Enriquekely Parte 2. Mi tía y… ¿Chombo?

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por enriquekely.
Desde que tomamos el bus de mi tierra natal empecé a sentir las ganas de regresar. Pero sabiendo lo que hacía unos pocos días hice no me quise arriesgar, pero siempre me quedaron las ganas de probar de nuevo.
Dos largas horas en autobús para llegar al pueblo mas cercano a donde tomaríamos otro bus para por fin llegar a casa de mi abuela. Las cosas pasaron como cualquier otro viaje.
Al llegar a casa de mi abuela note que todo estaba desordenado y en medio de la sala estaba una señora de unos treinta y tantos, no muy vieja, no muy nueva, algo sucia y con secuelas de lo que pudo ser una fiesta muy fuerte. Mi madre se acerco y le dio un carteraso. “ se formo la pelea”
Luego me dijeron que esa era mi tía valentina.

En aquellos días se celebraba una fiesta en el pueblo, era conocida como el carnaval, tres días de locura y desenfreno. Mi tía se comportaba como una jovenzuela o eso escuche de mi madre quien continuaba intentado bajar de la “gracia” a su hermana ya que mi abuela la tenía como la consentida.
Pasaron las horas y llegada la tarde mi madre seguía peleando con mi abuela.

Me aleje de aquel lugar y fui a la cocina, mi tía estaba con una toalla “se había bañado” y se tomaba algunas pastillas para seguir esa noche con la fiesta.
– hola… ¿kely? Como has crecido ya eres todo un hombre – acercándose a mi tambaleante.
Yo la intente saludar pero no entendí nada de lo que dijo y dándose la vuelta se dirijo a su casa, “que era un anexo de la casa de mi abuela”. Yo proseguí mirando los retratos que adornaban aquel lugar cuando encontré la foto de mi prima, suspire y aleje mi mirada.

Cuando escuche algo caer en seco en el anexo corrí para ver que era, mi tía se había desmallado entrando y sin percatarme que ella estaba desnuda intente levantarla, le tome por los brazos y acomodándola la levante y cuando iba a pedir ayuda ella me dijo que me callara.
– no le digas a nadie o no me dejaran salir –

Yo que no pensaba que ella estuviese totalmente cuerda en ese momento hice por levantar la voz pero en ese instante ella me tomo la mano y la puso en sus partes, una vulva peludita y suave estaba cálida y húmeda, estaba algo sorprendido por lo sucedido ya que era mi tía, en mi vida jamás se me hubiera ocurrido, además como estaba enamorado de mi prima no había notado a ninguna persona.

Poniendo ella su mano sobre mi pene empezó a acarícialo – has crecido kely – sonrió y se arrodillo sobre el piso, mirándome, con solo mover la barbilla entendí. “cierra la puerta”
Después de cerrar la puerta ella saca mi pene de su escondite y empezó a acariciarlo suavemente, lo paso sobre sus mejillas y luego se lo metió en la boca, sorprendentemente no me vine en ese instante, era difícil para mí contenerme, la calidez de su boca y esa lengua que no paraba de girar alrededor de mi pene no me dejaban en paz ni un segundo.
Era demasiado para mí.

Cuando empezó a succionar mi vida se quiso salir por mi pene y entonces ella paro.
“loca no te pares” quise decirle pero ella me puso los dedos sobre la boca.
– si le dices a tu mama no juego contigo de nuevo – me dijo, seguro pensó que yo era un niño pequeño que estaba tembloroso en sus manos, sonriendo la le empuje y ella cayó sobre la cama.

Abrí sus piernas y puse mi pene en la entrada a su vagina.
– si le dices a mi mama le diré quien comenzó – ella solo se quedo con los ojos bien abiertos.

Empecé a empujarle mi pene suavemente. No conocía otra manera de hacerlo.
gimió suavemente y se inclino hacia atrás.
mi pene empezó a estar más y mas mojado, hasta ahora mis relaciones fueron con mi prima la cual nunca estuvo así de mojada.
Era tan profunda y calientita. Podía penetrarla más y más, eso hice.
Yo apenas era un niño comparado con semejante vagina.
Ella se empezó a menear con ritmo y mirándome sonrió. – lo haces muy rico niño – me dijo y se inclino hacia delante. Puso sus manos sobre la cama y quedo como sentada en la cama mientras yo continuaba dándole.

Cerró los ojos y empezó a lamerse como si estuviera comiendo algo.
Acercándose a mi me tomo la cara y empezó a meter su lengua por toda mi boca.
Estaba muy asuntado. Esa era una mujer. Tenía un hijo recordé.
Sacándole el pene de la vagina quise correr pero ella me agarro.

– no temas, me gusto, no le diré a nadie ahora deja que te saque la lechita, si no sale te van a doler la bolas luego – dijo en tono burlo. Me había saltado alguna lagrima de los ojos pero no las noto ella. Estaba muy confundido pues sentía que le era infiel a mi prima.
Acostándome en la cama tomo mi pene y se sentó sobre él, empezó a menearse y yo sentía cada parte de su liquida vagina, algún que otro sonido como de agua salió y luego poco a poco ella se inclino sobre mí, sus senos se movían a la par de sus caderas. Cuando vio que cerré los ojos de placer aumento el ritmo.
– ¡tia! ¡tia! – dije con voz apagada mientras ella me tapaba la boca y aceleraba el ritmo.
– para, para, tia… tia!! – se escapaban algunas de mis palabras mientras sentía algo que no parecía placer. Era demasiado intenso para ser algo normal. Ella sonreía cerraba los ojos mientras aceleraba el ritmo.

No aguante mas esa explosión y me deje todo el semen dentro de ella.
– que rico – dijo levantándose.
– Luego jugamos ¿está bien? – poniéndose un vestido salió a la fiesta dejándome en la cama mirando el techo, mi pene palpitaba como nunca y la sensación de que esto solo comenzaba estaba aun en mi mente.

Pasaron los minutos como horas mientras estuve tendido sobre esa cama.
De un salto quede de pie, era la voz de mi primo que llegaba de la escuela, el tenia catorce años y era moreno. Mi madre le decía chombo.
Pasaron las horas y no me atrevía a mirar a mi primo a los ojos por mucho tiempo, seguro y leería mi mente y sabría que estuve con su madre, me carcomía la culpa.
Esa noche pasada las tres de la mañana me había hecho unas cuatro pajas “masturbación” pero no lograba sentirme satisfecho.

Luego como por arte de magia escuche la voz de mi tía por la ventaba.
– kely, ábreme la puerta – yo sonreí y corriendo abrí la puerta.
– ¿estás durmiendo en el sillón? Y mi hermana donde esta? –
– en el cuarto de mi abuela – respondí y ella se acerco a mí y me dio un beso.
Sus labios sabían a alcohol y humo.

– disculpa, sé que no te gustan las que fuman – dijo y quitándome el pintalabios de la boca se fue a bañar. Intente acercarme a ella un par de veces pero no lo logre, fui a donde estaba bañándose pero la puerta estaba cerrada y no respondió a mi llamado, al final desistí y me fui a dormir.
Ella paso se fue a su cuarto, yo no podía irme sin probarla de nuevo así que en medio de la noche me escurrí a su habitación y palpando la encontré.

Escuchaba un sonido suave y rítmico, tocando la cama note que esta se movía suavemente.
Sonreí en mi interior – seguro esta masturbándose, recordándome – pensé.
Cuando de la nada escuche algo que me congelo la sangre.
– mami, dame dame mas – dijo la voz de mi primo….

Estaba ayi parado en la oscuridad escuchado un chapoteo suave y rítmico.
Es mi primo…. “combo “ le está dando a mi tia?
Saliendo del cuarto y cuando estaba a punto de poner un pie fueral cuarto escuche.
– kely ¿quieres jugar? – me di la vuelta y la mire semidesnuda.
Me gire y acerque suavemente, ella abrió mi boca con un suave bezo para después comérmela salvajemente.
Después de un poquito escuche la voz de mi primo de nuevo, no entendí.
– dale pues, no creo que a el le importe – dijo mi tia.

Acercándome al oído de mi tia le pregunte, ¿Qué había dicho chombo? , ella me miro y sonrió.
– ¿Que si te la podía comer ¿- me di cuente que el que estaba acariciándome las bolas era mi primo. El moreno acerco sus gruesos labios a mi pene y metiéndoselo todo comenzó a chuparlo.

Mi semen voló por la habitación y baño a mi primo en el rostro,
– tanta buena chucha “vulva” que te he dado y sigues de marica – dijo mi ti acariciando la cara de mi primo quien sonreía apenado.
– Juguemos un poquito más – dijo mi tía. Yo asustado, pero mas excitado que temeroso me deje llevar por lo que sucedería.