HELEN: Padres amorosos 3
Hola mis queridos y hermosos lectores, continuamos con la tercera parte de esta serie de relatos que he llamado “padres amorosos”, empezado justo donde terminé el anterior. .
…Juan se sentó a mi lado y empezamos a platicar:
- Que rico cae ahorita está cerveza mi amor, quede exhausta, todavía me duele mi culito jaja
- Si mi putita hermosa, estivo riquísimo como siempre, pero esta vez como que sentí algo diferente, no sé qué…
- Me pasa igual amor, todas y cada una de nuestras cogidas son maravillosas, pero esta tuvo un toque más intenso, tienes razón
- Fue especial, diferente
- Mm, sabes, creo que se porque
- ¿A sí? ¿Por qué?
- Por Mya jaja
- Oye tienes razón
- Si mi vida, eso fue, no se tú, yo creo que también, pero a mí me excito muchísimo hacerlo con Mya presente por así, decirlo, desde que nació siempre lo hemos hecho en el cuarto y ya por las noches, y si Mya despierta interrumpimos y después seguimos, y muy rico, pero en esta ocasión yo creo que eso fue lo que lo hizo más especial y rico.
- Definitivamente coincido contigo en todo lo que dijiste jaja, fue muy rico y excitante que Mya estuviera presente
- Uy si mi amor, y sobre todo no dejo de sentirme sorprendida como es que justo en el momento que me recargue en el corral y empecé gemir y gritar Mya empezó a sonreírme y como se movía como si estuviera feliz de escucharme gritar de placer y ver mis caras de placer jaja
- Pues yo no la vi directamente pero cuando me dijiste que estaba sonriendo pensé lo mismo jaja, se ve que va a ser una niña súper inteligente como su mami hermosa, y además de alguna manera no sería la primera vez que nos escucha, cuando estabas embarazada y sobre todo ya en los últimos meses seguramente nos escuchaba dentro de tu vientre
- Oye si mi amor, tienes razón, te acuerdas como muchas veces mientras estábamos en nuestros momentos de amor se movía y daba pataditas jaja no cabe duda que desde entonces ya se ponía feliz de saber que sus padres se aman tanto, ya sabe desde mi vientre lo mucho que nos amamos y con qué pasión tan rica lo hacemos…
Y bueno mis queridos lectores la plática siguió por un poco más de tiempo sobre lo que había pasado esa tarde. Mi hijo y yo nos sentíamos sumamente excitados por haber tenido sexo en la presencia de Mya, aparte de que por raro que parezca los dos estábamos convencidos que desde el momento mismo en que la concebimos y durante todo mi embarazo Mya disfrutaba también de los momentos de amor y lujuria entre su padre y yo. Es raro de explicar, talvez hasta increíble, pero desde ese día Juan y yo nos convencimos de eso.
después de una buena platica sobre el tema y tres cervezas mi bebe y yo empezábamos a ponernos calientes nuevamente, nos dimos cuenta porque empezábamos a darnos besos muy cachondos y a tocarnos muy rico, para ese momento ya habíamos puesto nueva mente a Mya en el corral, estaba despierta y jugando con sus pequeñas manitas.
Entre beso y beso, caricia y caricia las cosas se pusieron intensas, me senté en las piernas de mi hijo y con mis brazos rodee su cuello mientras el manoseaba a placer mi cuerpo, mu culo, mis pechos mi coño que empezaba a ponerse húmedo y caliente nuevamente.
- Quieres más he putita
- Mm sabes que si bebe y no te hagas que por lo que se ve y se siente tú también jaja
Afortunadamente para mí, que soy una adicta al sexo, mi hijo siempre ha tenido una energía increíble, siempre me ha aguantado el ritmo jaja, hace ejercicio y se alimenta bien, se mantiene en buena forma y eso le ayuda mucho.
Así que los dos sabíamos que estábamos por desatar otra tormenta, pero esta vez sería aún más especial.
- Entonces bebe, ¿estás listo para darme más?
- Ms que listo, la pregunta es si tu estas lista para que te coja bien duro putita hermosa
- Sabes que siempre estoy lista para tu verga mi niño depravado
Comenzamos a fajar como locos, ya estaba sentada sobre las piernas de mi bebe, pero en ese momento me acomodé de tal forma que mis piernas quedaron a los lados de él, mirándolo de frente, su verga ya estaba dura, y comencé a frotar mi coño sobre ella, mi bebe me apretaba con firmeza el culo mientras nos besábamos con mucha pasión. Fue en ese momento que una idea picara me cruzo por la mente y entonces sin dejar de besar del todo a mi bebe mientras me manoseaba y movía mis caderas frotando mi sexo sobre su verga le dije con un tono muy cachondo.
- Oye bebe
- Dime zorrita
- Y si nos vamos al cuarto con a Mya para que nos haga compañía. Creo que no tiene nada de malo que esté presente cuando nos amamos.
- Mm eres una guarrita mami, me parece maravillosa idea…
Entonces nos levantamos del sillón, tome a Mya entre mis brazos y la saque del corral y nos dirigimos los 3 al cuarto. Juan y nos habíamos quedado desnudos desde la cogida anterior y así llegamos a nuestro cuarto. Al entrar en él, le dije a mi bebe que se acostara en la cama, cuando se acomodó, puse a Mya sentadita junto a él, Juan la sostenía con su mano para que no fuera a voltearse. Y entonces me subí a la cama y al otro lado de mi hijo y empecé a besarlo con pasión mientras con mi brazo extendido acariciaba y jalaba su verga, poco a poco empecé a bajar besando el fuerte y marcado pecho de mi bebe pasando por su abdomen hasta llegar a su verga y comenzar a mamarla, me llenaba de lujuria estar chupándole la verga a mi bebe en presencia de nuestra hermosa princesa Mya, por supuesto que a mi hijo también.
La beba seguía sentadita a un lado de su padre quien la sostenía para mantenerla derechita y que no se fuera a voltear. Entonces comencé a hablarle a Mya con una voz de ternura, ya se imaginarán, como las madres suelen hablarle a sus bebes, muy cursi y meloso.
- Mm mira mi amor que rica y hermosa verga tiene tu papi, esta deliciosa, mira que grande y dura esta!
Talvez no me lo crean, pero en ese momento Mya comenzó a sonreír y a agitar su manitas como aplaudiendo, Juan y yo nos sorprendimos un poco y comenzamos a reír y Juan comenzó a seguirme la corriente.
- Mira mi amor que putita es tu mami, desde que estabas en su pancita y desde mucho antes le ha encantado comerse toda mi verga, mírala que buena es
La beba sonreía y en verdad parecía estar feliz acompañando a sus pervertidos papis en esa rica sesión de amor y lujuria entre madre e hijo.
- Te voy a enseñar cómo me cabe toda en la boquita mi amor.
Empecé a devorar la rica verga de mi bebe como siempre, toda, cada milímetro, asfixiándome con ella, la metía una y otra vez en mi boca derramando y bañándola con mi saliva tibia. Juan me acariciaba la cabeza y gemía de placer mientras seguía sosteniendo el cuerpecito de Mya sentadita a su lado. En verdad era increíble que Mya estuviera tan tranquila y sobre todo que parecía estar tan feliz acompañándonos.
Después de un rato de chuparle la verga a mi bebe, me levante sobre la cama y me acomode sobre Juan para hacer un 69.
- Enséñale a tu hija como te comes mi coño mi amor
- Mm con gusto mami
Mientras Juan seguía sosteniendo a Mya comenzó a devorar mi sexo, bebiendo mi néctar, lamiendo mis labios y mi clítoris haciendo dar tremendos gemidos de placer mientras yo seguía succionando su verga. Ocasionalmente giraba la cabeza y miraba hacia atrás para ver a Mya y notaba que seguía sonriendo y moviendo sus manitas como aplaudiendo lo que sus depravados y amorosos padres hacían frente a ella.
- Que manjar, es una delicia la chocha de ti mami mi amor. Me hipnotiza su aroma y me embriaga su sabor…
Seguimos así un rato hasta que me levante y procedí a cabalgar a mi bebe con el coño, me senté sobre el tomando con mis manitas su dura verga para acomodarla en la entrada de mi sexo y me deje caer dando un rico gemido para comenzar de inmediato a cabalgar, mis pechos rebotaban sin control con la rapidez y la energía con la que cabalgaba a mi bebe mientras el gemía muy rico. A los dos nos ponía al límite de la lujuria y la excitación el morbo de que Mya estuviera presenciando aquello. después de un rato le levanté y me zafé la verga de mi bebe del coño. Me acosté sobre la cama y con las piernas abiertas le pedí a mi hijo que siguiera follandome, esta vez fue mi turno de sostener a Mya.
Juan comenzó a martillarme con mucha pasión, yo jadeaba como perra mientras sostenía a un lado de mi cuerpo a nuestra hermosa princesa quién no paraba de sonreí, no perdía atención, era realmente increíble, cualquier bebe hubiera perdido la atención de inmediato, hubiera estado inquieto meciéndose, pero mira estaba quietecita sentadita sonriendo. No cabe duda que Mya era muy especial desde entonces…
- Por hoy no te voy a enseñar cómo me rompe el culo tu papi mi amor porque ahora si me lo dejo muy adolorido de lo de hace un rato, pero para la otra si jaja
Mi hijo solo sonrió pícaramente mirándome mientras seguía penetrándome con pasión. Finalmente, después de un rato de estarme follando, saco su verga de mi coño y justo en ese momento un grandioso chorro de su leche cayo disparado sobre mi vientre llegando unas gotas hasta mis pechos. Yo gemía sintiendo esa tibia cremita en mi cuerpo y Juan jadeaba con los ojos cerrados mientras se jalaba y se sacudía la verga para derramas hasta la última gota de su leche sobre mí.
Al voltear a ver a Mya, note que estaba muy risueña, en verdad parecía haber disfrutado el presenciar aquello. Cuando mi bebe termino de exprimir su verga se acostó a un lado mío, quedando el a mi izquierda y Mya sentadita a mi derecha. Nos dimos un rico beso.
- No cabe duda que la presencia de Mya vuelve más rico y especial esto mami
- Si bebe, es riquísimo, y hermoso, ya halamos sobre como la educaremos y aunque quedamos que cuando tenga 6 años empezaremos formalmente a hacerla participe creo que es muy lindo que desde ahorita nos acompañe, es hermoso es increíble formar una familia incestuosa jaja, soy tan feliz…
Mi bebe comento lo feliz que se sentía también, habían pasado unos minutos desde que derramo su leche sobre mí y aun la tenía en mi cuerpo, entonces con mi mano izquierda que estaba libre porque con la otra seguía sosteniendo a Mya para que no se volteara comencé a frotarla sobre mi cuerpo como si fuera una crema corporal, sin embargo, en ese momento una rica lujuria y un delicioso morbo me invadió.
Sin decir más, tome unas gotas de la leche de mi hijo y las lleve a la boquita de Mya, comencé a frotarla sobre sus labiecitos suaves e hice que entrara un poco en su boquita ante la mirada atónita de mi bebe.
- Jaja por dios mami que haces, no cabe duda que eres una degenerada
- Jaja ay mi amor, pues no pude evitarlo quero que Mya probara tu deliciosa lechita, no te molestaste verdad?
- Jaja no para nada, pero no me lo esperaba
- Jaja pues ya sabes como soy mi amor, se me ocurrió, además le hará bien, es nutritiva jaja
Fue algo sumanmente excitante hacer eso, poner yo misma el semene de mi hijo en la boquita de nuestra hermosa princesa.
Desde ese día, mi bebe y yo volvimos a la rutina de siempre, tener sexo a cualquier hora en cualquier lugar que nos tomara por sorpresa la lujuria, incluso aun si Mya estaba presente. Ese día fue muy, pero muy especial para todo lo que sucedería más adelante.
Espero que hayan disfrutado esta entrega de 3 relatos mis hermosos lectores. Ojalá los disfruten, y si les gustan ojalá me lo hagan saber en sus comentarios. Aunque a veces no respondo los valoro todos y cada uno. Gracias por seguirme leyendo y nos vemos en el próximo. Besos.
Muy bueno, me la paso muy bien cada vez leyendo tus historias, siguela porfavor. Besos
Hola como estas dime tu tiene alguna expercia en este tema del incesto accede a responder xf
Que bien que Mya se vaya a acostumbrando al sabor de la lechita… podría hacerlo más seguido, así también debería probar el sabor de mamá y no esperar tanto.
Helen exelente reslto muy bueno me gusto mucho leerlo de verdad espero la continuación pronto lo subas
esperamos con ancias la proxima historia, ya desde pequeña enseñarla a tomar la leche de papa es requisimo
R.i.P
Bueno, hace largo rato Helen ya no da leña a nuestro fuego de lujuria y toca buscar otra.
Era un manjar, así que una lástima.
Wow Helen justo desaparecio en lo mejor de las historias y tan bien que iba 👎🏻
Hermosa historia, soy fan de todos tus relatos, me hice el usuario solo para felicitarte, siempre te leemos con mi pareja y nos calienta muchísimo