Enseñando sexualidad a mi hijo mayor
De como una simple pregunta, me llevo a experimentar el mayor placer que jamás sentí.
Buen día, este va a ser mi primer relato, de muchas experiencias que tuve con mi hijo mayor.
Nota: MI HIJO, AL MOMENTO DE LOS HECHOS TENIA 10 AÑOS, POR SI A ALGUIEN LE MOLESTA, NO CONTINUE LEYENDO.
Todo lo que voy a relatar, fue cierto, no me arrepiento de lo que paso, ya que les puedo asegurar, que fue totalmente consentido, disfrutado por los dos de principio a fin, sin jamás lastimarnos.
Cuando tenía 19 años, fui papá de un hermoso varoncito, (Valentín). Por la escaza edad, no duramos prácticamente nada junto a su madre. Cada quien vivía en su casa junto a nuestra familia. Los primeros meses, mi hijo vivió con ella por razones obvias, pero conforme iba creciendo, pasaba mucho más tiempo en mi casa que en la de la madre. A sus 5 años, yo ya trabajaba en una empresa de electrónica en la que mi pasar era muy bueno. Para los 9 añitos de mi niño, yo tenía mi casa, mi auto y una vida muy cómoda con horarios de trabajo de mañana de solo 6 a 12 hs.
Recuerdo el día en que todo comenzó. Un viernes, su madre me pidió si Valen se podía quedar conmigo todo el fin de semana ya que ella tenía trabajo. Por supuesto que accedí y cerca de las 17 hs mi hijo ya estaba en casa.
Valentín es un chico muy cariñoso, aunque muy varonil. Casi con 10 años, tiene un cuerpo muy atlético ya que practica básquet. Su piel es color canela, ojos marrones, unas piernas de envidia para sus compañeros, en fin un niño que estaba a punto de entrar un su pubertad. Yo por mi lado, casi en mis 30, tenía un físico en excelente estado. Ya que soy amante del futbol y juego casi a diario con compañeros de trabajo. Me considero bisexual, me encantan las mujeres, pero he tenido algún que otro roce con algún jovencito y eso me dejo muy, muy caliente.
Esa tarde, ni bien llego, salimos a jugar un rato al patio, primero unos tiros al aro de básquet y luego unos penales. Terminamos ambos muy sudados y llenos de pasto y arena.
Entramos en casa, y como es costumbre, ambos nos desnudamos dejando la ropa en la lavadora. (Desde siempre nos bañamos juntos, en mi casa no existe la vergüenza para nada entre ambos y la desnudez es normal.), subimos a la ducha y comenzamos a bañarnos.
Como les dije, el vernos desnudos, jamás fue raro, mil veces lo bañe, lavando desde su cola hasta su pene, le enseñe desde muy chico a pelar la cabecita y lavar bien con agua y jabón esa zona. Mi consejo para los papas jóvenes, es que hagan esto que les dije adelante de sus hijos, y que ellos lo vean, así es mucho mejor para que ellos aprendan. Para apurarlo, le puse shampoo y lave su pelo. Él estaba de espada a mi medio encorvado, lo que hacía que mi pene toque su espalda. Yo no estaba excitado para nada en ese momento. Le dije q se pusiera derecho porque no podía lavarle bien la cabeza y no me contesto. Le pregunte que pasaba y nada, seguía callado. Entonces lo agarre del brazo y lo gire, enseguida note que se tapó con sus manos el pito. Me miro y se ríe. Le digo que le pasaba.
Valen: Nada pa.
Yo: y entonces porque te tapas? Desde cuando tenes vergüenza conmigo?
No me dijo nada, solo agacho la cabeza. Pensé que ya era hora de tener esa charla entre padre e hijo, porque a pesar de que siempre hablamos de nuestros cuerpos, de los cambios, de las mil preguntas que en su momento me hizo como que porque mi pene tenia pelitos y el de el no, o porque es más grande o porque y porque jajaja, no nos habíamos sentado a charlar realmente serios de esos temas.
Opte por no decirle nada más del tema, le di un beso en la cabeza y abrazándolo le dije:
Yo: sabes que papá te ama con locura hijo, no tenes que tener vergüenza nunca conmigo. Yo estoy para vos siempre que me necesites y quieras saber algo, una pregunta, o algo que quieras mostrarme. Si?
Valen: Si pa, ya sé. Te amo.
Yo: Yo también te amo mi pichoncito (mi forma cariñosa de decirle :)).
Terminamos de bañarnos y yo salí primero, me seque y le dije que cierre el agua, q ya salga. Cuando salió, le pregunte si quería que lo seque y asintió con su cabeza.
Sin dejar de taparse el pito, se acercó a mí y comencé a secarlo. Primero la cabeza, seguí por el cuello y al llegar a su espalda y pecho le dije q levante las manos y solo levanto una, la otra seguía «tapando» su amiguito, seque su axila, y luego cambio de brazo y seque su otra axila y brazo. El solo me miraba y sonreía. Me agache para poder secar sus pies y piernas, y le digo:
Yo: sácate las manos de ahí, ya se lo que tenes jajaja, se lo dije para que se relaje, sabía que quería preguntarme algo, o algo raro intuía. Un padre sabe esas cosas jaja.
Valen: Deja, yo me termino de secar – dijo.
Me sentí un poco dolido, como que mi bebe, mi hijo ya no tenía esa confianza conmigo, por un lado lo entendí, es la vergüenza propia que viene con la llegada de los cambios de la pubertad, pero por otro lado, me dolió porque siempre pensé que llegado el momento de su desarrollo, él iba a compartirla conmigo, charlar sus inquietudes, que se yo, mostrarme sus primeros pelitos o algo así jajaja. Lo deje solo y salí, desnudo como estaba a mi cuarto.
Acostumbro dormir desnudo, desde siempre, lo hacía en pareja, y lo sigo haciendo hoy en día. Y mi hijo igual. Ya les había comentado que en casa la vergüenza no existía, y la desnudes era de lo más natural. Me puse un pantalón tipo short, esos de futbol y baje a preparar unos sándwich para cenar algo rápido.
Valentín no tardo en bajar, solo con un bóxer de Ben 10. Le dije q pusiera unos vasos y nos sentamos en el futon a mirar tele y comer. Miramos un partido un rato y le dije que me iba a recostar a mirar una película. Le dije q no este hasta muy tarde, le di un beso (nos saludamos siempre con piquitos) y subí a mi cuarto.
A la hora (más o menos eran las 22:30) escucho los pasitos de valen en la escalera. Lo veo que se asoma y me pregunta si se puede quedar a mirar tele porque no tiene sueño pero le da miedo estar solo abajo.
Le digo que sí y enseguida corre y salta a mi cama cuando levanto la sabana, le dije:
Yo: estoy en bolas, no te molesta?
Valen: neee (es como decir un no de forma despectiva)
Yo: te pregunto porque como ya no queres que te vea desnudo ni que te seque como antes, capas que te molesta que este desnudo, pero vos sabes que papa duerme así, y es mi cama y no voy a cambiar jajaja.
Valen: si ya se. (Sonaba muy cortante, evitaba mirarme lo cual era súper raro y no era normal, ya que siempre que mirábamos la tele juntos, lo primero que hacía era pedirme que lo abrace o él solito se recostaba con su cabeza en mi pecho abrazándome.)
Mas era mi «dolor» al ver que parecía adrede que me ignoraba, ni siquiera se acercó a mi lado, estaba raro.
Puse una película de terror, porque es el género que más me gusta, ya al rato se empezó a arrimar jajaja. Me hice un poco el difícil y no lo abrace, tenía mis dos brazos en la nuca. En un momento, se me acerca bien pegadito y oliendo mi axila me pregunta si era un desodorante nuevo que tenía.
Nuevamente le respondí de forma seca.
Yo: SI
Valen: Tenes sueño?
Yo: No, todavía no, por?
Valen: No, pregunto nomás. Que le paso a la chica? (refiriéndose a la película)
Yo: No se valen, mira la película.
Se hizo un silencio tenso. Pasaron unos 5 minutos.
Valen: Que vamos a comer mañana?
Yo: Hijo déjame ver la película tranquilo, que se yo que vamos a comer, mañana vemos.
Valen: Bueno……. Estás enojado?
Hice una pausa, tome aire y lo mire:
Yo: No estoy enojado!
Valen: (después de unos segundos callado) Y porque no me abrazas?
A esta altura, la verdad es que no le estaba prestando atención a la película. Tener a mi hijo a mi lado, sin poder abrazarlo, me molestaba. Siempre que nos acostamos juntos, suelo olerle el pelo, acariciarle la espalda, darle besos en las mejillas, amo ver su carita a tras luz, se le ven los pelitos del bigote y eso me mata de ternura.
Yo: Valentín, que te pasa?, desde la tarde que estas raro conmigo, primero me tratas raro en la ducha, como queriendo que me aleje, y ahora, venís y te acostas lejos, y me hechas en cara que no te abrazo? Sos vos el que no me abraza. Y me duele que sea así. Sé que estas creciendo y capas que te molesta que te abrace o te bese como antes, pero bueno, nos acostumbramos así. Se lo dije con los ojos medios llorosos la verdad.
Sus ojitos también se llenaron de lágrimas pero no decía nada. Lo abrace fuerte y le dije:
Yo: Decime la verdad que te pasa? Te conozco hijo y sé que algo tenes. Alguien te pego?, tu mama?. Si no hablas no sé qué te pasa.
Valen: No pa nada de eso.
Yo: Y entonces que te pasa???
Valen: Nada, es una pregunta, pero… nada, no se…
Yo: LPM JAJAJA, que queres, decime de una porque me pongo peor hijo, ya me conoces. Intuyendo por donde venía la cosa le digo Tiene algo que ver con esto? y le agarre las bolitas.
Valen: jajaja si pa(todavía con lágrimas en los ojos)
Yo: Y que tantas vueltas das? Te conozco hasta el último lunar del culo, hasta las venitas de tus huevitos, que vos pensabas q eran pelos jajaja.
Valen: (riéndose) Si me acuerdo papi. Nada, es que en la escuela mi amigo hablaban de algo, y se reían porque yo no sé de qué hablaban y me enojé.
Yo: (ya me imaginaba para donde iba la charla) ajammm, y…. decime, de que hablaban? O que es lo que no sabes?
Valen: (SILIENCIOOOOO… Y MIRADA PICARA) deeee…. laaaaa….. paaa…, laaaaaa…. paaajj….
Yo: Dale boludo jajaja tanto te cuesta decir la PAJA? Decilo jajaja pajaaaa, PAAAAJAAAA. Bueno, y??? Que es lo que pasa con la paja?
Valen: Y que es, porque ellos decían que se la hacían y se burlaron de mi cuando les dije que no sabía cómo.
Yo: Bueno hijo, vamos a hablar enserio. (Apague la tele, me senté en el respaldar de la cama e hice que él se ponga en la misma posición, yo seguía desnudo, pero tapado con la sabana hasta la cintura). La paja es algo que hacemos los varones con nuestros pitos, el verdadero nombre es masturbación, ósea se dice yo me masturbo, pero está bien decir yo me hago la paja, es más común decirlo así.
Viste que a veces se te pone el pito duro? osea cuando se te para. Bueno, cuando esta así, duro, los chicos a tu edad, o a veces antes, o algunos de pues, empiezan a jugar con su pito, porque se siente bien, además es una forma de conocer el cuerpo de uno. Vos sabes bien que nuestro pene se usa para tener sexo con una mujer y hacer bebes. A tu edad, es normal empezar a tocarse porque se siente muy bien.
Valen: Si si, te hace cosquillas cuando se para. Y como se hace?
Yo: (Para explicarle agarre mi dedo índice e hice los típicos movimientos de sube y baja) tenes que hace así le dije, subiendo y bajando el cuerito del pito. Si lo haces por un rato, te va a dar como ganitas de hacer pis, pero no tenes que parar, tenes que seguir hasta que te de una sensación re fuerte y linda en todo el cuerpo, principalmente en el pito. Por eso esta tan bueno hacerlo.
Valen: (Con cara de intriga) y que es la leche? porque mis amigos dicen que te salta leche y eso es lo que no entiendo. Como leche? Qué es?
Yo: viste que una vez te conté que papá puso una semillita en mamá y así naciste vos? bueno, esa semillita es eso, pero al igual que la paja se llama masturbación, la leche, se llama semen. Es un líquido blanco, que cuando seas un poquito más grande, y si te haces la paja te va a salir. Al principio no te va a salir nada, pero a medida que vayas creciendo, te va a salir primero una babita transparente, que parece pis pero no lo es, y después se va poniendo más blanquito.
La carita de mi hijo a estas alturas era de total asombro, tenía los cachetes colorados, sus ojos miraban atentamente todos mis gestos y lo notaba excitado.
Valen: Y como se cuándo me va a salir a mí? duele?
Yo: jajajaja no hijo, no duele para nada, al contrario, es una sensación que te va a volver loco, y una vez que la sientas, vas a querer hacerlo siempre jajaja. Pero eso sí, no podes hacerlo en cualquier lado, acá en casa no hay problema, a papá no le molesta. Ah y además, cuando te empiece a salir esa agüita, la leche, tenes que limpiarte bien el pito si?
Valen: Si pa. …..Pa?…Vos…. te la hacías cuando eras chico?
Yo: ehhhhhhhhhh jajaja si hijo, y me la sigo haciendo cuando me da ganitas jajaja. Como te dije, es una sensación que no podes dejarla, esta re bueno.
La verdad que la charla pasó de ser algo incomoda a ser algo muy íntimo y hasta graciosa, porque él se fue soltando de a poquito lo que me permitió hablarle con más soltura. Mi cuerpo reacciono y tenía mi pene medio parado, pero no dije nada, no era momento y me daba algo de pudor, a pesar de que muchas veces valen me vio con el pene duro en las mañanas y note que él también lo tenía durito, porque se frotaba y se tapaba.
Unos segundos después, me mira y me dice mira papá, y saco su pito duro por la abertura del bóxer. Ese fue el punto en donde todo empezó. Si yo la tenía media dura, verlo así, me la puso a mil.
Por primera vez lo mire con otros ojos, ya no era mi bebe pequeño, estaba comenzando su pubertad y verlo así me calentó de una manera que no podía creer.
Dentro de mi pensé ¿qué mejor manera de que aprenda a hacerse una buena paja que si se la enseño a hacérsela yo, que soy su papá?
Asique decidí alentarlo a poner en práctica lo aprendido jajajaja.
Yo: Faaaa hijo la tenes re dura.(se la empuje con un dedo hacia abajo en modo de juego)Sentir el calorcito de un pito joven es indescriptible, es algo mágico. —¿Tenes ganitas?
Valen: Si mal, me duele.
Yo: Y si hijo , duele porque los músculos del pito están tensos, por eso esta duro, y la forma de aliviarlos es con una pajita. ¿Porque no te la haces, así de paso te enseño bien como se hace? si no te da vergüenza.
Antes que le termine de decir eso, ya estaba con sus dos dedos subiendo y bajando el cuerito de su pene, la verdad quede hipnotizado con su sube y baja, parecía que se iba a arrancar el pene. Reaccioné y le dije que lo haga más despacio, más lento, que tenía que disfrutarlo. Me miró la entrepierna y me pregunto si la tenía parada.
Yo: y a vos que te parece jajaja, a papá también le dieron ganitas.
Valen: y hacetela conmigo. O te da vergüenza?(me miró como tomando revancha de las veces que yo le hice la misma pregunta. Lo tome como que me estaba retando a hacerlo enfrente de él, además de su lógica curiosidad.)
Yo: Sabes que vergüenza no tengo y menos con mi hijito. Bueno, la verdad es que me dieron muchas ganas, pero esto queda entre vos y yo sí? es algo que no se debe contar.
Valen: Si pa. Ahora no dejaba de mirarme y cuando corrí la sabana, asomó mi pene de unos 18cm (creo que es normal) con la punta ya húmeda. El al verme me dice sorprendido y acercándose a mí para ver de cerca:
Valen: eso es la leche? súper emocionado lo dijo
Yo: No hijo, eso es un agüita que nos sale cuando estamos muy excitados, es como un aceite para poder meter el pene en la vagina y resbale entiendes?
Valen: ahí puedo tocarlo?
Yo: Bueno, pero despacito. Con la yema de su dedito toco el líquido y la punta de mi pene, lo que me hizo dar un pequeño salto. Él lo notó y me dijo si me hizo doler a lo que le respondí que no, que me hizo cosquillas. Se acercó el dedo para ver de cerca y jugo con dos dedos formando el clásico hilito que toooodoooos hacemos en algún momento jaja.
Grande fue mi sorpresa cuando se tiró el pellejito para atrás, y trato de «lubricar su cabecita con mi precum. Me dijo que se sentía suavecito. Aproveche para dar un pasito, me apreté el pene para que salga una abundante gota de precum, la tome en mis dedos y le dije:
Yo: A ver hijo, pelalo bien que te pongo más.
Le puse mi precum es su cabecita, reconozco que fue una de las sensaciones más excitantes que sentí, trate de hacerlo lo mas suave posible porque a esa edad el glande es súper sensible. Jugué no más de 5 segundos lubricando bien su pene, y lo agarre más de abajo para cubrirlo con su pielcita (y dije dentro mío: ya fue, lo voy a masturbar bien para que aprenda) asique comencé con un lento sube y baja descubriendo al máximo y subiendo, por supuesto que no tenía un súper pito, pero como más adelante les contare, tenía unos 10 cm, algo normal. El solo miraba y no paraba de decir que estaba buenísimo, que no parara, le veía la cara y estaba coloradísimo. Mi pene estaba a los saltos y empezaba a chorrear una gotita de precum. Él lo noto.
Valen: Te salió más agüita a pa.
Yo: Jajaja si hijo pasa que cuando un hombre se excita mucho pasa eso, papá también tiene muchas ganitas de hacerse una pajita.
Inmediatamente, y sin decirme nada, con los dedos de su mano derecha tomó mi precum (yo pensaba que se lo iba a untar el pero no) y para mi sorpresa, con su otra manito, agarro mi pene y bajo delicadamente mi prepucio (ufff la sensación fue…… no se jaja decir que fue un choque eléctrico se queda corto) y acto seguido, lo esparció por todo mi glande. Su inexperiencia, sumado a su calentura y curiosidad, hacían que cada roce de sus deditos me hicieran suspirar.
Valen: Te duele pa? Te hago mal?
Yo: Noooo hijo, al contrario, me encanta, pero no lo hagas si no queres, el hecho de que yo te esté ayudando a vos, o enseñándote no significa que vos tengas que hacer lo mismo conmigo.
Valen: Pero yo quiero hacerlo pa, esta re bueno. Se siente raro y me gusta.
Yo: Bueno hijo, pero mirá que si seguís así, me va a salir la leche y te vas a manchar la mano.
Valen: enserio te va a salir? (acelero los movimientos ansioso para que me salga) quiero ver como es porfa.
Yo: Bueno hijo para jajaja me la vas a romper. Vamos a hacer así, primero yo te la hago a vos, hasta que te de la sensación y después vos a mi si?
Valen: bueno pa, y me soltó.
Le dije que se acomode entre mis piernas. Cuando se puso de pie, aproveche y le baje el bóxer, para que se lo saque. Quedo parado adelante de mí, aproveche para decirle que se acerque, porque quería ver si ya le asomaban algunos pelitos. Con una mano lo tome de la cola y con la otro levante sus huevitos, los hice a un lado y a otro, baje su pene duro y nada, apenas unos bellitos casi invisibles. Una postal maravillosa. Bueno, abrí mis piernas y me cubrí con la sabana, para que mi pene no lo toque y le dije que se siente en el medio, pero él me dijo que porque me tapaba y tiró de la sabana para sacármela. Me dijo que estemos desnudos los dos.
Yo sin protestar le digo que estaba bien. Se dio vuelta y se sentó entre mis piernas, lo recosté sobre mi pecho y el al sentir mi pene me dijo que estaba calentito y se movía restregando su espalda jugando con mi pene. Supongo que su calentura hiso que se desinhiba. Le dije que se relaje y que trate de disfrutar, que le iba a hacer una súper pajita jajaja. Automáticamente él solito abrió bien sus piernas y se acomodó a gusto. Me decidí a hacerle sentir y disfrutar del pacer de una buena paja.
Empecé a pasar las yemas de mis dedos por su pecho, al principio le daba cosquillas, pero le dije que se quede quieto y trate de disfrutar. Comenzó a relajarse y ya no se reía, solo contraía su cuerpo y su pito daba pequeños saltitos.
Seguí acariciando su pecho y poco a poco fui bajando, sin pasar por sus genitales, sino que los esquive y seguí a sus muslos. Después de unos minutos, sentí como su respiración se agitaba, estaba como loco y movía su cadera con claros signos como de sexo. La verdad es que producía un morbo terrible mezclado con ternura de ver a mi pequeño hijo disfrutar con su joven cuerpito. Pasaron unos segundos hasta que:
Valen: Dale paaaa….
Yo: Que pasa hijo no te gusta?
Valen: Siiii, me encanta pero dale….
Yo:(quería que me lo diga jajaja) Dale que hijo?
Valen: Dale, haceme la pajaaaa, no aguanto más, tocame el pito
Me mató de ternura que me lo pida casi suplicando. Asique deje de acariciarlo y empecé a rozar de a poquito sus huevitos, el dio un pequeño salto y un suspiro, casi un gemido. Yo no daba más, mi pito saltaba en su espalda pidiendo mimos, pero tenía que concentrarme en darle a mi hijo la mejor paja posible. Empecé a pajearlo de a poquito, pero a un ritmo bueno. Él se retorcía del placer y suspiraba muy fuerte. Sin decirme nada, una de sus manos busco mi pene y empezó a tocarme, lo deje hacer sin decir nada. Mi pene, lleno de precum, más su cuerpito transpirado y el mío, hacia todo muyyyy excitante. Con mi mano derecha lo pajeaba y con la izquierda jugaba con sus huevitos, su pubis, hasta su perineo. Después de unos minutos…
Valen: PAAA…. ME VIENE LA SENSACION…
Yo: Bueno vida, deja que te dé, disfruta, no tengas miedo, es lindo.
No tardo mucho más en soltar un pequeño gemido seguido de un gran suspiro. Su cuerpito se tensó, estirando sus piernas y tirando la cabeza hacia atrás, sobre mi pecho. Afloje los movimientos, y solo pelaba su pene suave, hasta que se relajó.
Quedo unos instantes así, con su cabeza hacia atrás, sus ojitos cerrados, totalmente colorado, sudada su carita, los labios rojos, Dios que hermosa imagen.
Abrió los ojitos y me sonrió y puso la boca en forma de piquito. Me acerque él le di un besito de unos tres segundos, sentí su respiración, su olor a sudor, mezclado con ese olorcito a hombrecito, que no es de bebé, pero tampoco llega a ser de adolescente. Un aroma embriagante y único. Tenía su bigotito sudado, salado. Un manjar.
Yo: Te amo mi pichoncito. Te gusto?
Valen: (sus ojos se llenaron de lágrimas) no dijo nada, se dio vuelta y me abrazo. Sos el mejor papá del mundo, te amo mucho pa. Esta buenísimo hacerse la paja.
Yo: Hacerse? si te la hice yo guacho jajajaja. Viste que te sentís mejor ahora? Como que te relaja todo el cuerpo. Vas a ver que vas a dormir mejor ahora jaja. Además viste que te sudaste todo no? Es porque aunque no lo parezca, gastas muchas energías al hacértela. Bueno hijo ya es tarde. si queres anda a tu camita a dormir.
Valen: NEEE no tengo sueño. Además tu pito todavía esta duro.
El había quedado entre mis piernas con su cabeza a la altura de mi pecho. Con su mano derecha agarro mi pene y empezó a bajar mi prepucio, jugando.
Yo: hijo si queres anda a tu camita, así papá se hace la japa solito. Debes estar cansado.
Valen: No pa, yo quiero hacértela, me gusta. Además no tengo sueño.
Yo: Bueno hijo, pero no lo hagas por compromiso si?
Valen: Si pa, lo quiero hacer porque te amo, es divertido además.
Así como estaba, siguió jugando con mi pene, bajaba el cuerito, y me lo cubría despacito. Se dio cuenta que si apretaba desde abajo, salían gotitas de precum, eso le encantaba. Con su manito izquierda, empezó a hacerme cosquillas en los huevos (siempre me depilo) y cada dos por tres, me regentaba si lo estaba haciendo bien. Yo solo lo miraba y con una sonrisa le decía que lo hacía excelente y le daba un piquito. Pude ver que su pito estaba otra vez duro, pero no le dije nada.
Siguió jugando con mis huevos, y pasaba sus dedos por mi pubis (lo cual me vuelve loco, es la zona que más me excita). Le dije que me pajeara un poquito más rápido. Aprendió súper rápido. No tarde en estar a punto de acabar y se lo dije.
Yo: (Con voz entrecortada) Hijo ya me va a salir la leche. Queres que siga yo así no te manchas?
Valen: NO papi, no me molesta, me lavo las manos después y listo.
Yo: Bueno hijo ya casi… seguí así amor… tira bien para abajo el cuerito… dale seguí… haceme cosquillitas acá (agarrando su manito y haciendo que me toque entre los huevos y el pubis)… DALE seguí que ya casi sale hijito… ahhhh siiiiiii….
Trate de contenerme y no ser tan ruidoso, pero la verdad es que fue el orgasmo más fuerte que había tenido hasta ese momento.
El no paraba de masturbarme de la forma más amorosa que nunca nadie me había hecho, mi semen cayó en mi pecho, y en su manito. Le dije que pare y así lo hizo.
El estaba muy sorprendido de mi semen, lo tomaba entre sus dedos, lo olía, jugaba viendo y sintiendo su textura.
Yo: HIJO me hiciste la mejor pajita del mundo, te amo mi amor. El sonrió muy alegre y me dio un beso hermoso. (Siempre de piquito)
Valen: Vos también me hiciste una súper pajita jajaja. A mí me va a salir así como a vos pa?
Yo: si hijo cuando crezcas más te va a salir así. Viste que a vos te dio la sensación fuerte? bueno a mi también me dio, y es ahí cuando sale el semen.
Valen: Esta re buena jajaja (no paraba de jugar con mi semen) no pareció darle asco ni mucho menos. Agarro mi pene y como había hecho para sacarme gotas de precum, apretó y salió más semen, él lo olía, y tomo con la punta de su dedito y acercando lo a mi boca me dijo ¿a qué sabe?
Como es obvio, yo varias veces había probado mi semen, y es salado como todos sabemos.
Le chupe el dedito, para que vea que no debe tener asco y le dije que saladito, no es feo, y acto seguido, el volvió a tocar parte del semen y lo probó, me miro riendo
Yo: Y? viste que no es feo.
Valen: encogió los hombros e hizo un gesto como afirmando que no es feo pero tampoco es un manjar jajaja.
Como vi que tenía su pito duro le dije que si tenía ganas, se podía hacer otra vez otra pajita, mientras yo me iba a bañar.
Si les gusto, díganme si pongo lo que paso después que salí de la ducha jajaja me acuerdo y se me para al instante.
Saludos
Me reexcite y termine haciendome una paja. Si tenes mas historia con tu hijo contala.
Obviamente quiero más capítulos
Améeee tu historia, desde que empezó. Eres el mejor papá del mundo! Que maravilla de relación con tu hijo!
Que tierno Vale, siempre es bueno aprender de alguien tan cercano
Más historias , que genial relato con tu hijo, entre hombres debemos enseñarnos
Porfavor una 2da parte! hace un monton que vengo esperandola
ESTOY IGUAL ESPERANDO JAJ
Está rico, peeero… a muchas nos mojan los niños y me encantaría que sumes a la mami chupándole y todo eso 🤤 me pondría más la concha como sopa. Ojalá lo consideres, en serio sería genial.