fantasia con mi padre hecha realidad

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por martinpescador.
Este relato lo escribo porque necesito contarle a alguien esta experiencia que me paso hace seis meses con mi padre.

Primero que nada describirme tengo 18 años, rubio, ojos marrones claros, deportista, hago deportes desde niño y por eso tengo un físico bien trabajado, soy bien masculino aunque hace unos años que se que soy bisexual.

Todo comenzó cuando era niño, mis padres se divorciaron cuando a mis tres años.
No tengo recuerdo de ellos casados, si se por sus cuentos que tenían una pésima relación, vivían discutiendo por lo cual a su divorcio me mude con mi madre y me dejaban verlo solo una vez al mes.

Mi padre acostumbrado a la buena vida, no es el clásico deportista, solo se dedico a leer y comer, es medio gordo, pelado, una persona tranquila, y para nada pudorosa, desde que era niño lo veía desnudo, panza de cerveza, tiene un pene grueso, huevos grandes, no es un tipo atractivo pero siempre me ha dado mucho morbo, debe ser normal, no lo sé.

Cuando se divorcio de mi madre, se caso con su amante, tuvo dos hijas con ella, cada tanto salíamos a acampar, yo me quedaba en la carpa de él, siempre lo veía y me daba morbo, era una mezcla de asco con lujuria, hace un año se divorcio.

Hace un año hablando le conté que era bisexual, lo tomo muy bien, me dijo que no le importaba, que era su hijo y estaba todo bien, me sorprendió y me agrado, somos muy amigos
Hace seis meses decidí ir a visitarlo un fin de semana, en el día todo fue bien, cuando me fui a dormir a mi cuarto, cerré la puerta y me estaba empezando a masturbar cuando de pronto entro mi padre, se dio cuenta pero no me lo dijo, solo me dijo si quería ir a su cuarto a charlar.

Cuando llegue me tire en su cama y charlamos durante largo rato de la vida y se desencadeno en el sexo, me conto que no tenía sexo hace seis meses, que se vivía masturbando, la conversación continuo hasta que empezamos a hablar de fantasías, con putas, con enfermeras, el me pregunto cuál era la más difícil y ta yo dude pero mirando al techo se la dije, desde niño he tenido la fantasía de tocártela a él… se hizo un gran silencio en la habitación.

El me pregunto porque la tenía, y yo le conteste no sé, será admiración… lo que paso después cambiaría mi vida; de pronto el corrió las sabanas, estaba desnudo mirando al techo y me dijo “si es tan fácil no me importa”, no lo podía creer, sentí unos nervios que nunca había sentido, y ahí estaba su pija con la que tanto había fantaseado, sus huevos… le dije ¿estás seguro? Y me contesto que si, es solo tocarla.

Acerque mi mano y la agarre suave, toque su cabeza que estaba semi cubierta por su prepucio, no se que me paso solo se que empecé a tocarlo como masturbándolo, el me dijo “no va a pasar nada, no me gustan los hombres y tu eres mi hijo”, dude pero ya tenía una tan buena erección que no sé que me paso… baje de pronto y me la puse en la boca, en ese momento el me intento correr y me dijo que no, yo me opuse y se la empecé a chupar, esta flácida, tenía gusto a piss, era una sensación muy rara, el me volvió a intentar correr pero yo continúe y me di cuenta que se le empezó a poner tiesa, al final el dejo que lo siguiera haciendo, sentí como se puso dura en mi boca, la agarre con una mano, chupaba hasta donde podía y con la otra mano agarre sus huevos, después baje a sus huevos y los chupe con ganas, era una sensación muy extraña, él no decía una palabra, solo estaba con los ojos cerrados, se la seguí chupando un buen rato, tenía ganas de masturbarme pero solo quería tocar todo lo posible, después de un par de minutos sentí como puso rígidas sus piernas, empecé a chupar con más fuerza, el busco nuevamente correrme la cabeza pero yo continúe hasta que comencé a sentir un primer chorro de semen, era impresionante, largo varios chorros con fuerza, los cuales trague, yo se la seguí chupando pero en ese momento el me corrió con fuerza, me empujo, se levanto y fue al baño.

Yo no sabía qué hacer, me quede en la cama procesando lo que me había pasado, en ese momento salió de su baño y me dijo con una voz para nada amigable ándate para tu dormitorio.
Me levante y me fui sin mirarlo, al llegar a mi cuarto cerré la puerta me acosté y comencé a masturbarme, lo hice dos veces esa noche, cumplí mi fantasía mas prohibida… y esa no fue la última vez que paso algo con mi padre, ya se los contare…