La pequeña zorrita de papá
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Shulamx.
Mi nombre es Minerva; esta historia es 100% real.
Siempre tuve una relación muy estrecha con mi papi, me gustaba ver películas, jugar, bailar y por decisión de mi mamá comencé clases de ballet y jass desde los 3 años.
Era una niña bajita, risueña, cabello ondulado y largo, ojos grandes color café y muy nalgona (herencia de mi mamá).
Recuerdo que al regresar del kinder iba cada tarde a mis clases de ballet y jass y gracias a esto empecé a tener mayor soltura de mi cuerpo, mas confianza y ser mas flexible.
Una noche cuando cenábamos en familia mi mamá recibió una llamada que un tío en el rancho había enfermado de gravedad y ella que solo se dedicaba a ser ama de casa se ofreció a cuidarlo.
Al siguiente día que era sábado mi mamá partió muy temprano al rancho y yo me quedé a cargo de mi papá.
Como deben de imaginar yo extrañaba mucho a mi mamá a pesar que se acababa de ir y estaba triste; mi papá (que se llama Alberto) dijo que compraríamos muchas cosas y veríamos películas.
Fuimos a la recámara de mis papás y comenzamos viendo películas de terror (que a esa edad eran mis favoritas) pero hubo un momento que me dio mucho miedo y mejor me dormí.
No sé cuánto tiempo habrá pasado, pero cuando desperté vi que mi papá veía una película pornográfica, el no se dio cuenta que yo estaba despierta, yo me quedé inmóvil al ver esas escenas era una mujer haciendo sexo oral, no hice ruido porque quería seguir viendo; si bien no sabía que era, mi intuición sabía que no era apto para niños.
Yo seguía muy atenta viendo la película y empecé a sentirme muy caliente, mi papá volteaba a cada rato para asegurarse que yo siguiera dormida, en una de esas veces me cachó viendo la peli; yo cerré muy fuerte los ojos pero ya era tarde ya había sido descubierta.
Mi papá pausa la película y se voltea hacia mí y me dice:
¿Nena, has estado viendo esta peli?
Yo: totalmente sonrojada y apenada no pude contestar y empecé a sollozar.
Yo: perdón papi, no me regañes
Papá: Mine, no te voy a regañar esto es normal, eso que ves en la peli lo hacen los grandes, en algún monento tú también lo harás.
Yo: ¿En serio papi?
Papá: Si amor, ¿quieres seguir viendo la peli? ¿te gustó lo que viste?
Yo: Si papi
Papá: ven nena acuéstate más cerca de mi para que estemos mas cómodos.
Me acerqué a mi papá y al meterme bajo su sábana me percaté que no traía su bóxer y tenía una gran erección, le dije papi por qué no traes ropa y por qué se te ve tan grande.
Mi papá me abraza y me besa la frente y me dice: porque sin ropa se disfruta más este tipo de películas y esto (tocándose lujuriosanente) se llama pene.
Me reí y me dijo: ¿Mine te gusta?
Yo: Si, se ve bonito; mi papá me veía con mucha lujuria y ternura a la vez, debo aceptar que yo sentía muchos cosquilleos en mi vagina; en ese entonces no sabía que era, pero me estaba excitando.
Papá: Eres una nena muy especial, muy linda e inteligente y por eso te voy a enseñar a ser una mujercita.
¿Quieres Mine?
Yo: Si papi.
Mi papá se acercó más a mí y me dijo, te voy a enseñar a hacer muchas cosas que vimos en la peli, no alcancé a contestar cuando mi papá me estava besando en la boca, al principio fue tierno y conforme pasaba el tiempo sus besos se volvieron más intensos, yo al principio no respondía tenía dudas, en el fondo sentía que no era correcto, pero él me empezó a hablar con dulzura, acariciando mis piernitas hasta que levantó mi camisón rosa y empezó a acariciarme por encima de mi calzoncito rosa, yo apreté mis piernas pero deslizó su mano; sobaba mi vagina tan suavemente que ya no pude más y abrí por completo mis piernas, empecé a responder los besos y ahí supe que ya no me iba a controlar.
Cuando separé las piernas y respondí los besos, el me dijo: nena, lo estás haciendo muy bien, se destapó por completo, estaba totalmente desnudo, muy excitado y me dijo ahora sigues tú Mine.
Lentamente me quitó el camisón y comenzó a besarme de nuevo, los labios, el cuello, mis pezoncitos de nena, mi pancita y llegó a mi calzoncito.
Levantó su cara (él estaba arriba de mí y yo boca arriba) y me dice, esto te va a encantar; empezó a besarme la vagina y el clitoris por encina del calzoncito, yo suspiraba y gemia.
Papá:¿Te gusta amor?
Yo: Si
Papá: ¿Quieres sentir más?
Yo: Si papito
Papá: ¿Segura?
Yo: Sí
Mi papá bajó mis calzoncitos, los aventó y me dice: amor estás mojadita, eso significa que te está gustando ¿te gusta? Yo rápidamente contesté sí.
Papá: Esto te va a gustar más
Hundió su boca en mis labios vaginales, besaba mi vagina, la lamía, de un solo lengüetazo avarcaba mi vagina y mi clitoris.
Yo jadeaba, gemia, arqueaba mi espalda y me decía
Papá: Mi nena de 3 años disfruta con su papi, es una mujercita, yo seguia gimiendo de repente me dice: ahora vas a aprender a disfrutar el pene de papi, el se tira sobre la cama, me hinca a un costado y me dice, dale besitos al pene de papi y chupalo como si fuera una paletita.
Yo tomé con mis manitas su pene y muy apenas pude besarle la cabecita, mi papá tendría 29 años, era fuerte y con 19cm de verga gruesa y venuda.
Me dijo lamela de arriba a abajo chupala, dale besitos.
Mi papá gemia y cerraba sus ojos, me decía que era su mujercita, que era la mejor.
Ya había agarrado ritmo, lo lamia, le chupaba la cabecita, le daba besitos y cuando lo lamia de arriba hacia abajo con mis dos manitas se lo agarraba y se lo jalaba de arriba hacia abajo.
Papá: Amor aprendiste muy rápido.
Yo seguía hincadita arriba de la cama a un costado de él, cuando me separó las piernas chupó su dedo y me empezó a dedear.
Me quedé quieta fui incapaz de seguir chupándolo, estaba extasiada al sentir su dedo recorriendo mis labios, sobando la entrada de mi vagina y acariciando el clítoris, siguió haciendo eso hasta que me dice nena ven, móntate.
Me cargó con una mano, con la otra pegó su pene al abdomen y me dijo,
Papá: Nena ayúdame con tus manitas ábrete las nalguitas, yo estaba de pie, mis piernas estaban separadas, una de cada lado de su cadera, era dificil; pero ayudaba que mi papá estaba delgado atlético y yo era flexible por el jass, de tal manera que mis pequeños labios estaban separados, dejando mi vaginita expuestas.
Papá: ¿Nena ya te separaste bien las nalguitas?
Yo: Si papi
Papá: Te vas a sentar arriba de mi pene nenita.
Yo: está bien
Mi papá seguia pegando su pene al abdomen, me senté, y se lo atrapé con mis nalguitas y mis labios vaginales.
El me restregaba adelante y atrás, mi ano, mi vagina y mi clítoris estaban siendo estimulados a la vez.
Cuando me restregaba hacia atrás sentía sus bolas rozando mis nalgas y ano, cuando me restregaba hacia adelante sentía su cabecita frotando el clitoris.
Yo gemia como loca, mi papá me decia:
¿Te gusta Mine?
Yo: Sí
Papá: ¿Me detengo?
Yo: ¿No?
Papá: Nena sigue así, mas rápido, más fuerte, así mi nena, muévete adelante y atras para papi.
Yo: Si papito.
Yo tenía los ojos en blanco, gemia, jadeaba.
Mi papá cerraba los ojos y luego los abría, me apretaba las nalgas y me decía: mi nena que nalgas tan ricas tienes, redonditas, grandes y suavecitas.
Pasaron como 5 minutos más en esa posición, los movimientos eran mas fuertes y rápidos; me restregaba con fuerza adelante y atrás y de repente me dice ya no puedo más Mine, te voy a dar una lechita bien rica, me levantó me acostó boca arriba me abrió las piernas y me puso la cabecita en la entrada de la vagina sin penetrarme, solo empujando poquito.
Salió con tanta fuerza que aún recuerdo que me cayó en la pancita y parte de la boca.
Me dijo lame la lechita que tienes en la boca.
Recuerdo que lo hice y tenía cierto dulzor que no lo hizo tan desagradable para mí a esa edad, de hecho hoy puedo decir que la leche de mi papá es de las más ricas que he probado.
Mi papá me limpió con mi camisón el resto de semén, se acostó junto a mí, me abrazó, me dió un besito tierno en la boca y me dijo:
Mine, nena eres mi mujercita, esto no se lo puedes decir a nadie, ni a mami
Yo: papi no le diré a nadie te quiero mucho y me gustó mucho.
Ya era tarde, nos bañamos juntos, jugamos en la regadera, nos agarramos, nos besamos me cargó y con su dedo meñique enjabonado lo intentó meter en mi vagina, me dolió y grité, me abrazó y me dijo, mi nena pronto iniciaré a dilatarte para prepararte para lo mejor.
Yo: ¿Papi qué es lo mejor?
Papá: Meterte mi pene en tu cosita
Yo: Si papi
Lo abracé, lo besé en la boca, con lengua como me enseñó.
Me vistió, me hizo mi cena me acostó a su lado y cerramos la noche viendo mas películas porno hasta que me dormí.
Espero que les haya gustado, fue 100% real, pronto les contaré cómo fue mi primera vez poco antes de cumplir 4, cómo nos gozamos papi y yo, como me hice adicta al sexo con hombres mayores a mi temprana edad.
Siempre he pensado que los papás deben enseñar a sus nenas a coger, que mejor que alguien que te ama te enseñe a disfrutar tu cuerpo, a conocerte, el mío lo hizo y se lo agradezco.
Para mí la edad ideal para empezar a conocer el sexo es entre 3 y 4 años.
Cuando tenga una hija le pediré a mi esposo que le enseñe poco a poco a partir de que cumpla 3.
Ojalá acepte.
que rico relato!!
Si tu esposo no acepto yo con gusto lo hago