¿El me abuso? O ¿Yo fui una hipócrita?
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Tuve relaciones con mi hermano desde los 9 años hasta mis 22 años.
Siempre he dicho que el abuso de mí pero la verdad no es tan clara como todos piensan.
Hola mi nombre es Jazmín soy dominicana y tengo 26 años.
Soy una chica morena, pelo corto castaño y buen cuerpo.
Empezare describiendo como era a mis nueve años, lo que puedo recordar, no estaba lo que se dice muy desarrollada ni nada, era delgada, pechos un poco formados y mis nalgas ya para entonces bien paradas esa parte de mi cuerpo siempre ha destacado.
Mi hermano que en ese entonces tenía 16, era un muchacho alto con un poco de sobre peso, moreno, pelo ondulado negro.
Todo empezó cuando mi hermano mayor Carlos llego a casa, donde hasta entonces solo vivíamos mi hermano pequeño Sergio, mi madre y yo.
El venia huyendo de la casa de su abuela, quien lo había criado, por unas fechorías que había hecho en el puedo donde vivían en el sur del país.
Era la primera vez que yo recuerde que nos conocíamos, mi madre trabajaba mucho y nunca nos llevo a mí y ni a mi hermano pequeño donde él vivía.
Todo estuvo normal los primeros días de su estancia, el enseguida tomo su papel de hermano mayor, se volvió el líder de cada juego, el jefe de mi hermano pequeño que hasta entonces yo era quien lo cuidaba, tengo que decir que me sentí celosa al ver el trato que le daba mi hermano pequeño a alguien que para mí era un desconocido por mas mi hermano que fuera.
Para mi madre se volvió una gran ayuda, ya que según ella con él en casa podía estar más tranquila mientras trabajaba, así no estábamos solos.
El día que todo empezó creo que mi hermano ya tenía como dos meses viviendo en nuestra casa, no recuerdo con exactitud cómo surgió pero mi hermano mayor, nos propuso que fuéramos a jugar a unos edificios abandonados que quedaban en un terreno algo apartado de nuestra casa.
Fuimos allí y mientras mi hermano pequeño fue a otro lado (no recuerdo la razón) nos quedamos solos en un cuarto de uno de los edificios, no puedo dar detalle cómo surgió pero el me dijo si quería verle masturbarse, a esa edad ya sabía lo que era eso (había pasado por una experiencia con mi ex padrastro) No puedo decir porque pero solo asentí, la verdad explicar eso me es imposible, solo asentí y él me dijo que mi hermano pequeño no vendría, no sé qué le dijo él para que no viniera.
El se sentó en unos cartones que había en ese cuarto y abrió sus pantalones, su pene ya estaba erecto, era largo y algo ancho.
El empezó a masturbarse mientras yo solo me quede observando sin moverme.
Al cabo de unos minutos o eso creo me dice que me quite los pantis y lo deje ver bajo mi falda para el poder venirse, a lo cual también acepte, lo hice tranquila como lo más normal, nunca he dicho esto, cada que me preguntan cómo surgieron las cosas mi versión solo implica a él tocándome en mi casa, jamás esta parte de la historia.
Así parada ante él con la falda levantada lo veía masturbarse, me dice que me ponga en cuclillas y me acerque para el tocarme solo un poco que así se iba a venir de una vez, nuevamente obedecí.
Cuando me puse en cuclillas él empezó a pasar sus dedos suavemente por mi coño, en ese momento puedo decir con sinceridad que estaba excitada.
No puedo decir cuánto estuvo tocándome antes de venirse, solo sé que al ver su semen salir, me quede mirando y solo recordaba los días en que mi ex padrastro llenaba mi cara de semen.
Era como ver algo conocido y casi anhelado, Jamás he dicho esto ni siquiera a él.
Después de ese día en casa todo cambio entre mi hermano mayor y yo.
Pasábamos el día solos en la casa, ese tiempo era de vacaciones en la escuela así que solo me la pasaba en casa limpiando, era la encargada de toda la limpieza y calentar la comida que mi madre dejaba cocinada para nosotros.
El me dijo que quería que estuviera en camisón mientras mi madre no estaba, lo obedecí, me excitaba hacer lo que me decía.
Andaba todo el día en camisón y cuando mi hermano pequeño salía a jugar con algún amiguito me quitaba los pantis y andaba solo con el camisón.
Carlos cada día era más osado, paso rápidamente de simple toqueteos a meter sus dedos, chuparme el coño y mis pequeñas tetas.
Yo me dejaba hacer todo sin protesta alguna, algo que nadie saben es que me gustaba en momentos que mi madre estaba sentir como mientras estábamos en la mesa el metía sus dedos dentro de mí y yo allí sin poder moverme, no puedo decir porque a esa edad era tan madura, tal vez lo que paso con mi padrastro o tal vez simplemente era mi naturaleza no puedo explicarlo.
Por más de un mes mi hermano y yo estuvimos haciendo cada día todo lo que él me pedía, nunca pedí nada ni propuse eso es verdad, ni cuando en mi mente había cosas que quería decir solo que quedaba muda y obedecía lo que me decía.
Así avanzamos de él solo tocarme y yo dejarme a yo tocarle a él, un día estábamos en la sala de la casa con el desnudo en el mueble y yo como siempre en camisón me dijo quiero que te arrodilles y yo muy tranquila lo hice, saco su pene y lo puso en mi cara, me dijo voy enseñare a que me lo mames (bueno realmente en ese momento casi me reí digo no era el primero, pero todos quieren ser los primeros y yo le deje creer que así era) El sentir su pene en mi boca no puedo describir con exactitud que sentí pero sé que fue diferente a mi padrastro.
Ese día lo pasamos en ello yo mamarlo casi todo el día, el se venía y me decía tienes que tragar yo hacía caras, no me gustaba el sabor, y lo miraba con mala cara, pero él no le interesaba, solo me decía traga luego te gustara mucho vas a ver.
Nunca me gusto, aunque si me acostumbre.
Carlos estaba tan osado que hasta mientras dormíamos, yo dormía con Sergio y él en un colchón en el piso, entre la cama de mi madre y la nuestra.
Todos dormíamos en un mismo cuarto.
El me despertaba en las madrugadas, muchas veces a mamarlo y otras solo me hacia abrir las piernas para el meter sus dedos en mi coño mientras se masturbaba.
Mucho tiempo estuvimos así, hasta que Carlos al parecer creyó que era tiempo de pasar a otra etapa.
La penetración, esta surgió uno de los tantos días solos en casa, ese día estábamos en un 69 ya teníamos un tiempo haciendo esa posición, la cual me gustaba mucho.
Lo sentía que mientras me chupaba metía sus dedos una y otra vez.
En un momento me detiene y me dice que me recueste en el colchón, llevábamos el colchón en el que el dormía para la sala, me recosté y abrí mis piernas él se puso encima mío y yo lo mire intrigada era rara esa posición para mi, casi nunca estábamos así.
El empezó a jugar con mis tetitas y me pasaba su pene encima del coño.
Lo mire y vi su intención y por primera vez dije que no.
No quería eso, no sé porque pero me asustaba eso.
Así que le dije no quiero que me lo metas.
Y el cómo sorprendido me dijo pero esto es lo mejor tu veras que te va a encantar, eso no duele como dicen ya verás.
Aun con toda su palabrería dije que no.
Y por favor eso no.
Aunque tengo que admitir que solo lo dije con mi boca no intente ni cerrar las piernas ni nada, solo decía que no.
El al parecer vio en que yo no rechazara con mi cuerpo, un si bajo un no, porque empezó a besarme cosa que casi no hacía y en un momento sin más entro de un golpe, tenía mi boca entre la suya así que cuando grite no se escucho más que un murmullo, empecé a llorar y él me seguía embistiendo mientras me besaba y me decía Jazz tranquila entre jadeos.
Yo solo quería que se acabara, estaba más que dolida, no puedo decir que me dolió la gran cosa como dicen, estaba enojada porque le dije que no a una cosa y el no escucho.
Termino dentro de mí y al levantarse cuando vi entre mis piernas salía su semen mezclado con sangre, eso me asusto un poco, el dijo eso es normal tranquila solo vete a bañar.
Me levante baje mi camisón que nunca me quite y me fui al baño muda como siempre.
A partir de ahí me puse toda antipática con Carlos mientras el trataba de contentarme diciéndome que ahora estábamos mejor que la próxima disfrutaría mas etc.
Ya no me dejaba hacer no me ponía el camisón y lo evitaba lo mas que podía.
Pero la verdad eso no me parecía suficiente quería que él fuera castigado por lo que hizo, quería verlo en problemas, así que le dije que se lo diría a mi mama.
Estaba tan enojada y él me rogaba no porfía manita no hagas eso además a ti te gustaba también tu también querías, pero yo solo decía yo dije que no.
Para mí lo único malo era que me hubiera penetrado aun yo diciendo que no.
Así que le dije a mi madre mi versión del asunto, claro la versión más editada que jamás nadie ha contado una versión donde yo era solo una podre indefensa niña que a él le gustaba manosear y que aunque le decía que no él seguía, lo conté con lagrimas en mis ojos, no dije nada mas allá, siendo así que para mi madre solo hubo algunos toqueteos de su parte, pero yo no contaba con que Carlos también hubiera hecho su estrategia, le había contado a una vecina que yo por estar celosa de él y querer que mi madre lo eche de la casa le dije que le inventaría a mi madre que él me tocaba, por lo cual en cuanto yo le dije a mi madre mi versión el llamo a la vecina para que lo defendiera y ella así lo hizo por ende mi madre no me creyó y en vez de eso me dio una tremenda golpiza por mentirosa.
Desde ese entonces mi hermano y yo éramos enemigos, así llego el nuevo novio de mi madre el cual dijo que veía a mi hermano mirarme raro y a mi madre que tuviera cuidado, ella decidió que para evitar (Lo que ya había pasado) el debía volver con su abuela.
Mi hermano se va y yo me doy por satisfecha aunque tengo que admitir que luego de pensarlo no me resulto tan bueno que él se fuera.
Mi hermano se fue pero no para siempre y yo, según él, le debía una.
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