GRACIAS A UN AMIGO DISFRUTE DE MI HERMANITA II
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
GRACIAS A UN AMIGO DISFRUTE DE MI HERMANITA II
Soy Richi otra vez, continuaré explicando las experiencias con mi hermanita Marta.
Llegó un día, que la suerte nos sonrió, mis padres se tenían que ir a un entierro de un familiar, fuera de la ciudad, así que me dejaban a cargo de mi hermanita, eran dos días fuera de casa, así que estaríamos solos. Mi cabeza empezó a pensar lo que podríamos hacer dos días para nosotros solos, era el paraíso.
Mis padres salieron de casa de mañana y se despidieron de nosotros, mi madre me dijo que me portara bien con mi hermana – seguro mamá, me llevaré la mar de bien, la cuidaré como ha una princesita – le contesté -. Así que nada más se fueron, me fui a la ventana, vi como salían del parking con el coche, y me fui corriendo a la habitación de mi hermana, le di un morreo de campeonato y me puse en la cama junto con ella, se me abrazó fuerte a mí y me llenó la cara de besos, sin nada más que decirnos, le baja las braguitas y le toque su panochita, estaba súper mojada, ella también había estado soñando con lo que haríamos los dos juntos; así que baja hasta su rajita y empecé a beberme ese néctar que destilaba, hasta que ella se corrió en mi cara; enseguida me bajó los pantalones del pijama y se metió toda mi rabo en la boca, y empezó a chuparlo como una loca; corriendo en su boca, saliéndole leche por las comisuras. Como teníamos todo el día y el siguiente, le dije – vamos ha disfrutar, así que vamos ha jugar – ella asintió.
Lo primero que hice, fue llevarme a mi hermanita a la bañera, ponernos los dándole una esponja y otra para mí, le dije – vamos la lavarnos a fondo el uno al otro – así que empezamos a enjabonarnos, yo pasé suavemente la esponja por sus tenitas, las cuales se endurecieron al momento, baje luego mi mano hasta su cueva, acariciándola suavemente, ella me cogió el pene y empezó a acariciarlo, entonces le dije que se me diera la espalda, entonces empecé a sobarle el culito, en especial empecé sobre su agujerito, primero con la esponja, después con los dedos, empecé a meterle un dedo, (estaba obsesionado de ver diversas películas eróticas en casa de un compañero, que se las cogía de su padre), ella lanzó un grito, y me dijo que parara, pero con mi otra mano empecé a pajear su panochita, poco a poco, acepto que le introdujera un dedo, empecé a entrar y salir sin dejar de pajearla, así mismo le iba mordisqueando el lóbulo de la oreja, en eso que ella sufrió un calambre y cayo sobre mi, los dos acabamos sentados dentro de la bañera, así que la levanté por su culo, lo abrí, y le metí mi verga, ella culeo al principio, y se quejó, pero poco fue adaptándose a mi aparato, poco a poco empecé a entrar y salir, ella empezó a gritar como una posesa y se corrió varias veces antes que yo.
Acabamos los dos tirádos en la bañera, salimos de ella y nos secamos, entonces le dije, – como tenemos la casa para nosotros solos, tu iras todo el día sin bragas, cuando quiera te la meteré, sea donde sea – ella asintió y se rió, y así fue durante todo el día, lo hicimos en el sofá, en el suelo, encima de la lavadora, con ella en marcha, quedamos exhaustos, así que nos fuimos a la cama pronto, – vamos a la capa de los papas – le dije – además, para más morbo, tu te pones un camisón de mamá y yo un pijama de papá – se puso a reír, así que busqué el camisón más provocador de mi madre, uno corto transparente, con braguitas tipo tanga, ella me escogió uno corto de seda para mí. Así que nos metimos en la cama y empezamos los juegos preliminares, empezamos con un 69, enseguida se corrió en mi cara, llegó un momento que me mordió y todo del placer que sentía. La puse a cuatro patas y la volví a ensartar por detrás, esta vez no se quejo, sino que al momento, fue ella la que marcaba el ritmo, al momento se corrió al mismo tiempo que yo, estábamos exhaustos, pero lo volvimos hacer, ella encima de mi, yo mordiéndole sus apetitosas tetas hasta que caímos rendidos y nos quedamos dormidos entrelazados…Al día siguiente, pondría en marcha mi última perversión, llamaría a mi amigo Fran para que viniera con su hermanita……
Excitante relato, yo recuerdo haber hecho algunas cositas con mi hermana menor, siendo yo adolescente y ella aún una niña hermosa,