HELEN: INCESTO TOTAL (MI DEGENERADA FAMILIA 5)
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por helenhot.
Aquella noche en que mi madre y yo experimentamos ese hermoso placer del sexo madre-hija, terminamos por revelarnos las travesuras que ambas habíamos iniciado, yo con mi padre y ella con mi hijo. Platicamos por un largo rato contándonos de cómo es que cada una se entregó a la lujuria con ellos, como era de esperarse, aquello nos puso bien calientes y como mi padre y mi bebito aun tardarían en regresar de su salida al table dance, nos entregamos a una nueva sesión de placentero y depravado sexo. Al finalizar, completamente felices, dichosas, lujuriosas, depravadas por haber iniciado aquello hablamos sobre lo que pasaría ahora que se habían dado esas cosas entre la familia…
Mama: Así que mi pequeña princesa, llevas ya mucho tiempo siendo la puta de mi nieto?
Yo: Si mami, han sido 4 años de dicha, me ha hecho tan feliz
Mama: Helen, amor, mira que yo siempre supe dentro de mí que tu serias una puta como yo, que la lujuria estaría presente en tu vida también, pero jamás llegue a imaginar algo así, que te entregaras a tu propio hijo.
Yo: Mami, todo fue repentino, el comenzó a despertar deseos prohibidos por mí, y yo sucumbí ante eso, jamás lo imagine tampoco, al principio si tuve mis dudas, remordimientos, pensaba que eso estaba muy mal, pero termine por comprender que entre mi hijo y yo nació un amor mucho más intenso, y ahora solo disfruto cada día a su lado.
Mama: Tiene mucho sentido todo eso que dices Helen. Sabes, por más raro que suene todo esto aunque no deja de maravillarme es algo que se me hace muy normal, no puedo explicarlo con palabras, solo sé que esto que está pasando en la familia de alguna madera es algo que debía de pasar.
Yo: Yo siento lo mismo mami, cuando descubrí el deseo que mi hijo tenía por mí, me sorprendió mucho, pero me alago, me excitaba pensar que mi bebe pudiera sentir deseo y lujuria por mí, ya te digo, tuve muchos pensamientos al principio pero al final no me resulto difícil entregarme a él, ser su puta, todo fue tan natural
Mama: Princesa, sabes algo? No sé porque tú nunca lo habías notado hasta ahora, pero yo siempre note algo especial en la forma en que tu padre te miraba, desde pequeña y más cuando eras adolescente, cuando tu cuerpo comenzó a cambiar y empezaste a convertirte en la hermosa mujer que eres, yo notaba como tu padre no podía dejar de verte, lo hacía con obsesión, te recorría con los ojos de los pies a la cabeza, hasta que llegó el momento en que estaba casi convencida de que era lujuria y deseo lo que había en su mirada cuando te veía y no se porque eso no me molestaba ni me ponía mal, por el contraria se me hacia lujurioso y excitante, es como si hubiera tenido el presentimiento de que algún día ocurriría todo esto que está pasando ahora.
Yo: Jaja, mami te lo juro, yo nunca lo ve venir, pensaba que esto sería solo con mi hijo, jamás pensé llegar a estar en una relación incestuosa y rica con mi padre y ahora también contigo, pero es hermoso, y pues yo tampoco mi imaginaba que tu fueras tan depravada y puta como yo, y mira, terminaste por ser la puta de tu nieto. Me encanta saber que eres una zorra degenerada como yo, y compartir esto, y ahora que lo pienso, creo que la lujuria corre por nuestra sangre…
Mama: Jaja, así es Helen, somos una golfas, y Juan debió haber heredado ese instinto de lujuria de tu padre.
Yo: Mami, ahora que vamos a hacer?
Mama: Continuar mi amor, empezamos algo que no podemos parar, debemos seguir disfrutando de este rico y depravado amor de familia que nos tenemos todos.
Yo: Jaja, mami estoy completamente de acuerdo contigo…
Y bueno, estaba decidido ahora que mi madre y yo habíamos tenido esa plática y ese encuentro sexual tan rico y abierto no quedaba más que ver hasta donde podríamos llegar, y siendo tan putas y degeneradas ambas sabíamos que llegaríamos muy lejos. No acordamos muchos detalles ni mucho menos un plan detallado, solo sabíamos que continuaríamos y las cosas simplemente se fueron acomodando, todo se dio muy natural y espontaneo, las situaciones no pudieron ser mejores, mi padre y mi bebito ni se imaginaban lo que estaba por ocurrir.
Esa noche me despedí de mi madre y me fui a mi habitación, completamente feliz por esa situación. Me fui quedando dormida, y no supe en que momento los hombres regresaron de su visita al table dance. Al día siguiente me desperté de madrugada, serían las 5 de la mañana y fui a cuarto de Juan pero al abrir la puerta es se veía profundamente dormido y emanaba un olor a alcohol, sin duda alguna que debió habérsela pasado muy bien con mi padre en el table dance, volví a cerrar la puerta y regrese a mi habitación, aún faltaba un poco para que amaneciera completamente, me volví a meter en la cama y no paso mucho cuando la puerta de mi cuarto se abrió y al girar la cabeza para ver quién era, mire a mi padre entrando despacio, con su pijama puesta. Cerró la puerta lentamente y se acercó a mí. Como ya estaba despierta gire mi cuerpo para saludarlo, el me sonrió y llego junto a mí, se sentó en la cama y se inclinó para darme un rico beso en la boca, él también tenía aroma a alcohol.
Papa: Buenos días princesa!
Yo: Hola papi, que haces despierto tan temprano?
Papa: No lo sé, simplemente me desperté y comencé a pensar en ti mi amor
En ese momento mi padre volvió a inclinarse y comenzó a besarme muy fuerte, con mucha pasión, metió su mano dentro de las cobijas y comenzó a acariciar mi sexo, yo lo tome de la cara con ambas manos para besarlo pasionalmente
Papa: Necesitaba verte Helen, pase toda la noche pensando en ti, quería estar contigo, había muchas mujeres hermosas en el table dance pero ninguna como mi hija, solo pensaba en ti mi zorrita hermosa.
Yo: Ay papi, que lindo, eres el mejor y más guapo papi del mundo
Seguimos besándonos por un buen rato, mi padre seguía manoseando con intensidad mi sexo que chorreaba su néctar, después de unos minutos sin decir nada mi padre se bajó un poco el pantalón de su pijama dejando salir su tremenda carne bien erecta y se la comenzó a jalar.
Papa: Mira como la tengo de dura mi amor, es por ti mi putita
Yo: Oh papi, que verga más hermosa
Entonces, mi padre me jalo hacia su verga, el seguía sentado en la orilla de la cama, y me jalo de tal forma que yo quede recostada de lado, y con mi cara justo en la verga de mi papi, sin pensarlo más y deseosa de devorarme ese tremendo pedazo de carne comencé a besarla y lamerla como loca
Papa: Así mi niña así, te encanta la verga de papa no?
Yo: Me enloquece papi…
Papa: Anda Helen, trágatela, sácame la leche con una tremenda mamada de esas que sabes dar
Yo: Si, siiiii quiero toda tu leche papi.
Enloquecida por el momento comencé a chupar con lujuria la verga de mi padre, bañándola de mi saliva y jalándola muy duro. Mi padre quieto las cobijas de mi cuerpo y comenzó a apachurrarme las nalgas y haciendo a un lado el hilo de mi tanguita me frotaba con sus dedos el ano y me dedeaba la chocha que escurría mi néctar, seguimos por un buen rato hasta que finalmente la leche de mi padre broto de su carne dentro de mi boca, la contuve y la exprimí toda hasta sentir la última gota salir, me saque la verga de mi padre de la boca y la disfruté, levantaba la mirada sonriéndole a mi padre indicándole con ese gesto de dicha lo mucho que me encantaba su cremita y como había disfrutado sacándosela de la verga. Pasado un rato nos empezamos a besar rico.
Yo: Papi, porque no salimos a caminar un rato al parque que está aquí cerca?
Papa: Pues, suena bien, no me he ejercitado desde que llegamos, pues anda princesa vamos
Mi padre salió de mi cuarto para irse a cambiar y yo me quede cambiándome en el mío, me puse un atuendo deportivo muy ajustado, un pantalón de licra que se me ajustaba muy bien en color negro y una chaqueta de mismo conjunto, que dejaba ver bien mis pechos. En su cuarto mi padre se cambiaba cuando mi madre despertó un poco y adormilada aun no to que se cambiaba, él le dijo que iría conmigo a caminar al parque, ella con un poco de sueño aun simplemente escucho y se quedó descansando en la cama. Y bueno, mi padre y yo salimos de la casa rumbo al parque, era muy temprano aun, el fresco aire de la mañana se sentía rico, al llegar al parque comenzamos a trotar y claro, ocasionalmente parábamos para darnos unos ricos besos, había poca gente y los que llegarán vernos no sabían que esos besos eran prohibidos…
Bueno en la casa mientras mi padre y yo estábamos en el parque la zorra de mi mami, no perdió el tiempo en tener su primer disfrute del día con m bebito, así que aprovecho el momento. A los pocos minutos que mi padre y yo nos habíamos ido, ella se levantó de la cama y salió hacia el cuarto de Juan, tenía puesta su bata de cama y debajo no llevaba sostén, solo la misma ropa intima del babydoll que había usado la noche anterior que un estaba húmeda del néctar que le salió por la lujuria con migo y que empezaba a mojarse nuevamente. Entro al cuarto de Juan que dormía profundamente, se acercó a su cama y se despojó de la bata, lentamente se metió dentro de las cobijas de la cama, mi bebe solo tenía puesto su bóxer.
La puta traviesa de mi madre debajo de las sabanas comenzó a acariciar la carne de mi bebe que tenía su erección matutina, cosa que mi madre comenzó a disfrutar. Mi bebe dormía tan plácidamente que no sintió nada hasta que con un rápido movimiento mi madre le bajo el bóxer a Juan, y comenzó a chuparle como perra en celo la verga, allí mi bebito despertó como espantado por una pesadillas solo para descubrirse en algo que parecía un rico y depravado sueño, inmediatamente levanto las sabanas de la cama y allí estaba su degenerada abuela comiéndose su carne.
Mama: Buenos días dormilón (le dijo con una voz muy sexy sonriéndole mientras le lamia los huevos)
Juan, aun adormilado y con esa reacción de cuando te despiertas de improviso por algo que se espanta, comenzó a reír, mirando a su abuela, no fue sino hasta que comenzó a despertarse bien que comenzó a disfrutar a pleno ese momento.
Juan: Abuela que estas…
Mama: Shhh, no digas nada mi amor, tu madre y tu abuelo salieron a caminar al parque, y aprovechando que nos quedamos solitos por un rato quise venir a darle los buenos días a mi nieto hermoso…
Juan: Oh dios, abuela, eres una puta, que rico, si chupamela, delicooooso!!
Mama: Mira que tremenda verga tienes Juan, oh siii
Mi bebe comenzó a hacer que mi madre se mentira toda su carne en la boca presionando su cabeza contra ella, por supuesto que mi madre disfrutaba atragantándose con la verga de su nieto, mi madre tenía la misma técnica para chupar vergas que yo, asfixiarse con ellas bien rico, bañarlas de saliva jalarlas duro y rico, muy lujurioso. Solo unos ricos gemidos se escuchaban, y unas obscenas palabras ocasionales, el disfrute de mi hijo al ver a la golfa degenerada de su abuela chupándole la verga era como estar en un muy rico y dulce sueño, mientas mi bebe observaba a mi madre comerse su verga no dejaba de pensar en lo hermosa que era, en cómo se parecía a mí y en lo increíblemente igual que le chupaba su vega a como yo lo hacía. Mi madre gemía como perra en celo en posición de perra mientras se chupaba la verga a su nieto, se daba placer a si misma frotándose su sexo que estaba muy húmedo. Pasado un buen rato mi madre comenzó a sentir que en cualquier momento la leche de mi bebito seria suya y comenzó a jalarle la carne con mucha intensidad gimiendo.
Mama: Dame toda tu leche bebe, tu abuelita quiere tragársela toda…
Juan: Si putita siiiii
Con un tremendo orgasmo mi hijo le dio a mi madre lo que quería y ella comenzó a saborear ese manjar prohibido, no dejo que se desperdiciara nada recogiendo cada gota del delicioso semen de su nieto por donde hubiera caído. Después mi madre subió un poco más para quedar recostada junto a Juan, comenzaron a besarse con lujuria mientras mi madre acariciaba la verga de mi bebito, él también le acariciaba el sexo notando que estaba tremendamente mojado, la ropa íntima de mi madre estaba bien mojada.
Mama: Nada mejor que empezar el dia con una buena dosis de proteínas de mi nieto…
Juan: Jeje, abuela me encantan tus chupadas, son muy ricas!
Mi madre vio en ese momento una buena oportunidad de darle a entender algo a mi bebito…
Mama: En serio Juan? Apoco no hay nadie más que te la chupe así de rico? Yo creo que sí! Debe haber alguna mujer igual de puta que yo que sea capaz de darte este placer tan rico con la boca, yo siento que ya antes has experimentado este placer…
Al decir eso, mi madre había provocado en mi bebe esa misma sensación que provoco en mi cuando comenzó a hacerme sus comentarios con un mensaje oculto, Juan, se quedó un poco desconcertado, eso le sonó muy raro y obviamente si había otra mujer que se la chupaba así de rico…
Juan: Porque lo dices abuela?
Mama: No lo sé mi amor, yo solo digo que talvez ya antes otra mujer, alguna chica con las que has estado te la haya chupado así como yo…
Juan: Pues…
Mama: Yo creo que si mi amor, pero bueno, ahora que te parece si le das a tu abuelita una rica chupada en su chocha!!!
Mi hijo quedo un poco confundido por esos comentarios de la cerda de mi madre, pero en fin, comenzó a complacerla, la recostó en la cama y le quito la ropa íntima y abriéndole las piernas comenzó a devorarle el sexo, su néctar tan dulce…
Mientas aquello ocurría en la casa, mi padre y yo caminábamos y trotábamos por el parque, en cierto momento que íbamos trotando, mi padre se retrasó un poco para admirar mi culo, yo volteaba a verlo y le sonreía pícaramente, después acelero el paso para alcanzarme y me atrapo entre sus brazos me giro para quedar frente a él, y tomándome con fuerza de las caderas me levanto con fuerza y me cargo tomándome de las nalgas y yo puse mis piernas y brazos alrededor de él, comenzó a darme unos besitos muy lindos…
Papa: Que hermosa eres Helen, me vuelves loco, ese culo tan redondo y rico que tienes me encanta…
Yo: Jaja, pues qué bueno que te guste papi, puedes hacer con él lo que te plazca, a mí me vuelves loca cuando me metes tu vergota tan rica por atrás, me siento en el paraíso.
Papa: Te amo princesa! Me encanta esta relación tan hermosa e intensa que comenzamos, eres una mujer increíble, me recuerdas mucho a tu madre cuando tenía tu edad, eres tan parecida a ella…
Yo: Mmmm papi, que bueno que te guste tanto…
Después de un momento mi padre me bajo y comenzamos a caminar tomados de la mano, fue entonces que yo comencé a darle insinuaciones como la puta de mi mami lo había empezado a hacer con mi hijo en la casa. Empecé a preguntarle sobre la noche anterior en el table dance con mi hijo y me conto algunos detalles, en general me dijo que se la pasaron muy bien, que a Juan le había encantado esa salida y que debí haber visto como se devoraba a las chicas que allá trabajan con la mirada, que le hicieron varios bailes privados y bueno, ya saben, las cosas que los hombres hacen en esos lugares. Y luego cambien el tema…
Yo: Papi, hablando de mi mami, que sientes por ella? Es decir después de tantos años de casados, aun la amas?, aún hay fuego entre ustedes?
Papa: Pues claro Helen, sigo amando a tu madre como el primer día, siempre ha sido una mujer increíble como tú, por eso me la recuerdas tanto, no solo en lo físico, tu forma de ser es idéntica a la de ella, cuando la conocí me cautivo su belleza y cuando descubrí que era una mujer muy cachonda y lujuriosa me convencí que debía hacerla mi esposa, y por supuesto que aún hay fuego en nuestra relación, la edad no nos ha hecho desearnos menos, por el contrario seguimos disfrutando intensamente jaja
Yo: Uy, qué lindo papi, si yo me hubiera casado me hubiera gustado que hubiera sido con un hombre como tú, atractivo, intenso, cachondo, y con una verga tan rica como la tuya para complacerme excelente.
Papa: Pues cualquier hombre que se hubiera casado contigo hubiera sido afortunado, pero bueno, todos lo que hemos tenido la oportunidad de poseerte somos muy afortunados jaja, me siento dichoso de ser ahora algo más que tu padre…
Yo: Y yo muy feliz también papi.
Papa: En verdad nunca has pensado tener una pareja estable, ya sé que tu prefieres disfrutar así como lo has hecho, pero ni tan siquiera lo haz considerado?
Yo: Pues, debo confesarte algo…
Papa: Dime pequeña?
Yo: Si hay un hombre muy especial en mi vida, me hace sumamente feliz, me ama intensamente y yo a él, he tenido una relación con el por casi 4 años, y ha sido increíble, de hecho me recuerda mucho a ti, jaja, es apuesto, fuerte y por supuesto también es increíble en la cama, me da un placer tan rico que ningún otro hombre me había dado hasta que tú me hiciste tu putita, desde la primera vez que estuve contigo supe sentí lo mismo, algo muy especial, rico e increíble…
Papa: En serio? Helen, que bueno, y quien es ese hombre? Si te hace tan feliz porque no has pensado en que con el pudieras hacer una vida de pareja?
Yo: Pues… es complicado de explicar por ahora papi, pero de cierta forma si he tenido una relación un poco más formal de pareja con él… y no se pudiera ser que algún día lo conocieras, estoy segura que te sorprenderías de conocerlo… (Se lo dije muy picara)
Papa: A si?
Yo: Si, papi, bueno creo que ya es hora de regresar a la casa, mi mamá y Juan ya se ha de haber despertado y tengo que preparar el desayuno, anda te reto a una carrera a la salida del parque si me ganas te daré un premio después…
Papa: Oh pequeña traviesa, no se diga más…
Y bueno, mi papi y yo corrimos riendo, felices y por supuesto que él me gano la carrera, por lo cual debería cumplir, y premiarlo, pero su premio se lo daría después. Antes de llegar a la casa, mi padre se desvió un poco para ir a comprar su periódico de ese día, entonces yo llegue primero a la casa, y desde el momento en que entre, escuche los gemidos de mi mami, subí lentamente las escaleras y a llegar al cuarto de mi bebito abrí despacito y muy poquito la puerta que no estaba bien cerrada, y fue cuando vi esa hermosa, y depravada escena, la puta golfa de mi madre estaba acostada en la cama de Juan y el devoraba su sexo, la excitación me invadió y tuve un deseo de unírmeles, sin embargo debía mantener la calma, ese momento llegaría tarde o temprano. No sabía cuánto tiempo llevaban así, y si tardarían más, mi padre podría llegar a la casa en cualquier momento y con los gemidos tan fuertes de mi madre descubriría aquello. Así que volví a bajar las escaleras de la casa y desde abajo grite: “JUAN, MI AMOR, YA DESPERTASTE?” Fue entonces que al percatarse de que ya estaba en casa se detuvieron. Volví a gritarle a mi hijo lo mismo, hasta que me respondió: “SI, YA MAMI”. Aunque ya sabía lo que ese par de degenerados hacían, tuve que fingir y seguir en esa actitud de que había acabado de llegar a la casa: “PORFAVOR MIRA SI YA ESTA DEPIERTA TU ABUELA Y DILE QUE ME VENGA A AYUDAR CON EL DESAYUNO”
Y bueno, así fue como mi madre y Juan, terminaron ese encuentro matutino, me fui a la cocina y a los pocos minutos bajo mi madre, y cuando entro a la cocina mi sorpresa fue grande cuando la mire llegar con un short color blanco muy ajustado que permitía observar que debajo llevaba puesto un calzoncito tipo bikini de encaje negro y una playera blanca sin mangas y sin sostén, casi se le podían ver los pezones atreves de la playera, se me acerco y me abrazo dándome un rico beso en la boca y nos abrazamos.
Mama: Buenos días mi zorrita hermosa!
Yo: Mmm buenos días mami!
Después de saludarnos de esa forma tan rica me soltó y me la quede viendo
Yo: Mami, mira que atrevida has bajado! Casi te puedo ver lo pezones y la ropa íntima.
Mama: Jaja, lo se Helen, esto es atrevido, pero creo que es una buena forma de empezar a preparar el terreno, tu sabes de que hablo, jaja
Yo: Jaja, me encantas mami, eres una puta ofrecida, que buena idea tuviste…
Bueno, nos pusimos a preparar el desayuno, cuando mi padre llego a la casa, y entro a la cocina para saludar a mi mami, y al notar la forma tan cachonda y sexy en que estaba vestida le sonrió, no dijo nada al respecto pero se pudo notar en su mirada que le encanto verla así. Mi padre se fue a la sala a ver la tv y a leer su periódico. Mientas tanto yo le conté a mi mamá lo que vi cuando llegue a la casa y que me puso loquita, ella rio y me dijo que no lo noto, pero ahora que se lo había dicho la excitaba que los hubiera visto por un rato. Le conté que papa fue a que le chupara la verga cuando despertó y a grandes rasgos lo que platicamos en el parque. Mi mami estaba encantada escuchando todo eso, y ella también me conto lo que paso en nuestra ausencia. Las cosas no podían ser más depravadas entre nosotras, platicando las travesuras que hacíamos con mi padre y mi hijo y sintiéndonos tan putas jaja.
Cuando ya estábamos por terminar de preparar el desayuno le dije a mi madre
Yo: Mami, después del desayuno le quiero dar a mi padre su premio por haberme ganado la carrera, necesito que entretengas a Juan, mientras tanto, puedes hacer eso por mí?
Mama: Por su puesto Helen, con gusto mi niña putita jaja y que le vas a dar de premio a tu padre?
Yo: Algo que a él lo enloquece, jaja…
Y bueno, llego la hora del desayuno, cuando mi hijo bajo de su cuarto su mirada de sorpresa y sus ojos de lujuria al vernos a su abuela y mi era tan rica, la golfa de mi madre como ya les había dicho, y yo con mi conjunto deportivo muy ajustado, tanto para mi padre como para mi hijo era un placer visual vernos a las dos así, mostrándoles nuestros cuerpos que eran el objeto de su deseo y lo ponían loquitos. Durante el desayuno los pensamientos de lujuria de los 4 eran intensos, platicábamos de cualquier cosa como “una familia normal”, las miradas de todos eran casi descaradas, las cosas iban tomando un rumbo increíble.
Casi al final del desayuno mi madre le dijo a mí bebito:
Mama: Juan, hijo, porque no vamos ahora tu y yo al parque, es bueno caminar después de comer, y ya que tu abuelo y tu mamá fueron en la mañana pues ahora vamos nosotros…
Juan: Claro, si abuela, suena muy bien…
Que buena idea se le había ocurrido a mi madre para hacerle el favor que le pedí.
Al terminar el desayuno, mi madre y Juan se fueron a sus cuartos a vestirse, mi madre uso un atuendo deportivo que lucía muy bien en su cuerpo maduro, ese cuerpo de la mujer de 54 años que es pero que parecería el de una mujer mucho más joven, una rica fruta madura. Mientras tanto yo me fui a la cocina a lavar los platos. Mi padre sabía que cuando mi hijo y mi mami se marcharan estaríamos solos… esperaba con impaciencia en la sala. Mi madre tardo un poco más alistarse pues quiso tomar una ducha, cuando mi hijo estuvo listo, bajo y se sentó en la sala con su abuelo. Alcanzaba a escuchar que comentaban de lo de la noche anterior. Y bueno cuando termine de lavar los platos salí de la cocina y me dirigí a mi cuarto, le mande un mensaje por celular a mi padre, simplemente decía: “CUANDO MAMÁ Y JUAN SE MARCHEN SUBE A MI CUARTO, TU PREMIO TE ESPERA…”
Así que, por fin, mamá estuvo lista bajo a la sala donde Juan la esperaba y se marcharon al parque. Inmediatamente mi padre subió a mi cuarto, yo lo esperaba impaciente, cuando abrió la puerta y entro, allí estaba yo, acostada boca abajo sobre mi cama aún vestida con mi atuendo deportivo, con la cabeza levantada voltee a ver a mi papi…
Yo: Ven por tu premio papi…
Inmediatamente me puse en 4, quedando como la perra sucia que soy, mi padre se acercó a la cama y se subió, se arrodillo detrás de mí y comenzó a acariciar mi culo, sus manos se deslizaban suavemente por la licra de mi pantalón deportivo que se encajaba en la raya de mu culo, admiraba ese culo que tanto le gustaba
Papa: Oh Helen, que hermoso…
Yo: Te gusta tu premio papi, mi culo…
Papa: Sabes que me encanta princesa…
Yo: Anda papi, disfrútalo…
Mi padre se inclinó y comenzó a besar mi culo sobre el pantalón, pasado un rato se despojó de toda su ropa y comenzó a frotar su enorme carne bien dura sobre mi culo, sin quitarme el pantalón ni nada de ropa, yo seguía en 4. Yo gemía como perra en celo, sintiendo la verga de mi propio padre sobre mi culo, y me enloquecía, el no paraba de decirme que era una puta y cosas sucias, pasados unos minutos comenzó a rasgar mi pantalón, hasta hacer el orificio lo suficientemente grande para hacer a un lado el hilo de mi tanga, lamia mi ano y lo escupía insertando dos dedos en él, lo que me provocaba un placer increíble.
Yo: Si cabron, siiii te encanta el culo de tu hija verdad degenerado?
Papa: SI puta zorra, mi hija tiene un increíble culaso, mmmm que rico hoyo tienes puta, te lo voy a romper bien rico, te gusta verdad perra?
Yo: Si cabron, si papi, tu verga en mi ano se siente deliciosa…
Así que mi padre acomodo la cabeza de su verga en mi ano, se escupía en la mano y embarraba su saliva en su verga, comenzó a metérmela de a poco hasta que sintió que ya estaba bien acomodada y me dio una tremenda estocada, enterrando toda su carne con furia en mi culo, yo di un gran grito de placer y comenzó a martillarme mientras me daba unas suaves pero firmes nalgadas, me apretaba las caderas.
Yo: Ay si, duro cabron, dámela duro…
Papa: Que culaso princesa, siiii, eres toda una puta guarra.
Siguió martillándome el culo por unos minutos, después me la saco, y se puso de pie sobre la cama, yo gire y me fui directo a la carne, él me tomaba del cabello con fuerza y me hacía que me asfixiara con su verga, cuando ya no podía más me la sacaba de la boca y los chorros de mi saliva caían sobre la chaqueta de mi atuendo deportivo, se escurrían por sus huevos, se agarraba la verga con una mano mientas con la otra me sostenía fuerte del cabello y frotaba toda su verga en mi cara, mi rostro estaba bañado en mi propia saliva, era algo muy depravado, mi padre era totalmente un depravado justo con mi hijo, tenía la misma forma de hacerme tragar su carne que Juan. Eso me enloquecía.
No había el mas mínimo respeto entre mi padre y yo cada vez que me hacia su puta. Después de gozar con mi boca la carne de mi padre me puse de pie besándolo como loca, con su verga en mis manos, y sintiendo sus dedos entrando y saliendo de mi ano y mi chocha, comencé a bajar el cierre de mi chaqueta deportiva, no usaba sostén, así que mis pechos quedaron al descubierto.
“Ven acá pinche degenerado”, lo hice que se sentara en la orilla de la cama y yo me arrodille, para mastúrbale la verga con mis tetas, por unos minutos no hubo palabras, solo gemidos de ese placer lujurioso que nos daba ese momento tan sucio entre un padre y la puta de su hija.
Yo mira a mi padre feliz, llena de lujuria, le sonreía le escupía la verga mientas se la masturbaba con mis pechos, el disfrutaba, no para de repetir “PUTA, ZORRA, GOLFA”. Pasado un rato mi padre se levantó de la cama, me tomo con fuerza y me levanto por completo girándome para quedar con mi sexo en su rostro y su carme en mi boca, comenzamos un 69, pero en el aire jaja, mi papa estaba de pie sosteniéndome mientras yo de cabeza le comía la verga con fuerza, mi padre mostraba tremenda fuerza muscular para sus 58 años, todo un macho. Seguimos así hasta que me hizo gritar al sentir un rico orgasmo, la cara de mi padre estaba toda bañada en mi dulce néctar, mientras gemía seguía con la carne de mi padre en la boca y finalmente luego de unos minutos lo hice eyacular, su leche se derramaba de entre mis labios escurriéndose por mi cara, aún estaba suspendida en el aire sostenida por mi padre.
Finalmente y terminada la tormenta de lujuria y depravación mi padre me bajo suavemente sobre la cama. El me miraba de pie junto a la cama sobándose su verga y yo sonriendo feliz lo miraba a él. Me puse de pie y camine hacia mi tocador, me mire en el espejo, mi cabello alborotado, mi cara bañada con una mezcla de mi saliva y el semen de mi padre, mi maquillaje todo escurrido por mis mejillas, me encantaba verme así, me ponía muy loca, me hacía sentir una puta sucia. Por el reflejo del espejo miraba a mi padre parado junto a la cama acariciándose su carne mientas veía mi culo y a la degenerada golfa de su hija lleno de placer, lujuria y amor, de un especial y rico amor de padre.
Yo: Mira como me has dejado papi, soy un desastre jaja
Papa: Te ves hermosa mi amor, muy sexy y muy puta jaja
Y bueno, decidimos tomar unas rápidas duchas juntos, en la cual nos besábamos y nos manoseábamos rico. Mientras aquello ocurría en casa, en el parque la lujuria entre mi madre u mi bebito también se hizo presente.
Llegaron al parque y comenzaron a caminar, charlando cosas ricas, ya pasaban de las 9 de la mañana y había más personas en el parque, cosa que limitaba a la perrita de mi madre y a mi bebito degenerado en sus demostraciones de amor, además de la evidente diferencia de edad que ante los ojos de las personas sería algo súper raro, ya saben…
Sin embargo mi bebe no dudo en tomar de la mano a mi madre, cosa que a ella le pareció linda y no sería polémico a los ojos de los demás. Caminaban disfrutando el momento, es un parque que está cerca de mi casa, es grande con muchos árboles y un par de lagunas artificiales pequeñas, en fin un lindo lugar.
Juan: Abuela, es increíble, jamás imagine llegar a lo que ha pasado entre nosotros…
Mama: Nadie lo hubiera imaginado bebe, anoche cuando saliste con tu abuelo pensaba justamente en eso, aún recuerdo cuando naciste, el hijo de mi hija, que felices fuimos tu abuelo y yo de tener un nieto, es simplemente increíble que haya pasado esto entre nosotros, mi propio nieto me ha hecho su puta jaja, me encanta, me mojo solo de pensarlo…
Juan: Jaja, me imagino que si abuela, jamás habría imaginado que mi abuela fuera una mujer tan caliente y puta, eres increíble.
Mi madre aprovecho ese momento para hacerle otro comentario a Juan, de esos que ella sabe hacer con suspicacia provocando confusión.
Mama: Muchos dicen que Helen es un retrato mío, tu qué opinas Juan, tu mami se parece mucho a mí?
Juan: Demasiado abuela, en verdad es un retrato tuyo.
Mama: Jaja, pues sí, yo también lo creo, ella es idéntica a mí, en todo no crees, en todo…
Al escuchar ese comentario y por el tono de voz y la mirada picara de mi madre Juan, tuvo un escalofrió que le recorrió todo el cuerpo, mi madre había despertado incertidumbre en mi bebito, él estaba a punto de cuestionarla al respecto cuando mi madre inteligentemente le cambio de una manera muy rica el tema…
Mama: Juan, amor, sabes que se me acaba de ocurrir…
Juan: Que abuela?
Mama: Estamos en un parque, porque no nos ponemos traviesos como lo que me contaste de aquella chica que fue tu novia en la secundaria…
Juan le sonrió pícaramente
Juan: Mmmm abuela!
Mama: Anda vamos a buscar un buen lugar…
La puta golfa de mi madre tomo a mi bebe de la mano y comenzaron a caminar, no tardaron mucho, mi madre vio un lugar perfecto, un gran árbol con buena sombra, plantas alrededor, un lugar ideal, no pasaban muchas personas y la vegetación les brindaría un buen escondite.
Mama: Ven mi amor, aquí parece bien
Se sentaron recargados en el árbol, mi madre volteo para todos lados y una vez que confirmo que tenían cierta privacidad, inmediatamente comenzó a acariciar la carne de mi bebe sobre su pantalón deportivo, el también comenzó a frotar su sexo, se miraban y sonreían, empezaron a darse unos pequeños besitos en la boca, la situación era excitante para ambos.
Cuando mi madre sintió la verga de su nieto bien dura, metió la mano dentro de su pantalón y la comenzó a jalar lentamente, empezaron a besarse un poco más intenso, de cuando en cuando ambos abrían los ojos y volteaban a ver que nadie los descubriera. Poco a poco la excitación, el momento el lugar los fue llenando de lujuria, sin pensarlo, perdieron la noción, se olvidaron del lugar donde estaban y comenzaron a besarse con una tremenda pasión y lujuria, la lengua de mi madre jugaba con la de mi bebe, el intercambio de saliva era riquísimo, la mano de mi madre jalaba más fuerte la carne de Juan. Mi madre comenzaba a gemir mientras sentía como mi hijo acariciaba su sexo sobre su pantalón deportivo.
Mama: Pero que dura la tienes ya bebe, que hermosa verga tienes, me encanta jalarla…
Juan: Oh si, tu mano se siente tan bien abuela, que puta eres
Mama: Esto es mejor que aquello con esa chica de la secundaria no?
Juan: Definitivamente, no se compara
Mama: Mi amor, quiero tu leche, quiero chupártela aquí mismo, la necesito con locura…
Juan: Abuela pero eso es mucho…
Mama: Tu solo cuida que nadie venga por aquí…
Y sin más, mi madre comenzó a bajarle un poquito el pantalón deportivo a mi bebe, lo suficiente para que su verga pudiera quedar al descubierto, acomodo el resorte del pantalón por debajo de los huevos de mi bebito, mirando su verga con lujuria, no pudo más y se inclinó para comenzar a devorarla, Juan no daba crédito a eso, en plena luz de día y en el parque la cerda degenerada de su abuela le comía la carne. Una situación muy excitante sin duda. Juan gemía lentamente, disfrutaba sin perder atención a los alrededores, miraba con lujuria como su vuela se la chupaba.
Mama: me enloquece esta verga mi amor, me he vuelto adicta a tu vergota mi bebe…
Juan: Si, oh si abuela, no puedo creer que estés haciendo esto aquí, que rico…
Mama: Soy toda una puta bebe, me encanta hacer locuras…
Juan, recordó en ese momento que él y yo habíamos hecho locuras similares en el pasado, lo seguía enloqueciendo nuestro tremendo parecido en todos los aspectos.
Mi bebe comenzó a tomar con una mano la cabeza de mi madre y la empujaba hasta que sus labios chocaban con sus huevos, la asfixiaba con su carne, igual que lo hacía con migo, cuando mi madre no podía más la liberaba un poco y su saliva escurría a chorros por la carne y los huevos de mi bebe. Para mi madre también era sorprendente la lujuria de mi hijo, idéntica a la de mi padre, la misma forma de hacerla tragar su verga, yo ya lo había comprobado también jaja.
Así siguieron por varios minutos. Hasta que finalmente mi madre ordeño a mi bebito tragándose toda su lechita dulce, cuando termino su manjar le dio unos besitos en la verga a Juan y la volvió a meter dentro de su pantalón. Se dieron unos besos ricos y se quedaron bajo aquel árbol disfrutando silenciosamente el momento, el calor, la briza la sombra y ese amor depravado y lujurioso llenaban el ambiente. Simplemente se quedaron por un buen rato allí. Ambos pensaban en lo increíble de aquella prohibida relación que habían iniciado.
Pasado un buen rato mi madre pensó que para ese momento yo ya debía de haber terminado de hacer travesuras con papá. Y le dijo a mi bebe que regresaran a casa. Cuando llegaron, mi padre y yo habíamos terminado hacia unos minutos de bañarnos y cada quien estaba en su cuarto. Mi hijo se fue a tomar una ducha. Cuando mi madre entro a su cuarto mi padre estaba recostado en la cama recién bañado y aun no se vestía, solamente tenía puesta su bata de baño. Mi madre cerró la puerta y se dirigió a él. Se subió en la cama sobre él y comenzaron a besarse como locos, mi padre comenzó a manosear el hermoso culo de mi madre.
Mama: Desde que legamos has estado muy tranquilo mi amor, no me has dado lo que a mí me gusta?
Papa: Jaja pues lo mismo dio de ti Aidé, me estas descuidando…
Mama: Te estoy descuidando?
Y así mi madre y mi padre comenzaron tener un rico rato íntimo, encendieron la televisión y subieron un poco el volumen, le dieron rienda suelta a su amor y su lujuria, mientras lo hacían cada uno pensaba en todo lo que estaba sucediendo, mi padre pensaba en lo puta que ramos su esposa y su hija, mi madre pensaba en toda esa lujuria de mi bebito idéntica a la de su esposo. Claro, mi padre ignoraba que para esas alturas tanto mi madre como yo ya sabíamos todo lo que estaba pasando. Y así el día transcurrió con “normalidad” sin embargo en el aire se respiraba la lujuria. Las cosas se iban a poner más intensas en los próximos días…
Hola bebes! Que tal? Espero estén disfrutando de esta serie de relatos fantasioso que su amiga Helen escribe para ustedes con mucho amor y lujuria. Nuevamente les aclaro que esto es producto de mi imaginación, pero me encantaría que fuera real. Para quienes aún no me conocen les comento que en la vida real si tengo una relación incestuosa con mi hijo Juan, dense una vuelta por mi perfil donde encontraran todos mis relatos. Un gusto bebes ojala se pongan cachondos y lujuriosos con mi historia, un grandísimo beso, hasta la próxima!
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