Ella y Yo… Segunda Parte

La Historia de un Papá y su Hija II.

La Historia de un Papá y su Hija después de Enviudar.

 II 

Ella se colgó de mi cuello, la tome entre mis brazos y asi fuimos a la cama, su mirada era lasciva, penetrante y dulce a la vez, me embriague con el perfuma de su piel. Llegamos al pie de la cama al inclinarme para recostarla ella me roba un beso, me regala una sonrisa y un “te amo Pá”. Me acosté a su lado y nuestras manos empezaron recorre nuestros cuerpos, comencé a besar su cuello, para descender a sus pechos, sus pezones erguidos esperaban mis labios, al besarlos todo su cuerpo tembló, mi lengua jugaba con sus pezones y mis labios los aprisionaban, sus manos me toman de la cabeza, me retenían, para que no deje de mamar sus tetitas, mi mano recorrían con caricias su vientre, para después seguir a su monte de venus, su cintura se arqueaba buscando mis caricias.

*Mi… ¡¡¡Asi, Papi, asi… ¡¡¡ Ooh Sssiii. Pá dame tu pene, quiero chupártelo.

Me pongo de espalda, ella gira sobre mí, dejando su chochito sobre mi boca, ella busca mi pene, comenzamos un 69 espectacular, ella disfrutaba, gruñía, su lengua envolvía la cabeza del pene para no dejarlo escapar mientras su mano en el prepucio, lo subía y bajaba rítmicamente; su conchita empapada de sus jugos, tiene un sabor dulzón y acido a la vez, mi lengua recorría todo su canal vaginal, mi dedo índice jugueteaba en su ano, cada tanto aullábamos a dúo de placer que nos estábamos dando mutuamente.

Yo, esperaba el momento que ella se sintiera segura de hacerlo, no quería apurar este importante momento, quería que disfrutara cada segundo.

*Mi… Pá, esto se siente divino. ¡¡¡Aaaahhh que placer. ¡¡¡ No pares, cómeme toda la chochita, asi, asi ooohhh…

Su cuerpo todo sudado, ella cabalgaba sobre mi boca, y la suya se atragantaba con mi pene. En un momento ella se da vueltas me mira a los ojos…

*Mi…  Quiero que me cojas ahora Pá, ya no me aguanto más.

Su cuerpo todo sudado, ella cabalgaba sobre mi boca, y la suya se atragantaba con mi pene. En un momento ella se da vueltas me mira a los ojos…

*Mi…  Quiero que me cojas ahora Pá, ya no me aguanto más.

Asentí con un movimiento de cabeza, la abrase fuerte, la acosté de espalda, ella abrió las piernas para que me acueste entre ellas, usaba mi verga cubierta de sus babas, para frotar todo su montículo y labios de su vagina, ella gimió y encorvó su cuerpo hacia mí, comencé a meter un dedo, muy despacio, estaba bien húmeda, el dedo entraban y salían muy fácilmente, la mire, le sonreí, le hice un guiño de ojo, saque mi dedo de su conchita, mi verga estaba a full, dura, las venas hinchadas hacían que se viera mas grande aun, ella temblaba, su respiración se agitada me decía que venía bien, era el momento, ella gimió y nuevamente empujo su cadera,  encorvó su cuerpo, ahora hundí la punta de mi verga en la entrada de su coño, frotándola  otra vez, unas gotas de líquido preseminal lubricaban los labios vaginales húmedos, de sus propios jugos y mis baba, el pene resbalaba por su canal, sentía como su clítoris latía al contacto de mi glande, lo apoye en la entrada y empuje suavemente, ella emitió un quejido, Creo que la penetre demasiado pronto, es que deseaba estar en el interior de su vagina, mi instinto de macho me domino, por un momento, me quede quieto, con mi verga a penas dentro de Mili, al no moverme ella se relajó.

*Mi… Metela Pá, Metela despacito… ¡¡¡Aaahh, si, si, que rico.

 Retrocedí un poco, y empujé un poco y la cabeza se perdió entre sus labios, retrocedí unos centímetros, para volver a empujar…

*Mi… ¡¡¡ Por Dios, metela, metela más adentro Pá, ahora, Siiii…

Me retiro un poco y vuelvo a envestirla, ella con los ojitos cerrados, mordiéndose los labios me aceptaba dentro suyo.

*Mi… ¡¡¡Siii, asi, mas, mas…

Movía la cadera empujando hacia arriba, comencé a bombear con movimientos cortos, empujaba y me quedaba quieto, para volver a bombear y quedarme quieto una vez más, asi llegué a su himen, nuevamente me quedé quieto, sentía como las paredes de su vagina palpitaban, era muy deliciosa esa sensación. Ella con los ojitos cerrados esperaba al igual que un niño, como cuando esta por recibir un regalo que tanta ansia. Su respiración por momento se entre cortaba, para después exhalar suspiros sonoros acompañado de sonidos y quejidos.   

*Mi… ¡Mmm, Siii, Aaahh.

Nuevamente retrocedí, mi boca busco la de ella, mi lengua se enredaba con la de ella, su respiración entre cortada, nuestros cuerpos todos bañados de sudor, el pene me dolía por aguantar esa sensacional erección, una vez más me muevo hacia afuera y de un movimiento firme, pero sin violencia, traspase su himen, mas de medio pene ya estaba dentro de su canal vaginal, de su boca escapo un ¡¡¡ Aaaayyyhh con los dientes apretados, su cuero de tenso.

*Yo… ¡¡Ya está mi amor, ahora es el momento de relajarte, disfrútalo, tranquila…

La besé y ella me correspondió, su carita estaba llena de luz, sus ojitos abiertos demostraban asombro, mientras unas lágrimas recorrían su rostro, me moví despacio dejando solo el glande en la entrada, para luego volver a empujar, haciendo movimientos de bombeo cortos, mientras me hundía cada vez más profundo en ella, sentí sus uñas clavadas en mi espalda, esto me provoco dolor y placer. Su vagina apretaba mi pene como si fuera un puño masturbándome, nuestra respiracion se aceleraban, yo no podía retener mas todo mi semen caliente en los huevos, ella se movía, buscando sentir cada vez más mi pene, en ese momento la sentí temblar mucho, con movimientos espasmódicos…

*Mi… Me viene Pá. ¡¡¡Si, asi, Mmmmm, mas, voy a acabar, siii, dame más, dame más Papá…

Acelere mi ritmo, ella entre cruzo sus piernas en mi cadera, su envestidas hacían de esto una sensación indescriptible, oleadas de calor suspiros, gruñidos.

*Yo… Mili yo también estoy acabando y ¡¡¡Pum…  Chorros de esperma caliente inundan toda su vaginal, 3, 4, chorros uno tras otro, parecía que no acabaría jamás.

Toda mi leche caliente inundo su útero, el pene y mis huevos latían, ella se retorsiva bajo mi cuerpo, como una gatita mimosa, en la habitación solo se sentía un ¡¡¡¡Aaa aaaaahhhh Siiiiii, Te Amooooo…. Me desvanecí de placer sobre ella, todas mis fuerzas salieron despedidas por mi erecto pene, para volcar semen caliente en la fuente del paraíso, mi cara descansa entre sus pequeños pechos…

*Mi… Te Amo Pá, esto fue sensacional, Pao me dijo que esta sensación no se podía comparar con nada y tenia razón… Hablaba con su vos agitada, entre cortada, como sollozando.

*Yo… Yo también te amo Mili, esto verdaderamente fue “Extraordinariamente Sublime”

Quise moverme para recostarme a su lado.

*Mi… No te muevas Pá, quédate quieto, asi como estas, quiero sentir que estas adentro todavía, esto se siente hermoso, tu pene late dentro mío.

Su vagina, latía al mismo ritmo que mi pene. Nos quedamos abrazado un buen rato, mi pene todavía dentro de ella, poco a poco fue perdiendo su rigidez, para quedarse dormido.

Nos despertamos de la somnolencia que nos provoco tener sexo, miro el reloj, marcaban las 19:15 Hs. Faltaba un buen rato para la cena.

*Yo… ¿Cómo te sientes mi amor…

*Mi… Bien, creo que bien, me molesta un poquito mi conchita, pero bien.

Al mira la cama, unas manchas pequeñas de sangre adornaban las sabanas, ellas las ve, se sonrió, me mira…

*Mi… Creo que sangre mas que Pao, cuando la desvirgaste. Pero no me duele nada todavía.

*Yo… Bien, igualmente te tomaras un analgésico, por las dudas. Mas tarde vamos a cenar con Juanca y su Sra.

*Mi… Bueno, entonces vamos a bañarnos, tenemos olor a pecado, ja, ja, ja, ja.  (Se ríe)

Me recuesto mirando el techo, ella me da un beso, se baja de la cama, camina desnuda hacia el baño, la miro, su andar es sexy, sereno, su cuerpo es armonioso, sus caderas, su cola tiene la misma forma que un durazno en almíbar, e igual de suaves, sus pechos se desarrollaron un poco más, se ven firmes, sus pezones rosados… Sabe que verla asi, caminar desnuda contoneándose, ese andar casi felino me excita mucho, al llegar a la puerta del baño, gira sobre su pie, sabe que la estoy mirando, me tira un beso, yo lo atrapo con la mano para llevarlo al corazón, le digo “te amo”.

Me levanto de la cama, voy al balcón, prendo un cigarrillo, la primera pitada, me quemo el pecho (tengo que dejar este vicio de mierda) exhalé el humo y despacio seguí fumando…

Llegada la hora, bajamos hasta planta baja, nos dirigimos al restaurante, al privado que reserve, le pregunte a Mili si se sentía bien, me responde que mejor que nunca, que solo le molestaba un poco la conchita, que cuando se bañó, noto que estaba un poco hinchada, en ese momento llega El Metre, acompañando a Juanca y su esposa, la presenta, su nombre es María José, yo le presento a Mili , que es mi hija… comenzamos a pedir la cena, y a degustar todo lo que pedimos, conversamos de muchas cosas y nada de trabajo, para no opacar la noche, ya en los postre, inicie la conversación sobre la nueva agencia, que gracias a Dios y a Juanca, que se movió buscando todo lo que le encargue, pedir para celebrar este feliz acontecimiento una botella de Champagne Moët & Chandon, con cuatro copas, esta noche Mili podía probar una copita.

*Yo… Bueno, Juan Carlos y María José, también quiero ofrecerles un importante puesto en la agencia “La Nueva” … Estos puestos serán muy importantes, y serán muy bien remunerados, siempre y cuando ustedes quieran aceptarlos.

Ellos me miraron con los ojos grandes como huevos duros, asombrados, no salían de shock, entre ellos se miraban y se sonreían como si lo que escuchaban era una mala broma.

*Yo… Se que no esperaban esto, quiero que lo piensen bien, es sin compromiso, nuestra amistad no se altera para nada.

*JC… Bueno Maxi, como veras, no veníamos preparado para esto, te pedimos que nos des un dia para pensarlo y saber cuales serian nuestros puestos de trabajo, hoy por hoy, como están las cosas un trabajo más, no viene mal a pesar de mis otras obligaciones en el estudio contable.

*Yo… Justamente como se de tu honestidad y capacidad para trabajar, te voy a ofrecer el manejo contable total de la agencia, también te voy a dar el 7 % de la sociedad con un sueldo acorde a todas tus responsabilidades. ¿Te parece bien…

*JC… Este, es muy tentadora, (ji, ji, ji, ji) Se le escapaba una risa nerviosa.    

*Yo… María José, conozco tu trabajo en RRHH y eso mismo quiero que lo hagas para mí, que manejes toda la flota de personal, las contrataciones de choferes, tomes las dediciones necesarias, de tomar más gente para las oficinas, etc, etc, etc. Tu sabes, y te daría también el 3 % de la sociedad mas un sueldo… Los dos tómense el tiempo necesario, con Mili nos quedaremos hasta el lunes a la tarde. Piénsenlo tranquilos, hagan sus cuentas y después me responden…

Tomamos nuestras copas y en un chin-chin brindamos por el bienestar de todos nosotros.

Mili pidió permiso y se disculpó, se retiró a la habitación, con la escusa que estaba cansada, que hoy salió a recorrer parte del casco céntrico de la ciudad, no iba a decir que estuvo cogiendo toda la tarde por que quedaba mal…

Nos quedamos charlando los tres, de la vida, como nos fue a cada uno, risas y anécdotas de la época de la secundaria y la Universidad, ya entrada la noche, ellos se retiraron mas que contentos, me quede un rato mas fumando unos cigarrillos en el bar del hotel, tome dos Jack Daniels y me fui a dormir…

Temprano me desperté, hice lo mismo con Mili, para invitarla a dar unas vueltas por las afueras de la ciudad, lugares que me recomendó Juanca… Desayunamos, y nos hicimos preparar unas viandas para llevar, ya que pensábamos pasar el dia recorriendo lugares.

Alquilamos una camioneta 4×4 y nos fuimos.

Después de dos horas y varios kilometres de caminos de montañas, con paisajes de ensueños, muy lindos, llegamos a un paraje cerrado por un portón de campo de madera (Tranquera) con un cartel “Prohibido Pasar, Propiedad privada” baje de la camioneta, estaba cerrado con una cadena y el candado abierto, lo quite, abrí el portón para ingresar con la camioneta y volví a cerrar el portón. Seguimos por el camino de ripio, el paisaje cada vez más imponente y hermoso y después de cruzar varias veces un arroyo de aguas cristalinas, llegamos a un paraje mucho mas sensacional que todo lo visto hasta ahora, una cabaña de troncos y piedras, era el condimento esencial para completar este lugar. Mili no podía creer todo lo que veía, a medida que avanzábamos, su cara de asombro, me causaban risa…

*Yo… Mili ¿te gusta este lugar…

*Mi… Nunca pensé que podía existir un lugar asi en una zona tan alejada, esto es terriblemente hermoso Pá…

Llegamos a la cabaña, un señor ya anciano nos recibe…

 ¿Ustedes deben ser los amigos de Juan Carlos y María José?

*Yo… Asi es buen hombre, vinimos a ver su cabaña, y todo el lugar. ¡Pasen, pasen, nos dijo el!  Mi nombre es Pedro dijo el viejo. Entramos a la cabaña y nos convido con café recién echo.    

*Pe… Su amigo me comento, que seguramente, ustedes necesitarían un lugar tranquilo para descansar.

*Yo… Ja, ja, ja este Juan Carlos esta en todo (le dije) … Seguramente que sí, estoy por cerrar un negocio, más bien abrir y casi seguro que me gustaría un lugar asi de tranquilo.

Pedro se pone de pie y señalando el camino me dice.

*Pe… Siga por el camino, pasando el puente del arroyo encontrara una huella a la derecha, siga hasta el final, encontrara una cabaña, y atrás hay una pileta de aguas termales, quédese todo el tiempo necesario, sobre la mesada de la cocina, les deje algunas cositas como para que, si gustan, se preparen algo para beber, café, té o mate y un pan casero que hace mi señora, recorra todo lo que quiera,  fíjese si le gusta y después hablamos.

*Yo… Gracias Pedro, ahora vamos a verla.

*Pe… A eso de las 12:00 o 12:30 Hs. estará la comida lista, me gustaría que se acerquen a comer con nosotros, mi esposa estará encantada de tener visitas a la hora del almuerzo.

*Yo… Muchas Gracias, por supuesto que aceptamos su invitación.

Salimos de la casa, subimos a la camioneta y partimos, cada kilómetro que recorríamos era hermoso, tan distinto al paisaje de la ciudad, el silencio, el aire, el cantar de los pájaros.

Llegamos al lugar, la cabaña estaba justo en el faldeo de la montaña, toda rodeada de árboles, pinos y jardín con muchas flores multicolores.

*Mi… ¡¡¡ Papá, esto es divino, parece la cabaña de Blanca Nieves ¿Podríamos intentar venir a vivir acá, esto es un paraíso terrenal?

*Yo… Nos se mili, son muchas cosas que tendríamos que prever, la distancia a la ciudad, tus estudios, no se ya veremos.

*Mi… Ya estamos acá ¿qué te parece si vamos y nos metemos a la pileta? el dia está lindo y el agua es termal, caliente…

*Yo… Si podría ser, pero primero recorramos toda la cabaña, para ver que comodidades tenemos realmente y después nos bañamos.

Bajamos de la camioneta nuestras cosas, las acomodamos en la mesa de la cocina, ya que no traíamos ropa de baño, nos desnudamos y fuimos a la pileta, Mucho mas grande que la nuestra, el agua estaba a una buena temperatura (según Pedro todo el año), realmente era muy relajante estar asi, después del baño caminamos por los jardines, según Mili éramos como  si fuéramos Adán y Eva en el paraíso, eso nos causo mucha gracia y reímos mucho.

En los alrededores no teníamos vecinos, realmente estábamos solo, los más cercanos eran Pedro y su señora, como a 15 km, un cerco de plantas verdes, no muy altos (1.1/2mts) de  forma de circular nos daba la intimidad ideal para tomar sol, igualmente no hay nadie en los alrededores, extendemos los toallones en el césped, nos recostamos con mili, mirando el cielo azul, limpio, sin nubes, algunas bandadas de pájaros surcaban el cielo, ruta emigratorias de las aves buscando climas mas cálidos.

Mili se coloca de costado y sigue la conversación, insistiendo con la idea de vivir acá, me explicaba que existe nuevas tecnologías con respecto de tener internet y que ahora es directamente satelital y bla, bla, bla…  La escuchaba con atención, ella me explicaba la tecnología satelital que existe, sin saber que todos mis vehículos de la agencia tienen seguimiento satelital, también note que su mano se deslizaba por mi abdomen, muy suavemente acariciaba mi pubis, se inclina sobre mi pecho para besar mis pezones, esta acción hace que mi pene se despierte, comienzo a excitarme, ella deja mis pezones para ir a mí boca, ella me besa, su lengua entra en mi boca para recorrerla, la mí la acompaña en el juego. Ella deja de besarme, me mira…

*Mi… ¿Te gusta Pá…

*Yo… Tú sabes bien que sí. 

Baja su mano para agarrar el pene de la base, sus finos y cálidos dedos recorren muy suavemente toda su extensión, ella le presta mucha atención y le gusta mirar mi pene.

*Mi… ¡Oye, ya estas caliente Pá!

*Yo… Si, Muy Caliente, tú me pones asi.

Con un dedo, toma una gota de precum, que se asoma del grande, mete el dedo en la boca y comienza a saborearlo.

*Mi… ¡¡¡Mmm, que rico esta esto.

Yo había estirado mi mano y acariciaba sus labios vaginales, estaban totalmente humedecidos

Los dos disfrutábamos el momento, lentamente le metí todo el dedo índice, al sacarlo lo llevé a mi boca, saboreaba mi dedo con su jugo, ella me miraba, cerré los ojos…

*Yo… ¡¡¡Mmm, esto sabe muy rico, tú también estas caliente Mili.

*Mi… ¡Si, Pá, mucho, como vos!

Se monta sobre mi pecho, se mueve y se acomoda hasta dejarme su conchita en la boca, tiene agarrado mi pene, se lo lleva a la boca y comenzamos hacernos sexo oral.

Tiene un sabor muy suave, agradable, es como agridulce, sus jugos se pegan en la lengua haciendo más rico y placentero, el perfume es casi frutal, algo asi como naranjas y jazmín, ni su madre, ni Pao tiene una vagina asi de linda, con su perfume natural.

Ella cada dia, me asombra más, es como una pequeña caja de pandora, llena de sorpresa, su habilidad para provocarme placer con su boca es sensacional, muy placentero, puede hacerme acabar en pocos minutos, lo sé, por qué lo a echo muchas veces, en nuestra casa.

Yo trato de compensarla de igual forma, mi lengua ha adquirido más flexibilidad, esto me permite explorar lo más profundo de su vagina y el ano, adora sentir mi lengua en su esfínter, este palpita y aprieta mi lengua para no soltarlo.

Me muevo para acostarla y ponerla a bajo de mí y cogerla, ella se incorpora, gira con sus nalgas en mi pecho, ella pone sus manos a cada lado de mi cabeza, se acerca para besarme.

*Mi… ¡Mmmmm… que rico sabor a conchita, tenes en la lengua y en la boca también Pá.

*Yo… ¿Si… ¿estás seguras…

Nos besamos con fuerza, con fuego y pación.

*Mi… ¡¡¡Si definitivamente, tienes el gusto a mi conchita…  ja, ja, ja.   ¡Pá, quedate quieto, soy yo la que te quiere coger, déjame cabalgar sobre tu verga como lo hizo Pao. Quiero sentirla bien adentro.

*Yo…Mili, escúchame un momento, hazlo despacio, para que sea placentero para los dos, recuerda que todavía una penetración total y brusca, puede causarte dolor y lastimar el interiormente de tu vagina.

*Mi… Si Pá, no te hagas problema, te voy a cuidar…  ja, ja, ja.

*Yo… Es que no quiero tener que llevarte a un médico y que descubran un desgarro vaginal.

*Mi… ¡Sshhhh… cierra los ojitos y disfruta, como lo voy hacer yo.

Comenzó a deslizarse hacia mi verga, sentí cuando los labios de su vagina se apoyaron en el glande, se movía despacio, se fue acomodando, su mano, toma la verga, la guio a su conchita, frota la cabeza de mi verga entre sus labios, sus jugos más el abundante precum, ayudan para que sin esfuerzo y solo con pequeños movimientos circulares se deslice a su interior varios centímetro, un profundo suspiro sale de su garganta.

*Mi… ¡¡¡Haaaaaaaaa, ¡¡¡Sssiii, Sssiii, ¡¡¡Mmmmm…

Parecía que su cuerpito se desinflaba, mientras exhalaba el aire en el suspiro, en cada movimiento en circulo de su cintura lo acompañaba con un empujoncito de su pelvis, mi verga estaba muy sensible, muy receptiva, sentía como milímetro de su vagina, latía, palpitaba excitándome, a medida que los minutos iban pasando, nuestro frenesí también, poco a poco nuestros cuerpos se fueron cubriendo con miles de gotitas de sudor que brotaban de nuestros poros.

Entonces, todo mi cuerpo se rindió y se dejo someter a los placeres que la chiquilla me proponía y, al silbido de la brisa entre las hojas, al apacible cantar de los pájaros se sumó nuestra respiración agitada, mi verga dura como estaca cada vez mas profunda, se deslizaba entre las paredes húmeda y caliente de la conchita de Mili.

Ella comenzó acelerar el ritmo, sentía como sus dedos apretaban mi brazo, yo la tenia agarrada de la cintura y empecé a bombear acompañando su movimiento, mirando por sobre mi pecho, la conchita de Mili tenía más de media verga que la penetraba, no sé cómo ocurrió, pero nuestros movimientos se hicieron frenéticos, todo era una locura de placer, suspiros y ….

*Mi… ¡¡¡Papi, Papito me vengo, me vengo ¡¡¡ya no aguanto masss…!!!

*Yo… Si mi amor, yo también estoy por acabar…

Sentí como su cuerpo se estremeció, los músculos vaginales apretaban mi pija y explotamos en un orgasmo unisonó, ella se abrazaba con fuerza contra mi cuerpo, yo a de ella, chorros tras chorros de leche caliente inundaba su útero, los dos nos quedamos tendidos abrazándonos.

*Mi… Hay Papi, que hermosa sensación, no quería se terminara.

*Yo… ¡Ssshhh, no hables, escucha a tu cuerpo, él te está diciendo como esta.

Mi verga todavía estaba erecta, la tenía empalada, yo sentía como su vagina se contraía y se relajaba, como si me estuviera ordeñando el pene.

Y asi nos adormitamos al calor de esa mañana hermosa al aire libre. Fueron algo asi como 15 o 20 minutos de sexo, que pareció una hora, Mili intentaba recuperarse, yo también.

Nos levantamos, fuimos nuevamente a la pileta de aguas termales, nos higienizamos, vos vestimos. Ya faltaba poco para la hora del almuerzo, cargamos todo en la camioneta, y salimos a recorrer el sector, otro camino se rodea el arroyo y emprendimos camino a la casa de Pedro, al llegar nos recibe nuevamente Don Pedro, nos invita a pasar, allí conocimos a Doña Graciela, su señora, la mesa ya preparada con una entrada de fiambres caseros, un buen vino tinto acompaño todo el almuerzo, después siguió un asado a la llama de un corderito y ensaladas, la charla fue muy amena y agradable, ellos contaron como fue que pudieron adquirir toda esa tierra y otras que están en otro lugar, que atrás de la cabaña donde estuvimos con mili está abandonada una vieja mina de oro que se agotó y se cerró, como viven en el lugar y lo felices que son, que tiene intenciones de vender la cabaña y una parte de la tierra.

Pasamos una tarde muy linda, ellos son muy sencillos a pesar de tener mucho dinero y propiedades, viven bien gracias a la renta. Ya entrada la tarde nos despedimos, agradecimos por el agasajo y nos fuimos rumbo al hotel.

Charla va charla viene y llegamos al hotel, por supuesto que ni ganas de cenar, estábamos llenos de tanta comida, la merienda, que nos ofrecieron Don Pedro y Doña Graciela, llegamos a la habitación, nos desnudamos y nuestra charla sobre el paseo, la cabaña, el lugar tan apacible las llevamos hasta el balcón, mientras miramos las luces de la ciudad, Mili se fue a bañar, yo me quede, tenía que revisar todos los documentos, contratos para dejárselos a Juanca, el acceso a la cuenta del banco, para disponer de fondos, mañana ya es lunes, no quiero dejar nada librado al azar, y si Junca y Marijo aceptan el trato, estaría todo cerrado.

El aire en el balcón es suave, una brisa cálida refresca mi cuerpo, me serví una Jack Daniels, prendí un cigarrillo, comencé a hacer un repaso de todo lo vivido en este último año, y ciertamente no me puedo quejar, tengo 33 años, una agencia de autos de alquiler que trabaja muy bien, prácticamente ya estoy abriendo una sucursal en otra ciudad, con una urbe muy poblada, con mucho movimiento, una bella hija de 14 años que esta cada dia mas hermosa, deseosa de aprender todo lo relacionado con el sexo, su amiga que al igual que Mili, está interesada en el sexo sin tabúes, no tengo necesidades económicas, podría decir que fui un gran afortunado…

Le mando un Mje a Juanca, que mañana nos reunamos todos, en el hotel a almorzar tipo 12:00 o 13:00 Hs y que me den las respuestas a mi propuesta.   

Termine de fumar el segundo cigarrillo, voy a la ducha, el agua recorre mi cuerpo, no se por que el recuerdo de Mariana regreso a mi pensamiento, sus manos acariciándome, el sabor de sus besos en mi boca, el perfume de su cuerpo, su vos diciéndome cuanto me amaba, los sueños que quedaron en el camino, sin darme cuenta las lagrimas se confunden con las gotas de agua de la ducha, estoy llorando, el pecho se convulsiona, el corazón late golpeando en mis oídos, sin darme cuenta, estoy sentado en el piso de la ducha llorando, con los ojos cerrados,  como un bebe que necesita ese abrazo protector, el que cura todos los males y hace olvidar el dolor, una mano acaricia mi cabeza, una voz dulce…  “tranquilo, no temas, yo estoy aquí, relájate”…  tome aire, su perfuma invadió todo mi pensamiento, sus manos me acariciaban, su voz me susurraban palabras preciosas que no entendía, pero era el timbre dulce de su vos, abrí lentamente los ojos para mirarla, volver a caer en la profundidades de sus ojos azules, al hacerlo, su figura se recorto entre la tenue luz que venía de la habitación contigua y el agua  que cae de la lluvia de la ducha, me quede casi petrificado, un frio recorrido todo mi cuerpo ¿¿Era mentira todo lo que había pasado, Mariana estaba aquí conmigo?? Y nuevamente esa dulce voz que me llama, me trae a la realidad…   ¡¡¡Papi, Papi… Me abrace a ella fuertemente, no podía parar de llorar, mi llanto contagio a Mili…

*Mi… ¿Qué te paso Pá, me despertó tu llanto, está muy angustiado?

Como pude trate de recomponer mi postura, me dolida todo el cuerpo, estuve mucho tiempo bajo en agua llorando, Mili me ayudo a pararme, me ayudo a secarme, de la mano me llevo hasta la cama, me acosté como pude, tenía el cuerpo entumecido todavía, Mili me tapo con una sabana y se acostó a mi lado.

*Mi… ¿Qué paso Papi, me asuste mucho, me podés contar?

*Yo… Si Mili, fue algo raro, algo que nunca me había pasado tan asi, tan fuerte, tan profundo, entre a bañarme y sucedió de repente, el recuerdo de tu madre y todo se desato así, involuntariamente, un recuerdo tras otro y cuando salí de todo eso, estaba abrazado a vos, quedate tranquila, ya paso, ahora estoy más relajado, no sé, tal vez fue tanto tiempo llevando una mochila de angustia, emociones que no descargue a tiempo y justo fue hoy y aca.

Mili se abrazó a mí, subió una pierna arriba de la mía, apoyo su cabeza en mi pecho, se voltea a mirarme y…   

*Mi… Bueno Pá, si, ahora nos quedamos asi abrazaditos, tranquilitos los dos, y hacemos noni noni, mañana también será un dia largo, ya volvemos a casa.

*Yo… Si mi amor, mañana ya volvemos a casa…