LA VISITA QUE LE HICE A MI TIO ENRIQUE
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Lu.
Fue una tarde calurosa del mes de Julio si mal no recuerdo, cuando tuve que ir a recoger un libro que mi Tia Sandra me había prometído prestarme, llegué a su casa sin saber la hora que era, puesto que había olvidado mi reloj en casa, lo que si sabía era que mi Tía salía de su trabajo a las 6:00 pm, llegué a su casa y toqué a la puerta, por varios minutos esperé a que alguien abriera pero nada, nadie salió, entonces decidí irme y regresar mas tarde u otro día, cuando subí a mi coche y estaba apunto de arrancar el motor, voltié hacia la casa y vi a mi Tío Enrique que me hacia señas que no me fuera y que pasara, entonces me bajé del coche y regresé a la casa, mi Tío me esperaba en la puerta, solamente con una toalla enredada en su cintura y me dijo que se estaba bañando y que por eso no había escuchado el timbre de la puerta, que pasara que el se iría a cambiar y pronto estaría conmigo.
Yo entré y lo esperé sentada en un sofá de la sala, y pude ver en un reloj que pendia de la pared que apenas eran las 5:25 pm, asi que aún faltaba bastante tiempo para que mi Tía llegara, mi Tío apareció ya vestido con una camiseta blanca y un short rojo y se sentó en uno de los brazos del otro sofá que estaba al lado del de donde Yo estaba sentada, conversamos un rato no recuerdo ni de que, pero en el ambiente se notaba cierto nerviosismo entre los dos, a mi me excitaba sobre manera el estar solos los dos en esa inmensa casa, para esto debo aclarar que mi Tío Enrique siempre me ha llamado mucho la atención y no es que sea muy bien parecido no, simplemente tiene algo que lo hace atractivo, y de igual manera Yo siempre he sentido que a el no le soy indiferente, entonces Yo ya no aguanté mas me puse de pie y le dije:
"Bueno Tío creo que me voy, porque aún falta un buen rato para que mi Tía llegue y no quiero que se vaya a molestar si me encuentra aqui contigo los dos solos, mejor regreso luego."
Pero mi Tío me dijo:
"No, ¿Porqué te vas? Tu Tía no tiene porque enojarse, espérala!"
Entonces me acerqué ahí al sofá donde él estaba recargado y le dije:
"¿En verdad tu crees que no se enoje por esto?"
Y sin que él se lo esperara lo besé con un beso tan ardiente que se quedo helado, aparte de besarlo con una de mis manos aprete su pene que inmediatamente reaccionó a mi apretón.
Luego le dije:
"Si tu crees que no se vaya a enojar por esto pues entonces Yo me quedo" y le sonrei con una sonrisa burlona, porque Yo sabia que después de ese beso él no me dejaría ir…
Después sin dejarlo accionar me puse de rodillas ante el y de un solo jalón le bajé su short y sus interiores dejando ante mi su enorme falo que estaba tan erecto como mojado, de su puntita salian enormes gotas de un líquido cristalino y pegazoso.
Yo le dije:
"Mira Tío tu verga esta llorando! ¿Será que ella tampoco quiere que me vaya?"
El estaba tan sorprendido con lo que Yo estaba haciendo que no podia decir ni media palabra.
Entonces Yo me volví dueña de la situación y tomé ese gran falo entre mis manos, acariciandolo primero despacio luego, tan frenéticamente como pude, mi Tío solo acertaba a aferrarse al brazo del sofá, dejandose hacer lo que Yo quería, le dí un besito a la cabecita de su verga y limpié todas las lágrimas derramadas por ella, de inmediato sentí al hacer contacto con mi boca el estremecimientos que provoqué en mi Tío, Yo estaba feliz de provocarle esa tremenda excitación que sabía que el estaba sintiendo y disfrutando, luego sin aviso alguno me metí toda su verga dentro de mi boca y empecé a mamarsela sin piedad!
Chupaba de arriba a abajo, succionandola con mis labios y masajeandola con mi lengua húmeda, mi Tío se retorcía de placer ahí en su lugar, conforme fui mamando más y más su verga, el gemía como un loco, pidiendome más y más cada vez! me suplicaba que no parara, que era delicoso lo que lo hacia sentir, Yo no dejaba de chupar ni un solo centímetro de esa verga venosa y gruesa que mi querido Tío tenía, y mientras chupaba con mis manos acariciba sus bolas que estaban tan grandes y duras como dos peras enormes!
No sé cuanto tiempo se la estuve mamando, lo que sé es que llegó un momento en que mi Tío ya no pudo mas y sin decir nada solo dejó escapar un enorme grito de placer y se corrió dentro de mi boca dejandome saborear la dulzura de su leche caliente, le dejé su verga limpiecita y le di un beso en la puntita como despedida.
Luego me puse de pie y el me miró aun incredulo de lo que había pasado, Yo volví a besarlo, chupandole sus labios y jugueteando con su lengua, el respondió a mi beso fascinado, me dijo que le encantó lo que le había hecho, que el siempre se lo había estado pidiendo a mi Tía y ella nunca había aceptado hacerselo, que Yo lo había hecho muy feliz, entonces burlonamente le dije:
"¿Aún sigues pensando que mi Tía no se enojará si me quedó aquí?"
Luego solté una enorme carcajada porque vi su cara de susto, seguro imaginó que al llegar mi Tía Yo le podría contar lo que minutos antes había sucedido ahí en su casa, pero ni loca iva Yo a hacer eso, asi que viendo el nerviosismo de mi Tío Enrique, decidí mejor irme, le dije que luego volvería a buscar a mi Tía Sandra, el asintió con la cabeza y con una expresión llena de alivio.
Me fui a mi casa y no habia pasado ni una hora, cuando apareció mi Tía tocando a mi puerta, Yo cuando la ví me sobresalté y pensé [No habra sido mi Tío tan estúpido en haber abierto la boca] mi Tía me saludó, en sus manos llevaba el libro que me iva a prestar, y me dijo:
"Me dijo tu Tío Enrique que estuviste en la casa buscando el libro, y también me dijo que mejor te habías ido porque no querias que Yo me fuera a enojar si te encontraba con el sola en mi casa, Sobrina no te preocupes por eso que Yo no me enojaré nunca y a mi casa puedes ir cuando tu gustes, esté o no esté Yo al fin que a tu Tío Enrique no le molesta recibirte y que esperes ahí mientras Yo llego"
"Gracias Tía" – Respondí con una sonrisa morbosa de mi parte.
Luego que mi Tía Sandra se fue me quedé pensando si mi Tío Enrique le habría contado lo que pasó entre nosotros y ella estaba de acuerdo y por eso la invitación o si en realidad me la hacia de buena gente que era.
Luego en una reunión que tuvimos en la familia en casa de la Abuela, ahí estaban mi tía Sandra y mi tío Enrique y cuando los saludé, mi Tío me dijo:
"¿Terminaste de leer ya el libro que te prestó tu Tía Sandra?"
Yo le dije que aun me faltaban algunas páginas que si lo estaban necesitando y el me dijo:
"No en lo absoluto, es solo que te quería decir que el día que lo termines de leer si quieres pasar por la casa y te prestaré uno de Ciencia Ficción que acabo de comprar y según sé son de tus favoritos, Yo lo miré a la cara y el me guiñó un ojo, y en ese momento comprendí la intención de sus palabras.
Y de pronto los dos nos quedamos sorprendidos porque mi Tía nos dijo:
"¿El libro de Ciencia Ficción? ¿No es el que está en el asiento tracero de nuestro coche Enrique? Dale las llaves a mi Sobrina para que vaya y lo coja, sirve que se lo lleva de una vez, o mejor ve con ella, porque ya es de noche y esta oscuro, asi la ayudas a buscarlo."
Mi Tío y Yo salímos casi corriendo de la casa y no es que nos urgiera encontrar el dichoso libro era obvio que aparte de cojer el libro nos cogeriamos a nosotros mismos…
Pero después de todo esto que ha pasado, Yo aún me sigo preguntándo ¿Mi Tía sabe lo que ha estado pasando entre mi Tío y Yo y le excita que pase por eso lo fomenta ó es que solo es una mujer de buen corazón? x)
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