Historias de Cris y Millan. capitulo 01
El amor triunfa y se abre paso entre las barreras impuestas por una sociedad.
Me desperté en un movimiento brusco del autobús, ese viejo trasto no era precisamente cómodo y silencioso.
Me daba igual, todo me daba igual menos él, ya os lo presentaré.
Nos habíamos despertado muy temprano para mí. Era en Domingo, y ese día tocaba.
Yo no podía ser más feliz, y mis ojos claros como el agua de manantial me delataban.
Viajábamos mi abuela, mi madre y yo, perdón, me llamo Cris y soy una niña muy despierta desde pequeña, desde que recuerdo, ya me entiendes.
Rubia con dos coletas, pequeña y muy tímida, al principio claro, ya me conocerás, estoy aquí para contártelo todo.
Doce son las primaveras que llevaba, pero desde mucho tiempo atrás tenía mi reglita. Siempre me dolía, pero me gustaba porque me hacía mujer para él. Ah si, ¡ÉL! mi amor, mi hombre. Un amor secreto que nadie conocía, ni él, o eso creía yo. Se llama José, pero todo el mundo le llama por el apellido, Millán. Ains el apellido, que decirte…es primo de mi madre.
¡Ya lo sé! ¡No digas nada! ¿Acaso el amor tiene fronteras?
Perdona, pero llega nuestra parada, que nerviosa estoy, creo que me pica ya mi chochito.
¡¡Espero que no me lo noten!!
Me caes bien. Te contare un secreto, me pica mucho, ya sabes mi chocho, a casi todo momento, y se pone calentito, muy calentito y tengo que calmarme con lo que sea, con lo que vea. Me gusta mucho, mi sonrisa crece, se me nota mucho porque soy muy muy expresiva. Tengo un chochito pequeñito y sin pelitos, muy infantil y rosado. Jaja y muy pícaro, además me encantan las braguitas de niña, con dibus y demás.
Ya hemos llegado a su casa, vive con su novia. La verdad es que no me gusta, yo lo quiero para mi sola, pero me cae bien, aunque no me acuerde de su nombre. Mi madre llama a la puerta, que nervios, Jo pues sí que me pica y de qué manera, tanto que tengo que ponerme la mano. Sale la novia y saludamos, pero donde está él? no lo veo, miro por todos los huecos y me desespero. Mi abuela me lo nota, somos dos gotas de agua, y pregunta por él, por mi hombre.
¡¡¡Ya lo veo!!! me hago hueco como sea y me voy al salón, me abrazo a su pierna, muy fuerte y no quiero separarme. Está en calzonas, hace calor. Noto sus pelos y la fuerza de su pierna cerca de mis partes y todo me pica mucho más, ya no aguanto más, pero yo no me separo. Acaricia mis rizos, le encanta, a mi mucho más, y me imagino que me somete tirándome del pelo, sometiéndome a toda su voluntad a su fuerza.
Se muy bien que hacer para estar con él. Y no voy a tardar para hacerlo. En una salita aledaña tiene una videoconsola y le gusta jugar. Le miro con pasión y le doy un tirón a la camisa pasándole mis manos por su cuerpo.
Le digo que quiero jugar. Al resto no le interesa eso, y se quedan en el salón hablando. Él asiente y nos vamos a la salita, siempre esta oscura, me gusta y me pone más.
Lo tengo ardiendo, y a mi hombre a solas, que más pedir. ¡¡¡Pero no aguanto más, como estoy!!! Cuando no me ve me subo las braguitas al límite hasta que se meten por mi rajita. Las noto totalmente mojadas. No sé cómo voy aparentar, pero ahora mismo todo me da igual.
Empezamos a jugar y yo me deslizo del posabrazos a su rodilla. uff mis pequeños y mojados labios sienten sus pelos y toda la rodilla me aprisiona el clítoris, nunca lo había notado tan duro.
Mi hombre hace ademan de quitar la rodilla, pero pongo mis dos manos en ella, es mía es mi rodilla y tengo claro que me quiero correr en ella. Le miro disgustada por lo que ha intentado, mi mirada le derrumba, siempre lo hace. Me mira con ojos de aceptación y los míos se iluminan, mientras, empiezo suavemente un movimiento con mi cadera.
Estoy realmente fuera de sí, es mi sueño, con mi hombre con el primo de mi madre, con mi amor eterno. Calmando la sed de mi interior, mojándole toda la pierna. Cada vez con más intensidad, me voy a correr y le voy a llenar todo. Me gusta. Me sujeto con mis manos hacia atrás, mi izquierda en el apoyabrazos, la derecha la pongo en su pecho, no tiene camiseta y se desliza abajo despacio.
Ya no sé ni donde estoy y pronto no sabré ni quien soy, todo son estremecimientos.
¡Pero todo se para de pronto, estoy inmóvil! ¡¡¿Que pasa?!!
¡Mi mano ha cogido su polla! sin querer o por instinto, pero allí está, ¡¡¡Y no me quita la mano!!! Sube el volumen de la tv, ya ni juegos, ¡¡los juegos están en otro lado!! Ains un escalofrío me recorre!! Siento su mano, tan grande tan fuerte como la desliza por mi lateral, cómo me va abrazando por la cintura y se mete por debajo de mi vestido.
Sus grandes dedos recorren mi cuerpo buscando mis braguitas y metiendo el índice por mi rajita, despacio, pero con fuerza, Me siento paralizada, toda mi infancia esperando este momento y me paralizo!!!. Reacciono y quiero la iniciativa, hago lo mismo y le meto la mano por debajo y cojo con desesperación toda su polla, su dura polla.
¡¡Yo quiero eso dentro de mí!! lo necesito!!! ¿Me oyes? Lo necesito para seguir viviendo. ¡¡¡Dios mío nos estamos masturbando!!! no se ni lo que suena en la tv. Apenas te podría describir nada, sólo decirte como todos mis músculos se tensan para correrme.
¡¡Pero él sigue!! Más todavía, más rápido, ¡¡más fuerte!!
Me agarra con mucha fuerza, me hace daño, pero me dejo porque me gusta y porque es mi hombre. Puede hacer lo que plazca conmigo. ¡¡Soy un juguete en sus fornidos brazos, el sueño de mi vida!!
Me lanza de la rodilla directamente a la polla, ¡¡¡¡Ains!!! la noto por todo mi chochete, me cubre entera, esto es mejor que la rodilla. Me sujeta con su brazo izquierdo para que no me mueva… su brazo derecho empieza a masturbarme o eso creía. ¡¡¡¡Dios!!!! está cogiendo su polla y buscando donde meterla.
¡¡¡Voy a ser MUJER, SU MUJER!!! Sin condón ni nada. ¡¡¡¡Me da igual, NECESITO SU POLLA DENTRO DE MI!!!! YAAAA! Estoy locaaa
Fue un momento de dolor, un poco violento, su glande encontró mi abertura a la felicidad. Me agarro más fuerte y empezó a empujar, primero lentamente, sabía que me hacía daño. Mucho daño, por un momento creí morir de dolor, pero se tornó poco a poco en placer, el más puro placer. Siguió empujando hasta el final de mi vagina, y bajo y subió y así me estremecía de placer, una y otra vez.
No me acuerdo cuantas veces me corrí yo, pero siempre me acordare de cuando se corrió él. ¡¡Me agarró más fuerte aún!! su mano sobre mis pechitos, estaba poseído. Poseído por mí!!
¡Me digo, me viene! ¡Yo doble la espalda hacia atrás! Me volvía a ir yo también sólo con sus palabras.
Su leche caliente me llenó por dentro, estaba tan llena que el semen salía fuera por donde podía, sobre todo cuando salió su polla y fue el descorchar una botella. No se podía desperdiciar nada de aquel manjar, y con mi mano lo recogí de mis partes para degustarlo con mi lengua. Lo saboree como nada en este mundo. Me trague su semen, un manjar de dioses!! Nos miramos y reimos. Nos queriamos mucho y sabiamos que nuestras vidas cambiaban para siempre. Y nos besamos hasta desgastarnos.
Poco recuerdo más de aquel día, el día que fui Mujer con mi Hombre, salvo que llené el asiento del autobús de vuelta.
Nunca estuve tan relajada y feliz, bueno si, ahora.
Pero eso… Eso es otra historia,
Me encanta!