La tarde que fuí la mujer de mia buelo.
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por meridano.
EL último día de clases por la tarde, casi de noche, fui la mujercita de mi abuelo.
Desde ese día, he sido de el en tras ocasiones. Quiero compartir con ustedes como fue esa primera vez en que tuve relaciones con mi abuelo.
Mi nombre es Claudia y tengo 18 años, acabo de entrar en la UVM, para estudiar la carrera de Psicología. Soy muy atractiva, soy de baja estatura, mido 1.55, mi cabello es largo de color rubio, mis ojos verdes, soy blanca de ascendencia libanesa y vivo en una Fraccionamiento llamado las Américas en la ciudad de Mérida, mis amigos le apodan la comunidad, porque aun que es fraccionamiento para gente acomodada como mis papas, aun no tiene servicio de autobús, y los taxis tampoco van allá, porque está pasando el periférico. Yo en ese momento estudiaba en el colegio Rogers Hall y estaba saliendo de mi prepa.
Yo siempre me habían llevado bien con mi abuelito, ya habían pasado unos 10 años que mi abuela murió y él se quedó solo. Él es mi abuelo por parte de mi papa y se llama Mario, tiene 75 años pero para su edad se ve bien, tiene muchos bellos en el pecho, blancos por la edad, y tiene pelo aun en la cabeza jejeje, no es calvo como mi papá, creo que todo comenzó hace un año, cuando mis papas salieron de viaje, y mi abuelo se quedó a cuidarme en mi casa. Me estaba duchando y Salí de forma descuidada solo con mi toalla, mi hermanito habían dejado su estúpida patineta en el camino, tropecé con ella y me caí torciéndome el tobillo, comencé a gritar de dolor y mi abuelo subió por mí, me levando de suelo y me llevo a la cama, me consoló y me puso una pomada en el pie, después de que sobrepuse del susto y el dolor, me di cuenta que la toalla se me había caído, el me cubrió con la toalla y así semidesnuda me cargo a mi cama. No me dio vergüenza, me entro un sentimiento extraño, me sentí bien sabiendo que el me miro desnuda y la forma en la que me cubrió, también recordé la mirada que puso cuando me vio, antes de taparme recorrió todo mi cuerpo con la mirada y me di cuenta por su expresión facial que le gusto lo que vio.
No podía dejar de pensar en ello, y también notaba que el tampoco, el mi miraba raro, siempre seguía siendo cariñoso, pero ahora siempre buscaba el pretexto para abrazarme, tocarme el cabello. También ahora se ofrecía mas cuidarnos a mí y a mi hermanito. Yo me daba cuenta de todo, en una ocasión, me estaba cambiando de ropa, la puerta de mi cuarto estaba abierta, sentí que alguien me miraba y por el espejo vi su silueta, allá estaba parado en la oscuridad mirándome, y yo me sentí exitada por ello, lo deje verme, yo fantaseaba en como seria entregarme a él, sobre todo cuando lo veía bien vestido, con su guayabera blanca, y su perfume de olor fuerte como lo usan todos los abuelos, mi abuelo siempre viste muy elegante.
Entonces ya terminando el curso escolar, en mi escuela hicieron una junta para organizar la cena baile de fin de curso, fui con mi madre, y tenía mi uniforme escolar, era de tarde. Termino la junta aburrida, y mi mama tenía que ir de compras, pero yo quería ir a casa, entonces ella habla a mi abuelo para que me venga a buscar a la escuela.
Mi abuelo llego en su auto, un Grand Marquis modelo 1985, él tenía varios autos, pero adoraba ese, porque mi abuela se lo regalo en un aniversario, estaba como nuevo, mucha gente estaba enamorada de ese auto, color negro y muy amplio.
Estaciono y se bajó, me dio un beso en la mejilla, como todo un caballero me abrió la puerta del auto para que yo suba. Veníamos platicando, de la escuela, de mis amigos , pero notaba su mirada, y de vez en cuando me tocaba las rodillas o colocaba su mano sobre mis piernas mientras manejaba. Comencé a sudar, él lo noto, me dijo —¿te enciendo el aire acondicionado¡–le dije que si, pero yo sudaba por que imaginaba como seria si el, me hiciera el amor en el auto, me sentía extraña por sentir eso por él, era mi abuelito.
Tenía una sensación rara en el estómago, como mariposas, tenía ansiedad. Mi abuelo ya estaba frente a la gran plaza, dirigiéndose por la carretera a progreso para entrar más adelante al fraccionamiento américas, cuando entonces hice algo estúpido, pero de lo que no me arrepiento. Abuelito, olvide algo en casa de una amiga, ¿me llevas ?, claro chapis. Así me dice de cariño, donde es, entonces lo fui dirigiendo y hice que salga por el periférico. Mira es por la universidad marista, entra por esa calle. Allá hay casa de gente rica, muy grandes, pero están lejos de la calle, tienes que entrar por una vereda para llegar a allá. Hice que entre a una vereda que conduce a una casa de descanso de una familia llamada Fernández, pero después de esa casa, la vereda dobla detrás de la casa, y solo está el muro. La vereda es de tierra y piedras, y mi abuelo llego al final.
¿Chapis estas segura que aquí es? Yo no sabía que decirle. Solo había monte y unas veredas más angostas donde los campesinos iban a sus rancherías, solo podían pasar bicicletas, no sé como pero él ya sabía que es lo que me tramaba.
Entonces le dije, abuelito me perdí, perdóname.
Él puso su mano sobre mis muslos, me dijo ,–no te preocupes—.
Entonces, le dije una estupidez. Si trajeran una chicas aquí, nadie sabrían si la están violando, le tome la mano y comencé a acariciársela, mis rodillas me temblaban. EL se bajó del auto bruscamente, creí que lo había molestado, me sentí tonta, y sucia por hacerle eso a mi abuelo.
El dio la vuelta y abrió mi puerta me tomo de la mano, pero no podía bajarme, asi que me cargo en sus brazos y me sentó en la tapa del maletero, comenzó a besarme y pronto yo a él, tienes los mimos ojos de tu abuela me dijo y también su olor y su suave piel. Entonces comenzó a desnudarme ahí mismo, aun no estaba escuro, me quito la blusa, luego la falda, y finalmente mi ropa íntima, me recostó sobre el maletero de su auto, me abrió las piernas , y comenzó a pasar su lengua sobre mi vagina, que estaba muy húmeda, sentía la puntita de su lengua recorrer toda mi rajita, con sus dedos separo mis labios vaginales y introdujo su lengua en mí, me sentía de mil, mis orejas estaban calientes, toda mi cara. Luego me lamio las piernas, mi barriga mis senos, paso su lengua por todo mi cuerpo, incluso. Se bajó el cierre de su pantalón y saco su pene, lo tenia bien duro, muy bien para sus 75 años, suavemente me abrió las piernas , coloco su pene en la entrada
de mi vagina y empujo suavemente, la cabecita de su pene fue hundiéndose en mí, sentía como resbalaba por mis paredes vaginales muy lubricadas por mis fluidos, empezó a mover sus caderas, sentía muy rico su pene moviéndose en mi, me incorpore y lo abrace sentada en el maletero de su auto mientras me bombeaba, me besaba el cuello como si fuera un vampiro intentando morderme, podía sentís sus dientes y su respiración frenética acompañada de jadeos de placer en mi oído, me cambio de posición, me apoyo boca abajo sobre el maletero y me dio duro como de perrito, yo decía si mmmmm si abuelito, asi asi asi, hasta que escuche su respiración acelerar mas y decir un ahhhhhh mmmm aaaahh, acompañado de una sensación calidad en mi vagina, tenia su rica leche en mí , la leche que engendro a mi padre, y de la que yo soy parte ahora la tenía en mi toda.
Saco su pene, y se subió el cierre de su pantalón, suavemente me tomo en sus brazos y me llevo dentro el auto, donde me vistió tiernamente como si yo fuera una muñeca, camino a casa, tenía y mi cabeza reposando en su pecho mientras manejaba, no decíamos nada, , pasando en periférico nos paró un retén de la policía (la ssp con su patrullas negras, el policía nos preguntó si todo estaba bien, yo solo me sonreía y el también, como niños después de hacer una travesura, el policía nos dejo ir. Fue una gran experiencia la de aquella noche, hacerlo con él, en un lugar casi público, y lo hemos repetido otras veces, ya en un hotel del periférico, uno que tiene el logo de una manzanita, amo mucho a mi abuelo, como me trata como una dama, de una forma que ninguno de mis novios lo ha hecho jamás, como todo un caballero.
Espero que este relato les haya gustado.
Desde la muy noble y muy leal Ciudad de Mérida.
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