LA NENA Y TOMY tercera parte
Para Tamara era un juego placentero con su mascota.
[Primera parte]
LA NENA Y TOMY tercera parte
INTRO:
Todo sucedió demasiado rápido, de pronto madre e hija encontraron en Tomy un placer sexual que ninguna de las dos había conocido.
Para Tamara era un juego placentero con su mascota, para su mamá era quizás el reemplazo de la ausencia de tener sexo convencional.
Pero lo verdaderamente nuevo, fue el echo que Tamara viera la vagina de su madre, así de cerca y bellamente depilada.
No sabía de donde le salían las ganas, no sabia bien que era lo que tenía que hacer, pero sentía necesidad de besar la entrepierna de su madre y chupar, muchas ganas de chupar y lamer, además de sentir el sabor de los flujos de calentura de su progenitora.
Mamá estaba tan concentrada en chupar el pito de Tomy, tanto deseo de recibir esas gotas sabrosas de semen en su boca, que apenas se daba cuenta de lo que estaba haciendo su hija.
El perro levantó una de sus patas, como cuando hace pis y en tres borbotones largó toda su leche en la absorbente boca, recién despues de mezclar el semen con su propia saliva y tragar esa mezcla saboreando de a poco, la mamá se percató de Tamara.
Su primer instinto de madre fue cerrar sus piernas, tomar la cabeza de la nena y retirarla, pero…
Tami se aferró a sus nalgas y hundió mas s nariz en el húmedo tajo de su madre.
Fue entonces cuando la mujer invirtió el sentido de sus fuerzas, y en lugar de empujar, atrajo la carita de su hija contra su vulva, la fue llevando suavemente hasta que los labios de Tami se posaron sobre su clítoris, la nena notó la pequeña protuberancia y comenzó a lamer…
“Chupa mi amor, chupa justo ahí” rogó su mamá…Tami tenía un chupete ahora entre sus labios y al ver el efecto que producía en su mamá, la hizo chupar más fuerte aún.
En ese momento la mamá comenzó a sentir un impulso incontenible de largar líquido, y un chorro fuerte y constante impacto en el medio de la cara de Tami, casi hasta ahogarla, pero Tomy ya estaba a su lado intentando tomar lo que salía de la concha de su mamá, entonces Tami hiso lo mismo, hasta que no salió nada mas y la mamá se estiró sobre la cama, mirando y sintiendo como Tomy y Tami lamian sus labios vaginales…Ella seguía teniendo orgasmos y no paraba de decir cosas sin sentido:
“Chupen!, Tamara méteme la lengua, ¡ Tomi lamé, lamé por favor!, Tamara mordeme aquí”
Así estuvo por varios minutos, Quería abrazar a su nena, la atrajo hacia si, pero Tamara no se detuvo en el abrazo, continuó hasta prácticamente sentarse sobre la boca de su madre.
Pudo sentir la hermosa caricia que la lengua de su mamá le producía sobre su pequeña conchita, sentía que le invadía su hueco, sentía la presión de esa lengua queriendo entrar en su conducto vaginal, sentía muchas ganas de orinar… Le pidió a su madre que la esperara y fue corriendo al inodoro, pero solo un par de gotas le salieron, así que regreso rápidamente…Tomy estaba ocupando la boca de mamá con su gran lengua, Tamara simplemente lo empujó y volvió a poner su vagina contra la boca de mamá.
Mientras Tomy ya estaba ubicado entre las piernas de la señora y sus lengüetazos iban desde el agujero del culo, hasta el mismísimo clítoris.
La mamá de Tami empezó entonces a dar pequeños chuponcitos en el botoncito de su hijita.
Tami volvió a sentir deseos de orinar, esta vez, no logró contenerse y durante mas de quince segundos estuvo orinando dentro de la boca de su madre. Parte era tragada por ella y parte rebalsaba por sus mejillas y cuello.
Cuando casi no quedaba nada saliendo, la mamá apretó con todas sus fuerzas el cuerpito de Tamara contra su boca y chupó fuertemente.
Tamara sentía que parte de su vagina salía hacia afuera. Cuando la madre la soltó, tenia los labios interiores por sobre los labios superiores y una sensación de electricidad, que solo el rose de la sabana la hacían tener un orgasmo…
Tomy estaba en posición de coito y movía su cadera con frenesí. Ambas al verlo se largaron a reír, y sin hablarlo, se fueron ubicando debajo de la pija del perro, mientras una la acariciaba, la otra lamia y daba chupetones intermitentes. Así hasta que a Tomy le salieron unas pocas gotas de semen, el cual compartieron en un sensual beso blanco, madre e hija.
Descansaron acariciándose con las manos, Tamy recorría el tajo de su mama, metiendo apenas el dedo índice en agujero del ano y subiendo hasta hacer un semicírculo en su clítoris y bajando nuevamente hasta volver a meterlo en su culo.
Por su parte su mamá, simplemente insistía en meter cada vez mas profundo su dedo medio, cada vez que Tami sentía dolor, movía su cola hacia atrás, para luego volver a dejarla que siga, así estuvieron largo rato, el dedo de la mamá, cada vez entraba mas profundo y Tamara ahora se entretenía con la cola de su madre, metiendo y sacando dos de sus deditos, logrando darle unas increíbles sensaciones de cachondes.
Tomy había apoyado su babeante hocico sobre el vientre de Tami, y miraba de un lado al otro lo que hacían sus amas, esperando que le dieran oportunidad para volver a participar.
A estas alturas, el relato debía cambiar de nombre a LA NENA, TOMY Y SU MAMÁ.
PD:
Espero que te haya gustado, deja por favor un comentario y un voto o escríbeme a
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!