volví a verlo.
Por la tarde, los nenes otra vez estaban solos y así estaban hasta pasadas las 8 de la noche.
Después de ese día y los siguientes tres dias comencé a ver la rutina. Yo no dejaba de masturbarme pensando en los nenes y en lo que estaba pasando en esa casa, pero tenía duda de quien era el tipo que les hacía esas cosas. Para salir de dudas, decidí un día en la noche visitar a mis vecinos, con el pretexto de que necesitaba un poco de anticongelante. Y resultó que el sobrino de 18 años de mis vecinos estaba pasando una temporada con ellos. Él era estudiante e iba a clases por la tarde. Entonces era el Primo mayor de los nenes quien estaba enseñándoles. Eso me calentó mas.
Estuve solo un momento en casa de mi vecino y me despedí, señalando que cuando gustaran yo podía cuidar a los nenes, al fin que estaba solo y no importaba que hicieran ruido. Vi que el comentario no le hizo agrado al primo de los nenes, pero mis vecinos se alegraron y me dijeron que con gusto aceptaban mi ofrecimiento, que luego me avisaban. En mi mente solo podía pensar tener de cerca a los nenes y verlos correr y reír en puro calzoncitos.
Ya tenía un plan en mente y ello incluía mucho semen por aventar y a los dos nenes. La sola idea me calentaba muchísimo.
El primo de los nenes de nombre Alan, era un chavo guapo, cara tierna e inocente, ojos grandes y color café claro, cabello corto y de buen cuerpo, era un tipo alto, media cerca de dos metros, y tenía un par de tatuajes en los brazos. Era un tipo agradable. Ese día que fui de visita a casa de mis vecinos, lo conocí, lo saludé e incluso intercambiados teléfonos (para cualquier asunto que necesitara).
Al día siguiente me levanté mucho más temprano y espere escondido cerca de la entrada de la casa de mis vecinos y vi que un tipo de unos 25 años medio malandro pero limpio y de buen ver tocó el timbre, lo reconocí, era el hijo del carnicero, su nombre era bruno, abrió Alán y lo dejo pasar. Yo corrí a mi casa todo sacado de onda y comencé a espiar.
Bruno traía pans gris, entró y los niños que ya estaban levantados lo fueron a recibir y lo abrazaron. Se veía que Alán le decía algo a Bruno, y este se limitó a hacerle una señal de que se fuera y se llevará a uno de los nenes, al de 7 años, y se quedó en la recámara con el de 6 años.
Bruno no perdió tiempo ya estando a solas con el nene, lo comenzó a acariciar del cabello y recorrer con sus mano todo el cuerpecito del nene, el niño pro su parte se veía que solo obedecía y reía en momentos. De hecho el nene era muy cariñoso y el solo se clavaba en la entrepierna de Bruno, aún cuando no se habían desvestido. Yo estaba a full con la verga recentándome, pero tenía que contenerme y ver todo lo que pasaba.
Bruno se sentó en el borde de la cama y el nene se acercó a él, Bruno lo abrazó tiernamente y se acercó y comenzó a besarlo, parecía absurdo pero el nene le correspondía el beso, y esa diferencia y perversion se veía deliciosa. Veía a Bruno disfrutar los besos que le daba al nene y el nene a su vez disfrutaba lo que le estaba haciendo, ya que hasta se paraba de puntitas para alcanzar a su abusador. No duro esos besos mucho tiempo, ya que Bruno se paro y se bajó el pans, al parecer no traía ropa interior ya que dejó ver de una una verga que se veía enorme cerca del rostro del nene. Y para mi sorpresa el nene sonrió y como si estuviera desesperado se lanzó a tratar de meterse esa enorme verga en la boca.
Yo estaba atónito y muy caliente, tanto que me olvide de Alan y el otro nene, que se perdieron de mi vista y la verdad en ese momento no me interesaban. Bruno se sentó de nuevo en el borde de la cama Y le hizo una señal al nene y este momento a tratar de mamar esa verga, lo agarraba con sus dos manitas y lo lamía torpemente, se veía que hacía esfuerzo para que cupiera la cabeza de esa vergota en su boca y es que era lo único que le entraba. Bruno por su parte solo se dejaba querer de esa tierna boca de un nene de 6 añitos, y con una de sus manos recorría el cuerpecito desnudo del nene y se detenía a masajear las nalgas por encima y por dejaba del calzoncito del nene.
En momento veía a Bruno agarrar al nene de su cabeza con ambas manos y tratar de meterle más centímetros de verga en esa tierna boca, pero cuando el nene sentía ahogarse le sacaba la verga, y así estaba en ratos. Después de un rato, Bruno se paro y abrazo al nene y lo coloco en la cama, en posición de perrito, le bajo el calzón y comenzó a lamerle el culo, sin miramientos y sin detenerse. El nene se retorcía de placer y lo veía como paraba más el culito para qué abusador le siguiera comiendo el culo. Veía a Bruno nalguear al nene y luego volver a meterse entre sus nalgas. Así estuvo un tiempo y luego lo vi intentar penetrarlo sin éxito, ya que el nene se quitaba (supongo le dolía). Después de un rato de intentarlo Bruno lo volvió a poner en el piso al nene frente a él y comenzó a jalarse frenéticamente la verga (supongo ya quería venirse) y agarró de los cabellos con una mano al nene y con la otra seguía jalándosela. Después de unos momentos vi la cara del nene empapada de los mecos de Bruno y para mi sorpresa el nene se los estaba comiendo gustoso. Ya para ese momento no pude contener y yo también me vacíe abundantemente. no podía creer que lo que estaba viendo me provocara tanto placer y deseo.
Mientras me recuperaba de la deslechada que me acababa de dar, recordé que Alán estaba por ahí con el otro nene, inmediatamente trate de localizarlo y efectivamente por ahí seguía, ambos estaban sentados y serios. Como esperando que Bruno terminara su fechoría. Por fin el nene que estaba con Bruno bajo con Alan y su hermano, y para mi mayor sorpresa estaba dando saltos de felicidad, se veía que le encantaba comer mecos. Bruno se quedó tirado en la cama, con la verga de fuera y semi erecta.
Continuará…
Que delicia de relato!
Me agrada que te haya gustado. Saludos
Bueno!
Gracias, ya escribiré más relatos. Saludos
Q ricoooo
Me alegra saber que no soy el único en disfrutar tu relato!. Espero la continuacion.
Muy bueno exitante quisiera tener un vecino asi
Que rico relato, me recordó mi infancia, muy excitante
Que afortunados esos VATOS ya quisiera unos nenes así que les guste la verga 🤤 🍆 💦 y la leche 🤤 🤤 oye muy excitante tu relato amigo, espero leer el siguiente, saludos 😁 😁 😁
Que rico unos nenes así, continua.