Iniciado Por Mi Tio A Los 7

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hola, soy de Chile, mi nombre es Mario y esta es mi historia de como mi tio me inició en los placeres sexuales con hombres.

Fui criado por mis abuelos ya que mi padre nunca lo conocí y mi madre se fue a trabajar a otra ciudad, yo soy del norte, mis abuelos tenían su hijo regalón, mi tío tenia 29 años, era alto, bien parecido, cuerpo bien definido, no musculoso pero no era gordo, se mantenía bien. Él se quedaba varias veces a dormir y para eso le tocaba dormir en mi habitación que tenía dos camas.

La verdad no sé realmente a que edad comenzó a tocarme, pero mis recuerdos están desde los 7 años, cuando una noche hacía mucho frío y le dije que estaba muy helada la cama, entonces me dijo que el se podía acostar a mi lado y asi abrigarnos. Él dormía solo con calzoncillos y una vez que se metió a mi cama, me abrazó de cucharita y pasó sus manos por debajo de mi cintura y me sujetaba fuerte.

– ¿Tienes frío aún bebé? preguntó, yo le dije que no tanto y me dijo que para abrigarnos más me podía hacer un masaje en el cuerpo, yo quería mucho a mi tío, el siempre era muy amable y cariñoso conmigo (claramente) y entonces le dije que bueno. "Pero para eso necesitamos sacarte el pijama", comenzó a bajarme el pantalon y me dejó solo con mis calzoncillos de niñito, luego empezó a pasar sus manos en mis piernas y en un momento me las empezó a besar, se sentía muy rico la verdad, me hacía cosquillas y el solo preguntaba si me gustaba, le dije que si y comenzó a lamerme los piecitos, se los devoraba, los metía casi enteros a su boca y así comenzó a subir, besandome los muslos y luego llegó a mi entrepierna. "Quieres que siga?" le dije que si con la cabeza y entonces bajo un poco mi calzoncito y dejo salir mi penecito.

Se lo metió a la boca y le daba besos en el glande, yo solo me retorcía por las cosquillas y esa extraña sensación que luego descubrí era el placer, estuvo un rato ahi y luego me dijo "Te gustaría besarmela a mí? Para que también se me quite el frío" ni siquiera lo dudé, era mi tio favorito y me gustaba su compañía y las cosas que me habia hecho. Se sacó los calzoncillos y dejó ver su verga dura y babosa frente a mí (su pene es largo pero no muy grueso, una vez que lo medí eran 19cms). "Besa la cabecita despacito" Comencé entonces a darle pequeños besitos a su glande y sentí su líquido en mis labios, "Eso se come" me dijo así que solo me saborie los labios y seguí, luego me dijo que abriera la boca y tratara de metermelo lo más que pudiese.

Empecé a sentir como se movía mientras me follaba la boca, puso su mano en mi cabeza y empujaba mientras su pene duro me taladraba la garganta, me ahogué varias veces pero el no sacaba su mano, en un momento me soltó y me besó, metía su lengua en mi garganta mientras acariciaba mi potito y me decía "Estás tan rica mi amorcito" (eso fue una constante en el sexo, siempre me trataba de mujercita). Luego me dio vuelta y abrió mis nalguitas y pasó su lengua de arriba a abajo en mi hoyito, eso fue lo mejor de esa noche, sentir como su lengua se metía en mi agujerito chiquito y apretado me causó sensaciones indescriptibles.

Luego volvió a meterme su verga a la boca, y nuevamente me sujetó la cabeza con la mano, sus embestidas eran más salvajes y rápidas, yo solo intentaba respirar para no ahogarme con mi propia saliva que le chorreaba su pene, cuando ya sentía que no aguantaba más me dijo "Abre bien que vas a tomarte mis moquitos" y sin más sentí como salía de su pene un líquido calientito, me asusté pues creí era orina pero él al ver mi cara me dijo "Tranquilo bebé, eso se come, tragatelo" Sin chistar hice lo que pidió y me tragué todo lo que salió de él. Su sabor fue para mí un manjar, la verdad no me pareció malo y lo tragué con gusto.

Él cayó exhausto hacia atrás e hizo que me recostara en su pecho. "Te gustó?" Sí, respondí. "Mucho?" Sí! "¿Te gustaría ser mi mujercita y hacer más cosas conmigo?" Sí tío! "Entonces de ahora en adelante serás mi noviecita ya? Pero esto es algo entre nosotros dos y nunca se lo cuentes a nadie"… Y así comenzó mi vida sexual con mi tío, satisfaciendo sus deseos y sus caprichos.

Si les gusta mi relato, les seguiré compartiendo mis experiencias con él, la primera desvirgada, las orgía con otro adulto y su hijo de 9 años y otras experiencias de mi infancia. Gracias por leer