incesto con mi madre de 68 años parte 2
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
luego del delicioso y increíble incesto con mi madre fui a ver a mi padre ya con un plan elaborado, ya que estuve con el empezamos a tomar y aunque ya tenia 75 años aun le seguía gustando la bebida, y ya entonados le dije, oiga y ya sabe que esa señora volvió, quien tu madre? no me hables de esa mala mujer que no se me olvida lo que nos hizo, menos a mi papa porque cree que le digo señora, dejo de ser mi madre cuando nos abandono y mas cuando supe que no lo engaño solo con el buey que se fue si no con otros mas, mira nada mas dijo mi padre algo enojado y yo creyendo que solo había sido con ese buey, ya ves hijo tu madre siempre una puta, pues si papa es lo que también pienso pero algún día va a pagar todo lo que hizo, y así seguimos tomando y al verlo pensativo le dije, no deja de pensar en ella verdad? hay hijo es que solo de pensar todo lo que hizo me da un coraje, y con toda intención le dije, coraje oh ganas, ganas de que hijo, pues ganas de volver a hacérselo, y soltando una carcajada contesto, hay hijo como crees ya parece que iba a volver a estar con tu madre, y que tendría de malo papa a lo mejor hasta le gusta ya la va a agarrar bien educada a menos que no quiera porque ya no puede, y picado en su orgullo contesto, hay hijo si todavía las puedo y sabes que te lo voy a demostrar cuando traes a esa puta pero quiero que estés presente por si no aguanto el coraje.
El oír eso me llenó de excitación y le dije, pues el sábado si quiere. Luego de aceptar seguimos tomando, mientras ya mi verga estaba parada imaginando lo que pasaría, y así llego el sábado y con mi madre arreglada lo mas que pudo llegamos a la casa de mi padre, y aunque el reencuentro fue frio, bastaron unas copas para ya alegres platicar, como grandes amigos y ya ebrios y como mi madre y yo habíamos quedado a una señal se sentó junto a mi padre y lo abrazó cariñosa, mi padre yo creo ya excitado, aceptó las caricias mi madre viéndome, y yo con una seña le dije que si me iba pero con un movimiento de cabeza me dijo que no, y así ya excitado también vi como mi madre ya lo besaba mientras metía su mano en la entrepierna de mi padre mas luego de un momento mi madre se levanto y le dijo, que te pasa viejo sigues igual que antes para luego irse al baño, extrañado le dije, que pasó papa iba bien, pues si hijo pero esta chingadera no quiere, pero usted si verdad? pues si hijo y ahora mas con lo que dijo ahora con mas ganas quiero cogerme a esta puta, y sabiendo que su deseo ya era muy fuerte que todo le dije, oiga papa y que tal si es cierto eso que dicen que de ver se antoja, y sorprendido exclamo, como crees hijo es tu madre, que paso papa no ya le dije que dejo de serlo cuando hizo sus chingaderas ademas es para ayudarlo que tal si así reacciona oh que ya se rajo, y ya rebasado por el deseo dijo, ándale pues hijo total lo que importa es que me la vuelva a coger.
Y apenas regresó mi madre y se sentó junto a mi ya le estaba acariciando las piernas, y simulando sorpresa las quito diciendo, que haces cabrón se va a enojar tu padre, y poniéndolas de nuevo en sus piernas vi a mi padre diciéndole, verdad que no papa, y apenas movió su cabeza diciendo, mis caricias aumentaron hasta que mi madre que ya caliente me empezó a sobar la verga ante la mirada ya lujuriosa de mi padre, que no dejaba de sobarse mientras veía como mi madre ya abierta de patas recibía las caricias que mi mano le daba, y mientras disfrutaba al ver que mi padre ya estaba listo con su verga ya parada le dije, ya le paró papa, y el ya emocionado y sin dejar de masturbarse dijo, no, no tu siguele cabrón, apenas dijo eso saque mi verga para que mi madre y mi madre apenas la vio la trago toda para darme su rica mamada.
Mi padre al ver esto no aguanto y acercándose puso la verga cerca de la cara de mi madre diciendo, a ver cabrona, no, que no podía, y mi madre al verla ya parada y lista dijo agarrándola, hay canijo me sorprendes, para luego empezar a mamarla también hasta que mi padre ya ansioso de cogérsela dijo gimiendo, ya ya te quiero coger ya ya y apenas se sentó en el sofá mi madre ya desnuda se montó en su verga para luego empezar la rica cogida era increíble ver como las pequeñas nalgas de mi madre se movían tragándose toda la verga, y al ver como me agarraba ansioso mi verga dijo, que esperas cabrón también para ti tengo, apenas dijo eso ya mi verga entraba también ante el placer de mi madre que al sentirse llena de nuestras vergas se empezó a mover como loca aumentando el gran placer que nos hizo explotar como animales, luego de quedarnos pegados un buen rato sacamos muestras vergas de la gran verija que ya tenia mi madre para ver con delicia como nuestros mocos escurrían abundantes.
Luego de este increíble el silencio envolvió el ambiente hasta que dije, bueno que no me digan que se arrepienten, pues yo no hijo dijo mi padre, me siento como nunca, y agarrando la aun escurriente verija de mi madre completó diciendo, y mas porque volví a cogerme a esta pinche vieja, míralo cabrón ya vas a empezar dijo mi madre, pero me vale no sabes como deseaba ser cogida así, y qué, ya se cansaron? y agarrando nuestras vergas las volvió a mamar, y ya que las vio paradas de nuevo, poniéndose de a perrito abrió sus nalgas diciéndole a mi padre, ándale cabrón cógeme por el culo eso fue lo que siempre quisiste no? mi padre al ver su floreado y abierto ano no le importó cuantas vergas ya habían entrado ahí, y acercándose con la verga ya parada lo empezó a lamer excitando de nuevo a mi madre y al ver que pedía mas verga acerqué la mía para de nuevo sentir su rica mamada, mientras veía como ya mi padre le hundía la verga hasta el fondo del culo y disfrutando como nunca la empezó a meter y sacar ante la lujuria de mi madre que pedía mas sin dejar de mamar mi verga, hasta que vi como mi padre se quedaba tieso echándole todos los mocos.
Ya que termino sacó su ya flácida verga y al ver que el culo de mi madre se movía pidiendo mas me dijo, a ver hijo completa a esta pinche vieja, apenas oí eso ya mi verga hacia gozar el culo de mi madre hasta terminar vaciándonos los dos, luego de saciar nuestros instintos animales y como si no hubiera pasado nada seguimos tomando con la promesa de volver a repetir eso tan prohibido y rico.
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