El reencuentro

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por thorpe1948.
A mi me surgió un día un desplazamiento, por motivos de trabajo a la capital, asique prepare mi maleta, pues tendría que estar como una semana fuera, cogí mi coche y tome rumo a mi destino.

Llegue al hotel, formalice la reserva y me fui a mi habitación, era temprano aun, por lo que Salí a dar una vuelta y tomar unas cervezas; de regreso cuando fui a pedir mi llave en recepción vi un grupo de chicos y chicas que charlaba de sus cosas, por lo que pude saber después eran de un congreso de peluquería y estética.
Recogí mi llave y me dirigía a mi habitación cuando llegando al ascensor, alguien me toca en la espalda, me giro y la sorpresa que me lleve fue mayuscula. Mi más ni menos que quien me había tocado en la espalda era mi querido primo, más guapo que nunca. Nos dimos un abrazo, nos saludamos efusivamente y me pregunto que hacia en ese lugar, claro como yo a él, la contestación fue la misma el a un congreso y yo a un curso de reciclaje, asique después de la primera impresión quedamos para cenar.

Después de ducharme, me dirigí al comedor del hotel, y me fue hacia la barra del bar, me pedí una cervecita y me dispuse a saborearla plácidamente, no tardo mi primo en llegar, se acercó pidió otra cerveza y nos pusimos a charlar amigablemente, de lo que había sido en la vida de cada uno de nosotros, y poco a poco la conversación fue derivando hacia nuestra niñez y como no nosotros, en lo bien que lo habíamos pasado juntos aquellos años y lo mucho que lo habíamos echado de menos aquel tiempo. Así fue pasando el tiempo, nos fuimos a la mesa para cenar, tomamos algo cantante ligero y nos fuimos.

En recepción me dijo ahora que vas a hacer, a lo que le contesté, que nada que me iría a la habitación, él contestó:
– Que numero de habitación tienes,
– Le conteste, que la 315.

Ele entonces me dijo que tenía que ir con el compañero durante una hora a ver unas cosas, que ya hablaríamos, y se fue. Yo me subí a mi habitación me puse cómodo y me puse a ver TV.
Como a la hora y media, siento que tocan en la puerta, voy a abrir y me lo encuentro en el dintel con una botella de champan en la mano, entramos y al cerrar la puerta, me dijo, ¿No pensarías que te iba a dejar solo esta noche después de tato tiempo? Nos echamos a reír y nos fuimos hacia la cama.
Abrimos la botella y llenamos nuestras copas, brindamos por nuestro encuentro y charlamos animadamente, durante un rato, pero claro después de tanto tiempo sin vernos no íbamos a dejar pasar la oportunidad de recordar de nuevo lo que hacíamos de más niños. En ese momento le pregunte si lo había echado de menos aquellos encuentros y no me contesto, tan solo se acercó a mi y sin mas me beso en la boca, un beso intenso profundo sensual, que diecia todo lo que quería saber.

Sin mediar mas palabras se quito la ropa y volvió a mi, volviendo a besarme yo estaba en albornoz, y debajo solo llevaba le bóxer asique me dijo, que perdemos mas tiempo o lo pasamos bien como antaño A lo que tampoco le conteste, simplemente me quiete lo poco que tenia encima lo abrace y lo eche en la cama, cuantas veces había soñado con aquello en aquellos años pasados, seguía teniendo un cuerpo hermoso, mas formado y su culo,…. Ummmmm dios estaba tan apetecible como siempre,, me recosté a su lado y abrazándonos comenzamos a besarnos y a tocarnos por todos los lados, yo le amasaba aquellas nalgas que tanto me ponían, el me acariciaba me besaba en el cuello, en la boca en las tetillas, cosa que me volvía loco, nuestros penes aprisionados entre los dos ya estaban duros como piedras, ninguno de los dos hablaba, no hacia falta, tan solo actuábamos, hasta que ya no podíamos mas, en ese punto el me separa y besándome por el peche se bajó hasta mi polla y sin mediar palabra se la metió en la boca, y comenzó a darme tremenda mamada, yo estaba en el cielo, al poco de estar mamándomela se dio la vuela y se puso e un 69, por lo que su polla quedo a la altura de mi boca, y la verdad tampoco lo pensé la metí en mi boca y comencé a mamársela al también así estuvimos hasta que los dos nos corrimos no en la boca del otro, fue un momento apoteósico, a mi nunca me había pasado y la verdad cuando me lleno la boca de semen me cogió por sorpresa, pensé en echarlo fuera, pero después , lo pensé mejor y le di la vuelta y acto seguido me fui a su boca y nos fundimos en un beso con nuestra leche aun en la boca, fue un momento en el que aquel beso mezclo nuestras leches al mismo tiempo que nuestras lenguas se encontraban, al final los dos nos lo tragamos sin separar nuestros labios, quedando encima de la cama, tan calientes como antes, pues nuestras pellas tardaron cinco minutos en recuperarse.

Cinco minutos en los cuales los besos y las caricias no cesaron, seguíamos amasando nuestras nalgas y yo poco a poco comencé a meterle el dedo en su precioso hoyito, un que gusto ver como le entraba, no había problema le mata tres dedeos y los tragaba sin problema así estuvimos un ratito acariciándonos hasta que yo ya la tenia como una piedra de nuevo, en ese momento me la cogió con la mano la beso y me dijo tranquilo se levanto y regreso con un frasco de lubricante. Me puso un poco en la polla y se unto otro poco en le nao. Se acostó en la cama y dándome la espalda, me dijo ¿recuerdas la primera vez?, pues cano la recordarla mejor, yo me acerque a su espalda y sobando la cabeza de mi polla entre sus nalgas me encendía hasta que la puse en su hoyo y como aquella primera vez, se la apreté poco a poco y la cabeza de mi polla se fue enterrando en aquella cueva que tanto placer me había dado tiempo atrás. Cuando se la hube enterrado entera, lo abrace con fuerza pegándolo totalmente a mi y la gloria llego a mi cuando al empezar a bombear, sentí sus primeros gemidos, aquello me calentó aun mas.

Me quede un poco parado, entonces el comenzó a moverse mientras me decía, vamos primo dame fuerte, métemela todo como tu sabes que me gusta, ya sebes que soy tu puta y que te quiero dentro, muy adentro, muestras pasaba su brazo detrás de mi y apretaba mis nalgas para que lo penetrar mas fuerte. Yo no podía mas aquella locura me invadió y comencé a moverme con tal fuerza y tal rapidez que cada metida lo desplazaba en la cama. Así me decía, démelo así, sigue no pares por favor, que hace mucho que no sentía una polla como la tuya tana dentro, sabes que me vuelves loco, que solo quiero follar contigo, dame mas, mas fuete, yo ya no podía mas mientras con un brazo lo abrazaba para que no se separar un centímetro de mi con la mano libre lo empecé a masturbar mientras seguía metiéndosela sin piedad hasta el fondo, no tardo en correrse y al mismo tiempo yo no aguante y me derrame dentro de aquel culo que tanto me gustaba, los dos quedamos exhaustos se dio la vuelta chorreando semen entre su piernas y abrazándose a mi me dio un beso que parecía una ventosa, ummmm me encantaba,

Descansamos un poco mientras tomamos una copa pero sin dejar de acariciarnos y darnos mimos. Hasta que comenzamos a animarnos de nuevo, en ese momento le dije, primo ¿quieres tu hacerlo como aquella primera vez? El me miro y me dijo ya sabes que a mi me gusta mas que me la metas tu, pero mira esta vez para recordar la primera vez lo vamos a repetir. Le di la espalda y me puse boca abajo él se puse entre mis piernas y empezó a acariciarme entre las nalgas, no tardo en aplicar sus labios a mi esfínter lo que me proporciono un escalofrió, sentí como su lengua jugaba con el intentando introducirse dentro, me dio una enorme mamada de orto que me lo dejo blandito.

Se puso lubricante y me lo puso a mi y sin mas se acoplo encima de mi, al contacto de aquella piel suave y caliente, me encendía, comenzó a pasar la cabeza de su pene por mi rajita hasta que la puso en la entrada de mi orto y comenzó a apretar, cuando la cabeza entro sentí un pequeño dolor, que la excitación que tenia el suavidad con que mi primo me la iba metiendo casi ni me entere hasta que sentí mi culo lleno de aquel pedazo de carne que me había taladrado. Se quedo quieto recostado totalmente encima de mi, y cuando comienzo a bombear, el placer fue total, iba tanto tiempo que no lo habíamos hecho que en ese momento se agolparon en mi mente todas las imágenes y las sensaciones de tantas otras veces que nos habíamos penetrado, en aquel momento repare que lo que me había metido era bastante mas grande que lo que yo recordaba, la verdad de largo no había crecido mucho mas tal vez un para de centímetros o tres, pero el grosor que había alcanzado era considerable,, durante el2e tiempo que la estuvo metiendo de verdad lo disfrute, después se dejo caer aun lado sin sacármela, quedando los dos de lado ahí si me la clavo tan adentro que me sentí morir del placer que me dio hasta el punto de que de tanto estimular mi próstata me corrí como una puta si tan solo tocarme. Fue apoteósico sentirlo agitarse dentro de mi mientras yo me corría como nunca y el al mismo tiempo se vaciaba totalmente dentro de mi.

Quedamos los dos agotados nos temblaba todo, nos quedamos así juntos y abrazados y no se cuanto tiempo paso, creo que los dos nos quedamos dormidos.
Yo cuando desperté eran como las seis de la madrugada, me di la vuelta me arrime a su espalda y con cariño lo abrace y lo bese en el cuello, me quede un rato así a su lado pero en esa postura con aquellas nalgas apretadas contra mi polla no podía ser que durara mucho, y así fue pronto comenzó a despertarse mi falo y ponerse de nuevo duro.
Yo no quería despertarlo pero aquello tan duro entre sus nalgas termino por despertarlo, no dijo nada tan solo echo su mano a mi polla y la enfoco a su hoyo, apretando con su mano para que entrar, no hizo falta mas estimulo sin mas apreté fuerte y de un tirón se la metí hasta el fondo, dios como estaba de caliente aquel culo como me gustaba tenérsela así tan adentro, comencé a bombear nuevamente, esta vez despacio lento profundo, no se cuanto tiempo estuve dándole caña, debió de ser mucho porque a mi casi me dolía ya la polla de darle y darle fuerte, pero no quería sacarla, quería seguir así eternamente hasta que quedara tan flácida que ya nos sirviera para nada, Dios mio que noche estábamos pasando, termine dándole otra vez fuerte como a él el gustaba y nos volvimos a correr los dos.

Cuando quisimos reaccionar eran ya la ocho de la mañana asique nos duchamos y nos fuimos cada uno a su quehacer, pero lo mejor de todo es que los dos teníamos por delante 5 días, que eran los que el estaría yo tenia dos días mas.
Asique nos fuimos y lo que aconteció esos días fue brutal, pero eso lo dejaremos para otra ocasión, espero le haya gustado el rencuentro, yo la verdad lo disfrute como nunca.
Si les gusto espero sus comentarios un saludo amigos.