la noche con un cuerpo infantil
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por sam66610.
Entre en su habitación con suma cautela, la oscuridad camuflo mi presencia, y yo como un lobo hambriento contemple su delicado cuerpo, era espectacular el molde de su estética.
Sobre todo esas dos carnes, los cuales me llevaban al sendero de la excitación.
Mi saliva escurría por mis labios y mi pene sobresalía con el deseo puro, de interactuar con aquella maravilla.
Al jalar su panty infantil de ositos, su vaginita me deleito con ese aroma de hembrita en desarrollo.
La excitación era indescriptible, mi miembro latía pues sabía que hoy cumpliría la fantasía más deseada.
Me acosté a lado de ella, rodee aquella cintura con mis manos y empecé a recorrer con mi lengua venenosa, el cuerpecito inerte de aquella mujercita.
Mi entras mi pene se besaba con pasión con aquellos labios vaginales.
Empecé a darle dos bofetadas a su trasero, por la osadía de oponerse en semanas pasadas.
No movió ni un musculo a pesar de que mi semen le pringaba las nalgas, estaba profundamente dormida, y es entonces cuando aproveche reposar mi pene en su inexperimentada abertura.
Como broche pintaba y movía su intimidad, sin la intensión de perforarla pues temía lastimarla, aunque a veces la cabeza de mi miembro decía lo contrario y era necesario alejarlo un poco.
Sus senos dos uvas inmaduras con los pezones rosadas y picudas, al paladearlo sentí el sabor agridulce a causa de su inmadurez, sin embargo mi inexperto aparato sexual, no pudo más y llego al orgasmo paradisiaco.
Todo un charco de semen en la entrada de su vagina y mi cabeza por fin vuelve a la razón, por fin me siento en paz.
Diga lo que diga mi conciencia hoy no me torturare, soy consiente de lo que hice, no la lastime ni la viole solo saboree y roce un pastel.
Nadie se dará cuenta, tal vez en la mañana notara una tinta blanca en su prenda, pero no la tomara en cuenta, no lo sabrá.
Me gustaría que sepa que sus ojos, cabello, boca, senos, vagina.
Son solo míos, sin embargo deseo que tenga una vida normal, no quiero ensuciarla con mi anomalía, no es normal, la sociedad lo pone así y así debe de ser.
Tiene los ojos como los tengo y el cabello rojo al igual que el mío, es mi sangre y no soy su padre soy su amante oscuro y secreto.
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