INCESTO PURO 4

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Nandincesto45.
MIS INICIOS INCESTUOSOS (Con mi mamá)

Mi madre Lina a sus 34 años era una mujer muy hermosa y despertaba la admiración y el deseo de los hombres por donde pasaba, 1.
76 de estatura, delgada sin ser flaca, sus pechos pequeños pero erectos y de pezones grandes cuando se empitonaba ó hacia frío, las caderas pequeñas pero con un culo redondo y firme que lucia con su andar cadencioso, sus labios carnosos y unos ojos verdes que iluminaban toda su cara, estas cualidades la valieron ocupar el primer puesto en un concurso de belleza en la universidad.

Con casi 13 años yo tenía mucho recorrido en el incesto, con mis hermanas Nora y Rosa y con un montón de primas que les gustaba mi pene.
Pero mamá me despertaba un morbo especial quizá por el respeto que me inspiraba ó la veía como muy imposible para mi lo cual no era obstáculo para que la espiara o intentara tocarle los senos como si fuera un accidente.

Aquel fin de semana mi papá se fue con Nora y Rosa para la finca, yo aunque quería ir no pude porque tenía que preparar unos exámenes del colegio, en la tarde le pedí ayuda a mi mamá para resolver unos problemas de matemáticas.

– Ven Nico te ayudo antes de ducharme, estaba vestida con una bata amplia muy transparente y sin sujetador además se le notaba un tanga blanco muy pequeñito lo que me causo una erección que no sabía como disimular, se sentó a mi lado y me explico el teorema de Pitágoras, simulando que iba a tomar un bolígrafo pase todo mi brazo sobándole los pechos; pasamos a otro tema y…….

– Hijo te noto como agitado ¿tienes fiebre?
– No mamá, no me pasa nada.

En esas sonó el teléfono
– Nico conteste que debe ser su papá
Hola papá! salude cuando reconocí su voz –— Si bien, gracias— Ya se la paso—
– Mamá, y le entregue el teléfono
– Hola cariño ¿Cómo están?.
si que no se queden mucho rato en la piscina…….
bueno mañana te esperamos… chao….
besos a las niñas cortó la llamada.

– Hijo, termine ese tema solo, voy a ducharme.
Dijo mi madre al salir.

– Vale mamá gracias por la ayuda.

Aproveche para espiarla, como otras veces, pero ese día fue especial:
Calculé un tiempo suficiente para sorprenderla desnuda con la disculpa de sacar el portátil….
Me quede mirándola, al verme intentó taparse con la toalla…….
mamá déjeme ver otro poquito le dije con voz trémula, ella pudorosa sin decir nada lo pensó, miro mi cara expectante y dejó caer la toalla dejando ver de frente la causa de mis calores, miro mi entrepierna y creo que noto mi pene completamente erecto, se ruborizó, empezó a vestirse, primero un tanga negro sobre su coño bien depilado, después el sujetador acorde con el tanga cubriendo sus pezones empitonados, una falda tipo Channel y la blusa escotada sin mangas.

Al sentarse frente al espejo le sobe mi pene por la espalda.

– No hijo.
Me dice y empezó a peinar su rubio cabello natural.

Le di un beso en su cabeza, le apreté los senos suavemente, “tengo la mamá más hermosa del mundo” le dije al oído, tomé el portátil y salí a terminar mis deberes.

– Nicolás voy a la farmacia, ya vengo.

Al regreso la notaba nerviosa y pensativa hasta que tomo una decisión y se sentó en mi cama.

– Nico se que me deseas desde hace tiempo.

– No sabes cuanto mamá y más se me acentúo el morbo esta tarde cuando posaste para mi y vi tus encantos femeninos causándome gran placer.

– Pero me da vergüenza hacerlo contigo.

– Mamá no te preocupes, le dije cogiéndole una mano.

– Vamos a hacer una cosa: Póngame una venda en los ojos y hágame lo que quiera pero sin hablar.

Busque una corbata de mi papá y le cubrí los ojos, luego empecé a desnudarla lentamente con morbo, y a tallarle mi pene por su espalda mientras la besaba en el cuello.

Cuando la desnude se tendió en la cama, bese sus jugosos labios abriéndolos con mi lengua, no se imaginan el morbo que produce besar a tu propia madre con deseos sexuales, ella se dejó pasivamente, empecé por mamarle los senos, sus pezones se endurecieron y exhaló el primer gemido, coloque una rodilla en su vagina presionándola mientras me quitaba la ropa luego empecé a hacerle la mine aplicando todos los conocimientos practicados con mis hermanitas y con mis primas, su coño se humedeció y entre espasmos y gemidos me dice:
– Métamelo yaaaaaaaaaaa.

Con mi corazón acelerado se lo fui empujando mientras sentía lo bueno que es follar con la mamá y más cuando no tienes sentimientos de culpa por estar tan desarrollado en mí el gusto por el incesto.

Sus movimientos de cadera se acoplaron a los míos en un frenesí total que nunca había sentido
– Masssss, masssss duroooo, asiiiiiii asiiiiiiiiiii, mí bebecito.

Y en un estertor ansioso murmura en mi oído:
– Quien sabe a cual de las niñas se lo esta metiendo su papá en este momento.

Y nos corrimos disfrutando del pecado compartido, me quede agotado sobre ella sin sacárselo y cavilando: ¿como se había enterado que mi papá follaba con sus hijas Nora y Rosa? Y con la curiosidad de si sabia que yo también.

Luego mi mamá empezó a mover las caderas rítmicamente y comprendí que quería follar de nuevo, yo ni corto ni perezoso le hice el mete y saca mientras le mamaba los pechos hasta hacerle alcanzar un nuevo orgasmo y cuando me iba a correr me dijo suplicante que me descargara en su boca, se comió mi semen con deleite y cuando me estaba limpiando el pene con su lengua……….

– Tengan cuidado al hacer sus cosas.
Dijo una voz a mis espaldas.

Casi me da un infarto del susto, mire y era el tío Mario parado en la puerta de la habitación, mi madre pálida como el papel se quito la venda.

– ¿Cómo entraste? Pregunto cuando reconoció a su hermano.

-Pues por eso les digo que tengan cuidado, la puerta estaba abierta.

Nos levantamos y note que mi madre recupero los colores pero no le dio vergüenza dejarse ver desnuda de su hermano, me fui para el baño y los deje ahí conversando.

Cuando salí ya se habían ido para el cuarto de mi mamá y les escuche una follada fenomenal.

En la noche, después que mi tío Mario se marcho me acosté con mi mamá en su alcoba y después de otra follada la convencí para que me contara como había comenzado el incesto con su hermano.

– Hijo, el primer hombre en mi vida no fue Mario.

– ¿Entonces quien?
– Fue tu abuelo Atilano o sea mi papá cuando yo tenía 10 años, después me entregue a Mario como lo han hecho todas mis hermanas y lo que tengo entendido algunas de mis sobrinas y tu no te hagas el inocente que muy bien sabes que también se a cogido a mis hijas Nora y Rosa.

– Si mamá, también estoy enterado que Rosa es hija de él.

– Ya sabes, esto es un secreto de familia.

Desde ese día perdí el pudor con mi mamá y follamos cada que nos apetece.

Luego con el tiempo hice vida marital con mi hermana Rosa, como os lo dije en el comienzo de esta saga.

Deseo os haya gustado esta narración verídica que culmina mis anteriores relatos “Incesto Puro 1, 2 y 3”.

P/TA: Estoy preparando el relato incestuoso que va a contar la historia de mis primos José, Beatriz y Lupe que en cierta forma están muy ligados a esta saga.

Agradezco comentarios en mi perfil de usuario.

Fin.