La nena de papá Pt.-IV
Sexo con papa.
Una pequeña escapada a un lugar casi paradisíaco, sería mi más grande jugada para poder concretar lo que deseaba con mi hija.
No era algo que no había pensado antes Pero la charla reveladora con mí amigo me animó a ir por todo, sin importar el riesgo.
Tenía unos ahorros que junte, después de mi divorcio, los iba a utilizar pará emprender en algún negocio, pero no hay mejor inversión, que la que se hace a uno mismo. Y si las cosas salían bien, iba a ser dinero más que bien invertido.
Comenze con los preparativos para darnos una escapada con mi hija, sin que ella supiera nada. Quería que todo fuese una sorpresa. Compré los pasajes, compré un paquetes turístico para dos, en un lindo hotel de 3 estrellas con vista al mar. No iba a ser muy lujoso pero que la ibamos a pasar bien, eso era seguro.
Una vez que tuve todo cerrado, la llamé a mí hija, que estaba cursando y le conté la sorpresa, sus gritos de emoción me dejaron casi sordo. Me dijo que apenas salía de clases me iria a visitar, y asi lo hizo. Cómo a las dos horas llegó a casa, entró cual huracán y salto sobre mi, enrredando sus piernas sobre mí cintura, y dandome un fuerte abrazo. Yo correspodi dicho abrazo, que duró unos segundos, pero el choque de nuestros cuerpos, me hizo casi exitar, el aroma de su pelo, sentir sus pechos pegado a los míos. Pero un baldaso de Agua fría entró por la puerta, era mi ex mujer. Quería hablar sobre nuestro viajé sorpresa, del cuál ni le dije nada. Me aleje rápidamente a mi hija, y me puse a hablar con su madre, al principio no quería saber nada de que me la llvera de vacaciones, primero por el tema de la plata, después de que no quería, porque ya pasaban demasiado tiempo conmigo, pero mucho su opinión ya no contaba ya que mi hija era mayor de edad, y podía tomar tranquilamente sus decisiones. Eso calmó a la fiera por el momento.
Llegó el tan esperando día,, mi hija se había quedado en mi casa hasta ese día, y ya poco a poco había comenzado con el tire y afloje. Las indirectas mias eran sutiles pero efectivas, no quería echarlo a perder antes de comenzar. El día de mayor tentación fué el día que la lleve a comprar una bikini, me comenzó a modelar, los conjuntos elegido, que no dejaban nada A la imaginación, y todo lo contrario a lo que un padre diría, elegí el mas diminuto que encontré, al principio no quería, pero todo por complacer a su Papito, se lo probó y lo compro.
Salimos al día siguiente hacía el aeropuerto, durante el camino, no paraba de tomarse fotos para subirlas a sus redes.
El viajé fué rápido, cuando llegamos, tomamos un taxi, y directo al hotel a registrarnos, y nos fuimos directo a la habitación, Alli nos duchamos, nos pusimos ropa más ligera para aprovechar el calor y nos pusimos a disfrutar de la vista, mientras pensábamos cómo pasar el día.
Mientras admirabanos la vista desde el balcón de nuestro hotel, yo no podía dejar de mirar la vista de me estaba dando mi hija de espalda hacía mí. Traia un shorsito negro el cual resaltaba un hermoso traste, pero yo quería mas, y así entre broma, le pedí dije que se lo sacará, que se iba a morir de calor, que estaba muy tapada, y ella riéndo aceptó, y se quitó allí delante mio el shots. Mi corazón se aceleraba mientras se desvestía sin pudor delante mío quedando solo con el bikini. Le ofrecí tomarle algunas fotos, lo cual la puso de inmediato a posar para mi, cual modelo de maxim.
La temperatura en mi subía cada vez más, y ante de dar un paso en falso, decidí que saliéramos a recorrer la ciudad, las playas, ver qué actividades se podría hacer.
Pasamos el día caminando, conociendo algunos lugares, comimos en un restoran frente al mar, y pasamos el resto del día en la playa, descansando. Por la tarde paramos a beber algunos tragos en la barra del hotel, y ya con el alcohol subiendo por nuestros cuerpos, no fuimos al cuarto a descansar.
Ya en el cuarto, cada uno en su cama nos pusimos a mirar una película, aunque no podía concéntrarme, ya que a medio metro La tenía a mi hija en ropa interior con una remeron gris que usaba como pijama.
De pronto vi que se acostó de lado para dormir, yo seguí viendo la tele cómo si nada, de a poco con el movimiento de ya estar completamente dormida, vi como la remera se le iba subiendo, dejandome ver su culito desnudo exibhiendo una diminuta bombacha blanca. Traté de no caer en la tentación y fuí hasta el baño para mear, cuándo salí ella seguía en la misma posición, solo reflejo de la televisión iluminaba el cuarto de color azul y blanco. Me acerque poco a poco, ante tal belleza y me senté en el borde de la cama, sentí miedo que puediese sentir mi peso sobre el colchón pero ni así se despertó.
Estiré mi mano y la pose sobre su muslo, y de allí comenzó mi recorrido sobre su suave piel hasta llegar a su lindas nalgas dónde me di gustó acariciandolas lentamente, se la veía bastante firmes a pesar de que no hacía ejercicio. Llegué hasta el elástico de si rompa interior y solo lo corrí unos centímetros. Me incline y besé su cula con suavidad, era lo más excitante que había vivido en toda mi vida, acerque mi nariz hasta bla raja de su culo, y un deliciosa aroma a jazmín me invadio, pase la lengua por ensima de la tanga, y un pequeño movimiento me alertó, así que me moví rápido para salir de allí y seguí mirando la tele cómo si nada. Por suerte mi hija no se inmutó, fué un movimento producto del sueno.
Al día siguiente nos levantamos temprano para preparar las cosas y así podér pasar todo el día en la playa, mientras hacíamos eso, en mi cabeza un miedo y culpa de ser descubierto resonó en mi. Pero mí hija seguía normal, ignoraba lo que había sucedido la noche Anterior, lo que.me dejo.mas en calma pará seguir avanzando.
Bajamos a la playa y nos colocamos cerca del hotel, allí me senté a leer u libro, mientras mi hija se relajaba en la arena para tomar sol, cada tanto le ofrecía pasarle bloqueador, lo cual ella inocente aceptaba.
– ay papi..es la tercera vez que me pasas.. parece que solo querés tocarme…
– qué?
Mi cara de sorpresa ante tal comentarios me hizo casi ponerme al descubierto, así que puse mi mejor cara de ofendido.
– era un chiste..no era para que te enojes… igual con esas mano grandes pudistes ser un buen masajista..
Dicho eso, se puso de pie y camino hacia al mar para darse un chapuzón. Pero el comentario de mis manos resonó en mi cabeza por horas.
Por la noche decidí lansar la carnada, la invite a cenar, sería una comida padre e hija, pero con uno tintes románticos. Nos pusimos nuestros mejores vestuarios, yo una camisa y un pantalón de vestir y me senté a esperar que mi nena se termine de arreglar. Para mi sorpresa, salió con un vestido poco sutil, que dejaban exibhiendo todo si pecho hacia afuera, trate de disimular mis ganas por estrujar ese par de tetas y la tomé del brazo y bajamos a la recepción como una pareja.
Al llegar a un lugar donde tendríamos nuestra velada, a nadie pareció importantarle que un hombre Maduro, escoltara a una jovencita, y por cómo iba vestida, seguramente todo abrían suponiendo que yo era su sugardady.
Nos sentamos en la mesa uno en frente del otro, mi mirada trataba de desviarse, pero la gravedad me atraia hacía sus hermosos pechos.
Comenzamos despacio, degustando un vino, mientras esperamos nuestra comida, la charla era vanal, sin mucho que detallar. Cuando la cena termino, le pregunté que le gustaría hacer, ella me miró buscando complicidad en mí, y pidió una botella de tequila. Mis ojos se abrieron como dos platos, al ver que se animaban a tanto. Le seguí el juego y pedí la botella entera, ella rio, y cuando nos trajeron nuestro vaso, yo me lance a servirme el primer shots, el cual ella me frenó el brazo y me explico cómo tomarlo, era una experta bebedora.
El calor de la bebida subió mí temperatura, mi hija perdió la vergüenza y comenzó a reírse por todo, los pequeños roses comenzaron, su mano sobre mi pierna, la mía sobre su espalda, nuestra sillas pasaron de estar enfrentadas s estár una al lado de la otra y las caricias no cesaban. A medía botella decidí tomar la iniciativa y proponerle seguir en nuestrs habitación del hotel, ella acepto, no sin antes dar una caminata por la playa.
Subimos a nuestra habitación, y nos pusimos cómodo, a ella se le ocurrió la idea de juntar nuestras camas para poder jugar a un juego de verdad o reto, o algo así, yo acepté, y nos tiramos sobre la cama a jugar, todavía había media botella de tequila para tomar. Al principio las preguntas eran suave, pero de pronto ella dió el paso hacía algo más.
– te gustan gustó algunas de mis amigas?
No le respondí y tome mi trago, era mi turno.
– estuviste con alguien mayor?..
Se sirvió otro shots, y segui preguntado, ella no me detuvo.
– alguien que conozco?
Y volví a tomar su shots.
– te gusto estar con esa persona?
– para ya hiciste dos..me toca jajaja..
– bueno.. dale.. pregunta..
-Te gusto.. Aldana?..
No bebi..
– Florencia?
Tampoco bebi..
– Tamara?
Y mi trago seguía intacto..y justo antes de que se autonombrara, me incline y le comí la boca, el besos duro apenas unos segundos hasta que ella me empujó..
-papa!! Estás loco…
En ése instante, me dí cuenta del error que había cometido y traté de discúlparme, ella me miraba entre sorprendida y aterrada.
– perdón… mejor vamos a dormir..
– si . está bien..
Despejamos la cama y nos acostamos, ella de espalda a mi, yo apague la luz y me acosté mirando el techo, todo me daba vueltas, creó que me dormí sin darme cuenta. Pero nose en qué momento, sentí el cuerpo de mi hija pegado a mí lado, su culo casi sobre mi mano. Y comenze cómo un rose inconsciente con mi dedo, le acariciaba la pierna o algo parecido porque sentí el contacto con s piel.
Sin pensarlo me puse de lado y quedé de cucharita hacía ella, mí bultos bien pegado a su cola, y me quedé ahí quieto, esperando su movimiento que no tardó en llegar, su trastes se comenzó a frotar contra mi bulto, con leves movimientos circulares, mi erección se comenzó a sentir a través de mi bóxer.
Pose no mano en su cintura y comenzó a deslizarla de arriba a abajo, haciendo que la falda de su vestido se suba, dejando su culo completamente expuesto para mí. Noté que no llevaba nada debajo de su vestido, así que segui frotándome contra ella, esperando algún tipo de freno, pero lo único que hizo fué voltear la cabeza hacia mí y tomar mi cabello y darme un beso de lengua apasionado.
Aproveché ese intenso beso, para deslizar mí mano de su cintura hasta su pecho, y allí le introduje la mano en el escote y agarré su pecho con fuerza, y comenze a masajearlo, mientras ella soltaba leves suspiros.
No me resistí y me incorpore, le arranque el vestido dejándola completamente desnuda, se acomodo boca abajo, dejandome su culito para mí.
Me bajé el boxer, liberando los 25 cm de verga, y puse detrás de ella, yo podía seguir un minuto más sin sentirme dentro suyo, la tomé de la cintura y la atrsje hacía mí poniéndola en cuatro, me agarre bla pija y se la acomode en la entrada, y lentamente se la metí, primero hasta la mitad y cuando se mojo entró hasta los huevos, y comenzó a bombear lentamente mientras ella se aferraba a la sábana u dejaba que su Papi se de gusto.
La tomé del hombro y comenze un mete y saca.mas.inteso, ninguno decis nada, sentí si mano llegar hasta mí pierna y apretandola como para que siga, y no me detuve, segui cogiendome a mí hija, estába más caliente que en toda mi vida, mi verga brillaba con los jugos de mi Nina y yo seguí, metiendo y sacado, metiendo y sacando mí pitó de su interior. Hasta que comenzó a soltar una catarata de gemido uno tras otro, mientras su culo aplaudía contra mí pelvis.
– ahhhhh uy papi…ahhhh papiii.. más… duró papiii… siiii… ahhhhh… Dios..que rico coges…dalee cógeme todaaa.. haceme tu mujer .. ahhhhgggg siiiiii…
Entré tanto gemidos, y griterío, mi verga comenzó a soltar chorros y chorros de leche, era una descarga de meses sin sexo, sumado a la cosss que me decía mi hija, no pude ni llegar a sacarla por completo, creo que las primeros lechazos terminaron adentro, pero el resto baño su culo de blanco, dejandome a mi de cama y a mí hija bañada en leche por dentro y por fuera.
Muy bueno el relato tu hija sabía que tú querías meterle la verga por qué tantas preguntas si te gusta mi amigas fulana sutana perengana ella se quiso ser la ofendida por el besote bque le diste y lo bueno vino despues cuando tú hija se pone de cucharita y haya se da todo ya no traía ropa interior ya la concha pedía verga y así fue le distes una buena metida de verga que vas hacer papá y abuelo continúa con el próximo relato está muy bueno
Excelente relato.
Muy buen relato tu hija aceptó tu intención desde el primer momento aunque cuando le diste el beso pensé que terminaba todo pero ahora esperar y ver crecer su pancita me imagino que habrá más y ahora que está embarazada. Te doy 5 estrellas
Menos el embarazo me gustó, hubiera preferido que no despertara