La visita de mi hermanita de 9 años 07 como si fuera la última vez

una ocasión especial antes del principio del fin..
La Visita de Mi hermanita de 9 años 07 Como si fuera la última vez

En la última parte les contaba acerca de un par de ocasiones en las que probé la adrenalina con mi hermanita Michelle, además de enterarnos que ella se tendría que quedar indefinidamente en nuestra casa. Ya habían pasado 6 semanas desde que había llegado y aproximadamente 4 semanas y media desde que teníamos nuestros encuentros, después de esa ocasión en la que habíamos tenido sexo en la noche, con mi familia en la casa, nos despertamos en la mañana, Michelle se tuvo que bañar inmediatamente, pues habían quedado restos de semen seco en sus piernas y en su vientre, como dije en la parte anterior, metí a lavar el cubrecama y la sabana. Era viernes así que mi mama y mi abuela estaban trabajando como siempre por lo que no hubo necesidad de darles explicaciones. Michelle se terminó de bañar, yo prepare el desayuno, comimos, y el día también transcurrió con relativa normalidad, salvo las miradotas seductoras que me lanzaba mi hermanita de vez en cuando que ya eran costumbre. Habíamos tenido sexo hace apenas unas horas, por lo que yo no estaba ansioso ni nada, así que me lo tome con calma. Hice mis actividades diarias, mi hermanita jugaba, hacia unas cuantas tareas, que para ella no eran nada en realidad y todo transcurrió con normalidad hasta después del almuerzo.

Yo le digo que si quería ver anime conmigo, y ella asiente, subimos a mi cuarto, busco mi vieja y confiable Tablet, la cual habíamos estado usando para ver juntos anime en la cama acostados en vez de sentados en la PC. Entonces, tomo el cable USB, conecto la Tablet, y con mi hermanita guiándome, voy buscando que anime podríamos descargar esta vez, yo entro a una popular página de anime y busco cual está en temporada, pero mi hermana me interrumpe y pide buscarlo ella, yo acepto y le doy la silla. Estaba a punto de teclear cuando me dice que me cubra los ojos, que es una sorpresa. Yo siguiéndole el juego me voy a la cama, le digo que esperare ahí.

Sinceramente no tenía muchas expectativas, pensé que ella pondría un anime estilo Magic Girl, o alguno relacionado a historias de la escuela, de esos muy suaves. Ya habían pasado unos tres minutos y le pregunto, aun con los ojos cubiertos por mi brazo.

-¡Espera, solo falta un capitulo por descargar, no seas impaciente!-Me dice.

Supuse que era corto, pues por lo general, cuando descargamos un anime nuevo, solo veíamos primero el primer capítulo para ver si nos gusta. Pasaron un par de minutos más cuando escucho el sonido del cable cayendo y a ella casi saltando a la cama, cae, casi que sobre mí, yo la abrazo y busco la cobija

-¡Uy! ¡Que pesada estas!-Le dije burlándome

-Hahaha, ya lo tengo.-Me dijo, mientras me daba uno de los extremos de la Tablet, ella le pico a la galería y puso el primer capítulo. Ella tenía una sonrisa inmensa, de entre burla y malicia, y estaba claramente sonrojada. Me pregunto que se habrá traído entre manos.

El capítulo inicia, y empiezo a sospechar que algo está mal. Creo reconocer el logo de una casa de animación que he visto más de una vez. Sale el logo del anime, no lo reconozco, pero está plagado de rosado, los Kanjis tienen apariencia esponjosa, hay un símbolo de hombre, entrelazado a uno de mujer, el primer capítulo se llama «Experiencias mojadas en un día caluroso» El cual es repetido por voces infantiles que hablan en japonés. Ahora lo entiendo, es un  anime Hentai. Y no cualquiera, es uno sobre lolis. Mi hermana es todo una pilla pienso.

-Ehm…Michelle, esto…es…-Le digo, con una cara probablemente de pena y desconcierto.

-¿Acaso no te gustan estos?-Me dice con una expresión llena de una especie de orgullo.-Con los muchos que tenías…

-Ahhh…Bueno.-Le digo, en señal de aprobación a lo que probablemente va a pasar, sinceramente yo también estaba emocionado, podría coger dos veces en pocas horas, y todo porque lo quería ella.

La historia del anime, se veía bastante plana, oh, una Loli que tiene que ir sola a clases particulares con su profesor en verano, oh, que original. Pero a pesar de todo, la animación se veía bastante decente, no tardo mucho para que apareciera la primera escena lasciva, el profesor convence a la pobre niña de pelo negro que se desnude, una cosa lleva a la otra y el dedo del profesor termina en los genitales de la niña, y a pesar de que este tenía la censura típica de cuadraditos, se veía que su masaje se concentraba en su ano. Mi pene empezó a erectarse, y esto fue perfectamente notado por mi hermanita, la cual estaba casi que acostada encima de mí. Ella voltea a mirarme con ojos picaros y procede a meter su mano debajo de mis boxers, empieza a estimular mi glande. Seguimos viendo el Hentai, el profesor tiene a la Loli inclinada sobre un escritorio, mientras lame sus piernas y sus genitales. Yo decido participar también y meto mi mano debajo del pijama de mi hermanita, que ese día constaba simplemente de una camisita de tirantes y un short bastante ajustado, morado y con un estampado de flores. Mis dedos llegan al elástico de sus braguitas y la aparto para llegar a sus labios, estaba claramente húmeda.

Ambos empezamos a tocarnos muy suavemente mientras veíamos como el profesor se preparaba para insertar su pene relativamente grande en el pequeño ano de su alumna Loli, mientras mis dedos entraban y salían enérgicamente de la vaginita de Michelle, y ella masajeaba desde mi glande hasta mi base, pasando de vez en cuando por mis testículos. Los latidos de nuestros corazones empezaron a sonar cada vez más fuertes, estábamos claramente excitados en ese punto. El maestro ahora estaba penetrando salvajemente el culo de la Loli, mientras esta ponía muecas de placer y dolor un poco exageradas.

-Ah…Hermano Miguel…Ah…-Decía Michelle mientras sus caderas se movían casi por instinto cerca de mi pierna.

-Ah, olvídalo.-Dije mientras me levantaba de golpe.

Mi excitación había llegado a un punto culminante, y por como mi hermanita siguió mis pasos, la de ella también. Puse la Tablet en la cama aun reproduciendo la follada que le daba ese profesor a su Loli, mientras volteaba a mi hermana, hasta que quedo recostada boca abajo en la cama, con la Tablet en frente de su cara, alce su culo hasta que sus nalgas se veían prominentes, baje rápidamente su short de tela morada y sus braguitas, para que acto seguido mi lengua surcara sus labios regordetes, ella empezó a gemir bastante mientras mi lengua se introducía en su ano. Ella me había dicho que desde que tiene sexo anal conmigo, cuando se bañaba se hurgaba un poco el culo para tenerlo bastante limpio y se había bañado en la mañana, a ella tampoco le gustaba la suciedad en medio de estas cosas. Y ese era el caso, su culito sabía a su propia piel y un poco al salado del jabón. Pase unos buenos minutos lubricando y dilatando su ano con mi lengua y dedos, mientras ella se toqueteaba su propia vagina. En el Hentai el profesor ahora estaba con otra alumna, a la cual estaba obligando a sentarse en un enorme dildo mientras él la follaba analmente. Se notaba que a mi hermanita le habían dado ganas de tener sexo anal.

-¿De dónde sacaste ese Hentai?-Le pregunte mientras seguía mi labor en su trasero.

-Ah….Revise tu historial de búsqueda….ah…creo que se llamaba «Hentaila»…Ahh.-Decía ella entre gemidos

En efecto estaba sorprendido con la juventud de hoy en día, mi hermana de 9 años sabía hacer lo que mi propia mama no sabe, y gracias a Dios que no sabe. El culito de mi hermana ya estaba lo suficiente preparado para recibirme y yo entrando un poquito en el juego el lance una frase, que suena un poco Cringe, pero en ese momento era bastante excitante.

-¿Quieres el pene de Onii-chan en tu culo? ¡¿Ah?!

-¡Si, lléname Onii-chan!-Dijo ella siguiéndome el juego.

Por un momento me reí internamente, por lo absurdo de la situación, pero, fue un  micro-segundo, la calentura que traía se imponía con creces, y sin más empecé a introducir la punta de mi pene en ese agujero rosado y apetitoso. Podía ver como su hoyo engullía mi pene mientras que empezaba a sentir el increíble paquete de sensaciones indescriptibles de la presión, la suavidad, la estrechez, la humedad, todo esto acompañado de contracciones que solo incrementaban el placer. La piel de mi hermana se erizo, y la mía después de mucho tiempo también.

-! Ahhh…el pene de Onii-chan esta en mi pancita!-Dijo ella mientras soltaba un buen gemido, esta actitud viniendo de cualquier mujer o adolescente sería un tanto ridícula, pero viniendo de una niña, simplemente reforzaba lo morboso de la situación. La mitad de mi pene ya estaba adentro del ano de mi «Onee-chan» mientras le daba embestidas que iban aumentando de velocidad, y de profundidad.

En el Hentai, el profesor estaba penetrando salvajemente a una tercera Loli que no me fije de donde salió, teniéndola sujetada de sus piernas en medio del aire, mientras se veía como se abultaba su vientre, por la masa que entraba en su cuerpo. Michelle veía a la pantalla, pero probablemente la mayor parte de sus pensamientos se centraban alrededor de su ano.

-Hugh…¡Ahhhg!-Chillaba mi hermanita cuando ensartaba hasta la base mi pene de un empujón, para proceder a dar estocadas profundas, llenas de sonidos obscenos de chapoteo, aire atrapado y mi pelvis chocando contra sus nalgas.

Mientras que una de mis manos estaba amasando y pellizcando los pezones de Michelle, la otra estaba sujeta a su bajo estómago, porque, sin decírselo, me volví adicto a sentir mi pene abultando su pancita, aunque no era mucho, si se podía sentir. Hace relativamente poco, había descubierto a una Pornstar conocida como «Hotkinkyjo» que se especializaba en introducirse muchas cosas por el ano, y una de ellas eran los fistings, en un video de ella se veía como otra chica le metía su brazo casi completo por el culo, hasta que la silueta de su puño se alzó por la altura del ombligo de Hotkinkyjo, haciendo tintinear el piercing que esta traía ahí. Eso me excito se sobremanera, y me encanta sentir desde entonces como mi pene hacia un ligero bulto en el vientre de mi hermanita al penetrarla por el ano. Era mi propio «Belly Bulge» que aunque bastante sutil, me excita. Continúe follándome a mi hermanita entre gemidos, espasmos y babeos como si fuera la última vez, mientras que seguía en reproducción ese anime Hentai. Mis embestidas se acompasaron con las del profesor para tener una experiencia inmersiva, aunque algunas veces tuve que ser un poco rudo, pero mi hermana, lejos de disgustarle, me decía entre chillidos que siguiera. En medio de toda la faena, mi hermana ya se había corrido dos veces, yo, por haberme corrido unas horas antes, podía seguir. Hasta que aproximadamente después de 15 minutos mas, Por fin solté unos enormes chorros de semen dentro de mi hermanita. Cuando sentí que sus esfínteres me habían ordeñado la última gota de semen, saque mi pene, aun un poco erecto de su ano, sonó como destapar algo encorchado, y Michelle cayo completamente exhausta en la cama, aun tenia ligeros espasmos, se notaba que se había corrido una tercera vez junto conmigo. De su culito empezó a borbotear mi semen junto con unos peditos adorables.

El primer capítulo del Hentai ya había terminado y nosotros estábamos satisfechos, así que nos limpiamos lo mejor que pudimos antes de abandonar la cama. Esa vez no hubo necesidad de usar lubricante siquiera, los propios jugos de Michelle y mi precum fueron suficientes, además, ella en un par de ocasiones me había dicho que estaba bien sentir el culito lubricado, pero que también le gustaba sentir un poco de fricción en medio de toda la humedad. Creo saber a qué se refería, yo ya había escuchado antes que el ano es una zona muy importante en la sexualidad de las mujeres, y aunque la mayoría de las razones eran relacionadas a cuestiones de dominación y masoquismo, con lo que yo no estaba muy interesado, lo que si entendía, era que cuando las chicas son penetradas analmente siente una mezcla de placer y dolor, y que el dolor lejos de bajar la sensación del placer, lo intensifica.

Después de esto, decidimos esta vez sí, ver un anime normal, después de todo, no todo en la vida es el sexo, aunque nuestras interacciones incluso en solitario siempre están acompañadas de miradas cómplices y comentarios subidos de tono. Estábamos viendo ya el tercer capítulo de «Magi: The Laberinth of Magic» eran aproximadamente las 4 de la tarde cuando de repente suena mi teléfono, pongo pausa al capítulo, y busco un momento entre las sabanas hasta encontrarlo, me sorprendió un poco que la llamada fuera de mi padre, pues por lo general el llama es a mi mama cuando nos pregunta cómo va todo.

Contesto la llamada y lo primero que escucho es el sonido de una ducha, o el estaba en el baño, o su mujer tenía la puerta abierta.

-¡Hola Miguel, Dios te bendiga! ¿Cómo va todo?-Pregunto mi padre, cuya voz se podía escuchar perfectamente pues puse el teléfono en altavoz

-Hola, papa, por aquí todo bien, Michelle y yo veíamos un anime. ¿Y ustedes?

-¡Bien todo bien por aquí! Estaba tratando de comunicarme con tu madre, pero parece que apago su teléfono.-Me dijo, mi madre suele tener el teléfono encendido incluso cuando trabaja, pero me imagino que esta vez estaba un poco estresada como para apagarlo.

-Ah, de seguro se le acabo la batería, estos teléfonos de hoy en día no duran nada.-Le dije.

-Bueno, cualquier cosa cuando llegue, le dices de mi parte, que por aquí ya vamos a terminar el viaje.-Dijo justo antes de que tanto mi hermanita como yo prestáramos suma atención al teléfono con cara de impacto.-Así que creo que para dentro de una semana ya podemos ir a buscar a Michelle.-Las palabras que probablemente menos queríamos oír simplemente salieron de la bocina, yo veía a Michelle con una cara de entre tristeza y decepción, ella me miraba igual.

-¿Miguel?… ¿Hola, escuchaste?-Me dijo, después de que me quedara un momento en silencio, en shock.

-¡Ah, sí, sí, sí, sigo aquí! si, escuche…Oh, ¿entonces ya van a terminar por allá? por si acaso les digo que se pueden tomar su tiempo, por aquí en realidad no hay muchas prisas, la verdad mi hermanita encajo bien aquí.-Le digo, tratando hacer que aguarden.

-No, Miguel, ya los hemos molestado mucho, dejándoles a Michelle, y sé que por ti y tu abuela, ella se podría quedar por siempre, y que ella también se la pasa bien, pero para tu mama no es así la cuestión, además ya vamos a terminar por aquí en serio, y debemos volver a casa.-Me dijo rotundamente.

-Ahh…Bueno, así son las cosas… ¿Te gustaría decírselo a ella? Esta aquí mismo.-Le digo, mirando coléricamente a mi hermanita.

Le paso el teléfono a Michelle, quien se pone a hablar con nuestro padre, hablan de lo típico, ella pregunta si no se podría quedar ahí por más tiempo, insiste en eso, pero evidentemente falla, yo casi que no preste atención a esa conversación, mi mente estaba ocupada, mi mirada se centraba en el cuerpecito de Michelle, no la veía únicamente con lujuria, los sentimientos que en ese momento pasaron por mi mente eran mucho más profundos que eso. En resumen, ante mis ojos, Michelle no era sino una luz que acariciaba con su calor mi existencia, que hasta que ella llego había carecido de sustancia, sentía que me completaba con mi hermana, y que ella se completaba conmigo. Y realmente hubiera querido que este periodo de tiempo hubiera sido infinito, pero así no son las cosas.

Sinceramente en ese momento pensé un poco dramáticamente, para mí era como el fin del mundo, pero pensando más detenidamente, no es como si nunca más la fuera a volver a ver, ni tocar…ni penetrar. Pero en ese momento se sentía así.

-Ok…ok…Si…aja…Ok…Bye.-Dijo mi hermana colgando la llamada, para automáticamente verme con ojos casi llorosos, que demostraban sus sentimientos.

Corrió directamente a abrazarme, y yo me agache, recibiéndola con los brazos abiertos, ella se aferró a mi fuertemente mientras sus lágrimas corrían por sus ruborizadas mejillas. Lloraba, sollozaba, y mordía mi hombro de la frustración. Me costó un tiempo calmarla, explicarle que yo estaba igual de triste, de hecho también estaba soltando lágrimas, le dije que no se preocupara, que no sería la última vez que nos veríamos, que sabía que era repentino, pero así eran las cosas.

-¿Y qué va a pasar con lo nuestro? ¡No podremos hacerlo si estamos tan lejos!-Me decía aun con su carita húmeda de lágrimas.

-No me necesitas para sentirte bien, puedes masturbarte cuando puedas en tu casa y…-Le trate de decir.

-¡No!-Me dijo antes de volverse a pegar a mí.- ¡Yo te quiero a ti, no solo por eso! Realmente te quiero hermano Miguel.-Me dijo mientras yo sobaba su cabeza y me conmovía desde lo más profundo de mi corazón.

Le dije que yo la podría visitar cuando quiera, y que ella también podría venir, después de todo, mi padre tiene automóvil y se les hace relativamente fácil, le dije que seguiríamos en contacto y nada iba a cambiar entre nosotros solo por no vernos y un montón de cosas que no recuerdo muy bien, porque habían muchos sentimientos ahí metidos.

-Antes de que me vengan a buscar…¿Podemos hacerlo todos los días que nos quedan?-Pregunto mi hermanita, un poco anticlimática, pero igual llena de sentimiento.-¿Podemos hacer el amor tanto como podamos antes de separarnos?

Dude un poco en este plan por lo agotador y los indicios que quedarían en ella después de hacerlo tan seguido, pero después de ver su persistencia, decidí hacerle caso.-¡Ok!

Y así fue como planeamos tener sexo los siete días que nos quedaban juntos, antes de que sus padres la tuvieran que llevar de nuevo a casa. No quiero hacer spoilers de cómo fueron esos días, porque será en el próximo capítulo, pero nada más les digo, que no fue como lo planeamos.

Fin de la Séptima parte

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Por aquí abajo les dejo mi correo, si quieren decirme o mandarme «algo» o simplemente hablar sobre la forma en la que relato las cosas, y si no, también lo pueden dejar en los comentarios, igualmente un agradecimiento a quienes siguen esta serie de relatos. Nos vemos en el próximo capitulo