ENCUENTROS DE MI MADRE Y MI PRIMO

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hola, tengo 19 años y quiero contarles algo que ha venido sucediendo en los últimos meses en nuestra familia.
Hasta hace poco realmente yo considero hoy en día que era demasiado ingenuo y nunca imagine las cosas que podían suceder y yo ajeno a todo ello.

Todo comenzó hace más de tres meses cuando escuche una conversación entre mis padres y pienso que lo hicieron sin darse cuenta que yo los podía escuchar.
El tema era que mi mama le comentaba a mi padre que su sobrino, Sebastián, se estaba pasando de la raya en confianzas con ella cuando por alguna razón estaban solos y ella quería parar las cosas antes que se generara un escándalo familiar.
Y mi padre muy tranquilo le pregunto… y que tanto son esas confianzas? Ella le dijo… pues que me dice cosas un poco pasadas de tono, por ejemplo sobre mi cuerpo, además si le resulta posible pega su cuerpo al mio y me acaricia sin ningún respeto a lo que yo le exijo.

Mi padre le contesto… esos son cosas de muchachos por la edad, que tienen sus hormonas alborotadas y desean a las mujeres mayores, pero no te preocupes, ya se le pasara.
Y mi madre le respondió… o sea que no le das ninguna importancia a lo que te estoy contando y si el día de mañana se llegara a sobrepasar mas.
Qué? Mi padre muy olímpico le respondió, pues relájate y disfrútalo.
Después de esto mi madre salió muy enfadada de la habitación pasando cerca a donde yo estaba, pero era tanto el enojo que ni se dio cuenta de mi presencia.

Esto me sorprendió mucho y decidí poner más atención a futuro de lo que hiciera mi primo con mi madre y efectivamente lo que ella decía era cierto, cada vez que mi primo podía acechaba a mi madre, pero ella al parecer sintiéndose sin el respaldo de mi padre dejo que las confianzas de él aumentaran y un par de veces lo vi entrar a la cocina y pasando por detrás de ella le acariciaba las nalgas y le decía… Huyyy tía que rica estas y ella no se lo reprochaba, por lo cual mi primo se fue tomando más confianza con ella y la última vez que yo vi algo fue cuando lo sorprendí acariciando los senos a mama, por eso decidí montar una estrategia para saber hasta dónde podían llegar las cosas.

Mi primo siempre buscaba oportunidad para ir a nuestra casa y un día hace mes y medio me pidió que le dejara copiar alguna música de mi colección, le dije que viniera a casa, porque yo cuidaba mucho mis discos y no quería perderlos porque me había costado mucho esfuerzo conseguirlos, por eso acordamos que el vendría dos días después y como estábamos en vacaciones de estudio, no había problema para hacerlo durante la mañana, ese día mi hermano mayor como había conseguido un trabajo por vacaciones no estaría en casa, mi padre en su oficina, por lo cual se suponía que solo estaríamos mi madre y yo.

La cita era a las diez de la mañana y a eso de las nueve y media cuando mi madre se entraba a bañar le dije que iba hasta la universidad y regresaría al medio día, hice el amague de salir haciendo sonar la puerta para que ella la escuchara, pero me regrese cuando ella entro al baño y me escondí en mi habitación.
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Cuando dieron las diez de la mañana y suponía que estaría llegando el primo le escribí un mensaje por el celular comentándole a mi madre que me había encontrado con una amiga y que íbamos almorzar, por eso regresaría mas tarde.

Ella ya se había vestido como lo hace normalmente en casa, una blusa y una falda y todo normal cuando después de las diez sonó el timbre, ella fue a atender la puerta y allí apareció el primo que de inmediato le pregunto por mí, mi madre le dijo que yo me había ido para la universidad, el dijo entonces lo espero, pero ella cometió el error de contarle que yo regresaría hasta por la tarde porque iba a almorzar con una amiga.

Esa fue la mejor noticia para él, porque enseguida le dijo… Tiita y tu como estas?, Te veo muy hermosa.
Ella le dijo… bueno no mas creo que te estás pasando de la raya y si sigues así le voy a contar a tu tío.
Él le respondió… No, yo se que a ti no te gustaría un escándalo, por eso no le vas a contar nada.
Mira esta gran oportunidad que tenemos hoy de estar solos y no la debemos perder.
Él le hizo algo a mama porque ella le dijo… por favor no, no sigas, no quiero.
Él le dijo… Sí, yo se que si quieres, seguro mi tío no te atiende como yo lo puedo hacer.
Ella le insistía… No, no por favor, suéltame.
Vamos tiita, se buenita mira a tu sobrino como te desea y tu nada, de pronto por los ruidos imagine que él la besaba y ella le decía por favor, ya está bien, suéltame.
Y el muy cínico le dijo.
Pues si ya está bien sigamos, y la debió volver a besar.
Luego ella le dijo… mira que si llega alguien y nos encuentra en esto habrá problemas.
No te preocupes, nadie va a venir, déjame besarte y acariciar tu cuerpo que me vuelve loco, ella le dijo… eres un abusivo.
Sí, soy un abusivo pero es culpa tuya, tu cuerpo me fascina y no te imaginas cuantas pajas me he pegado pensando en ti.
Ella le dice… Oye Sebastián respétame.
Pero el no paraba en su ambición de poseerla y continuo con su asedio.
Yo desde mi escondite sin notarlo me he excitado y deseaba salir para ver y no estar escuchando e imaginando cosas.

Creo que mi primo con su asedio y caricias logro doblegar la voluntad de mama y posiblemente ella decepcionada por el comentario de mi padre fue cediendo a sus pretensiones, pero le repite otra vez… Mira que si alguien llega habrá problemas, a ella parece que ahora solo le preocupan los demás, pero no le escuche decir… soy una mujer casada, debo serle fiel a mi esposo, nada de eso, solo la preocupación de que los demás se enteraran.
Pasan unos minutos y hay un silencio total, en el que yo imagino Sebastián esta besando a mama y por eso no escucho sus voces.
De pronto ella le dice… Mira hasta donde hemos llegado, prométeme que no le contaras a nadie de esto y él le responde… Soy un caballero y nadie se enterara, además deseo estar contigo muchas veces.
Ella le respondió… Ni te lo imagines y volvió el silencio.
Finalmente los vi pasar desde mi escondite, para la habitación de mis padres.
Cuando escuche los jadeos de ambos me acerque a la puerta y pude a través de un espejo verlos en parte, como se besaban y como Sebastián fue desnudando a mama y luego ella lo ayudo a él y cuando los dos estuvieron totalmente desnudos, el recostó a mama sobre la cama y separándole las piernas empezó a darle sexo oral, todo esto era nuevo para mí, tuve que aprender mucho para poder narrarles lo que vi.
Ella empezó a gemir, jadear y por momentos le apretaba la cabeza a Sebastián contra su concha y le decía… Uhmmm Sebas que rico donde aprendiste esto? El levanto la cabeza y le respondió… Te das cuenta de lo que te estás perdiendo.
Sigue, sigue, le dijo ella mientras se retorcía del placer sobre la cama con los ojos cerrados.

Hasta ese día nunca había visto a mama desnuda, sus senos aun se conservaban en su lugar y su concha totalmente depilada, Sebastián con sus caricias, la hacía vibrar y así pasaron bastantes minutos y ella no paraba de gemir, hasta que soltó una serie de gemidos muy fuertes y le dijo a Sebastián, ya, ya, ya, para, para, ya llegue.
El se detuvo y ella respiraba agitadamente.
De pronto le dijo a Sebastián y tú qué? Él le respondió… ahora me vas a dar lo que tanto he deseado y se fue subiendo sobre ella en medio de sus piernas, pasando por los senos de mama, que los beso y acaricio todo lo que pudo y luego siguió subiendo quedando sus sexos enfrentados.
Mama metió la mano por en medio de sus cuerpos y tomando la polla de Sebastián la dirigió a su concha que se veía muy lubricada, por eso la polla de él se perdió rápidamente en su interior y luego de besarse apasionadamente en los labios, Sebastián comenzó a moverse sobre ella entrando y saliendo y ella le rodeo la cintura con sus piernas lo cual me permitía ver la continua penetración que fue aumentando en intensidad y fuerza, los dos respiraban agitadamente, pero mama además gemía y le decía palabras sueltas como, uhmmm, Sebas que rico, dame mas, mas, eso así, mas fuerte y él se esmeraba por darle gusto.

Yo estaba muy sorprendido con lo que estaba viendo y escuchando, porque jamás imagine a mí primo follando a mama y a ella desnuda pidiendo más y más sexo y mucho menos con esas expresiones.
Claro que no puedo negar que lo que presencie en esos instantes me excitaron muchísimo.
En este día perdí toda mi inocencia sobre el tema.

Pero volviendo a ellos, Sebastián al final chocaba violentamente su pelvis contra la de mama y ella lo disfrutaba inmensamente, eso no es posible negarlo.
Cuando alcanzaron el clímax, él le dijo… Tiita, me vengo, me vengo y yo no sabía que significaba eso hasta cuando mama le dijo… Me has soltado todo tu semen dentro de mi vagina? Él le dijo… Siii.
Y ella le replico… No sabes que me puedes haber embarazado?.
Sebastián sorprendido le dijo… pensé que te cuidabas.
Nooo, y ahora que hacemos.
No se le respondió el.
Pero luego ella soltó una carcajada y le dijo, te asustaste verdad Sebas? Crees que a mi edad podría comportarme como una colegiala?
Ellos continuaron pegados por unos minutos y mama le dijo… Me gusto mucho sentir tu semen dentro de mí, lástima que será esta única vez.
Y el enseguida le dijo… No tiita, no puedes hacerme eso, no te imaginas cuanto me excita mirarte y desearte, ya te lo dije, son muchas las pajas que me he hecho pensando en ti.

A continuación ella le hizo prometer que no diría ni una sola palabra a nadie porque las consecuencias podrían ser terribles, él le prometió que nadie se enteraría, agregando que esperaba no fuera la última vez y ella le dijo… Ya veremos, en ese instante regrese a mi escondite entendiendo que todo estaba por terminar.
Ella le pidió que se fuera pronto y apenas el salió ella se entro a bañar nuevamente.
Aproveche esos minutos para irme a la calle y empezar a pensar sobre todo lo que había visto y escuchado.
Ya no podría ver a mama con los mismos ojos, como lo que era, sino como una mujer con un atractivo femenino que nunca antes note.
Sus senos, su concha, esas piernas hermosas y lo que más me impacto fue escucharla gemir como alguna vez lo vi fugazmente en la televisión.
Esa noche vine a conciliar el sueño a la madrugada, además pensaba porque mama no me comento que Sebastián había estado en casa buscándome, seguro ella no quería preguntas.

Después de esa primera vez me volví demasiado curioso con las cosas de mi madre, siempre estaba atento a todo lo que ella hacía, a cuando Sebastián nos visitaba, al parecer el ya no la asechaba directamente tanto como antes, pero si le lanzaba unas miradas de deseo terribles.
Desde ese día ellos se han reunido nuevamente tres veces en horas de la mañana cuando nadie los interrumpe, lo sé porque le he preguntado al vigilante si Sebastián me ha venido a buscar, de las cuales confirmadas dos que pude conocer con antelación la fecha y hora de la cita, gracias a estar revisando los correos del celular de mama en el cual encontré mensajes de Sebastián que le decía… Te extraño mucho quiero verte mañana y ella le respondía con un sencillo, Si.
Y en otra oportunidad que ella fue la que lo invito.
Y él le respondió… Desde luego que sí.

En estas oportunidades no fui a estudiar e hice lo mismo que la primera vez simule que me marchaba y me escondí.
En ambas ocasiones los encuentros de sexo fueron cada vez con mayor intensidad, porque se iban tomando más confianza entre ellos.

La última vez, Sebastián le propuso a mama follarla por el culo y ella se negó al principio, pero él la convenció y tuvieron momentos increíbles de excitación, se olvidaron que alguien pudiera enterarse y se entregaron mutuamente.
Era tal la explosión de sexo que hasta yo desee salir de mi escondite y participar.
Esta vez yo quería participar, claro que con mi celular logre tomar algunos videos y no sé si los pueda utilizar con mama para persuadirla de que este conmigo también.
Si esto sucede se lo contare.