Las cosas de mi mamá….
Un hijo, resentido con su madre por alcohólica, aprovecha la ocasión, y luego hasta la comparte con un amigo..
No sé, si es porque mis padres se divorciaron siendo yo todavía un niño, o porque mi madre es alcohólica, la cosa es que yo no amase o quisiera a mi madre, pero vivía bien molesto con ella, la mayor parte del tiempo. Ya que era algo común para mí, el verla llegar borracha, después de trabajar. Aunque me acostumbre desde niño, a llevarla a la cama, no dejaba de sentirme mal por eso. Las mil y una vergüenzas que pasé, difícilmente se las puede perdonar. Imagínense que su madre llegase no tan solo borracha, sino que casi sin ropa a su casa, y no en una ocasión aislada, sino que por lo general la mayoría de los viernes en la noche.
Bueno, al cumplir mis catorce años, tenía tanto resentimiento contra ella, que ya no me molestaba en las condiciones en que ella llegaba a casa, por lo que procuraba no verla. Y así me la pasé hasta mis dieciocho años, en que una noche mientras que mi madre llegaba como de costumbre bien borracha, me topé con ella al momento que yo pensaba salir con unos amigos, molesto por el retraso la llevé hasta su dormitorio y la tiré en la cama, tal como había llegado. Cuando niño yo me dedicaba a quitarle toda la ropa, pero en ese momento su aliento alcohólico, me molestaba. Por lo que la dejé en la cama, pero de manera bien torpe, ella comenzó a desvestirse, lo que hizo que yo me detuviera a observarla. Al principio fue por pura curiosidad, pero a medida que la fui viendo como su ropa iba a dar al piso de la habitación, me quedé extasiado ya que no estaba usando más nada bajo su vestido.
Tan desnuda como estaba se quedó finalmente acostada en la cama, justo en ese momento mis amigos tocaron la puerta, por lo que salí de inmediato con ellos, pero durante toda la noche no pensé en otra cosa que, en mi madre, tendida sobre su cama completamente desnuda y borracha. Cuando regresé ya en la madrugada, al asomarme a su habitación, al parecer se había levantado y puesto su bata de dormir. Por lo que algo molesto conmigo mismo, me fui a dormir, pero nada más al acordarme en mi cama, del cuerpo de mi madre desnuda, comencé a masturbarme como un loco. Aunque después de venirme, con mi mano llena de mi propia leche, me sentí un poco mal. Por haberme masturbado, pensando en mi madre.
Pasó muy lentamente esa siguiente semana, pero al llegar el viernes, comencé a desear locamente que mi madre llegase bien borracha. Mi interés era el volver a verla desnuda, Por lo que cuando la sentí tratando de abrir la puerta, inmediatamente me abalancé abrir la puerta para ayudarla. Ella realmente estaba bien borracha, me vio como si no me viera, dando tras pies la fui llevando hasta su habitación, no me había dado cuenta, pero al momento de agarrarla, coloque su brazo izquierdo sobre mi cuello, y la rodee con mi brazo derecho finalmente colocando mi mano sobre su seno derecho. Pero a medida que caminábamos torpemente, al comenzar a tocar, mis dedos me hicieron notar que era lo que estaban tocando. Casi de manera inmediata, los retiré. Pero de igual forma los volví a colocar, pero en lugar de colocarlos sobre la tela del vestido, metí mis dedos bajo la tela del vestido. Sentí su seno entre mis dedos, su caliente pezón, que comencé a sobar con la punta de mis dedos, a medida que seguíamos caminando rumbo a su cama.
Mi madre momentáneamente me daba una de esas miradas, pero que no ven. A medida que seguía casi cargándola hasta su habitación, comencé a pensar en otras cosas que hacer aparte de verla desnuda. Apenas entramos al cuarto, la tiré sobre la cama, prendí la luz y la observé detenidamente. Como de costumbre era tal su borrachera que, aunque no estaba dormida, difícilmente podría decir que estaba despierta. Sin perder tiempo, le bajé el zipper de su vestido, y de inmediato se lo terminé de quitar. Quedando ella con su ropa íntima, la que paso a paso comencé a también quitarle, primero el medio fondo oscuro que estaba usando, luego de manera seguida las panti medias y las pantaletas, y por último el sostén. Cuando la tuve del todo desnuda frente a mí, de manera cuidadosa, lentamente le abrí sus piernas.
Me quedé con la boca abierta, por un buen rato observando su coño. No podía dejar de ver como debajo de esa mata de pelos negros y ensortijados, se encontraba la raja de mi madre, suavemente pasé mi dedo indicé por sobre sus labios vaginales, y al ver que ella permanecía sin reaccionar me atreví a tocar un poco más y más. En cosa de segundos sentí esa tremenda incomodidad dentro de mi pantalón, mi verga se encontraba súper erecta y bien dura. Tanto que, sin pensarlo dos veces, la saqué de su escondite. En ese instante mi madre abrió los ojos, me dio una mirada diferente a las que me había dado el resto de la noche, se sonrió ligeramente y me hizo señas para que me acercase a ella.
Yo sin saber qué hacer precisamente, algo entre temeroso y excitado me le acerqué, fue cuando ella con su voz de borracha me dijo, tu eres todo un hijo de puta que te quieres acostar con tu propia madre. Sus palabras me dejaron pasmado, pero mi mamá sin perder tiempo ni el tino, agarró mi verga entre sus dedos, y comenzó a moverla de manera que casi rosaba su coño. Pero a medida que ella seguía haciendo eso, yo fui acercando mi cuerpo más al de ella, hasta que comencé a sentir como el sabroso calor de su coño, envolvía toda mi verga. Mi excitación era bárbara, por las muchas cosas que me estaban pasando, por una parte, se lo estaba metiendo de verdad, verdad.
A mi propia madre, hasta esos momentos mi actividad sexual, sólo se había limitado a una que otra paja ocasional. Pero nada de tener a una verdadera mujer desnuda, entre mis brazos. Además, la manera en que ella había comenzado a mover su cuerpo, me puso mucho más caliente, sin contar las cosas que me comenzó a decir a medida que se los metía y sacaba de su caliente y mojado coño. Dame más duro papacito, que rico coges hijo de puta. El escuchar sus palabras, y casi de inmediato que comencé a besarla y a chuparle sus senos, nos pusieron a los dos como un par de locos. En medio de todo, no podía creer que yo mismo, me estuviese tirando a mi madre en su propia cama. Pero qué rica estaba la condenada borracha, me imagino que ella debió alcanzar un tremendo orgasmo, ya que me ha dejado todas sus uñas marcadas en mi espalda. Al tiempo que yo disfrutaba de acabar dentro de su peludo y negro coño.
Después de estar un buen rato, tendido a su lado me levanté de la cama, pero con un sentido de culpa tremendo, pensando como la volvería a ver a la cara después de haber hecho eso con ella, aprovechándome de que ella estaba completamente borracha. En la mañana del sábado, al despertarme, procuré vestirme rápidamente y salir de la casa, sin ver a mi madre. Pero al poner el pie en el pasillo me la encontré de frente, me vio como si nada hubiera pasado, me dio los buenos días y la bendición. Después como de costumbre, me dijo que ya estaba listo mi desayuno. Lo cierto que para mí fue todo un sufrimiento, pero a medida que fue pasando el día, pensé que quizás ella no se acordase de todo lo ocurrido, y me fui quedando mucho más tranquilo.
Esa noche cuando salí con mi mejor amigo, ardía en deseos de contarle todo lo ocurrido, pero por el hecho de tratarse de mi propia madre con quien me había acostado, me costó mucho trabajo el no hablar sobre eso. Pero de repente mi amigo me dijo, oye te veo muy raro, te pasó algo y no me lo quieres contar, yo bien nervioso le dije que eran ideas de él, pero mi amigo, me dijo. Sí ideas mías ok, pero luego no te molestes conmigo cuando yo no te cuente lo que me pasa. Sus palabras de verdad me afectaron, ya que aparte de que nos conocemos desde que éramos bien chicos, yo sabía todo sobre él, incluso que su hermano mayor es maricón y por eso su padre lo sacó de la casa, un día que lo encontraron con otro chico dándole por dé tras. O sea que no teníamos secretos entre nosotros, y justo cuando yo pensaba volver a decirle que eran cosas de él, me dijo. De seguro se trata de tu mamá, claro de quien más iba a ser, en otras palabras, mi amigo en gran parte era mi paño de lágrimas, cuando me sentía mal con mi madre.
Al escucharlo decir esas palabras, no me quedó más remedio que afirmar con mi cabeza, tapándome la cara, por lo que él continuó diciendo, volvió a llegar bien borracha, y yo le respondí que sí. Bueno siguió diciendo él, bueno eso no es nada nuevo, a menos que haya llegado con un hombre, y como si dentro de mi hubiera una bomba a punto de estallar, le dije rápidamente que no era eso, y sin dejarlo que me siguiera preguntando me armé de valor y se lo conté todo con lujo de detalles. Al terminarme de escuchar mi amigo se ha quedado sin palabras, por un buen rato. Hasta que finalmente me dijo, no te creo. Yo volví a contarle todo, sin aumentar ni quitar nada.
Después de eso no tocamos más el tema, hasta que casualmente el siguiente viernes, los dos nos encontrábamos en mi casa viendo un video porno que mi amigo había conseguido. Cuando a eso de las doce de la noche, llegó mi mamá, más borracha que de costumbre. Yo algo avergonzado con mi amigo, por el triste espectáculo que nos brindaba mi madre, la ayudé a levantarse del suelo, mientras que él sin que yo le dijera nada se colocó al otro lado de ella, y entre los dos la llevamos a su dormitorio. Tras dejarla en la cama tal como estaba vestida, ya nos retirábamos de la habitación sin decir palabra, cuando la escuchamos a ella decirnos de manera bien borracha que la ayudásemos a desvestir. Tanto mi amigo y yo nos miramos, y sin pensarlo mucho comencé a ayudarla a desvestir a ella, que torpe e infructuosamente, trataba de bajar el zipper de su vestido.
Mi amigo me observaba nerviosamente, mientras que yo me limité nada más a quitarle el vestido, tras lo cual la acosté en la cama y tomando a mi amigo por el brazo lo saqué de la habitación. Fue que él entonces me dijo, así fue como pasó la otra vez, a lo que yo respondí, si más o menos. No habíamos llegado a sentarnos, cuando en el cuarto de mi mamá escuche un fuerte golpe, de inmediato los dos corrimos a su habitación, ella estaba sentada en el piso ya sin su sostén tratando de quitarse las pantimedias y las pantaletas al mismo tiempo. Fue cuando mi mamá dijo en un tono bien raro, ayúdenme. De inmediato yo a pesar de la vergüenza de tener a mi madre semidesnuda frente a mi amigo, la ayudé a sentarse en la cama, y sin decir nada mientras ella me observaba con una sonrisa estúpida de borracha, le terminé de quitar toda su ropa íntima dejándola del todo desnuda.
De golpe como si ella se hubiera despertado, pero más borracha de lo que estaba, abrió sus piernas y nos dijo a los dos de manera de reto, a que ustedes no saben cómo se llama esto, y sin esperar la respuesta e introduciendo sus dedos dentro de su coño, dijo. Esto es un verdadero coño, ¿lo quieren probar? Ya en ese corto instante mi excitación fue rápida, y la de mi amigo no se diga. Nos vimos a la cara y después la volvimos a ver a ella, que gesticula y hablaba sola, diciendo. Cuando una busca un macho no aparece ninguno. En ese mismo momento tanto mi amigo como yo, nos hemos quitado los pantalones e interiores, nuestras vergas apuntaban directamente, hacía la borracha de mi mamá. Ambos nos fuimos acercando, hasta que nos dimos cuenta de que ella era una y nosotros dos, y yo no pensaba cederle mi lugar a nadie, y creo que mi amigo tampoco pensaba eso.
Fue cuando mi madre, en su acostumbrado tono de borracha dijo, que bueno, uno me da por el coño y el otro por el culo. El nada más decir ella eso, la imagen que vino a mi mente fue tan excitante que, sin perder tiempo de inmediato dije, el culo, le quiero dar por el culo. Mi amigo con una tremenda sonrisa en su rostro no dijo nada. A pesar de su condición, cuando agarró mi verga mi mamá de inmediato la ha metido dentro de su boca, por un corto instante me ha dado una sabrosa mamada, pero de inmediato, sacándose mi verga de la boca se colocó en cuatro y con habilidad que me dejó sorprendido, dirigió mi verga entre sus nalgas, las que en cosa de segundos se han tragado toda mi verga. Casi de inmediato nos quedamos acostados de lado, mientras que mi amigo, comenzó a introducir su verga dentro del coño de mi madre.
No sé cómo lo hicimos, pero los tres nos movíamos al mismo tiempo, divinamente disfrutaba yo de estar dándole por el culo a mi mamá, mientras que ella gemía, se quejaba, se reía y nos decía de hijos de la gran puta para bajo. Mi amigo quizás por ser la primera vez que estaba con una verdadera mujer, y lo morbosa de la situación, se vino en cosa de poco tiempo. Pero yo continuaba disfrutando del culo de mi madre, sabrosamente. Mi amigo creo que pensó en retirarse, pero mi mamá lo ha tomado por su verga y sin perder tiempo la ha dirigido directo a la boca de ella. Yo no salía del asombro, al ver lo sucia que se comportaba mi madre, pero eso me excitaba mucho más todavía. Por lo que con mayor fuerza arremetía yo contra su sabroso culo, el que ella movía divinamente de lado a lado, y apretaba sabrosamente, cada vez que yo metía verga. Después de un corto rato, dejó de mamar y mi amigo se lo volvió a enterrar dentro de ella, mi mamá seguí diciéndonos groserías, insultándonos, pero riéndose, a medida que la seguíamos clavando. Hasta que ella alcanzó un gritón orgasmo.
Después de eso, yo también eyacule, pero dentro de su sabroso culo, y mi amigo me supongo que habría vuelto a terminar. Mamá quedo agotada o extenuada, mi amigo y yo nos levantamos, la dejamos tal como estaba, con una sonrisa entre sus labios, y nos marchamos de la habitación. Ya afuera del cuarto mi amigo se quedó en silencio, no dijo ni una sola palabra, mientras que yo simplemente le dije, esto queda entre nosotros, que nadie se entere. Como en la otra ocasión, después de que mi amigo se marchó, hasta la mañana del día siguiente me sentí mal, por permitir que eso pasara, pero en la mañana al ver a mi mamá actuando tan alegre como una colegiala enamorada, como por arte de magia se me ha quitado esa pendejada. Todavía mi mamá sigue bebiendo mucho, pero estoy yo para ayudarla a desvestir, y en ocasione mi amigo me ayuda a cargarla.
Hola como estas primero felicitarte en verdad q buen relato te animo q escribas la 2 parte por fa q mas sucedió despues de lo sucedido con tu amigo uno de los mejores relato q leei en verdad subí la 2 y si ahya 3 mucho mejor accede a responder xf
Gracias por la felicitación y los comentarios, en cuanto a la parte 2 francamente no había pensado en eso, pero aun no es tarde para hacerlo.
que rica debe ser tu mamá, yo en tu lugar la gosaría toda, espero leer una segunda parte y has un video y fotos de ella, debe ser toda una diosa
dios amigo que relato tan bueno te la rifaste