La Única Perra que necesitan mis Amantes parte 2 – mi ninfómania, mi pérdida y nueva vida.
Todo lo bueno tiene que terminar y muchas veces algo nuevo suele pasar..
Perdón la demora, trabajo y criar a una niña sola es difícil pero no creo que encuentre a alguien Igual a su padre y ella tampoco necesita otro padre.
Como dice el Título mi pérdida y ninfómania, Pongo era un buen perro pero muchas veces no solo la edad pero también las enfermedades se llevan a quienes amamos y queremos, no recuerdo que tenía Pongo pero no pudimos hacer mucho y lo pusimos a Dormir para que deje de sufrir fue una perdida para toda la familia pues no era una mascota era parte de nuestra familia, antes de que muriera pero me rellenó como a pavo de navidad Estado Unidense, nuestras sesiones eran de noche o cuando estábamos solos, siempre en el mismo lugar, ese cogin que se adaptaba a tu culo, yo le mostraba el culo y el iba a coger a su hembra, por suerte nunca tuve problemas con infeciones ni nada por el estilo y me enteré mucho después de que puede pasar, incluso en mi inocencia pensé que podía quedar embarazada de Pongo.
Pero sin el alrededor no había quien calmara mis urgencias de placer extremo, en ese entonces cuando Pongo murió ya tenía 9 y yo 18 mi hermano 22, estaba trite y Ahora sin mi semental, pero no duraría mucho pues nuestros padres consiguieron otro perro, otro dálmata, Manchas, pero aún era un cachorro y sabía que al menos hasta que cumpla segundo año y sea más grande no podría hacer que me monte como hacía Pongo, la verdad no sé cómo paso lo que voy a contar pero si mal no recuerdo era en un matrimonio de un familiar, al que fuimos, yo con 18 ya podía beber y estaba solo con familiares, pero seguía cachonda, como si estuviera en celo todo el tiempo, estos familiares tenían un perro no muy grande un cooker macho por suerte, me ofrecí a cuidarlo e intentar llevarlo a algún lugar y hacer que me coja pero era muy pequeño y apenas podía si quiera masturbar al perrito, al menos lo hice pasar un buen momento con mi mano y boca, luego de la ceremonia, vino la fiesta y las bebidas, recuerdo vagamente como es que termine rogando a mi hermano que me llevará a mi cama y luego como mi mente me daba vueltas y todo se volvía claro, mi hermano y yo estábamos cogiendo, se sentía bien, mi hermano ya tenía experiencia y complacer a una chica casi inexperta en el sexo con su propia raza me llevo a varios orgasmos antes de eyacular dentro de mi, a la mañana siguiente desperté con resaca y pensando que era un sueño pero estaba desnuda y mi hermano en el suelo durmiendo de la misma manera, los días pasaban y pronto me encontré en la situación de querer repetir esa noche, por suerte mi hermano pensaba igual, ya que no había perro que pudiera complacerme, logré encontrar un pequeño te reemplazo, pero muy bueno, lastimosamente no duró mucho y tampoco pude entrenar a Manchas en esa área, pues yo me iba a mudar pars ir a una universidad al siguiente año, por suerte un amigó le hablo de mi a su abuelo que alquilaba una pequeña casita al lugar al que iba y mis padres me mandaban dinero para pagar el alquiler, comida y demás cosas que necesitaba.
Esos años fueron relativamente pacíficos hice nuevos amigos y hasta conseguí trabajo para darme mis gustos, cuando cumplí 21 los abuelos de mi amigó decidieron venderme la casita, que alquilaba pues querian dinero, yo les dije que era mejor que siga en alquiler así ganaban un dinero fijo y constante, pero no recuerdo el motivó exacto pero querían dinero en gran cantidad, mis padre hablaron y llegaron a un acuerdo, pues un año antes mi hermano igualmente se consiguió una casa y ahora esta casa era mi regalo de despedida pues me iba a quedar en el lugar, unas semanas después de arreglar todo y de que oficialmente esa ya era mi casa varios de mis amigos estaban regalando y vendiendo perritos que habían tenido los perros que ya tenían pues no podían cuidar a todos, recuerdo que decidí adoptar a un pastor alemán, un Husky y un labrador y compré al Golden retriever con descuento por amistad, estaba ansiosa pues vivía sola y ahora ya tenía nueva compañía, cuando cumplí 23 los 4 Cachorros ya tenían ganas de cruzar e intentar dejar descendencia, uno a uno los fui entrenando para que me cogieran a mi a las pocas semanas andaba desnuda por casa acompañada por mis 4 amantes, cada vez que tenían ganas yo me ponía en 4 y uno de los 4 me montaba, los más activos eran el pastor alemán y el Husky a veces se intentaban pelear por quién me montaba primero, ya no intentaba parar el nudo simplemente dejaba que saliera y entrara con las embestidas y me gustaba quedar anudada por ellos sentir su semen dentro de mi útero, vagina y culo, había veces en las que me lo metían por la retaguardia por lo apurados que me embestian tenía que caminar con el ano con vaselina o lubricante para que no doliera el anal, pero disfrutaba cada uno de ellos, a veces los 4 me montaban en un dia cada 30 a 40 min cambiaba de Macho, el más grande que sentía era el pastor Jack, el segundo más grande era Ramsés el Golden retriever, luego venían Kaiser el Husky y finalmente Café el labrador, recuerdo mis orgías incluso me cogían de misionero me tiraba en mi cama con la cintura cerca al borde de la cama y con las piernas abiertas, el primero en aprender a cogerme en esa posición fue Jack quien me la metía y no podía dejar de gemir, cada vez que su nudo entraba y salia, dolor y placer mezclados, luego el abotonamiento no se cómo mi vagina seguía siendo capaz de quedar abotonada con todo los que hice, pero me gustaba sentir esos 30 minutos en los que me llenabanel útero queriendo preñarme y luego todo chorreaba hasta que había un charco de semen y jugos vaginales en el suelo.
Esta historia y la anterior muy buenas… espero haya continuación. Saludos.
Que delicia de historia, 😍😘😁. Me encanto.