Las nalgas de mi madre – Cap 4
Un sueño hecho realidad y un problema.
Después de unos minutos de habernos acostado, todo me parecía tan surreal, no dormía con mi madre desde que apenas era un niño y me mandó a mi cuarto para nunca más dejarme dormir en su cama con ella. Escuchaba absolutamente todo, el silencio de la noche, el aire acondicionado encendido, mi corazón latiendo, la respiración de mamá, y mi mente no dejaba de repasar todo lo acontecido, lo cual definitivamente contribuyo a seguir con la verga como pata de perro envenenado, bien tiesa.
Absorto en mis pensamientos y recuerdos, quería ver el video que le tomé a mamá bajo la falda, pero me daba pavor que despertara con la luz y me atrapara jalandomela mientras veía sus calzones, nalgas y pelitos, de pronto absolutamente todo se volvió más oscuro, ya no podía ver absolutamente nada y los sonidos de mi corazón y la respiración pausada y serena de mamá sonaban más alto; El aire acondicionado se apagó!.
La tenue luz que habitualmente entraba por las persianas no estaba más, se fue la electricidad!, nada fuera de lo común en días y noches de mucho calor en nuestra zona pues se por todo mundo querer enfriar sus casa la red eléctrica se sobrecarga y bueno, he acá el resultado, sin electricidad y en poco tiempo el calor infernal de verano hará imposible dormir. Abrir las ventanas definitivamente no ayuda pues el poco viento que hay está ardiendo así que a aguantarse.
Mientras divagaba en mis pensamientos, comencé a preguntarme, cómo se sentiría tocar las nalgas de mamá?, serán tan suaves como se ven?, y si paso mi mano por sus nalgas suavemente?, lo notará?, mientras me cuestionaba esto mi respiración se aceleró, ya estaba nervioso y no había hecho nada aún, la sola idea de sentir sus nalgas aún por encima de la ropa me producía un morbo indescriptible.
No se que me pasa, nunca había tenido pensamientos así sobre mi madre, es mas, no recuerdo siquiera una vez que la hubiera notado como hembra, siempre solo como Mamá. Ahora no puedo dejar de pensar en sus nalgas, su panocha y culo peludos y haberla visto abierta de piernas sin calzones definitivamente cataliza el morbo.
Sin pensarlo más, acerqué mi mano hacia su formidable trasero, coloqué el dorso de mi mano izquierda contra la nalga que estaba sobre el colchón, buscando que fuera algo casual en caso de que se despertara. Deje mi mano ahí como quien no se da cuenta, después de todo la coartada era perfecta, un inocente movimiento nocturno, los nervios me tenían a tope, sentía que mamá podía escuchar mi corazón latiendo como tambor. Después de varios minutos de tener mi mano recargada contra su nalga, decidí voltearla para que mis dedos y la palma sintieran al menos la forma de ese delicioso trasero.
Sentía que el corazón se me salía del pecho!, finalmente pude colocar mi mano abierta sobre la nalga de mi madre!, bueno, por encima del calzón, pijama y sabana, pero ya la tenía ahí y para mi esto es la locura!
El poco frío que el aire acondicionado había dejado aún mantenía la temperatura de la habitación cómoda, sin embargo mi temperatura estaba al 100, tener a mi madre cerca, sentir suavemente su nalga aunado a todo lo anteriormente vivido simplemente era para arder.
Lentamente recorrí la mano sobre la suave sabana, sintiendo el objeto de mi deseo y tratando de visualizarlo en mi mente, los relieves de la ropa y sabana eran insignificantes en este momento, si bien hace unos momentos mi verga estuvo piel con piel entre sus redondas y respingadas nalgas, no es lo mismo a sentir con la yema de las manos.
Después de un buen rato recorriendo por sobre la sábana toda la amplitud de sus nalgas, esta demás decir que mi excitación era en extremo alta, sentia el pijama mojado completamente en la zona de mi paquete y una necesidad enorme de jalarme la verga mientras deslizaba mi mano en sus nalgas.
Envalentonado al ver que no había reacción alguna de mamá, su respiración serena y cadenciosa, metí mi mano izquierda bajo la sábana que nos cubría, moviendo la mano lentamente hasta volver a sentir sus nalgas. No se cuanto tiempo transcurrió, pero su fue un buen, recorría a placer desde su espalda baja hasta la pierna, por la cadera, el lugar en donde se hacïa el valle entre las nalgas, estaba absorto en las sensaciones cuando ella se mueve súbitamente más hacia la izquierda, casi quedando boca abajo, sentí el alma se me salía del cuerpo, retire de golpe la mano y sentía hasta ganas de llorar de los nervios.
En la posición que recién adoptó no sabía cómo estaba acomodada, sin luz era para mi imposible ver algo que me permitiera mover la mano sin riesgo de despertarla, sin embargo estiré de nuevo la mano bajo la sábana para colocarla suavemente sobre sus nalgas, su trasero se sentía más amplio, casi por completo boca abajo ese derrier cambiaba, hmm que delicia.
Pero el calor ya era demasiado, mamá comenzaba a moverse, me asuste y retire la mano, justo cuando ella movió las piernas y con la mano derecha se sacó la sábana de encima, porque apagaste el aire acondicionado hijo?, fingiendo estar dormido no respondí, me movió el hombro izquierdo con la mano , Juan, porque apagaste el aire?, hace mucho calor!, no lo apague maa, respondí de forma somnolienta, ¡hace mucho calor! Dije a la vez que con las piernas me quitaba la sábana de encima, prendelo por favor hijo!, me levante y a tientas busque el control del aire, no enciende maa, creo que se fue la luz!, ughh que fastidio!, con este calor no se puede dormir!, tengo mucha sed, dijo mamá aun en tono somnoliento, como ya estaba parado le respondí, voy a la cocina por agua, yo también tengo sed, tráeme un vaso con agua por favor hijito, checa a tu padre y si puedes desconecta el refri, no se vaya a descomponer cuando regrese la luz; ok maa, ya vengo.
Baje en la total oscuridad cuidando no tropezar, necesitaba urgentemente jalarmela para descargar la calentura acumulada, así que decidí llevarle agua a mamá primero y después bajar a “desconectar el refrí” que como hay que moverlo pues toma tiempo.
Acá esta tu agua maa, uh?, gracias hijito, que calor hace!, respondió aun con voz de dormida, te la pongo en tu buró, no las vayas a tirar. Si amor, desconectaste el refri?, no aún maa, no se ve nada y tengo que moverlo, creo que en la gaveta de la cocina hay una lámpara, dijo un poco más despierta, usaré la lámpara de mi cel maa, dije mientras lo tomaba del otro buró y me dirige a la puerta, cuando escuche como ella se movía en la cama para tomar el vaso de agua que le deje.
Ya con la luz de mi celular era más fácil moverme, baje y vi a papá tirado en el suelo, tal cual lo dejamos, fui a la cocina e intente mover el refri para desconectarlo, cuando escuche pasos en el segundo piso y la puerta del baño cerrarse, o mamá o mi tía fue al baño, esto complicaba mis planes de hacerme una buena puñeta viendo el video que le tomé a mamá.
Comencé a jalar el refri fuera de donde estaba para poder desconectarlo, aunque es grande y voluminoso no fue muy complicado, lo complicado era hacerlo mientras pensaba en las nalgas de mamá que recien descubri, vi, toque y pase mi verga entre ellas, después de desconectar el refri tenía que acomodarlo de nuevo en su lugar pues cerraba el acceso a la alacena, cuando de reojo veo luz moviéndose en la sala, voltee y aun no se veia quien era, tu padre sigue dormido ahogado de borracho, dijo antes de entrar a la cocina mamá, si maa lo acabo de checar y le vale madre el calor jajaja, hijo!, ¡qué son esas palabras!, aunque si, le vale madre dijo ella mientras rió levemente y apareció en la cocina, necesitas ayuda para mover el refri?, no maa, ya estoy poniéndolo de regreso en su lugar.
Cuando voltee por completo después de empujar el refri, se me cayo el celular de las manos al ver a mamá tomando agua del vaso que le llevé, ya no traía el pijama rosa que se puso!, traía un camisón muy ligero, le llegaba apenas unos dedos arriba de la rodilla, nunca le había visto esa prenda, es más no sabía siquiera que tuviera algo que no la tapara completamente!, cuidado hijo!, me agache rápido a recoger mi cel, perdón maa, ando aun dormido, no quería que me viera otra vez con la verga bien parada, pero no podía quedarse agachado todo el tiempo, lo bueno fue que dijo, ay mijito, eres un desastre!, mientras caminó a llenar de nuevo su vaso de agua, yo aproveche para levantarme rápido y pararme detrás de la isleta de la cocina y verla moverse, no había suficiente luz para verla bien pero en definitiva me gustaba ver sus piernas y que era obvio no traía brassier debajo del camisón.
La tía Cristy está bien dormida, no se como puede dormir con este calor, comentó mamá, eso me sacó de mi absorto momento morboseando su cuerpo, jejeje vaya bienvenida para ella, dije yo, y si!, yo de plano me voy a tomar una pastilla para dormir, no aguanto el calor, la cabeza me duele de tanto estrés y necesito dormir, gracias por desconectar el refri hijo, dijo mientras salía de la cocina sin siquiera voltear a verme
No se si estaba enojada conmigo, obvio contenta no estaba, pero era difícil saber que de todo lo acontecido la tenía más molesta.
Cuando escuche gavetas y demás abrir y cerrar en la parte de arriba me cayó el veinte!, las posibilidades de manosear a mamá dormida eran enormes!, se tomaría la pastilla para dormir y eso la noqueaba de tal manera que ni un terremoto la despertaba.
Siendo la media noche sabía que tenía tiempo para explorar esta oportunidad única, estar en la misma cama de mamá y ella empastillada para dormir, con un camisón que en definitiva me dejaría sentir mejor sus nalgas!
Me hice pendejo abajo todo lo que pude, sentía que el tiempo no pasaba lo suficientemente rápido, tampoco quería jalarme la verga en este momento, aunque me urgía, estaba más allá de cachondo, sabiendo que algo increíble venía a mi en tiempo y forma, pero el que espera desespera y ya se me cocían las habas por subir.
Vi el video en mi cel unas 10 veces, le hice zoom en las partes donde se le veían los pelitos saliendo por el lado del calzón, la verga me pulsaba en cada vista, los detalles eran impresionantes, esa blanca piel, contrastando con lo negro de los pelitos, el respingado par de nalgas moviendose mientras ella se movia, uff que intenso!.
Una hora pasó, vi mi celular y eran cinco minutos pasados la una de la mañana, no se escuchaba ningún ruido fuera de los ronquidos del viejo tirado en el suelo, así que decidí subir, esperando se hubiera tomado la pastilla y esta hubiera hecho efecto.
Subí casi corriendo, la puerta de mi recamara estaba cerrada aún, sin perder más tiempo entre a a recamara de mamá, solo se escuchaba mi corazón latiendo como tambor en redoble y la serena respiración de mamá, intenté ser lo menos cuidadoso posible al meterme a la cama, así si no se había tomado la pastilla en definitiva se despertará para reclamarme jejeje, nada!, estaba dormida como un tronco!!
Para asegurarme estaba dormida realmente, le deje caer la mano en un costado, no fuerte, pero si lo suficiente para que se despertara, ni siquiera cambió el ritmo de su respiración, por como lo sentí estaba dormida boca abajo, pero no sabría bien a bien hasta no tener luz para verla.
Tomé mi celular y desbloqueandolo como para ver algo, pude ver con la luz de la pantalla que efectivamente estaba dormida boca abajo, destapada, su cara viendo hacía la derecha, el brazo derecho hacia arriba de su cara y el izquierdo a un costado hacia abajo, la pierna izquierda completamente estirada y la derecha flexionada… el camisón levantado más arriba de media pierna izquierda y casi por completo arriba de la derecha.
Estaba por encender la lámpara de mi cel cuando veo se enciende la luz del closet, ya regresó la electricidad!, me levanté de la cama a toda velocidad, tomé el control del aire acondicionado y lo apague, estaba en modo de protección y no quería se descompusiera, se me ocurrió ir a mi recamara a hacer lo mismo pero encenderlo para mi tía, cuando escuche que ya había encendido, cerré la puerta de la recamara de mamá con seguro y encendí la luz principal para darme un festín con las nalgas de mi madre!.
Efectivamente estaba tal y como lo pude ver con la tenue luz de la pantalla de mi cel, pero con la perfecta iluminación de la habitación era increíble!, el camisón estaba enrollado del lado derecho, dejando ver una parte de la nalga derecha, muchos pelitos negros se veian saliendo entre sus piernas y nalgas, las manos me temblaban, me costaba respirar de los nervios, me acerqué con cuidado, era el momento de la verdad, si no estaba bajo los efectos de la pastilla y despertaba me mataría, pero en este momento lo único que me interesaba era verle el culo a mi madre!. Con manos temblorosas jale el camisón hacia arriba de sus nalgas, dejando al descubierto ese enorme y delicioso trasero cubierto por un calzón de algodón blanco completamente al descubierto, era increible la cantidad de vellos negros que se asomaban por las orillas del calzon, en el area de la panocha entre sus piernas eran muy abundantes, deslice mi mano temblorosa para tocarlos, se sentían muy suaves, su piel blanca era sumamente suave, nunca la había visto asi de cerca, le mobí la nalga derecha, se sentia suave pero firme, metí dos dedos entre el calzon y su piel para jalarlo un poco hacía arriba, al principio se sintió resistencia pero de pronto se subio de golpe enterrandose entre las nalgas y dejando al descubierto una abundante cantidad de pelos, un olor delicioso emanaba de entre sus piernas, sentia que me venía, pero a la vez temblaba de miedo.
Acerque mi cara entre sus piernas, aspirando profundamente sentí un aroma que nunca había percibido, el aroma de la intimidad de una mujer, ¡y esa mujer era mi madre!, que ahora tenía a mi completa y total disposición para explorar en la más morbida y loca manera que jamas imagine.
Mi falta de experiencia no es limitada por mi imaginación, no tenía que limitarme a verla con el calzón puesto, estaba bien jetona por la pastilla así que podía ver TODO a mi antojo.
Quería verla completamente desnuda de nuevo, pero esta vez poder realmente observar, sin embargo me daba miedo desnudarla por completo, si despertaba, o algo pasaba no tendría forma de salir del problema, así que decidí solo quitarle el calzón. Le enderece la pierna derecha que tenía flexionada, y metiendo mis dedos entre su cintura y el calzón comencé a bajarlos, por su peso y la posición en la que yo estaba me costó bajarlos, hice fuerza y finalmente vi como comenzaron a descubrir el aún más blanco par de nalgas, la raya entre ellas era hipnotizante, cada centímetro que quedaba a la vista me era aún más excitante, cuando lo llevaba en la parte mas ancha de su trasero vi que muchos vellos negros salían entre las nalgas, uff tenía que aguantar!, sentía que me venía de lo caliente que estaba, mi verga punzaba y tenía el pijama ya completamente mojado de líquido viscoso, cuando finalmente lo bajé hasta las piernas en donde comienzan las nalgas el espectáculo era fenomenal!, aun con las piernas casi completamente cerradas, la cantidad de pelo que le salía en la zona que está entre las nalgas y las piernas era impresionante!.
Estando parado al lado de ella, maniobrar no era fácil ni cómodo, la espalda me dolía de estar flexionado de la cintura y de los nervios, pero al ver aquello de forma natural me acerqué y hundí mi cara entre sus nalgas!, sentí los vellos en mis labios y mi nariz, aspire profundamente y quede completamente anonadado con la delicia de su olor!, no se cuantos minutos estuve ahí, con la cara hundida entre su culo, panocha y piernas, aspirando profundamente, mientras mis manos separaban sus nalgas suavemente mi cara se hundía mas y mas hasta que mi nariz pego con algo suave y húmedo, no se que era, obviamente a mi temprana edad no sabía mucho más de lo que en el porno se puede mal aprender, pero lo que sí sabía era que hoy lo averiguaré en carne propia.
Me levanté casi en éxtasis, sin pensarlo más, me coloque de forma que pudiera bajarle completamente los calzones y quitarlos, en un santiamén la tenía desnuda de la cintura para abajo, con el camisón enrollado a media espalda y completamente abriendole las piernas para tener un acceso irrestricto a su panocha y culo. Su respiración seguía siendo pausada y serena, ¡Bendita pastilla!
Me acosté entre sus piernas abiertas, aunque la verga me dolía de tenerla contra el colchón, ¡me valía!, quería ver, oler y probar de cerca el culo y panocha de mi madre, con las manos abrí sus nalgas, poco a poco vi como ese enorme par dejaban ver entre abundantes pelitos negros el ano rosa y el comienzo de unos carnosos y deliciosos labios vaginales.
Con la yema del dedo índice acaricié el suave inicio de sus labios vaginales, estaban levemente húmedos, subí por el perineo hasta llegar al ano, tambien se sentia humedo, imagino que por el calor que hacía estaba sudada, bajé las manos a sus piernas y las empujé para abrirlas más, Wow!, mi madre era flexible, tenía sus piernas completamente abiertas, casi llegando al split, con ello sus nalgas se separaron por completo, la vagina quedó abierta y expuesta y su trasero proyectado ligeramente hacía arriba. Acerqué mi cara a su panocha, aspire profundo y sin pensarlo saque la lengua para pasarla entre aquella mata de pelo negro azabache llegando hasta la suave piel rosa de su vagina abierta.
No sabia como, digo lo había visto en videos, pero me puse a pasarle la lengua a mamá a todo lo largo de los labios vaginales, hasta el culo, ahí el sabor era diferente, más ácido, ¡pero me valía!, estaba en la gloria y no pensaba detenerme por nada, estuve no se cuanto tiempo ahí, ya me dolia la mandibula de estar lamiendo la entrepierna y el culo de mi madre, pero era intoxicante, no pude controlarme y me vine en el pantalón de pijama, pero no me detuve, quería más!, rápido me levanté y me desnudé, le saque el camisón a mamá por completo y al igual que yo, la deje completamente desnuda.
Me quedé embelesado viéndola, a pesar de haberme venido hace un minuto, mi verga seguía dura, su espalda era hermosa, bien delineada y sin excesos de carne, sus nalgas tenían algunas rayitas, con el tiempo aprendí se llamaban estrías, no eran muchas, pero sí algunas, muchos vellos más pequeños que los de su vagina o culo las cubrían, como un durazno, sus perfectas y contorneadas piernas se veían formidables, definitivamente estaba devorando a mi madre con los ojos.
Recorrí palmo a palmo su espalda, nalgas y piernas, hasta sus delicados pies eran increíblemente suaves y para mi bellos. Con la lengua fui recorrí lo que acababa de recorrer con las manos y los ojos, el tiempo era algo imperceptible para mi, lo único que existía era esa delicia de mujer y no desaprovecharía la oportunidad para mí única de saborearla por completo.
Suavemente la tomé del brazo derecho y la comencé a voltear boca arriba, observando como se revelaban ante mi sus hermosos y frondosos pechos coronados por dos pezones grandes, de color rosa, estaban hinchados, como si algo los empujara desde adentro, su abdomen plano, una pequeña marca de nacimiento en la cadera izquierda, de un leve tono cafe claro, casí imperceptible pero me llamó la atención pues tambien la vi en mi tía y yo mismo tenía esa marca, su pubis hermoso, lleno de una espesa mata de vellos negros, brillantes, ocultaban bajo de si esa deliciosa vagina que acababa de lamer y que en definitiva lameria de nuevo en cuanto terminara de recorrerla por enfrente.
Sus piernas se veían aun más fuertes y tonificadas que por la parte de atrás, interesantemente no tenía mucho vello en ellas, de hecho, muy pocos y de un color muy claro, casi imperceptible, rozando su piel con la yema de mis dedos la recorrí por completo, observando cada detalle, el brillo de su blanca piel por el sudor, sus pocos lunares, era intoxicántemente hermosa, yo seguía temblando, pero no me detuve; cuando llegue a sus pechos, acaricié por mucho tiempo sus pezones, los cuales se pusieron muy pero muy duros, me acerque a ellos y con delicadeza los lamí y succioné a placer, mientras hacía eso noté que la respiración de mamá cambio, era más notable, sin ser agitada si era más intensa.
Continue por su abdomen, plano, suave y con casi imperceptibles vellitos, hasta llegar a su panocha, que súbitamente estaba super poblada de esos increibles vellos de color negro intenso, sin mas le separé las piernas, levantandole las rodillas y apoyando sus hermosos y delicados pies en la cama, quedo abierta, entre los abundantes pelos se abrio su vagina, se veía muy pero muy mojada, en ese momento pense era por mi saliva, pues se la acababa de lamer, pero cuando hundí mi cara de nuevo en ella y pase la lengua entre los labios vaginales noté que la viscosidad, sabor y olor eran diferentes, de hecho era tan abundante que escurria un poco entre sus nalgas hacia el ano.
Tambien descubri que en la parte de arriba de los labios de la vagina tenia un pequeño bultito, como un pequeño piñón, color rosa más intenso, curioso lo toque,al rozarlo con los dedos mamá movió levemente las caderas, gimió muy suavemente y movió los brazos, me quedé helado!, casi me cago ahí!, pense se despertaba, cuando vi que ya no se movía, volví a tocarlo y descubrí lo que ahora se es el clítoris, tanto que he escuchado de él y que muy pocos saben que hace, pero bueno, en ese momento no sabía nada, solo que si lo tocaba suavemente ella reaccionaba, volví a tocarlo, se movió de nuevo, y noté que su mano izquierda se colocó sobre su pezón izquierdo, con los dedos hacía una leve presión en el pezón, wow!, tocarle ahí le hacía a ella misma tocarse, con ese descubrimiento decidí ver qué pasaba si lo tocaba mas, pero esta vez lo haría con la lengua, me acerque suavemente a ella, viéndole la cara para ver alguna reacción, cuando saque la lengua y la pasé sobre el pequeño piñón su cara cambio, una pequeña sonrisa, muy tenue, se dibujó, sus dedos apretaron el pezón y su cadera hizo un leve movimiento de abajo a arriba. Esto era para mi nuevo, no entendía mucho, pero me quedaba claro que era algo que ella estaba disfrutando, esta demás decir que yo ya estaba de nuevo con la verga super dura, me escurría tanto como a mamá la panocha,, mientras pasaba mi lengua de lado a lado y de arriba a abajo por el pequeño piñón se me ocurrió tomar un poco del líquido que le escurría a mamá de la panocha para sentirlo en mi verga, ella arqueaba la espalda un poco en cada lenguetazo, cuando acerqué la mano a su vagina para tomar el líquido que de ahí emanaba, ella empujo mas la cadera y mi dedo extendido entró un poco en su vagina!, ¡qué sensación!, se sentía sumamente mojado y caliente!, lo deje ahí dentro quieto, mientras mi lengua intensificò el movimiento en el piñoncito, su mano derecha agarró el otro pezón y con ambas manos comenzó a jalarlos, rolarlos y magrearlos, su respiración era entrecortada y rápida, apretaba las ojos en cada lenguetazo y mi dedo sentía como apretaba los músculos de la vagina, definitivamente había descubierto sin querer como masturbar a una mujer, y que mujer!, mi madre!.
No se cuanto tiempo estuve haciendo eso, ahora el dedo lo metía y sacaba al ritmo que ella movía las caderas y yo lengueteaba el piñoncito, ella subía poco a poco la intensidad de sus movimientos, ¡gemía de una forma que nunca había escuchado!, esto era increíble, le estaba mamando la panocha a mi madre, desnuda, metiendo el dedo un poco por la vagina, yo desnudo entre sus piernas y ella lo estaba disfrutando sin saber que era yo y no algún sueño,
De pronto ella emitió un gemido profundo, apretó las piernas, tensando todo el cuerpo y abundante líquido, que pensé era orín , saliendo de su vagina comenzó a temblar, ¡yo me super asusté!, no sabía qué le pasaba, la solté y me retiré para ver como ella seguía apretando los pezones , estirando las piernas y teniendo como convulsiones mientras gemía profundamente.
Duró un buen rato haciendo eso, cada vez más líquido salía de su vagina, tenía el pecho, cuello y cara sumamente rojos, y un rictus de dolor en la cara, de pronto de la nada se quedo quieta, los brazos cayeron a su lado, las piernas las dejo estiradas, comenzó a respirar más pausado pero profundo y una sonrisa se dibujó en su cara, estaba empapada en sudor, líquido del que le salió de la vagina, sudor mío y un aura de placer que nunca antes le había visto.
Cuando me iba a acercar a ella, se giro a la derecha, pierna izquierda estirada, rodilla derecha levantada y nalgas abiertas, misma posición que cuando llegue de la cocina, pero ahora empapada y desnuda para mi deleite.
La cama era un verdadero desastre, sábanas mojadas de mi semen, de nuestro sudor y de lo que le salió a mamá de la vagina, el colchón seguramente también, su calzón y camisón que no quite de la cama también, menudo lío en el que estaba metido, pero en este momento lo único que me interesaba era sentir un poco con la verga las nalgas de mi madre.
Me coloqué suavemente entre sus piernas abiertas, y soportándome en las manos apoyadas en el colchón acerque mi verga bien parada a sus nalgas, justo cuando estaba sintiendo sus vellos en el glande, ella estiró la pierna derecha juntandola con la izquierda, ahora mi verga estaba “atrapada” entre sus nalgas y sus piernas, rozando su empapada panocha y era un sensación indescriptible!, con cuidado comencé a mover la cadera de arriba a abajo, mi verga topaba con el colchón debajo de ella, pero por el dorso superior de mi verga los labios muy mojados de su vagina se sentían delicioso, después de unos cuantos movimientos de subir y bajar, no aguanté mas, estaba por venirme, no se porque pero saqué la verga de su deliciosa presión y apenas iba deslizando mi verga fuera cuando el primer borbotón de semen salió, aterrizando justo entre sus nalgas, borbotón tras borbotón dejaron la raja de las nalgas de mi madre llenos de mi abundante semen, del esfuerzo e intensidad me deje caer sobre ella, mi verga casi se ensarta en su ano, sentí como el glande se atoro un poco pero se deslizó fuera con rumbo a su vagina, sin penetrarla obviamente pero si estuve a punto de meterla.
Sentí que el mundo se apagó, estaba completamente sudado sobre el empapado cuerpo de mi madre y sin darme cuenta me quedé dormido arriba de ella.
Algo me despertó, un ruido cercano, la puerta del baño!, alguien entró, me desperte super asustado, luz de día entraba tímidamente por las persianas, vi con pavor que mi madre estaba aun dormida, llena de semen algo seco, sudor abundante, la cama un desastre, y mi erga bien dura entre sus nalgas!
Definitivamente me mataría, no sabía realmente que hacer, nunca pensé fuera a hacer tal magnitud de desastre, cuando me estaba incorporando sentí mi verga deslizarse entre sus piernas y nalgas, algo suave estaba en el glande, me gano la curiosidad y empuje un poco, uta!, sentí calientito en la punta de la verga, caliente y apretado, sabía muy bien que estaba pasando, sin pensar en las consecuencias, empuje un poco más, sentí como la cabeza de mi verga entraba en su vagina, ella retorció la cara, gimiendo levemente, escuche la regadera correr, mi tía o mi papá se estaba bañando, no tenía tiempo de hacer mucho, solo de tratar de limpiar algo o ver como salir del problema, pero no me podía ir sin sentir cuánto de mi verga le podía meter a mi madre.
Me hinque con las piernas abiertas montando su culo y deslice lentamente mi verga dentro de su vagina, estaba muy apretada pero húmeda lo que permitió una entrada bien lubricada, de pronto ella gimió, me asuste, y me levante como de rayo, no le había alcanzado a meter ni la mitad de la verga, pero me dio un miedo enorme seguir, como pude le puse el calzon, y el camisón mal puesto, definitivamente al despertar se daría cuenta de todo y mi sentencia seria una!.
Pero lo bailado, no me lo quita nadie!
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