En qué me metí 4
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por dainaa.
Tomé desayuno con mi papá y las visitas como si nada anormal pasara.
Cuando terminamos me ofrecí para levantar la mesa y bueno, asear la cocina.
Mi papá, sorprendido, me besó la mejilla y se fue con mi padrino a la sala mientras mi tío caballerosamente me ayudaba.
Me encantaba él, pero no porque fuera muy guapo, porque no lo es tanto, sino porque era suya.
Me sentía suya y me trataba como si fuera de su propiedad y era rico.
– Dani, tengo tantas ganas de metértela (me dijo al oído que me derretía)
– Tío por favor, hay más gente aquí
– Pero no está tu mamá, ella me asusta un poco
– Jaja es tu hermana, cómo podría asustarte?
– No lo sé, pero debe ser terrible cuando se enoja, supongo que tú lo sabes
– Sí, lo es, pero.
– Tienes las tetitas tan ricas, estás sin sostén?
– Sí
– Y bajaste así, sabiendo que estaba tu papá y mi cuñado?
– Ellos no me miran de otra forma, como me miras tú (mentí)
– Son hombres Dani.
Ya escuchamos a tu padrino culiar a tu amiguita esa, debe ser un pervertido, ten cuidado con él, no me gustaría saber que te mira con otros ojos, parecido a como te miro yo.
Mi zorrita rica.
déjame metértela
Estaba apoyada en el mesón de la cocina frente a él muy cerquita cuando sentimos que alguien venía.
– Dani, tu padrino necesita ayuda con algo del computador, podrías ir a verlo? Yo no entiendo mucho de esas cosas
– Claro
_______
Apenas entré a la salita él me abordó y me besó la boca.
Sus manos pellizcaban mis pezones y mordía mis labios.
– Dani, dormí tan rico anoche.
Quiero hacerlo de nuevo contigo.
– Padrino, no podemos
– Hicimos mal.
No quisiera que mi hermana y tu papá se enteraran, pero no puedo.
Necesito culiarte.
– Padrino por favor!
Me metió dos dedos en mi conchita y fue suficiente para que me la metiera rapidito yo apoyada contra la pared en sus brazos.
Él acabó y me puse a limpiar y a ordenarme para no demostrar nada.
Me acerqué al computador y no tenía nada.
Fue una excusa
– Dani, quién te desvirgó, cuéntame quién te enseñó (me manoseaba toda y me besaba el cuello)
– Padrino no preguntes
Volví a la cocina y estaban hablando mi papá con mi tío de trabajo y se detuvieron cuando entré.
– Terminaste? Qué tu padrino era tan bruto?
– Un poco, sí jaja
– Tío me trajiste un regalito? Dime que me trajiste algo!
– Sí, pero para tu cumpleaños, chiquilla
– Quedan horas tío! Dámelo!
– Qué impaciente hija.
No tienes que estudiar? O irás con nosotros a la iglesia? Eso sí sería una novedad
– No, papá, no iré.
No le digas a mi mamá si?
– Bueno hija, vas con nosotros Ale? o te irás a tu casa?
– Me iré a mi casa, hace tiempo que no voy jajaja
– Voy a ver a mi compadre, y luego nos vamos hija.
Hablamos luego.
Te llevamos Ale?
– No, gracias.
Voy en seguida.
Necesito tu baño jaja
– Ya lo creo jaja.
Nos vemos Ale.
Una vez se fueron todos me empezó a meter mano y se sentía delicioso.
Tenía tantas ganas de sentir su verga dentro mío que no me acordé de nada más que no fuera tenerlo dentro mío.
Sus manos en mi culo metiendo uno de sus dedos con aceite de coco me recordó lo que habíamos empezado hace tiempo y que iba a metérmelo por el culo.
– Tío, despacito si?
– Dani, haré todo lo posible
Se sentía suave, tierno, cuando de repente le dio por metérmelo duro y fuerte.
Quería gritar, y lo hice.
Estaba apoyada sobre el mesón y él detrás mío.
Mis tetas las sentía duras y heladas por estar sobre la mesa.
Pero mi culo: esta ardiendo.
Me sentía llena.
– Métete dos dedos en tu conchita, hija
Lo hice, y se sentía mejor! No podía creerlo! Estaba teniendo dos orgasmos y sentía su verga tan apretada cuando dijo que estaba acabando.
Así fue.
Su leche me llenó y ensució mi culo.
Sentía raro, pero raro rico.
– No sabes cuánto soñé con esto chiquilla desde que te la metí por primera vez que quise metértela por el culo.
Este culo maravilloso! Eres lo mejor.
Mi princesita.
Mi ricura.
Te quiero tanto chiquilla.
Feliz cumpleaños bebita bella.
Felices 15! Quiero culiarte de nuevo! Ahora! Ohhh bebé.
Él estaba tirado sobre mí encima de la mesa y no se dio cuenta que mi padrino nos miraba desde la puerta con su verga afuera lacia.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!