En casa de mi abuela

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Comienzo explicando, desde niño he vivido en casa de mi abuela, con ella vivimos un primo y yo.
Su casa es una de esas casonas antiguas de dos pisos, con el patio en el centro de dos pisos, la parte de enfrente da a la calle, de un lado y la parte de atrás tiene un pasillo que sería el patio, que da a un callejón, que se comparte con los patios de varias casas, ese pasillo casi no se usa, solo para poner basura.

Mi abuela tenía que salir a trabajar a diario porque tiene una tienda de ropa, ella a veces hacia vestidos o ropa, por lo que nos dejaba mucho rato solos.
También solo nos preparaba la comida y no volvíamos a verla hasta la noche.
Algo a lo que nos acostumbró a mi primo y a mí fue que apenas llegábamos de la escuela nos decía que nos quitamos el uniforme y así nos andábamos en la casa, en calzones o desnudos; eso era desde la primaria, secundaria y preparatoria, solo hasta la universidad ya peludos entonces usábamos bóxer o calzones.

Bueno otra cosa que aclarar es que mi pito es bastante pequeño, casi micro pene, no soy gordo ni feo; soy moreno, medio lampiño (solo pelos en axilas, mis partes y piernas), fornido (86 kg) y alto (1.82), mis huevos son medianones, pero mi pito es de unos 5-6 cm y delgado como 1.5 cm ya erecto, flácido solo tengo huevos.

En uno de mis días de preparatoria, tenía 17 años, venia llegando a la casa y me recibió una de mis tía con su hija, mi primita de 3 años, se llamaba ——-, pero le decimos Aní.
Me existe como loco cuando la vi porque andaba desnudita de la cintura para abajo, uta… no sé pero tenía en su conchita como un líquido blancoso, pero su vulvita estaba grande, como la de una mujer grande.

Salude a mi tía y ha Aní, fui arriba a quitarme mi uniforme.
Me paje antes de bajar porque no podía bajar mi erección y pues se me veía entre mi trusa.

Al bajar mi tía estaba preparando la comida y me puse a platicar con ella, después nos fuimos al comedor y más tarde a ver la tv.
Durante todo ese tiempo estuve súper excitado y me masturbe como 4 veces, no podía dejar de ver a Aní su conchita.

Más noche llego mi abuela y se pusieron a platicar mi tía y ella.
Su charla era que mi primita había estado enfermita y que le había dado una infección en su vaginita, pero que como no sabían y ella casi no se quejaba, hasta que la vieron que su vulva estaba muy roja, al día siguiente la llevaron a el medico porque su vulvita estaba muy inflamada, que le estaban poniendo cremas en su vulvita y estaba teniendo tratamiento para la vulvovaginitis.

Para no hacer el cuento largo… mi tía le pidió el favor a mi abuela de que si Aní podía quedarse con ella el fin de semana porque no podían cuidarla y no querían dejársela a nadie porque estaba enferma.

En la mañana me despertó mi abuela, me dijo que Aní estaba en una de las recamaras de al final del pasillo, que más tarde le diera de desayunar y que si podía le diera sus pastillas.
Después se me prendió el foco que eso implica que le pusiera crema en su vulvita, o ¿no?.

Más tarde como a las 9 am me desperté como de costumbre un sábado me quede en bolas, bajando a preparar el desayuno para mi primita y yo.

Cuando escuche que hablo le dije que estaba en la cocina, ella iba solo con una camisetita de Pooh de color rosa, sus pantuflas rositas.
Al verme se quedó viéndome, pero yo disimule y le dije que había servido el desayuno en el comedor grande.
Después de desayunar le dije que debía tomar sus medicamentos, ni lo pensé ni nada.

La lleve a mi recamara y puse una película de niños que le gustaba, le di un vaso de agua y le di los medicamentos, después le dije tengo que ponerte cremita en tu cosita pero como no quiero lastimarte voy a ponerte la cremita con mi pipi, voltio a verme y se rio, porque estaba parado y me dijo que si, que era muy pequeñito más que mis dedos o los de su mama (era cierto).

La puse boca arriba y unte cremita en su rajita y en mi pito.
Puse mi pito en su entradita y empuje, mire su carita y solo hizo un gesto, le pregunte que si le dolía y me dijo que no, que sentía raro, pero para esto mi pito estaba completamente adentro de su vaginita.
Soy un poco precoz pero esta vez fui más que rápido, solo al meterlo, ni me moví ni nada, mientras le preguntaba me corrí, la abrase y saque mi pito de su vulvita.

Me quede dormido a un lado de ella por lo cansado, más tarde al despertar la busque, estaba jugando en el patio con sus muñecas.
Lo cual no desaproveche, me puse cremita en mi pito y me senté en el suelo, la cargue le dije que se sentara sobre mí, otra vez dos tres movimientos y me descargue de nuevo en su vaginita.

Como a la una de la tarde antes de comer, estaba tirada en una estancia de arriba mirando la tv con sus nalguitas hacia el aire, me puse sobre ella y comenzó a restregarme en sus nalguitas, volviendo a descargarme en sus nalguitas.

La lleve acabando de ver la película a la sala, la acosté boca arriba y sus piernitas abiertas, tome cremita y se la unte en su vaginita, jugué con sus labiecitos mucho ratito, después la puse en la orilla del sillón y abrí sus labiecitos con mis dedos, me hinque, acerque mi cintura después metí mi pito entre ellos (me vine solo con rosarla) aun así de pequeña sus labiecitos eran gruesos como mi pito y sin penetrarla mi pito cabía en el pliegue de uno de sus labiecitos de niña, espere unos minutos a que mi pene volviera a pararse y la penetre de una solo envestida descargándome en el mismo segundo que entre en ella.

Para hacer de comer le dije que la ayudaba a comer, la senté en mis piernas y solo acomode mi pito entre sus labiecitos, sin penetrarla desapareció en sus labiecitos hinchaditos, me corrí.

Ese día me corrí como 8 veces.
Antes de que mi abuela llegara me puse una trusa y a ella le limpie muy bien su vulvita.

Ya estando mi abuela en la casa, mi primita cuando yo estaba mirando la tv junto con ellas, se sentó sobre mí, rápido la cargue con una mano y la recosté en el sillón, corrí a cambiarme la trusa antes de que se traspasara mi semen, porque me había corrido, me éxito mucho que ella restregara sus nalguitas sobre mi enfrente de mi abuela…
Esa fue mi primera experiencia con ella y mi primera vez… seguiré contándoles.