El sacrificio de una madre Cap2
Continuamos la historia de Gerardo y su cachonda madre.
“Acostándome”
Y tratando de dormir, pues verla llegar en ese estado y con los pelos del coño más alborotados que los de su cabeza me hizo soñarla no solo aquí sino también en la antigua casa, con vecinos, con familiares, con extraños, a los que directo llevaba a su cuarto.
- Mami, ¿qué ocurre? ¿dónde está papá?
- Muerto cariñito, para alegría de mi felpuda. Dijo relamiéndose los labios
- ¿Qué?
- Toma, esto me adelanto tu tío, cómprate dulces a lo que termino.
- ¿Solo esto?
- Ay mi vida, no sé si te enteras pero yo trabajo por amor al vicio.
- Debes estar bromeando.
- No, y lleva mi ropa a la lavadora, ya no la necesito.
Se deslizo el vestido de noche (negro) y la micro tanga (blanco), para luego irse con su acompañante, al matadero, al ring, donde le sacaban la mierda a punta de vergazos, “ASI PERRO”, “NO TE DETENGAS”, “DESTROZA EL PELUDO COÑO DE TU CUÑADA”, “VAMOS, DURO, DURO, DURO, ¡AHHH!! ASI DIOS MIO!! DALE HASTA QUE LO ARRUINES Y LO LLENES DE LECHE”, “ESCUCHASTE”, “TU PUTA TE DA PERMISO”, “DE QUE LA PREÑES Y LA DEJES BIEN PANZONA”, “PARA QUE PUEDA PARIR COMO LA PERRA QUE SOY”, “DE A CINCO”, “TODA SUCIA Y ACLUCLILLADA”, “MIENTRAS NO ME PERDONAS Y ME DAS GUERRA POR EL CULO”.
Saber que eso le gritaba a mi tío en el calor de la batalla y con el constante estallido de sus nalgas me hizo sentir nauseas porque aquel familiar era el que más venía a visitarnos.
- Debo detenerla, ¡no puede tener un bebe con mi tío!!
Corrí por las escaleras y abriendo la puerta no estaban, si, era solo mi mente, jugando perversamente conmigo.
- ¡Rayos!! mi cabeza, está pensando mucho en lo que vi. Dije despertando agitado
Calmando mi respiración y sobándome los ojos caí en cuenta que ya había amanecido.
- Mejor me levanto, mamá es puntual con el desayuno.
Si ayer me di varios golpes de realidad hoy no sería la excepción.
- ¿Dónde está? Dije al salir de mi cuarto
Pues no había sonido de tacones ni de sartenes crujiendo, ni siquiera….”los buenos días dormilón” con su linda sonrisa.
- ¿Porque mami? ¿porque?
Sabía que estaba en su habitación, que había llegado, que dormía, pero, ¿porque no despertar como de costumbre? Sonriente y llena de alegría…claro…dentro de mi deseaba que todo volviera a la normalidad, como un anhelo infantil, pero no…ya todo había cambiado.
- Entiendo, tu jefe te dejo peor que limón aplastado.
- Adiós y mejor me alisto para el trabajo.
No quería decepcionarme más ni mucho menos enojarme, así que me alejé de casa lo más pronto posible, ya recién en la calle caí en cuenta que estaba solo y sin escuchar sus consejos, que momento, y pensar que ella siempre me cuidaba, del peligro de los suburbios.
……………………..
……………………..
Ya en la Fábrica, para ponerle una cereza al pastel y pedir un deseo, me topé con los bravucones, que fumando cigarrillos perdían el tiempo en el patio, ahora si me cagaba una paloma creo le daría las gracias… (Pensé sarcástico).
- Hey, hey, nenito de mami, porque no vienes un rato.
- Ando tarde para marcar y no me fastidien, no traigo lonchera ni dinero.
- No importa, mañana seguro que traerás, ahora queremos enseñarte una cosa.
- No tengo tiempo. Dije apurando el paso
- ¡Qué vengas o te madreamos!!
Uno se puso delante de mí y los demás atrás.
- ¿Qué quieren?
- Ya nos enteramos que estas saliendo con Cat, mi ex novia.
- ¿Qué? ¿estuvo contigo?
- Si y mira, solo para que te enteres….la putita que fue conmigo.
Me enseño su celular y un video se reproducía, ¡era Caty!! Chupándole los huevos en los baños de la fábrica, mientras le hacia una paja.
- ¡Rayos!!
- ¿A que sabe mi pene cuando la besas? Eh, jajaja.
Mi limpie los labios y me aleje de ellos.
- Corre, corre, ¡que pronto tendremos así a la milf!!
Llegue a mi sector y Caty me esperaba con los brazos cruzados.
- ¡Oye!! hasta que por fin llegas, soy tu novia, pero tampoco me hagas esperar tanto.
Iba a besarme pero ladee la cabeza.
- ¿Qué ocurre? Solo quería darte un beso de novios.
- Eee….esteee…mejor lo dejamos aquí, no eres mi tipo, con permiso.
Ya estaba por irme con el supervisor, pero me atajo con su cuerpo.
- Me engañaste, creí que te gustaba. Dijo con los ojos brillosos
- Sí, pero….
- ¿Pero qué?
No era mi intención encararla pero algo me empujo hacerlo….tal vez….el cariño que le guardaba.
- No me dijiste que estuviste con uno de los bravucones.
“Quedo pensativa y respondió con mirada matadora”
- Ya veo, era eso, desgraciado hijo de perra, ¿qué te enseño?
- Un…un video.
- Ni me digas haciendo que, porque ya puedo imaginarlo, lo siento Gerardo, sé que no debí ocultarte eso pero ya paso, ahora me gustas tú.
Me agarro de las manos y me vio tan tierna que no pude resistirlo.
- Tú…también me gustas.
- ¿Entonces? Lo de él y yo ya paso, ahora es nuestra historia, no me dejes.
Creo que tenía razón, no era para tomarlo tan a pecho, además los bravucones solo querían fastidiarme y separarme de ella, así lo entendí.
- Vale, sigamos juntos Caty.
- ¡Ay sí!! ¡Te adoro!! ¡Te quiero!! ¡Te amo!! Dijo llenándome de besos
- Jejeje, ya debo irme o el supervisor me hará una advertencia.
- Ok, nos vemos al rato entonces.
Se fue y el trabajo duro como de costumbre hasta las 4:00pm, lo único raro fue no verla al salir, así que cuando iba a llamarla apareció detrás de mí colgándose como una mona, supongo que también era juguetona, si, como ella, que curioso, verla y recordar a mi madre, en sus mejores tiempos de chiquilla.
- ¿Qué ocurre amor? ¿Porque me miras así?
- Me recuerdas a alguien.
- Oye, no será a la puta de un callejón ¿no?
- No no, a mi madre.
- Ay…perdón, como lo siento, es que tantas cosas feas que me dicen.
- De veras tienes un parecido en el rostro y en su físico, cuando era adolescente.
- Ya veo, ha de haber sido muy bonita entonces.
- Si, luego te enseño sus fotos.
De la mano caminamos, dando un paseo por el patio.
“Momento de los mimos”
- Me encargare de que nunca dejes de sonreír.
- ¿Porque?
- Porque así te querré siempre.
- Ay qué cosas dices. Dijo sonrojada y cruzando las piernas
- De veras, me encanta tu sonrisa.
Mastico su chicle y mordiéndose los labios me miró la cintura.
- Gerardo, amorcito.
- ¿No te provoca hacer algo?
- Si, descansar, tengo la espalda casi rota, ese supervisor es un explota….
- No, no me refiero a eso, sino…a otra cosita, más divertida. Dijo agarrando mi camisa y jalándola con fuerza como queriendo arrancármela
- Eee… ¿qué cosa?
Me miraba sedienta y como si yo fuera su recipiente de agua.
- Podríamos….no sé….tengo mi casa libre sabes.
Ya estábamos por llegar a la calle y no comprendía porque quería llevarme a su casa, pero bueno de todas maneras iba a aceptar la invitación, tal vez y me daba unos masajitos.
- Vale, vamos, ¿pero sabes dar masajes?
- Si, en eso soy experta, lo hago con la mano y con la boca. Dijo hinchando su mejilla con la lengua y como agarrando una botella de las gordas, remangándola
- Ay caray……que cosas tan raras haces. Dije viéndola rabiosa
- Si, hazte el tonto nomas que llegando me vas a dar hasta por donde no me brilla el sol.
Me agarro del pantalón y me llevo apurada, al parecer ansiaba darme ese relajante masaje, solo me preguntaba, ¿cómo iba hacerlo con su boca? Capaz técnica nueva.
……………………
- Está bien chicos, solo porque son amigos de mi hijo y además…. ayer me pagaron.
Esa voz, esa dulce voz, la reconocí al instante, ¡era mi madre!! Que acompañada por los bravucones me dejo peor que un cubito de hielo.
- ¿Y en que trabaja señora Portillo? Si se puede saber claro.
- En un bar, de mesera.
- Vaya, con esos billetes en la cartera debe tener un traje muy bonito.
- Bueno, mi indumentaria es algo ligera pero sin enseñar mucho.
- Haber si mejor nos dice donde trabaja y vamos a visitarla.
- ¿Son mayores ya?
- Si, con todas las de la ley.
- En ese caso, no está mal que vayan a tomarse unas cervezas, además con todo lo que trabajan les cae como premio.
- Si y que mejor que ser atendidos por la mamá de nuestro amigo, ¿no?
- Les llevare unas bien frías, jijiji.
¿Qué? Me dije alarmado
- La dirección te la puede dar otro día Cano, ahora que nos preste el dinero. Dijo el otro viendo la cantidad que tenía en su cartera
El líder por poco y le da un codazo pero se contuvo viéndolo serio.
- ¿Pasa algo chicos?
- No, nada señora, ya luego lo arreglo, ahora como dice préstenos lo que acordamos.
- ¿Cuánto me dijeron?
- 20 para cada uno, 60 en total.
- No, esta vez les daré 100, por ayudar a mi hijo en su sección y hacerle el trabajo menos pesado.
- Joder, eso suena de pu…digo bien.
Mamá les dio de su dinero y todo mientras uno de ellos la grababa con su celular.
- ¿Esta prendido?
- No señora Portillo, que haría yo grabándola por detrás.
- Si, ni que fueras un viejo mañoso.
- Así es, aquí todos somos chicos buenos y no andamos mirando…Dijo enfocando su durazno y como este anchaba su vestido
- ¿Qué cosa?
- Nada, nada señora Portillo.
- Jijiji, mejor tomen, el dinero para sus libros y sus pasajes.
- Oh genial señora, para todo eso ira.
Fue en ese momento que no pude más con el descaro e hice presencia.
- ¿Mami?
Al escucharme la piel se le puso chinita y la emoción la desbordo.
- ¡Cariño!! al fin saliste de la fábrica, te extrañe tanto.
Corrió abrazarme como sintiendo culpa por no acompañarme.
- Perdóname, llegue muy tarde anoche y me quede dormida, te juro que no volverá a suceder.
- Está bien mami, no te preocupes. Dije tratando de alejarla un poco pues sus pechos claramente estaban sin sostén y no solo se aplastaban contra mí, sino que se desnudaban más con el efusivo abrazo, al punto de mostrar ya las areolas
- Disculpe señora Portillo, no me da un apretón con ese par de…..manos tan lindas.
- No, solo me convierto en osita cariñosita con mi hijo, jijiji.
- Vaya, que hijo de….
Molesto refunfuño y ella sonriente volvió a verme.
- ¿Comiste algo bebe? ¿Estas con hambre?
- Un poco, la verdad mucho, como no tome desa…
El bravucón aprovecho que mamá estaba distraída para meter por debajo su celular y grabar entero su raja, si hasta hizo un gesto de cerdo sabiendo que seguro más tarde vería unos enormes y jugosos cachetes.
- ¿Qué ocurre cariño? ¿porque te cortaste? ¿Pasa algo?
Iba a girarse pero la detuve.
- Eee…no, mejor ya vamos.
- Vale, te invitare un platillo requete sabroso. Dijo haciéndome cosquillas en el estomago
- Jejeje, te pasas mami, ya no soy un bebito
- Perdón entonces, señor macho alfa Gerardo, a veces olvido que te está creciendo pelos en el pecho y en otro lado. Dijo guiñándome el ojo y aguantándose la risa
- Siempre tan molestosa mami.
- Ya me conoces.
Revoloteo mi cabello para luego darse la vuelta y llevarme de la mano.
- ¿Eh? ¿que estabas haciendo agachado?
El chulito guardo rápido su celular y se alejó silbando como si nada hubiera pasado.
- Discúlpelo señora, este pedazo de…buen amigo, a veces se pone a buscar hormigas para su criadero y no sabe respetar la distancia personal.
- Ay, era eso y yo pensando que me estaba grabando por debajo, que pena.
- No, le gusta buscar con luz, esta algo tuerto.
- Ya veo, suerte con eso entonces, yo me tengo que ir, un gusto conocerlos y se me cuidan eh, nada de fiestas, nada de vicios y sobre todo…nada de chicas, aléjense de las traviesas. Dijo sonriente
- Lo intentaremos, jajaja.
Los tres se juntaron en orden y si solo les faltaba peinarse de lado… (pensé sarcástico).
- Hasta luego señora Portillo y pronto estaremos visitándola, para conocerla mejor a usted y a nuestro amigo, Gerardito.
Pero qué cara….
- Ay que simpáticos, los estaré esperando, con los brazos abiertos.
- Y si mejor lo haces con tus piernas… (Murmurando al pasar).
Se fueron riéndose, mientras mamá ingenua los despedía con su mano, ahí confundido pregunte esperando entender lo que pasaba.
- Eee… ¿los conoces?
- Recién hoy, ¿qué curioso no? y yo pensando que no tenías amigos.
- ¿Amigos? ¿De qué hablas mamá?
- Ay no te hagas, ellos se me acercaron y me dijeron bien clarito que eran tus amigos, además son respetuosos, ya veo porque los elegiste.
- Respe… ¿tuosos?
- Con que bien escondidos los tenías, pero está bien, siempre es bueno hacer amigos en el trabajo, así no te aburrirás ni tampoco tendrás problema con los abusivos.
- Pero….ellos….son….
- Uy que reservado fuiste, seguro eso lo sacaste de tu padre pero no importa vamos ya, el trabajo de ayer también me dejo muy hambrienta. Dijo sonriente y sobándose la pancita
Fue en ese momento que mire a Caty y ella pareció sospechar lo mismo que yo….”mi madre, con el calzón en un tobillo y los tres encima de ella, turnándose para darle”.
- Umm… ¿y esa muchachita? ¿quién es? Dijo asomándose
A lo que rápido respondió dejando a mi madre al borde del desmayo.
- Soy su novia, un gusto suegra.
- ¡Ay!!….!Ay!!….¿Su-suegra?
- Si y pienso darle muchos nietos eh.
Mamá calmo su corazón y viéndome sonriente acepto lo que pasaba.
- Vaya, supongo que es un día de sorpresas, primero los amigos, ahora la novia, Gerardo, por lo visto te estas acostumbrando a tu nueva vida.
- Eee….sí mami.
- Bueno, en ese caso no me quedare atrás y le echare ganas también a mi nueva vida.
- ¿Qué?
- Mira cariño, ayer me pagaron. Dijo emocionada y abriendo su cartera
En ese momento recordé los billetes desparramados y otros tirados sobre su desnudo y enrojecido cuerpo, pero estaba tan contenta que no me atreví a recriminarle.
Total, ya no tenía a papá y buscaba la forma de ganarse la vida, que culpa tenia ella de los aprovechados.
- Estupendo mami, ya la estábamos pasando mal. Dije sonriente y dándole ánimos
- Si, ahora todo cambiara, te lo prometo mi vida.
Me hizo cariñito, al punto que la perdone de corazón, luego, ya más suelta y animosa vio a mi novia.
- Me llamo Camila, Camila Portillo, pero tú puedes decirme como gustes, suegra, mami, mamacita, jijiji, como quieras.
- ¿Cami está bien?
- Pues sí, todas mis amigas me llamaban así.
- Queda entonces, suegrita Cami.
- ¿Y tú? ¿No te presentas nena?
- Caty pero me dicen Cat.
- Uy, ¿gatita? Por algo debe ser, jijiji.
- Mejor ni le cuento, jijiji.
No sé si era el destino o mera coincidencia, pero se parecían tanto, al punto que daban la impresión de ser mamá e hija.
- Vamos, te llevare a comer.
- ¿En serio?
- Si, si estas con mi hijo eres parte de la familia.
- Ok…suegrita.
Aquella tarde fue un regalo del cielo pues verla tranquila, con dinero, sonriente, bromista, no tenía precio, tal vez estaba pagando en privado uno muy caro pero con la familia no mostraba cicatriz alguna, eso me dio un indicio, de que como mujer adulta lo estaba llevando con responsabilidad.
- Te quiero mami.
- Yo también cariño.
Almorzamos fuera de los suburbios, en un restaurante de pastas y mariscos, como en aquellos tiempos cuando papá vivía y nos consentía a más no poder, que nostalgia.
Pero como toda en la vida…..empieza y termina.
Dejamos a Caty en su casa, volvimos a nuestro piso y como a eso de las 7:00pm, mamá recibió una llamada.
- Un segundo hijo.
Me dejo viendo la película en el sillón mientras ella fue a la cocina, ahí baje un poco el volumen y pegue oreja, solo por curiosidad.
- Hola jefecito, aunque sea me hubiera tapado ¿no? me desperté con la gallina empollando. Dijo riendo
- …………………
- Como que me dejo un regalito, ¿que se abría en nueve meses? se pasa, tan rápido y quiere dejarme panzona, ni que fuera perra callejera. Dijo riendo
- …………………
- No, de milagro no se rompió y saque al pollito a tiempo, lo que hubiera sido embarazarme a la primera, ni mi esposo.
- …………………
- Si, ya me despego los labios, al punto que ni me la reconocí, de tantos días que me la lavé chinita, jijiji.
- …………………
- Que no ha escuchado, “que por la plata se entrega la concha”, digo, por la plata baila la mona. Dijo riendo
- …………………
- Mentira mentira, era broma, los billetes me gustan, pero…más lo que tiene colgando entre las piernas, eso fue el verdadero premio, sacarme toda la telaraña.
“escuchando que algo se rascaba”
- …………………
- Ay que travieso, cuide esa boca, no sea tan sucio, ¿olvida que está hablando con una señora de su casa? Dijo riendo
- ………………….
- Si, solo yo puedo cachondear, por algo tengo estos pelos en la concha, como la ve.
“ahí supe que sonaba”
- ………………….
- ¿Cómo qué ahora? Jijiji, No, escúcheme, ya hablando serio, sabe que me encanto la noche que pasamos y que también le tengo ganas, pero de verdad no puedo, mi gallinita amaneció malherida y algo desplumada, por cierto, ¿me jalo el mechón no?
- ………………….
- Travieso, lo sabía, pero no importa, se lo paso, solo entiéndame, llevo tiempo sin acción y estoy como recién desvirgada.
- ………………….
- Lo sé y no se preocupe, mientras cumpla mi pago, me trate bien, yo bailo y lo atiendo en el club, como quedamos.
- ………………….
- Aja, si, no hay problema, que venga y lo espero, si es para consentirme lo recibo hasta de piernas abiertas, digo de brazos, jijiji.
- ………………….
- Era otra broma jefe, como cree, si usted es el único macho que puede voltearme los ojos, con ese pene riquísimo que se carga, ay de solo imaginarlo se me moja la conchita.
- ………………….
- Como que está apuntando al techo, pues alce el teléfono y llame a una de sus conejitas, yo le doy permiso, por vagina y culo, para que luego no ande pidiendo el mío, jijiji.
- ………………….
- A que yo soy la favorita, uy, qué halagador se puso, no me haga ir eh.
- …………………
- ¿Drogarme la zorra? ay qué cosas me propone usted, pero no, gracias, ya cuando me recupere estoy de vuelta, para que me saque la mierda como se debe, sí, ¿que come que adivina? Esa sensación, de sentir ese tronco tan largo abriendo mi conchita, no me lo quita nadie de la cabeza, créame, hasta los gritos los escucho, que buena cogida me dio.
- ………………..
- Pero todo a su tiempo, ahora mi descansito, que me lo he ganado eh.
- ………………..
- Ay patrón, sé que es su sueño que me lleve bien con él, pero no, mire, con decirle que ganas no me faltan de cagarle la cara y limpiarme con su boca, así se la tengo jurada.
- ……………….
- Pero un momentito, ya que usted lo manda a consentirme, como su reina que soy, voy hacer un gran esfuerzo y le daré una oportunidad, de conocernos mucho mejor, ¿está bien? ¿Eso lo deja tranquilo?
- ………………..
- Si, solo por usted, al que adoro mucho. Dijo mandándole besos
- ………………..
- Ya jefecito, se me cuida, bye.
Mamá colgó y volvió con una sonrisa de oreja a oreja.
- ¿Qué ocurre mami?
- Voy a salir cariño, dentro de un rato.
- ¿A dónde?
- De compras. Dijo bailando entusiasmada
- ¿Tan bien te va ahora?
- Sí, pero ojo, no gastare mi dinero, es un regalo de mi jefe.
- Eee….no deberías aceptarlo.
- Pero como que no, si es gratis cariño, además tengo tiempo que nadie me consiente y eso para una mujer como yo es difícil, soy linda hijo. Dijo inflando los cachetes cual chiquilla quejona
- ¿Qué quiere ese señor? Ese que llamas jefe.
- Pues nada, solo me retribuye…..el buen trabajo que hago como mesera.
- ¿Segura?
- Sí, no te alarmes, ni pongas esa cara, que yo a tu padre nunca lo sacare de mi peludo corazón.
- ¿Qué? ¿peludo?
- ¡Ay!! perdón, estaba pensando en otra cosa que se me fue, mi corazoncito hijo, este de aquí. Dijo señalándolo con su dedo
- Eee….ya veo.
- Si, y te dejo, debo alistarme.
- Eee…..mami.
- ¿Qué?
- ¿Puedo acompañarte?
Mamá en principio lo dudo pero al final creyó conveniente llevarme, tal vez para despejarme y ver que todo marchaba bien.
- Claro, vamos, te comprare juegos de pasada.
- ¿En serio?
- Si, ya va haciendo hora de que recuperemos algo de nuestras vidas.
…………………………
…………………………
Así pasaron los minutos y como a eso de las 8:30pm, la puerta sonó de forma incesante, era la visita o mejor dicho la persona que esperaba.
- No cariño, voy yo, tú alístate.
Ya se había bañado, ya se había maquillado y muy contenta paso acomodándose su prenda.
- Eee….bájele mami, se te ven los cachetitos.
- Sí, es que se me engancho esto en los calzones, ay, eso pasa por andar sin nada y ponerme el cubre peluches de último, ya, ya salió.
Iba a irme, pero…note algo raro en su caminar, en su forma de ajustar el vestido, lo cual me pareció sorpresivo pues llevaba años de años viéndola, que extraño, si hasta el olor natural que emanaba era intenso, ¿será que se cuerpo estaba cambiando? O mejor dicho… ¿preparándose?
Toc Toc Toc Toc!!
- Ya voy, ya voy.
Abrió la puerta y frente a ella apareció el cabronazo de Jasón, deleitándose de pies a cabeza.
- Ohh…por donde mire veo jamón del bueno, habla, ¿a qué hora sirves el pellejo con pelos? Te lo quiero morder. Dijo haciendo tronar los dientes
- A la misma hora que la de tu mamá. Dijo burlona y golpeando suave sus costillas
- ¿Con que quieres pelear no? doña zorra.
- Tú me jodes, yo te jodo, ¿está claro?
- Como el agua, ¿y no me saludas?
- Límpiate la baba primero, luego pórtate bien, recuerda que estas en mi casa. Dijo advirtiéndole con el dedo
- Ok, lo intentare.
Mamá confiada lo abrazo y le dio dos besos en la mejilla, como queriendo llevar la fiesta en paz, “un nuevo comienzo tal vez pensó”, pero….
- Espera espera.
- ¿Qué? Dijo confundida y a punto de girarse
- El jefe me ordeno que esta vez no te comieras nada.
- ¿Cómo? Si aún no ce….
Levanto su vestido por el frente y metiendo su dedo por un costado de sus bragas lo flechó, cual corazón, para acto seguido jalar la tela y despegarla de su gomosa vagina.
- Ohh, está suavecita la conchita, ¿pero aféitate un poco no?
- Cuanto pelo enmarañado joder, esto es de guarras.
- De guarras.
Desgraciado asqueroso, si lejos de detenerse subía y bajaba el dedo, ya queriendo hasta sacar el hilo de sus nalgas.
- Así tienes que meterte el dedo o te vas a tragar hasta los jeans.
- ¿Está claro?
Mamá cogió su brazo, lo apretó rabiosa, casi arañándolo y cuando esperaba la tremenda cachetada, esta lo dejo ahí, mirando fijamente lo que hacía y relamiéndose los labios.
- Me coma lo que me coma, ¿no hace más apetecible mi trasero?
- Zorra vieja tenías que ser.
- Desgraciado, tú no tienes remedio, primero me metes el dedo, ¿y ahora me llamas vieja? que grandísimo hijo de puerca eres, sabes.
- Estas llegando a los 40 y con toda la carne que te cargas que morra vas a ser.
- 37 chiquito por si no lo sabes y bien que te mueres por montar mi culo de vieja.
- No te vas a salvar, serás la perra de mi jefe, pero de que te la hundo te la hundo.
- Mira, yo tampoco creo poder salvarme pero porque no hacemos una cosa.
- Tratar de llevarnos bien, digo, si algún día vamos a matar la gallina mejor que sea en buenos términos, ¿no?
- Como quieras, me da igual.
Mamá se giró a verme y rápido me hice el distraído.
- Jasóncito.
- ¿Qué pasa zorra?
- ¿Ya me sueltas el calzón? lo tengo a la cadera de tanto que jalas.
- Uff…y si mejor me dejas ver como quedo.
- Esta igual tonto, el jefe no me rajo.
- Como que no, si tiene una tripa colgando.
- Y yo un carnoso y peludo chocho, para que lo tengas claro.
- Puta madre, faltaba más, la batalla que debiste darle, no está mal, nada mal.
- Así soy yo, nunca huyo de los re….
Jalo tanto el triángulo para husmear que le hizo dar unos pasitos hacia adelante.
- Oye, jijiji, ya, podría venir algún vecino.
- Que rica concha carajo, me muero por probarla. Dijo rozándola con su dedo
- Lo sé, pero recuerda quien es tu jefe y quien es su chica.
- Entendido…..doña zorra.
Soltó la tela de golpe dándole un ligazo en toda la vagina.
- ¡Au!!…serás tonto. Dijo sobándose
- Lo lamento, es que me pareció ver a un vecino, jajaja.
- Si cabron y yo me chupo un dedo, pero ya pasa y compórtate, lo vuelvo a repetir.
- Caraja, como esta ese ano de dramático, seguro ni sentada en el trono se abre.
- Eso a ti que te importa. Dijo golpeándolo
- Ok ok, ¿y a quien coño esperamos?
- A mi retoño, se está cambiando.
- Ohh, no me digas que el hijo de puta ira.
- Se llama Gerardo… (viéndolo chinita) …y si, ira con nosotros, porque necesito un verdadero hombre a mi lado.
- Ya sabía que te lo follabas, eres una mujerzuela sin escrúpulos.
- Serás tonto, como voy a follarme a mi hijo.
- Seguro a él si le das el culo ¿no?
- El de tu madre ya se lo di, cuando fui a llevarlo por su primera vez, menudo regalazo se llevó, petándola a tope y sacándole toda la mierda, es que mi hijo si es macho pues, no solo un caballero, se lo hizo cagar con todo su semen.
- Uy la señora de su casa, se está poniendo brava y bien cochina, jajaja.
- Ya te dije, no me provoques que también se golpear duro.
Lo empujo y este sonrió por primera vez.
- Ya doña, ¿dónde está?
- En su cua……
Ambos me vieron en el sillón, dando paso a un silencio raro.
- Cariño.
- ¿Si mami?
- Pensé que te estabas cambiando pero bueno no importa, te presento a Jasón, un amigo del club.
- Hola señor.
- Hola chaval, un gusto conocer tu segunda casa.
- ¿Se-segunda?
- Sí, porque la primera ya la conozco, estrecha y llena de vello púbico, debiste salir como un mono.
- ¿Ve-vello púbico?
- Jijiji, que gracioso este pedazo de…. discúlpalo cariño, Jasón a veces es muy bromista y no se mide, mejor ve alistarte, vamos, rápido, hay que salir.
- Eee…vale.
Quedaron conversando muy bajito, al punto que ya no escuchaba nada, pero por la cara y la forma de hablar de mamá supe que le estaba recriminando, a lo que Jasón le contestaba con una broma y haciéndola reír, así le fue cambiando de cara, al punto que la tenía mimosa.
……………………
……………………
Ya en mi cuarto, trate de volver lo mas pronto posible pero mis tenis, mis dichosos tenis, se perdieron bajo la cama, demorándome más de lo debido.
- Ahí te la llevo, y tienes suerte, justo hoy puse hielos.
El sonido de la refri y posterior choque de copas, solo podía indicar una cosa, estaban bebiendo mientras las risas no cesaban y por lo que escuchaba tampoco los juegos.
- Ay caray, mejor me apuro.
En lo que buscaba me dio una mezcla de alivio y desesperación, pues a pesar de que estaba con ese tipo, no se llevaban tan mal como ayer, es decir, estaba mejorando su relación y eso como que me calmaba.
- Después de todo, trabajara muy cerca de él ¿no?
“Cinco minutos más tarde”
Había encontrando mis zapatillas y con total confianza me disponía a salir, cuando en eso….entendí que la amistad con mamá tenía sus privilegios, unos muy compensativos.
- No encuentro tu celular travieso, ¿seguro que se cayó por este lado?
- Sí, busca bien, ahí debe estar.
- Oye, creo que te vi patearlo, no seas tramposo.
- No, te parece, busca.
- Ok, solo porque el jefe esta por llamar y somos empleados responsables. Dijo soltando una risita
- Oh si, muy responsables doña cachetona.
- Que extraño, porque me habrás llamado así, ni que estuvieras viendo mi cara, jijiji.
Entendí que mamá estaba usando sus habilidades femeninas, para engatusarlo y tenerlo de su mano, pero… ¿era necesario llegar a esto? ¿De ponerle todo su durazno en la cara?
- Hey doña, quiero saber algo.
- ¿Por aquí cagas? Dijo agarrando sus nalgas
- Cerdo hijo de puta, jijiji, si, por donde más.
- Uff….es que es un culazo brutal, de ensueño.
- Yo creo que no es para tanto. Dijo sobrándose
- Como que no es para tanto, a ver.
El tipo no se aguantó y apartando su hilo vio su arito sin poder creérselo.
- Ohh….diosss….quien dice que la perfección no existe.
Mamá se giró y contenta lo miró, como sintiéndose halagada por el cumplido.
- Lo saque de mi madre, ambas tenemos el mismo ano.
- Uff… ¿que se lo mirabas?
- No, me lo enseñaban, sus hombres antes de reventarla.
- Jajajaja, con que tuviste una mami muy puta ¿no?
- Si, y nunca pensé…terminar como ella, toda traviesa y flojita.
Mamá le estaba confesando sus intimidades o sucesos que seguro recordaba de chiquilla, algo que yo también desconocía.
- Ya, ¿me tapas? siento el aire, se puede resfriar, jijiji.
- No, ya me dio ganas de probarlo.
Le clavo el hilo en una nalga para luego sacar la lengua y meterla entre sus finos y rosados pliegues.
- Rayos, si estoy soñando despiértenme por favor.
“lamiéndole el ano a sacudones”
Y en nuestra propia casa…
- ¡Ay!! dios mío!! ¿Tan buena estoy para que me hagan esto?
Seguro nunca se lo espero pues en su vida solo papá estuvo y para serles sincero no lo imaginaba haciéndole eso.
- ¡Si me lo quieres meter por dentro!! ¡Ahh!! ¡qué cerdo eres!! Dijo sintiendo como este trataba de penetrarla con la punta de su lengua
- ¿Apoco no te gusta?
- Hace algún tiempo me habría derrumbado, de saber que alguien me hubiera tomado el culo de esta forma, pero sabes que…ya hoy, me siento abierta a todo, no sé por qué. Dijo sin resistirse
- Caraja señora, si parece que alguien la hubiera pervertido. Dijo sonriendo burlón y escupiéndolo para seguir lamiendo cual perro
- El jefe me dijo, que nadie se pervierte solo despierta lo que es.
- ¿Y tú que eres?
- La hija de mi madre, una mujer a la que no entendí de pequeña pero que ahora hasta me uniría a sus fiestas.
- No olvides invitarme doña (escupiéndolo más y viendo como intentaba abrirse apenitas, como si reaccionara naturalmente al estímulo, cual culo de guerra) yo puedo hacerle esto a las dos y muchas cosas más.
- ¿Seguro? porque ella es tan puerca que hasta miedo da.
- Ohh….presiento, que vamos a llevarnos muy bien.
- Claro amigo y ya que te diste el lujo de probar mi delicioso ano, porque no me pones el hilo como estaba, mi hijo podría volver sabes.
- No, ya se me antojo también la peluda.
Se lanzó a devorarla y ahí sí pudo meterle toda la lengua dentro, eso hizo que mamá abriera la boca con ganas de jadear y se adormilara de saque.
- ¡Chompsss!! ¡Chomps!! ¡Chompss!!
- Oye, no seas atrevido, respeta la conchita de tu jefe.
- ¿No escuchas? Se va a enterar eh y te va a nalguear.
- Duro por pei…nar…..los pelos de su chica.
Que rayos, mamá en carretilla se miraba por debajo, como este le revoloteaba la peluda vulva, motivo por el cual se mordió el puño para no soltar esos gemidos que los tenía ya en la garganta.
- Ay….ay…..ay…..ay.
- Ahora que la veo en acción, te doy la razón Jasón.
- Tengo el coño demasiado guarro, mírala nada más, toda llena de pelos.
- ¡Con una loca rulosa!!
“no aguantándose”
- ¡Ahh!! ¡si me provoca agarrarme las greñas y arrancármelas de raíz!!
Mamá desatada grito y pensé que lo decía por pura calentura, pero no…en uno de los tantos lenguazos logro cogerse el mechón y jalarlo con fuerza.
- ¡Ahhhhhh!! ¡Ahhhhhhhhhhhh!!
- Cállate carajo, no hagas tanto ruido o el mocoso puede venir.
- Tienes razón, perdón.
Mamá se soltó los pelos y recostándose sobre el suelo pareció renegar de su suerte… ¿o de mí?
- ¡Chompss!! ¡Chomps!! ¡Chomps!! ¡Chompsss!!
- Oye, bien que piensas en mi hijo pero no dejas de chuparme el coño como un dulce.
- Esto se puede disimular, pero tus jadeos no doña zorra.
- Sí que fácil, tu solo chupas concha y yo no tengo que hacer bulla, que fácil, cabron.
Splashh!!
Rabioso le metió una sonora bofetada en las nalgas al punto que la tiro como un saco de papas.
- ¡Au!! Si serás…..perro malo, te comas la gallina del patrón y ahora golpeas a su dueña. Dijo sobándose
- No sabes todo lo que te va hacer el jefe, mejor ve preparándote. Dijo pisándole la espalda y aplastándole una nalga para ver su ano selladito
“que ganas que le tenía”
A ese orificio, si hasta se aplasto el bulto….
- El jefe es bueno y va a tratarme bien.
- Eso crees tú, pero él sabe cómo llevar bien a sus chicas, por algo es el dueño del club.
- Mira, para que lo tengas claro, no me importa lo que me haga con tal que mi cheque salga puntual.
- Hija de puta, jajaja, como todas creen que es un negocio sencillo, abrir las piernas, pero cuando llega el cabronazo, hasta salen corriendo por la calle desnudas.
- Digas lo que digas no vas asustarme, soy una amazona en la cama.
- Ya lo veremos, ya lo veremos.
Le quiso meter el dedo en el ano y mamá contrayendo sus nalgas se lo impidió.
- Oye, eso sí está prohibido.
- Uff…..la cereza que va a reventar el jefe. Dijo chupándoselo
- En tus sueños así como la viste así va a terminar, bien cerradito.
- Una vez más, claro doña, claro. Dijo sarcástico
- Para tonto nadie te gana, pero ya veras, voy a llamar al jefe y le voy a contar lo que hicimos.
Mamá metió su mano debajo del sillón y sacando el celular marco un número.
- No juegues con tu vida doña.
- Dirás con la tuya, jijiji.
Mamá espero sonriente que le contestara, cuando en eso…Jasón la cogió del cuello y la ahorco durísimo, hasta hinchándole la cara diría.
- Ok, ok, ya entendí. Dijo sofocada
- Más te vale.
“Recuperando el oxígeno”
- ¿Cómo esta patrón? Si, ya estamos por salir y solo llamaba para decirle que Jasón se está portando muy bien.
- …………………
- Aja, ya somos amigos y creo que vamos a llevarnos de maravilla.
- …………………
- Ay gracias, ya sabe que lo hice por usted.
- …………………
- No, no ha hecho nada, se lo juro. Dijo sentada y abriendo las piernas para luego sobarse el triángulo delante de Jasón, como si la amenaza no le hubiera importado
- Caraja, te encanta el peligro ¿no? jajaja.
- …………………
- Si, está aquí conmigo y solo para que este más seguro, mi hijo nos va acompañar. Dijo recostándose, elevando las piernas y jalándose las bragas
- Oh doña, así de cachonda esa peluda no va a durar mucho en este negocio.
- …………………
- No estoy calentando a nadie patrón, como cree, si soy toda una señora de su casa, ¿acaso lo olvida? Dijo separando sus piernas, para luego cerrar y abrirlas con tanta fuerza que pareció querer romperse el calzón
- Te voy a reventar puta, te voy a reventar.
- …………………
- Ya patrón, lo dejo, Jasón esta algo impaciente por salir y creo que es la falta de sexo, debería darle una coneja. Dijo poniéndose los tacones en las orejas y elevando todo lo que pudo el culote, eso hizo que Jasón por poco se bajara los pantalones, si ganas no le faltaban
- …………………
- Como que las manda con descanso laboral una semana, ¿tan bravo es?
- ………………….
- Uy, no lo he visto en acción pero supongo que debo creerle, usted lo conoce mejor que nadie. Dijo lamiéndose la palma y sobándose con ella la vagina
- …………………
- Basta patrón, me está asustando, si, tanto que mi felpuda tiembla. Dijo metiéndose el dedo y sacudiéndolo dentro
- …………………
- No que voy a darle, con todo lo que me dice ni loca, además soy una mujer fiel y orgullosamente casada.
- …………………
- Si, vale, nos vemos, ya lo estoy viendo, chau jefecito, lo adoro, lo amo, mua.
Colgó y mamá tirando el teléfono se agarró los tacos (misma gimnasta) se mordió los labios, se arrancó el calzón y al ver que este sudando no aceptaba la invitación se dio una voltereta hacia atrás, desnudando su culo hasta la cintura, uff, lo que fue ver eso en Jasón, pero por algún motivo no cedió a sus impulsos.
- Cuando te olí por primera vez sentí el aroma a guerra en tu cuerpo.
- ¿Era eso o mi coño apestoso? Jijiji.
- Soy un experto en putas igual que mi jefe y créeme, no todos los días llega una hembra que huela así.
- No puedo olerme pero debe ser, yo también vi eso en mi madre.
- ¿Qué cosa?
- Los hombres, acercándose y oliéndola como una perra en celo, era algo que nunca entendí, pero supongo que a eso te refieres. Dijo pensativa como recordando
- Si, ya vas pillando la idea.
- Bien ¿y a que huele esto?
Mamá se paró y acercándose al sillón le planto el coño en la cara y no solo eso, sino que le estrujo el cabello, como queriendo obligarlo hacerlo.
- Uff…esto, esto es afrodisiaco puro y va hacer que muchos hombres la destrocen hasta morir. Dijo metiendo la lengua entre sus labios, de forma suave como queriendo catarle el sabor
- Uy, nunca lo pensé pero que lindo seria morir por una follada, una de las buenas.
- Para eso vas a necesitar un burro y tu culo bien amarrado y empinado.
- Esto no se lo conté a nadie, pero en la granja de mi madre me gustaba verles el rabo a los caballos.
- ¿Así? Dijo cerrando los ojos y chupando uno de sus labios, al punto que se lo estiro
- Si, con decirte que una vez agarre uno de curiosa y lo sobe con mi mano.
- Vaya que chiquilla tan traviesa.
- No sé qué me ocurrió pero ver tanto a mi madre me dejaba algo extraña.
- Ay, no se tonto ni porqué te cuento esto, jijiji.
- Te estas soltando, está bien, déjate llevar, soy tu amigo ¿no?
Fue en ese momento que mamá sonriente y despreocupada se giró viéndome parado.
- ¡Gerardo!! ¡porque no hiciste ruido al llegar!!
Nerviosa bajo la pierna del sillón y se acomodó el vestido, sacudiéndolo como si estuviera con polvo.
- Eee….lo siento mami, no sabía que estabas ocupada.
- No, no, solo estaba…mostrando a Jasón mis piernas y lo bien bonitas que son, ¿verdad?
- Así es muchacho, ¿apoco tu mamá no es bien piernona? Dijo agarrando muslo y sobándolo hasta su trasero
- Ya, no te pases, subiste mucho. Dijo retirando su mano
……………………..
- Lo siento si te hice pensar mal cariño pero como tardabas demasiado nos pusimos un ratito a jugar, como adultos que somos.
- Eee…ya veo, ¿y también estabas bebiendo? Dije señalando los vasos
- Ay mi vida, ¿que no tengo derecho a echarme una chelitas? ¿Con mi nuevo amigo? Dijo recogiéndolos
- Es que como no solías beber en casa me pareció raro.
Se acercó hasta mí para luego acariciarme el cabello.
- No bebía porque a tu padre no le gustaba y yo respetaba su decisión.
- ¿Y porque no le gustaba?
- ¿Te acuerdas como se pone la abuela cuando bebe?
- Ay caray.
Ahí recordé la semana que vino a visitarnos, para el cumpleaños de mi madre, era engreidora y todo, pero cuándo descontrolaba no había nadie quien la frenara y eso paso aquel día, para ser preciso al siguiente, cuando fuimos a limpiar su cuarto y vaya sorpresa nos dimos, mi abuela, mi santísima abuela, estaba desnuda y rodeada de cinco vecinos, también desnudos, si bien me impresione al comienzo y quise correr, un jalón y unas palabras de mamá me tranquilizaron.
- Adónde vas cariño, no seas niñita.
- La abue está soltera y puede hacer con su corazoncito lo que se le plazca.
- Además…..siempre fue picante, por si no lo sabias. Dijo guiñándome el ojo y dándome un codito
En ese momento termine sonriendo y no solo por el hecho anecdótico, sino que…la abuela tenía un diseño en su vello púbico de un corazón y por si fuera poco este se encontraba de color lila como su melena, si, así de locaza era mi abuela, que se teñía hasta los pelos del coño.
Pero al marguen de todo…..sobria me consentía mucho.
- Eee….creo que ya entendí mami.
- Por eso no tomo pero una chelita de vez en cuando tampoco es que me caiga mal.
- Si son solo algunas y no decenas por mi está bien. Dije sonriente
- Tranquilo hijo, sé controlarme, a lo máximo me veras despertar con dos. Dijo riendo
- ¡Mamá!!…no te pases eh.
- Es broma, bromita, no te enojes.
- Es que como estas sola y en ese momento dijiste que abue también, pues….
- Ay cariño, hay cosas que van a tener que suceder y que ni te vas a enterar, dalo por hecho.
- ¿Qué?
- Sí, no pensaras que voy a vivir sin nada de nada ¿no?
- Eee… ¿a qué te refieres?
- Mejor ni te lo digo, total y no te vas a enterar.
Me abrazo y dándome un beso en la frente me condujo a la puerta.
- Ya vamos Jasón, se hace tarde.
- Claro, ¿pero no me das la mano también?
- No, tu agárrate de otra cosa, jijiji.
Escuche una nalgada y de pronto un brinquito.
- ¿Que fue eso mami?
- Nada hijito, nada, tu solo sigue mirando al frente.
Así fuimos bajando los pisos donde extrañamente mamá no menciono palabra alguna y solo soltaba risitas como si le hicieran cosquillas.
Qué extraño, muy extraño, al punto que aproveche un descuido de ella para de reojos mirar y ganarme……..con todo lo que le hacía Jasón.
Menudo cabronazo, si le había subido el vestido por detrás, plantándole toda su mano y con el dedo medio haciéndole el ganchito (ahí caí en cuenta que dejo tirado su calzón) pero eso no fue todo, un vecino justo salía de su casa y viendo el culazo de mi madre, rechoncho y con una mano en la raja, dejo caer su cigarrillo al suelo.
- Solo noches vecina porque para buenas ese par.
“riendo nerviosa y tapándose con el vestido, pero aun dejando el brazo asomando”
- ¿Usted no era el gasfitero?
- Así es, arreglo todo tipo de tubos y hasta desagües, jugosos y rosados desagües.
- Vale, ya sé a quién llamar cuando se atore mi cloaca.
- Márqueme, con confianza, yo se la desatoro y se la vuelvo atorar, jajaja.
- Pero me cobra económico eh. Dijo apuntando en su teléfono
- Por ese par gratis y hasta término embarrado en mierda con tal de ver de dónde sale.
Jasón la nalgueó, provocando que el vecino le sonriera asqueroso, como diciéndole provecho cabron.
- Selladito, es un asterisco todavía. Dijo burlón
- Madre mía, espero me llame pronto entonces.
- Para cuando te lo entregue muchos ya lo habremos atorado y desatorado, jajaja.
Jasón creo que le tanteo el arito, ya que mamá abriendo la boca adolorida contrajo las nalgas y se volteo pegándole en el pecho, no saben la cara que puso el vecino, un poema.
- Uy, ¿qué paso doña Portillo? ¿Qué paso? jajaja.
- Nada vecino, solo sentí un calambre. Dijo sonriente y viéndolo a Jasón chinita
- A bueno, le creo, le creo, jajaja.
- Ya lo tengo apuntado.
- Dale, pero déjeme darle la bendición antes de que se valla.
- ¿Por?
- Por todos los entierros que va a tener, jajaja. Dijo presinando la entrepierna de mi madre
- Jijiji, que chistoso.
- Ya sabe…..llámame.
Mamá asintió con la cabeza a lo que yo preocupado cuestione.
- ¿De que hablaban mami?
- De emergencias, en el baño, una nunca sabe cariño pero siempre hay que tener a los profesionales a la mano.
- Eee… ¿segura? ¿solo eso fue?
- Si, ¿qué más pude haber hablado con el simpático vecino?
- De nada más…..supongo.
Me rasco suavemente la cabeza como tratando de relajarme, ¿será que algo habrá pillado?
…………………….
“Ya en la calle, una camioneta oscura esperaba por nosotros”.
- Vaya, que hermoso, ¿es tuyo? Dijo mamá dejándome y tocando la pintura impresionada, si hasta brillaba, muy reluciente
- No, del jefe, pero lo manejo como si fuera mía.
- Mi esposo siempre quiso comprar uno así, pero eran muy caros.
- Para que veas, el buen negocio en el que estas.
- ¿Crees que el jefe pueda regalarme una? ¿O prestármela como a ti?
- Uff….dale tu virginidad anal y te va a comprar todo este edificio.
Ambos nos miramos pues fue muy suelto para hablar.
- Es un tonto bromista cariño, no le hagas caso…..ya mejor conduce, antes que te patee las bolas y las lance a la azotea, jijiji.
- ¡Mamá!!
- Ay mi vida, si el me molesta así pues yo igual, ¿no crees?
- Pero….
- Nada, tu madre será educada, linda, hogareña, una princesa, pero cuando la provocan se pone igual de brava que tu abuela. Dijo cruzando los brazos y con mirada retadora
- Eee….bueno mami, pero no tanto eh.
- Tranquilo cariño, sé controlarme, yo no me pintare abajo, jijiji.
- Ay caray.
Creo que lo dijo recordando la anécdota.
- Gerardo, ¿así te llamas no?
- Sí señor.
- Ve a comprarme unos cigarros a la tienda, de paso te compras lo que quieres o te lo guardas, para que veas que soy caute. Dijo dándome varios billetes
- Ay que consentidor, así me gusta Jasoncito, te estas ganando mi corazón, jijiji.
- ¿Ci-cigarros?
- Si, para ahora y para después. Dijo abrazándola de la cintura
- Jijiji, ve hijo, ya se me antojaron a mí también.
- Eee…vale.
No era común que mamá fumara y es más, las pocas veces que la vi solo lo hacía en casa, cuando terminaba un buen encuentro con mi padre… ¿será que por eso ya no lo hacía? ¿Porque no tenía con quien satisfacerse? Pero ahora la pregunta sería…… ¿para qué volver a tener los cigarros en su dormitorio?
- Ya precioso, ve.
- Un momento mami, voy atarme los pasadores.
Como me aleje un poco para apoyar el pie, ellos creyeron que ya no los escuchaba.
- ¿Qué pasa doña? ¿Porque esa carita?
- Mira, voy a ser directa, ya que no me llevan de compras en tiempo.
- ¿Así? haber habla.
“acariciándole la camisa con las uñas”
- Escucha, quiero trato de princesa y me voy a portar muy bien contigo.
- ¿Qué significa bien?
- Tú sabes, no te hagas. Dijo desabrochándole un botón
- Hey, pero mira nada más, creo que tenemos una chupa pollas por aquí.
- Hazme un shopping completo y te chupo lo que quieras, lo que quieras.
En ese momento recordé, lo melosa que se ponía mi madre con papá antes de salir de compras, pero con sinceridad nunca espere que hiciera lo mismo con este hombre, supongo que al final…..también terminaría recibiendo su premio.
- Uff…..espero no te arrepientas eh.
- No, soy una mujer de palabra, te lo juro.
- Ok, ¿y qué hacemos con el jefe?
- Mira, si nadie habla nadie se entera, ¿quién más podría chismearle algo?
- No lo sé, tu hijo de repente.
- Ay estás loco, si ni lo conoce, además él nunca vendería el culo de su madre, soy quien lo trajo al mundo.
- ¿Así? pues quien sabe…quien sabe.
Termine de atar mis pasadores y resignado fui a la tienda, mamá estaba cambiando y todo frente a mis ojos.
- ¿Qué te doy chiquillo?
- Una caja de cigarrillos.
- ¿Una caja? Si tienes pinta de que no te jalas ni uno, jajaja.
- No son para mí, son para mi madre.
- ¿Así? ¿la que está afuera? ¿Con ese cliente?
- ¿Qué?
Como lo dijo en tono burlón llamó mi atención y girándome los vi encima del capot, pero no solo eso, Jasón le chupeteaba el cuello y un poco más abajo…este le metía la mano entre sus piernas……al punto que…en el calor del encuentro……mamá las separo y el vestido su subió tanto que vimos su peluda vagina siendo dedeada.
- Me encantan como son las mamis por aquí, no tienen vergüenza ni de follar delante de los hijos, jajaja.
Solo guarde silencio y le entregue el billete.
- Toma, llévale esto también, ya lo tiene muy crecido.
Me dio un rastrillo con los cigarrillos y encima me los cobro.
- Es todo chaval y antes que te vayas, dile a tu madre que también vendo condones y pastillas anticonceptivas, son un buen negocio por aquí, jajajaja.
- Gracias, ya veré si se lo digo.
Espere que terminaran su manoseo, pues mamá dejándose besar la boca ya le estaba arañando la espalda con los ojos totalmente cerrados, para salir al fin, con una mezcla de confusión, pues no entendía…… ¿si lo hacía por calentona? ¿Por las compras? O por llevarse bien con él.
De todas formas ella estaba cambiando mucho y eso……me preocupaba.
- ¿Listo para el paseo cariño? Dijo despeinada, agitada y aun sentada en el capot, con el hombre parado entre sus piernas
- Si mami, listo.
- ¿Y esa cara?
- No es nada.
- Ay mi amor, no me digas que no encontraste el dulce que buscabas. Dijo arreglándose el cabello
- Eee…no.
- ¿Entonces?
Fingí alegría a lo que ella también me sonrió.
- Así me gusta, verte contento, igual que mami. Dijo bajándose y abrazándome
Así di por pasado el momento incómodo y le entregué sus cosas.
- ¿Y esto bebe? No te pedí un rastrillo.
- Eee….me lo dio el señor, diciendo que…..podías necesitarlo.
- ¿Así? pero si tengo las axilas bien depiladas. Dijo viéndose
- Pues no sé.
- Bueno, qué más da, igual me puede servir para otra cosita.
Ahí recordé porque mamá siempre tenía dos rastrillos en el baño, uno casi limpio y el otro….lleno de pelos ensortijados, pues claro, en aquel tiempo, no sabía que tenía la concha peluda y siempre supuse que eran de su cabello, pero ahora…..todo era más claro y sabía bien para que lo usaría, si hasta la imagine sentada, en el suelo de la ducha, de piernas abiertas y rastrillándose la piel mientras el chorro de agua le caía.
- ¿Qué miras cariño? Dijo sonriente y a la vez extrañada de que tuviera puesta la mirada en su entrepierna
- Caray mami, lo siento, perdón. Dije avergonzado
- Debes estar creciendo, es normal, después de todo eres hombre ¿no?
- Eee… ¿de qué hablas mami?
- De nada y ya entra, te estamos esperando.
“Ya en el auto”
Ambos se la pasaron conversando y riendo todo el camino, entre bromas suaves, picantes y muy picantes, a lo que mamá no se quedaba y le contestaba con la misma intensidad, metiéndome también al juego y dándole un maquillaje de normalidad, creo que en el fondo, quería que me acostumbrara a esto, ¿pero porque? ¿Que planeaba?
- Ya estamos llegando cariño, ¿no es emocionante?
- Eee…..si mami, el centro comercial. Dije sonriente
- Cuanto tiempo sin venir, hasta siento que voy a llorar.
- De eso me encargare yo doña, cuando le pase el ombligo.
- Uy, ¿así? Dijo mordiéndose un dedo y mirándole la bragueta
- ¿Mami?…!mami!!
- Ay perdón hijo, regla número uno, ya que tienes novia, perro que ladra nunca muerde. Dijo volviendo a mirarlo y gastándole la broma
- Eee… ¿cómo así?
- Que hay hombres que son mucho bla bla, pero a la hora de la hora no ponen firme ni el cohete, por eso…calladito y bien bonito con tu Cat.
- Eee….vale mami.
- Como me late doña que al final yo terminare enseñándole más a tu niño que tú.
- Ni se te ocurra, que tú eres capaz de ponerle hasta modelo, jijiji.
- ¿Así? ¿y quién crees que sea? Jajaja.
- ¡Ay!! Eres un tonto, en tus sueños será.
- ¿De qué hablan mami?
- De nada…..ya mejor aparca el coche. Dijo sonriéndole extraño
Este estaciono el auto en el sótano y mamá saliendo no perdió ni un segundo, estaba echa una chiquilla, en un parque de diversiones.
- ¡Siii!! ¡Compras!!
Salto, corrió y hasta bailo, que momento, después de tanto tiempo sentía su vida pasada cada vez más cerca.
- Baila tú también hijo.
- Jejeje, ok.
No pude negarme pues a pesar de todo ya habíamos sufrido bastante, en especial ella.
- Hey doña, vamos ya.
- Uy el apurado mi vida, como tu padre ¿no?
- Eee…..sí.
- Pero luego luego hasta quieren volver diario por el premio, jijiji.
Mamá me dejó y corriendo lo abrazo por la cintura.
- Joder, ese chochito ya está escurriendo.
- Con decirte que se va ir hasta el fondo, jijiji.
- Uff…lo siento jefe, pero hoy reviento dos cosas, su tarjeta y su coneja.
- Escuchaste nena, hoy te cuelgan en el tendedero de los pelos. Dijo mamá hablándole a su entrepierna
- Donde coño viste eso enferma.
- Ay si te contara todo lo que vi con mi madre, harías una historia.
- Estoy interesado, cuenta cuenta.
Mamá sonriente movió su cabeza, de lado a lado, como diciendo “este guarro”.
- ¿Si mami?
- Ven, no te quedes atrás.
Obediente llegue con ellos y juntos subimos el ascensor.
……………………
Las luces, los anuncios, las tiendas, hicieron que brillaran los ojos de mi madre, al abrirse la puerta.
- Ay dios mío.
- ¿Qué pasa doña? Disney?
- ¿Si mami?
- ¿Tenemos hielos en la nevera verdad?
- Eee…sí.
- Estupendo, porque por esos bolsos no me importa orinar con dolor. Dijo flotando
- Ay caray.
- Bueno, nunca pensé consentir una coneja, pero ya que va a cooperar hay que darle nomas, total y así la reviente no dirá nada, todos salimos ganando, jajaja.
Ya mamá se había ido a la primera tienda y con la encargada a su lado se colgaba todo tipo de carteras.
- Vamos muchacho, tal vez mami necesite ayuda.
- Eee….vale.
Llegamos con ella y estaba tan entusiasmada que quiso llevarse los primeros modelos.
- Estas son Jasón, cómpramelas.
- ¿Y si no quiero?
- No seas así, cómpramelas, porfis.
- Pero son muy costosas doña, no sé, podríamos buscar otras más baratas, de imitación.
- No, me compras o me molesto. Dijo seria y cruzando los brazos
- Umm… ¿segura que quieres estas?
- ¡Si!!
- Joder, ya que, el jefe dijo que te quería contenta.
Mamá cambio de cara y abrazándolo se le quiso trepar.
- Ya te ganaste algo.
- ¿Qué cosa?
Con su lengua inflo y desinflo su cachete para luego guiñarle el ojo.
- Quiero ganar más.
- Compra más entonces, jijiji.
Así salimos de la tienda, con ellos de la mano y yo cargando las compras.
- ¡Zapatos!! Quiero zapatos.
- A por ellos entonces.
Mamá volvió a correr y entrando converso con la encargada, preguntaba precios, estilos, diseños, hasta que se pusieron de acuerdo y juntas fueron al provocador.
- Tiene unos pies hermosos, estos son para usted.
- ¡Ay!! ¡Sii!! ¡Qué lindos!!
Mamá se puso los tacones, adornados de piedras brillantes y una especie de peluchito en la punta y en toda la correa.
- Fueron hechos para usted, mire lo bien que le queda.
- Si, y que preciosas correas, le dan un estilo fino a mis piernas.
- Lléveselo, porque yo lo haría.
Mamá miro a Jasón y de frente le dijo.
- Quiero estos, me los llevo.
- ¿Segura?
- Totalmente y quítamelos.
Mamá se recostó en el puff y alzando su pie se lo puso a la altura de su bulto, pero no solo eso, no le importó levantar su vestido y mostrar algo negro que asomaba.
- ¿Qué pasa? ¿te pongo nervioso? Dijo relamiéndose los labios y sonriendo cachonda
- Jajaja, para nada.
- ¿Entonces? ¿Qué esperas?
Este apoyo una rodilla en la alfombra y cuando iba agarrar su taco mamá se lo puso en el hombro, enseñándole toda la concha, pues encima esta jalo un poco su vestido para que la viera entera.
- ¿Así me vas agarrar? Piernitas al hombro? Eh.
- Todo el kamasutra te voy hacer.
- ¿Hasta la pose del perro y la perra?
- Si, para que tu hijo nos vea pegados.
- Mejor voy por el par, lo dejo con su esposo señora.
- Jijiji, ok, creo que la asustamos.
- Tú, marrana de mierda, si hasta el chocho se te ha hinchado.
La encargada se fue y mamá bajando la pierna se despatarro en el puff.
- Ay qué raro, ¿se me habrá metido un piojito?
Fingiendo malestar llevo la mano a su entrepierna para acto seguido rascarse el peluche con su vestido.
Ras!! Rass!! Rasss!!
- ¿Qu-que haces mami?
- Perdón hijo pero tengo pelitos aquí abajo y a veces pican.
- ¿Pe-pelos?
- Si, mira chaval.
Jasón tiro de su vestido y agarrando su mano me la enseño.
- ¡Oye!! travieso, ya, no seas así, nos pueden ver. Dijo sonriente y mirando hacia los lados
- Que conozca la conchita de su madre, joder, tan rica que es.
Pero como no hizo nada para taparse, ni tampoco cerro las piernas y solo se dejó someter con esa sonrisa que no se le borraba de la cara.
- Eee…ya mami, ya entendí, tienes pelos, mu-muchos pelos.
- Jijiji, ¿no escuchas? ya entendió Jasón, Suelta.
Se quedaron mirándose a los ojos y con una expresión de complicidad que me hizo temer lo peor, si, ya habían arrancado y seguramente no se detendrían.
- Ok doña, espero no habérsela despeinado. Dijo burlón y viendo como esos pelambres salían cual enredadera
- No, yo le hago su moño, jijiji.
Mamá uso la mano para supuestamente arreglársela, pero lo único que hizo fue dejar en claro el peluche esponjoso que tenía.
“bajándose el vestido”
- ¿Me lo terminas de sacar o se lo pido a Gerardo?
- No, yo me encargo.
Jasón agarro la tela de sus hombros y pareció querer desvestirla, a lo que ella le metió un golpecito en la cabeza.
- Jajaja, ¿qué pasa doña? ¿No te referías a sacarte esto?
- No te hagas el payaso y sácame el taco.
- Ok, no te molestes tampoco.
Mamá se giró a sonreírme, como diciendo que tonto es mi amigo.
- Disculpa cariño, pero se lo merecía, ¿o no?
- Jejeje, bien dado mami.
- Así me gusta, agresivas, dame otro.
- Uy, es un masoquista hijo, seguro le gusta que le den de latigazos y lo amarren, jijiji. Dijo dándole otro
- ¿Lati que? Dije confundido, pues no entendía de donde mamá saco esa broma
Pero no me hizo caso y con Jasón siguieron jugando.
- Y si me sigues provocando ya vas a ver en el ring, te voy a dar bien duro para que aprendas. Dijo mamá poniéndole las piernas en el cuello y dándole de golpes
- ¿Aprender a qué doña?
- A respetar a la mamacita de mí retoño.
- No, igual te voy a dejar con la lengua afuera y en tu cama, para que te pregunte que paso.
- ¿Estas escuchando hijo? Mi amigo no escarmienta, ¿le doy otro?
- Eee….estee……
- Dame otro, que luego con el rabo yo te voy a pegar.
Mamá abrió la boca sorprendida y riéndose nerviosa me miró.
- No le creas hijo, como con su cosa me va a pegar, ni que fuera un palazo, jijiji.
- ¡Mamá!!
- Ay, lo siento, se me escapo…ya vez lo que generas tonto.
- ¿Diversión?
- Ya quisieras, pero a buena hora traje a mi niño.
- ¿Al cuida nalgas?
- Si, él va cobrar por mí, jijiji.
- ¡Mamá!!
- Ay ya, no seas así cariño, entiéndeme, llevo tiempo sin salir con un hombre y mi cuerpo está un poco……alborotado. Dijo sonriente
- Tan alborotado, que los tiene erizados, mira. Dijo agarrando su vestido y alzándolo al vuelo
- ¡Oye!! que travieso estas y no me ayudas sabes. Dijo tapándose
- Ok, ok, jajaja.
Se paró y al verme tímido creyó darme un consejo.
- Mira muchacho, ven. Dijo abrazándome
- ¿Qué?
- Cuando una hembra como tu madre lleva tiempo sin macho es normal que se ponga zorrita, ¿y sabes por qué?
- Porque las pulgas de su gallina le pican, como un hormiguero que no puede ahuyentar con nada.
- ¿Qué quiere decir?
- Que alguien tendrá que hacerle el favorcito, te guste o no.
- Debe estar bromeando.
- ¿Tú crees?
Mire a mamá y ella lo tomo con humor.
- Estoy necesitada cariño pero no tanto, así que escúchalo nomas, en sus sueños será.
- Eee…..bueno mami, si tú lo dices.
- Así es, confía en mí, soy tu madre. Dijo estirándome su pierna
- Eee… ¿qué haces?
- Seguro quiere que le saques el vestido y le pongas el culo mirando al techo, jajaja.
- ¿Eh? Dije asustado
- No mi vida, tranquilo, solo quítame el tacón.
- Ya veo, era eso.
Mientras se lo quitaba me di cuenta que mamá lo amenazaba de forma juguetona, será que en el fondo… ¿estaba calentando los huevos para su caldo de gallina?
……………………..
“la encargada volviendo”
- ¿Solo esto llevara bonita?
- No, quiero tres pares, pero de diferentes colores.
Jasón miró a mamá y ella ya de pie se palmeo la pelvis, como diciéndole ¿me vas a decir que no?
- Ok, ahora yo sufro, pero luego lo voy a gozar.
- Y yo gozo ahora pero luego lo voy a sufrir, jijiji.
- ¿Qué dijiste mami?
- Nada cariño, acompáñanos, jijiji.
Pagó la compra y fuera de la tienda me di cuenta que Jasón ya tocaba más de la cuenta, que extraño, presionaba cintura, cadera, abdomen, hasta disimulándome sus pechos, pero mamá no le decía nada y al contrario, cuando el dejo de manosearla fue ella misma quien le condujo la mano nuevamente, para que este agarrara carne o mejor dicho…jamón del bueno.
- ¡Ay!! vestidos de noche, entremos, por favor, los necesito para las reuniones con el jefe. Dijo rogándole cual chiquilla
- Joder, con esa elegancia vas a parecer su esposa.
- No sé, pero yo también soy una dama fina y como tal tengo que vestirme, vamos, por favor, solo un par, ¿sí?
- Ok, entremos entonces.
Contenta lo jalo a la tienda, eligiendo un par de vestidos largos y muy elegantes.
- Allá están los probadores señorita.
- Gracias nena……acompáñame Jasón.
- No, yo de eso no se nada, mejor dile a la….
- Que me acompañes he dicho. Dijo chinita
- Ta bien, ta bien, voy.
- ¿Cómo te gusta hacerme enojar no?
“sonriendo cabronazo y plantándose”
- Si maldita puerca, mientras estés en el club tu gordo culo me pertenece, ¿algún problema?
A lo que mamá también lo hizo, más pequeña, pero sacando pecho y coño, pues verla así me hizo imaginar ese pelambre erizándose de la rabia.
- No me hagas recordar cómo nos conocimos que te voy doy a dar una paliza, de la que nunca te olvidaras, ¿estas escuchando? Dijo clavándole su dedo en el pecho
Ahí no aguantaron y ambos se rieron.
- ¿Cómo pasa el tiempo no?
- Si y como cambiamos. Dijo recostándose en su pecho
- Ya doña, se está poniendo esto muy marica y eso conmigo no va conmigo.
- Claro, si eres el macho revienta cucas ¿no? Dije haciéndole cosquillas
- Caraja, me largo entonces.
- No no, lo siento, jijiji, ven.
Mamá cariñosa lo llevo de la mano y antes de entrar a los probadores….
- Cariño.
- ¿Si mami?
- Espérame aquí, no tardo.
- Eee…vale, ¿y tu amigo?
- El solo va agarrarme la ropa, no te preocupes. Dijo gritándome ya de adentro
- ¿Aga-rrarte la ropa? Que paro eso…… ¿no tienes que desvestirte?
Quería confiar, quería creer en su palabra, pero la angustia me invadió al punto que decidí seguirla.
SEGUNDA PARTE EN MI BLOG/BUSCARME COMO GERARDORELATOSXXX
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