Incubo ( Parte 7 )

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Kirito1970.
Capitulo 7

Me incorpore de un brinco y mi madre se acercó a nosotros, se le veía el enojo a flor de piel, yo no acertaba que hacer, mi hermana también se levantó y cuando trato de acercarse a ella, mi madre le acertó una bofetada tan fuerte que Gaby trastabillo y giro cayendo al suelo, de inmediato comenzó a llorar, pero también en ese instante, una ráfaga de aire bastante fuerte recorrió toda la sala, lo suficiente para que nos percatáramos de ello los tres al mismo tiempo, luego trato de pegarme también a mi pero yo alcance a esquivarla y solo me dijo: -cómo pudiste, a tu hermana, eres un desgraciado- y se retiró muy molesta a su habitación de la cual no salió hasta el otro día, cuando fui ya por la noche a ofrecerle algo para cenar, no me contesto pero claramente escuche su llanto, me sentía mal, me sentía contrariado, lo que sucedió me hizo reaccionar un poco, pude percatarme que las cosas en la casa no andaban ya bien, fue por primera vez me di cuenta que la influencia maligna que hay en la casa nos estaba afectando.
Me retire a mi habitación y todos nos dormimos temprano, de esas noches raras en que la actividad ceso completamente, pero que al día siguiente resurgiría pero con mucha más violencia.

También Eva se sentía un poco molesta conmigo, pues mi mama le dijo lo que había pasado, que nos había sorprendido en pleno acto sexual y que Gabriela ya no era virgen gracias a mí, aunque creo que su molestia más bien era porque o bien me sentía suyo y le molesto compartirme con su hermana o viceversa porque sentía a su hermanita suya y yo se la había tomado, no se… muchas ideas cruzaron mi cabeza, incluso entre sueños me pareció ver a aquella niña fantasmal rondando la casa, como buscando algo, y lo adjudique a mis sueños.

Al día siguiente, desayunábamos los tres, como no había salido mi madre, pensé que seguiría enojada, pero apareció, se sentó en la mesa y Eva le arrimó su desayuno, después de un breve momento de silencio, nos dijo:
-discúlpenme hijos, perdón Gaby por pegarte, nunca lo había hecho, y no lo volveré a hacer, no sé porque pasó lo que hicieron ayer pero está mal, muy mal eso y tenemos que platicarlo-
Dirigiéndose a mí, me dijo:

-pensé que eras más responsable, eres como el jefe de esta casa ya que tu padre nunca esta, me has defraudado, aunque sé que todos tenemos errores, solo te pido que no lo vuelvas a hacer por el bien de Gaby, la puedes lastimar…-
-está bien, mama, lo prometo-

A Gaby le dijo: – tú y yo tenemos que platicar mucho, hija, no puedo creer lo que mis ojos vieron, pero te quiero mucho y quiero que nos comuniquemos más-

Gaby solo contesto con la cabeza que sí, y terminamos todos de desayunar, en el ambiente se respiraba algo de alivio, nos despedimos de mi mama y nos fuimos los tres, mi mama se quedó sola en casa.

Después de un rato que nos fuimos mi mamá se metió a bañar, desde ese momento sintió la presencia de algo, pero no le dio importancia, de hecho nunca había sido afecta a ese tipo de cosas, más bien era escéptica a los temas de sobrenatural, aprovechó la calma del baño matutino y se rasuro su monte de venus, quitándose con detalle todo el vello púbico, hace mucho que no lo hacía y eso la reconforto.

Pero aquel ente que estaba en esta casa, no iba a dejar pasar aquella bofetada, aquel amigo-novio que se sentía dueño de Gaby no iba a perdonar la agresión de su Madre y se preparaba para vengar aquella bofetada a su chiquilla.

Salió de bañarse solo con una toalla envuelta en el cuerpo y la toalla pequeña enrollada en la cabeza, se dirigía su cuarto, pero cambio de opinión y fue a la cocina, se preparó un café y lo puso en la mesa, cuando estaba en la alacena buscando algo de galletas, nuevamente sintió aquella ráfaga que el día de ayer había sentido cuando abofeteo a Gaby, entonces volteo la cara y se quedó petrificada, un perro grande, como san Bernardo todo blanco estaba parado en la entrada de la cocina, con los ojos brillantes de un color rojizo, le gruñía a mi madre, la cual ante la sorpresa retrocedió un par de pasos pero aquel perro diabólico continuo gruñendo, mi madre ya con el corazón acelerado se deslizo por la puerta que da a la sala y cuando trató de correr hacia el jardín que era lo más próximo, aquel perro la alcanzo a media sala y con sus patas delanteras la hizo caer al suelo, tirando la toalla de la cabeza a lo que ella de inmediato se giró boca arriba y se topó con la cara del perro quien gruñía con fuerza, ya presa del terror trato de gritar pero su garganta ahogaba todo intento por la impresión misma de sentirse indefensa ante aquel animal enorme que se disponía a atacarla, el perro en un movimiento rápido con el hocico le abrió la toalla que le cubría el cuerpo, ella instintivamente, trato de cubrirse pero fue mucha más la fuerza de aquel animal y la toalla quedo a varios metros lejos de ella, quedando completamente desnuda y nuevamente recostada en el suelo, trato de incorporarse con la mesita de centro que estaba cerca de ella, y que era la que yo había movido para acomodar a Gaby en el suelo , cuando se giró para apoyarse en esa mesa, aquel perro le brinco encima, quedando mi mama recostada boca abajo en la mesita, grabe error de ella, porque aquel perro enorme quedo encima de ella y en posición acomodada, sus nalgas quedaron al aire y sus rodillas apoyadas en la alfombra, mismo que aprovecho de inmediato aquel perro demoniaco y con las patas delanteras apoyadas en los hombros de aquella mujer indefensa, y sacando un miembro enorme, color rojo intenso, sin ningún preámbulo se abalanzo sobre ella y al primer intento de mancillarla mi madre trato de zafarse cuando se dio cuente de las intenciones de ayuntarla de aquel perro, pero no podía, el peso del animal arriba de ella no la dejaba moverse, hubo un segundo intento y mi mama solo movía las nalgas a los lados para tratar de evitar que aquel animal lograra su cometido, ella lloraba y estaba entrando en un trance de histeria, pero no sirvió, en el siguiente intento aquel gigantesco miembro del perro encontró la abertura vaginal recién rasurada, preparada sin querer para la violación de que iba a ser presa, e ingreso de lleno, en un solo movimiento ingreso completamente hasta el fondo, arrancándole un grito de dolor, al sentir incrustado hasta sus entrañas aquel perro, ya no opuso resistencia, entro en shock, mientras aquel perro maldito iniciaba las penetraciones y descargaba su furia violando a aquella mujer, así duro un rato bombeándola completamente, con violencia, de pronto se detuvo, salió del cuerpo de ella y con el hocico la agarro de los cabellos jalándola, la arrastro por todo el caminillo del jardín hasta la mesa de piedra

Allí la subió, quien ya parecía más bien una muñeca, sin nada de fuerzas, quedo mirando al cielo, sintió como aquel perro acomodaba sus manos, una a cada esquina de la piedra y luego los pies, de igual modo, quedando como una equis humana, luego el perro se agazapó un poco y comenzó nuevamente la penetración, al primer intento volvió a ingresar, y nuevamente aquel falo lleno todo el interior de aquella adolorida vagina, la pobre mujer con la mirada fija en el cielo solo esperaba que todo acabara, pero aquél perro que la estaba mancillando conforme la cabalgaba, fue lentamente transformándose a un ser humanoide, mi madre nuevamente, al percatarse de ese cambio, sintió un fuerte escalofrió y un pánico intenso la recorrió, miraba con terror como aquel perro se convertía una persona deforme, horrible, incluso el pene que sentía dentro de ella, se empezó a sentir más grueso; aquel ente entonces la agarro de las muñecas y acelero más las embestidas al cuerpo de mi madre, quien trato por un breve instante de zafarse, pero era inútil, aquel ser estaba recostado completamente en ella mientras sentía aquel miembro llenarla toda, comenzó a sentir la penetración de otro miembro, esta vez por el ano, el cual se iba insertando lentamente, a cada bombeo ingresaba un poco más, poco a poco fue sintiendo como llenaba sus intestinos, incluso más allá de donde un humano llega, aquel ente todo deforme, sus ojos rojos brillantes reía, mientras violaba aquel cuerpo indefenso, así duro mucho tiempo hasta que aquel ente, eyaculo dentro de ella, la sensación de aquella eyaculación, provoco que mi madre perdiera el sentido, una masa viscosa y verde, escurrían de su vagina y ano, los cuales estaban dilatados y no se podían cerrar algo de olor fétido, una vez terminado de expulsar aquella porquería dentro de ella, se esfumo, pasaron varias horas y mi madre reacciono y con mucho esfuerzo llego apenas a la sala y se tumbó en la alfombra, justo donde ayer mismo había yo recibido el cuerpo de Gaby.

Yo fui el primero el regresar a la casa, cuando entre la vi y me quede pasmado, estaba en medio de la sala, tirada en la alfombra de la sala, boca arriba y completamente desnuda, estaba inconsciente, mi primer pensamiento fue sumamente morboso, pensé que la había sorprendido masturbándose, pero al acercarme me di cuenta que yacía dormida y solo cuando me acerque más, me di cuenta que estaba inconsciente y con moretones en muchas partes de su cuerpo, y que de su sexo salía una liquido bastante asqueroso, trate de hacerla reaccionar pero no me fue posible, entonces sin dudarlo, llame a una ambulancia.

Mientras llegaba, rápidamente moje una toalla y la limpié de su cuerpo, quitando con cuidado todo aquello que le había escurrido y luego le puse su bata de baño y una pantaleta, llegó la ambulancia y se la llevo, me sentía muy angustiando, rápido llame a mi padre quien le aviso a la familia, le avise a Eva que pasara por Gabriela a su escuela y que se fueran a la casa, que mi mama se había puesto mal.
Cuando llegue al hospital ya no pude ingresar a verla, ya se encontraba en estado de coma por hemorragias internas.

Después de varias horas empezaron a llegar varios familiares preguntando por su saludo, yo me sentía bastante mal, la sensación de impotencia ante lo que sucedía me llenaba de ira, así trascurrió la tarde y a la noche se ofreció a llevarme una pareja de tíos el ya cerca de los 50 años y ella de 40 años, mi tía era hermana de mi mama, llegamos a mi casa, y al entrar estaban cenando Gaby y Eva, como no esperaban que llegara con visitas, se sorprendieron, más mi tío, pude ver que le brincaron los ojos ya que las dos estaban sentadas en la mesa con ropa interior nada más, Eva si se incomodó un poco y se levantó de inmediato y se fue a poner su bata, pero Gaby no, ella se quedó así, les ofrecí algo de cenar y aceptaron, cuando se sentaron a la mesa, Gaby se levantó para ceder su lugar a mi tío, quien de inmediato se sentó y quedo Gaby de pie a su lado, les serví de lo que había y me senté por un momento en la sala, voltee a ver a Gaby y me di cuenta que no traía pantaletas, solo su camiseta larga que le llegaba hasta medio muslos, mi tío entonces, no se dio cuenta por su posición que estaba sentado, ya había regresado Eva y se había sentado, mi tía la estaba enterando te dodo, pero mi tío bajo su mano y al sentir que no era visto por nadie comenzó a acariciarle los muslos a Gaby, ésta no se retiró, se quedó quieta aceptando aquella caricia, aquella mano extraña que la comenzaba a tocar, mi tío quien al ver que Gaby no reacciono continuo moviendo sus dedos, esta vez se aventuró por arriba de la camiseta y recorrió suavemente su nalga hasta la cintura, repitió esto bastantes veces, hasta que se frenó en la base de la camiseta, esta vez sutilmente abrió la camiseta y sus dedos quedaron por dentro de la misma, así comenzó a subir lentamente, hasta llegar a la base de la nalga, se dedicó a disfrutar la redondez de la nalga por un momento, luego continuó subiendo hasta llegar cerca de la cintura, con toda la camiseta arremangada y las nalgas expuestas, claro que por la posición nadie se daba cuenta, pero así estuvieron un buen rato, disfrutando mi tío de ese par de nalguitas, gano confianza y ya las apretaba suavemente incluso insertaba levemente un dedo en medio de las mismas.

Eva lloraba, y mi tía hacia esfuerzos por calmarla, entonces mi tío dijo: – quiero ir al baño, me enseñas Gaby donde está el baño? – Gaby asintió con la cabeza y cuando mi tío se levantó, cayo la camiseta de nuevo como estaba y nadie sospecho nada, yo me encontraba ensimismado en mis pensamientos de lo que estaba sucediendo, lo que la había pasado a mi mama y no me di cuenta cuando se levantaron, llegaron al baño y se metieron, de inmediato mi tío cerró la puerta con llave, era excusa nada más, bajo la tapa del baño y se sentó allí, acerco a Gaby y le pidió a ella que levantara los brazos y de un solo movimiento, le retiro la camisetita, estaba embelesado disfrutando la vista, gozando ver el cuerpo de aquella niña desnuda, observando la rayita que dividía su monte de venus lampiño, ver y hacer era lo mismo, le faltaban manos para tocarla, para pasárselas por aquel cuerpecito infantil, Gaby obedientemente accedía a todo, la vulva de aquella niña ya se encontraba mojada, aquel hombre entonces la giro y le apretó las nalgas, metió un dedo e hizo contacto con su ano, el cual ya había sido alcanzado por el lubricante natural de Gaby, ingreso despacio el dedo medio, Gaby al sentir eso de flexionó ligeramente hacia adelante, dando oportunidad a una mejor penetración, como sabia mi tío que no tenía mucho tiempo, saco su pene, nada anormal, más bien pequeño, eso sí erecto, y apunto a las nalgas de Gaby, luego tomo a la niña por la cintura y la atrajo lentamente de reversa, cuando el pene toco el ano infantil, aquel hombre puso un poco de saliva en su punta y lo volvió a colocar en el ano, Gaby se flexiono nuevamente hacia adelante, no mucho, y aquel hombre la empezó a atraer mas, aquel pene empezó a ingresar, despacio, cuando había ingresado la mitad, Gaby ya jadeaba audiblemente, y el tío la alejo para sacarlo, para luego ensalivarlo de nuevo y comenzar de nuevo, pero esta vez, Gaby agarro sus nalgas y las separo, entonces el tío que la tenía agarrada de la cintura continuo, y esta ocasión todo aquel pene maduro entro en aquel ano infantil, después de un par de segundos de estar así, empezó el mete y saca, estaba disfrutando intensamente aquel ano apretado, en pocos minutos después eyaculo dentro de Gaby, realmente fueron unas cuantas gotas lo que sintió Gaby dentro de ella, y aquel miembro ya flácido salió de ella y rápido se incorporó y lo guardo, Gaby sitio por primera vez lo que se sentía quedarse excitada y no llegar al final, al ver que mi tío se preparaba para salir, se puso su camisetita y salieron los dos, pero el mando primero a ella por delante, llego a donde estaba todos, pero se sentó junto a mí en la sala y el tío regreso a la mesa.

Gaby sin decir palabras, tomo mi mano discretamente y la llevo debajo de su camiseta, mis dedos tocaron su sexo y por el aroma que me llego y lo mojada que estaba, supe lo que había pasado, solo me dijo:- no sentí bonito como cuando paso contigo- , y se recargo en mi brazo.

Acabaron de cenar mis tíos y se retiraron, ya que mi tío tenía urgencia de salir, quizás por remordimientos de lo que acababa de hacer estaban atacándolo, nos quedamos solos los tres en casa, al parecer llegarían a partir de mañana unos familiares a apoyarnos con la falta de mama.

Esa noche, Eva se retiró pronto a su habitación, realmente le había afectado lo de mi madre, Gaby y yo nos quedamos un rato en la cocina, yo acabe de cenar algo ya que no la había hecho y Gaby me espero, acabe y cuando nos retiramos, no quiso quedarse sola en su cuarto, entonces decidimos quedarnos en el cuarto de mama.

Me quite pues la ropa quedando en bóxer, pero Gaby si se quitó la camiseta, apague la luz y deje solo una pequeña luz encendida en el buró de mi mama, ya acostados, empezaba a dormitar cuando Gaby se giró y me abrazo, me dijo con voz baja: -no puedo dormir, me siento muy mojada-

Eso, junto con el calor y suavidad corporal que sentí de ella, bastaron para despabilarme, me quite el bóxer y empecé con el ritual de apareamiento, hicimos el amor intensamente, libremente sin que nadie molestara.

Empecé de inmediato a gozar de su sexo con mi boca, y a ella le encantaba sentir mi lengua jugando con su vulva, por momento lamiéndole todo y por momento succionando su botoncito, Cuando más excitada se encontraba, se giró y se recostó boca abajo, me dijo que mi tío la había usado así, no necesite más, hablaba de una penetración anal, entonces me acomode arriba de ella y cuando sintió mi pene erecto entre las nalgas, ella misma se acomodó, abrió sus piernas lo más que pudo y con sus manitas se abrió las nalgas, yo deslice varias veces entre su vulva mi miembro que tenía listo, ya que pude comprobar que todo el miembro estaba lleno de la miel sexual de ella, empecé la penetración, gentilmente fui ingresando, sin retroceder ni un momento, Gaby empezó a jadear y su respiración estaba acelerada, continúe hasta que mis testículos tocaron su clítoris, le había cabido todo, espere un momento a que se acostumbrara aquel anito a mi miembro, cuando Gaby comenzó a mover las caderas , fue el aviso que estaba ya lista y comencé a bombearla, lentamente, suave, entraba y salía de ella, disfrutaba mucho la imagen, me preguntaba que había sido de la niña que llego a esa casa, tierna y tímida de 9 años, ahora le tenía ahí, desnuda, su espalda y sus nalgas infantiles tragándose un pene y pidiendo más, la cadera de ella correspondía al galope, su carita de niña con los ojos cerrados, disfrutando las sensaciones que le dejaban sentir en su intestino a su hermano mayor, mientras que mi miembro la perforaba incesantemente, una de sus manitas se deslizo por abajo y alcanzo su vulva, y sus dedos trabajaron en su clítoris, hasta que llego al orgasmo, su ano apretaba de una manera enloquecedora, pero me contuve, Salí de ese orificio y gire a la niña, así de frente, sin esperar ingrese en su vagina, y continúe penetrándola, no tarde mucho y descargue mi furia sexual dentro de ella, la llene completamente, la agarré de la cintura y la gire evitando que mi pene se saliera aun de su vagina, quede recostado en la cama y Gaby acostada en mi pecho, mi pene perdió virilidad pero tardo en salir de aquella preciada fundita infantil, ella acurruco su cabeza en mi regazo y así nos quedamos dormidos, no supe en que momento mi pene salió de ella.

Mientras que yo disfrutaba y hacia mía una vez más a mi hermanita, al mismo tiempo en el hospital, en el cuarto donde estaba mi madre, de la obscuridad que producía una cortina cerrada, salieron 4 figuras enanas obscuras, solo sus ojos brillantes rojizos se les percibía, lentamente se acercaron a la cama de mi madre, quien yacía inconsciente, es estado de coma, esos enanos con movimientos torpes, se colocaron a los dos lados de mi madre, uno de ellos deslizo la sabana que la cubría, quedo acostada solo con la bata de hospital, luego a la par dos de aquellos enanos deslizaron de los hombros hacia abajo la bata, dejando sin nada a mi madre, cayo la bata a sus pies y nuevamente los enanos que estaban cerca de las piernas, cada uno tomo uno de los tobillos de ella y separaron completamente sus piernas los otros dos enanos se colocaron en medio y empezaron a escupir en el sexo dormido de ella, nuevo se acercó uno y empezó a darle lengua, y el otro lo quitaba para hacer lo mismo

El medidor de ritmo cardíaco registraba un ligero incremento, su cuerpo físico, aunque inconsciente estaba reaccionando al estímulo, se estaba empezando a excitar, así continuaron, la vulva rasurada de ella ya estaba empapada, entonces los dos enanos se hicieron hacia atrás atemorizados, entonces una figura grande imponente, mitad animal y mitad persona se materializo ante ellos, se aproximó y un miembro gigante empuñaba una virilidad impresionante, acercándose y sin preámbulo alguno la penetro completamente, entraba y salía de ella fuertemente, aquel miembro salía mojado de los jugos vaginales de ella, el ritmo cardíaco se aceleraba más, con ambas manos, huesudas y dedos largos agarro los pechos de ella y los apretó con fuerza, mientras que continuaba con la penetración, aquel miembro se iba engrosando más y la vagina de ella se iba abriendo más, entonces sin dejar de penetrarla, saco de su boca aquel demonio un gusano, blanco, viscoso grande, lo puso en el estómago de ella, este se arrastró hasta que de un extremo salió una pequeña boca que atrapo el pezón de un pecho y del otro extremo broto otra pequeña boca que atrapo el otro pezón, y estas succionaban los pezones de ella, mientras aquel demonio continuaba cabalgándola y el miembro ya se había engrosado más, son dejarlo de hacer, escupió nuevamente otro gusano igual que al anterior, esta vez se detuvo, saco el miembro de aquella vulva, tan dilatada que se podía observar el interior, acerco el gusano, y este se deslizo a la base de las nalgas, mientras que aquel demoníaco ser se insertaba de nuevo en la vagina, aquel gusano comenzó a hacer lo mismo en el ano de ella, mientras que era bombeada por aquel miembro enorme, el gusano aquel ingreso completamente en el ano hasta desaparecer por dentro, avanzaba por dentro retorciéndose, aquella tortura sexual era demasiado para mi madre, el medidor cardíaco estaba acelerado, la respiración era rápida, muy rápida, al igual que las penetraciones eran fuertes enteras, salía completamente y entraba completamente, el cuerpo de ella sudaba copiosamente, fue demasiado, cuando aquel demonio sintió ya la poco resistencia de aquel cuerpo indefenso, eyaculo, la sensación de aquel miembro dentro , provocó un paro respiratorio a mi madre, quien al momento de llegar al orgasmo, su pobre corazón no resistió aquel demonio pego su boca a la de ella y tomo el último aliento de vida y mientras que las contracciones involuntarias ya de ese cuerpo acababan de vaciar a aquel miembro, una extraña llama como de fuego pero que no quemaba surgió del pecho de ella y recorrió todo su cuerpo, cuando aquel extraño fuego acabo de recorrer todo el cuerpo de ella todo aquello sobrenatural se desvaneció, solo una carcajada escalofriante se escuchó, y luego silencio total… solo el sonido del medidor cardíaco se escuchaba, un beep interminable… había fallecido ella.

Pasadas tres horas, cuando la enfermera de turno paso, mi madre estaba con su bata y arropada con su sabana, como si no hubiera sucedido nada, parecía dormida y con una cara de dormir, la enfermera dio a viso a los médicos, había fallecido, a las 8 de la mañana nos estaba avisando a nosotros, paro respiratorio.