La sorpresa de una tradicion
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
La familia estaban reunidos en la casa de doña Eva y don Alfonso, todos estaban cenando, una cena muy lujosa cumplía ya 18 años Ana Maria hija menor de Eva y Alfonso. Tambien estaban los abuelos don Rómulo y don Eugenio, los hermanos y hermanas de doña Eva y don Alfonso. La noche pasaba la niña bailaba con todos los hombres de su familia hasta que doña Eva hablo, apagaron la música y oyen lo que decía su hija nerviosa iba escoger un hombre de su familia para que la desvirginara al sacar el papel con el nombre todos se sorprendieron mucho
– doña Eva.- es don Rómulo
Todos sorprendidos veía al hombre que sonreía el un señor de 65 años bajito, morenos ojos grandes musculoso por el trabajo que hacia, hace muchos años que había desvirginado a su hija Eva si, madre de Ana Maria.
Ana Maria al oír el nombre de su abuelo volteo a ver a su madre, cuando su madre salio del comedor, Ana Maria la siguió y dijo.-
– madre.
– si mi niña dime.
– tengo miedo mami
– No te asuste, que yo pase por ahí y es un poco doloroso pero muy delicioso. Disfrútalo déjate llevar tu abuelo es muy experimentado.
– Esta bien madre gracias.
Ana Maria una muchachita de 18 años, morena clara pelo café, alta una estupenda figura delgada nalgas redonda y caderas ancha, unos pechos grandes y bien marcados.
El padre de Ana Maria y su madre la agarraron de sus manos y la llevaron directo don de estaba el abuelo esperándola, todos los invitados sentados alrededor de la cama matrimonial antes que pasara otra cosa, llego el brindis.- por anita, para que en las manos del abuelo Rómulo empiece su vida de niña a mujer. Que delante de todos lleguen a saltifacerse uno al otro llego el momento de entregar a la joven con su abuelo los padres de Ana Maria le dieron a la joven don Rómulo sonrió agarro la mano derecha de la joven todos gritaban beso, beso. La madre de ana saludo a su padre y al detenerse al oído le dijo.- papi despacio por favor, sabes por que te lo dijo. Se oían risa y aplausos.
Pasaron al cama, don Rómulo besaba el cuello de la hermosa nieta succionaba con fuerza a parase enfrente de ella empozo a besarla, la lengua del hombre entraba a la boquita dulce.
Empezó a lamer los senos de la joven, mordía despacio, ana sentía un gran placer sus pezones estaban muy parado y don Rómulo lo sabia succionaba fuerte mente los pezones lamía los redondos senos mientras las manos desbrochaban la falda de su nieta, a quitarle la ropa empezó a besar el vientre y las piernas de su nieta, se excitaba mas y mas por cada lambida o caricia que le daba su abuelo Rómulo.
La joven agarro valor y empezó a besar el cuello de su abuelo acariciaba sus pectorales músculos y marcados. En ese momento el hombre escogió la mano de la joven y la llevo a su miembro al sentir la herramienta de su abuelo. Ella abrió sus ojos y bajo su mirada tenia en su mano un miembro muy grueso no la abarcaba, ana Maria volteo a ver a su padre y su madre estaban sentados enfrente de la pareja, doña Eva le sonrió, se veía un poco preocupada, por su hija.
El hombre acariciaba las piernas de su nieta, fue bajando y empezó a lamer la vajina de la joven, Ana Maria cerro sus ojos cada vez que su abuelo lanbia tierna raja metía su lengua entre las paredes virginales de Maria. Empezó a subir besaba y lanbia el cuerpo de la muchacha llego al cuello de la joven, le ‘planto un beso, en la boca, Ana Maria sentía el pene de su abuelo tentando la entrada se su cueva.
Ana Maria agarro el miembro de su abuelo y puso entre los labios de su concha, las piernas de su nieta lo tenia rodeado, don Rómulo llevo hacia el, las caderas desnudas de la joven, se acerco mas la verga a la entrada de la concha Ana, empezó a empujar el hombre despacio, tomo la enseguida la forma gorda de la cabeza de la verga de don Rómulo, volteo a ver a sus padres, doña Eva movió la cabeza afirmando que siguiera.
Con un movimiento firme la penetro unos centímetros la cabeza desapareció inmediatamente en la concha de Ana Maria
Los ojos de la joven se abren brotaron unas lagrimas que empezaron a caer, la vulva de la joven aumento de ancho de tal forma que el dolor que sentía se le hacia casi intolerante.
Don Rómulo se espero unos minutos para que la vajina de la joven se acostumbrara al intruso que estaba desgarrándola, el hombre sentía que estaba en el cielo al sentir la estreches del coño de su nieta. Otro empujón mas sintió la joven este ultimo sintió que los huevos de su abuelo le pegaban en sus nalgas, otro grito pego la joven todos voltearon la madre de Ana Maria se levanto rápidamente de su asiento.
Ana Maria tenia cerrados sus ojos, los puños apretaban las sabanas de la cama donde descansaba su cuerpo, muy lentamente se fue relajando, abrió sus ojos, se inclino hacia delante una de sus manos toco el vientre de su abuelo pero fue bajando y comprobó por si misma que la verga de su abuelito estaba alojada en su interior, lentamente empezó a bombear, sacarla y meterla, los huevos del hombre pegaban en las nalgas de la joven por el bombeo que estaba haciendo poco a poco empezaron los gritos de placer que en las bocas de los dos salían. Salía la verga de don Rómulo se veía mojada por los jugos que salía de la vulva de Ana Maria con unas manchas de sangre.
Don Rómulo comenzó a moverse rápido, la joven rodeo con sus piernas el cuerpo de don Rómulo, gritaba como un loca, su cabeza golpeaba con la almohada al recibir las embestidas, se oían gritos de placer apretaba fuertemente a la joven como siquiera traspasarla, el hombre eyaculo una gran cantidad de leche en el interior de Anita, apretó con fuerzas la cintura de su abuelo se retorció su cuerpo tuvo el primer orgasmo de su vida.
Salio de adentro de su nieta y cayo la verga de don Rómulo endurecida aun, saliéndole aun pequeñas gotas de semen mojado con los jugos de su nieta e hilos de sangre.
Ana Maria, sus delgadas y abiertas piernas de su desflorada vulva, grandes gotas de secreción del abuelo, se escurría para recorrer el culo de ana donde se amontonaba para caer finalmente.
Los padre de la joven se incorporaron ayudando a la joven a levantarse con la respiración agitada estaba bañada de sudor pero sonrió a su madre así doña Eva quedo tranquila.
Al pasar el tiempo Ana Maria y su abuelo seguían teniendo relaciones pero si que nadie se enterara esa noche se enamoraron y con el tiempo pasaron los meses don Rómulo murió pero en el vientre de Ana Maria llevaba un gran sorpresa.
El monkirelatos
Yo lo tengo a mi suegro.
Que empezo cogiendome y luego a mi hermana y a mis dos hijas y mi sobrina.