las reconpensas despues del infierno.
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Semperexitad.
El sol estaba saliendo.
el autobús para la escuela pasaría en poco tiempo.
Me había pasado toda la noche haciendo unos planos para mi proyecto escolar y casi no había dormido.
Los parpados me pesaban y el ruido de la música de mi hermana mayor hacia que mi cabeza se sintiera como si un bailarín de claque con zapatos de hierro estuviera bailando sobre mi cráneo.
Y mi hermana menor gritaba desde la ducha a mi madre para que le pasara una toalla.
Vivir con tres mujeres era horrible.
En el cine siempre tenias que entrar a ver la peli romántica, siempre tenias que esperar una eternidad para el baño y siempre, aclaro siempre tenias que cargar cualquier cosa pesada por ellas eran mujeres y eran “delicadas”.
Me llamo nico soy… un idiota de quince años… no muy alto, ni musculoso.
Un chico normal con piel olivácea, si me vieras tal vez me confundirías con el típico skate.
Como todos a esa edad sentía algún tipo de frenesí sexual a tal grado de llegar a espiar a mis hermanas y madre en la ducha, piscina, habitación etc.
A robar sus bragas y esas cosas.
Tengo dos hermanas Lynn de dieciocho y jessy de trece.
Ambas son unas bellezas pero cada una a su muy diferente modo.
Lynn seria como una tsundere ósea un misterio con piernas, callada, fría, seria y muy intolerante con las bromas.
Y mi hermana jessy es más una niña dulce y para ser sinceros es con la que me llevo mejor.
En cuanto a apariencia Lynn es de cabello oscuro igual que yo y tiene unos ojos de un verde precioso.
Casi no tiene tetas pero tiene un trasero de infarto.
En cuanto a jessy su cabello es color miel y sus ojos son castaños y alegres como los míos, casi no tiene tetas pero a los trece años ya casi alcanza a mi hermana Lynn asi que promete para el futuro.
En cuanto a mi madre… es complicado.
Por su culpa mi padre se fue.
Pues le descubrió un amante y no se lo perdono.
Mi madre es rubia y tiene unas tetas de infarto y un trasero ni muy gran ni muy chico que se mantiene firme.
En fin todo inicio por esos estúpidos planos de proyecto escolar.
Ya que si no los hubiera olvidado, no hubiera perdido el bus y no habría sido secuestrado por unos psicópatas del gobierno.
Cuando perdí el bus decidí ir caminando (mala idea).
Iba corriendo y en eso veo que un auto se para y baja la ventanilla, saca una pistola de dardo y entonces las luces se apagaron.
(Por lo menos para mí)
— Su sangre es la indicada —decía una voz— solo esperemos a que lleguen a recogerlo.
¿Si esos malditos rusos quieren un sujeto de pruebas porque no lo consiguen ellos mismos en su propio país?
— Porque en Latinoamérica nadie se preocupa por la desaparición de un niño.
—dijo otra voz riendo—.
Todo estaba oscuro pero empezaba a notar que estaba atado a una mesa de operación.
Por abrí un poco los ojos pero una voz dijo.
—Dale más sedante.
—y entonces regrese a la oscuridad.
La segunda vez que desperté… corrobore que efectivamente estaba atado pero esta vez en una silla metálica.
Todo el cuerpo me picaba como si me hubieran sumergido en acido.
Pero por fin pude ver a mis captores.
Dos hombres rubios que hablaban en lo que yo suponía que era ruso.
Tenían varias agujas y empezaron a picarme con ellas pero sorprendentemente no sentí nada.
Después de la decima las luces volvieron a apagarse.
Cada día despertaba (suponía que era cada día) y cada vez me daban mas inyecciones.
Hasta que un día el tipo que me inyectaba no saco agujas.
En vez de eso me dio un tiro.
Desperté en un deposito que olía horrible, un hueco en la tierra tenía algo blanco sobre todo el cuerpo que se suponía que era cal.
Junto a mi había otro cuerpo de un chico rubio.
Pero el estaba realmente muerto.
Salí como pude del hoyo y encontré una camioneta de la cual otro tipo rubio y alto sacaba unos bultos de cal.
No recuerdo exactamente como fue pero una energía recorrió mi brazo y de repente la palma de mi mano estaba en llamas.
Necesitaba salir de ahí.
Y necesitaba ropa pero esas no fueron las razones por las cuales prendí fuego a ese desgraciado.
Cuando llegue al pueblo más cercano me di cuenta que seguía en mi país solo que estaba cerca del desierto.
Si seguía conduciendo podría llegar a mi ciudad en tres horas.
Pero antes de eso compre algo de ropa con el dinero de la cartera que el tipo había dejado panel de la camioneta.
Cinco semanas.
Había estado desaparecido cinco semanas.
Mis hermanas me abrazaron al igual que mi madre.
Me preguntaron dónde estaba solo les dije que secuestrado, mi madre insistió en llamar a la policía, pero yo me rehusé y dije que no quería hablar del tema.
Todos lloramos por el rencuentro pero me sorprendí al oír algo extraño.
“Voces” pero nadie hablaba.
— “Gracias al cielo”—decía la voz de mi madre— “gracias”
— “Tendré que limpiar el desastre que hice en su habitación”— decía mi hermana menor.
— “encontré mis bragas en su cuarto, pero este no es el momento para echárselo en cara”— decía Lynn.
— “Demonios ojala no haya visto el ducto de ventilación donde guardo toda la colección”—pensé y entonces paso algo muy extraño.
— “Debería buscar mejor todas las bragas que se me han perdido, busque en todos lados de su habitación pero tal vez debería ver en el ducto de ventilación” —pensó mi hermana y acto seguido— “¿de donde me vino esa idea?”
Les juro que en ese momento casi me infarte.
Pensé cualquier posibilidad, indiferentemente de lo que había pasado en el desierto con mi mano y eso… esto era verdaderamente irreal.
Primero pensé que estaba alucinando después pensé que estaba drogado y en algún momento pensé que estaba muerto.
Pero intente otra vez Mientras cenábamos, mi hermana se estaba sirviendo ensalada y un filete de salmón su comida favorita.
— “demonios donde quedo la mayonesa” —pensó mi hermana.
— “¿porque te sirves Salmon si lo odias? Sírvete carne de res— dije entre pensamientos sin muchas esperanzas.
— “no me gusta la carne” —pensó mi hermana.
Ahí si me atragante con mi filete y tuve que tomar un poco de agua para pasar el bocado.
Tal vez era el premio por el infierno que había sufrido.
— “claro que te gusta, te encanta” —pensé.
Mi hermana se encogió de hombros y se sirvió el filete.
Después de la cena casi no pude dormir, no me lo podía creer… ahora solo me preguntaba ¿Qué era capaz de hacer?
Al día siguiente mis hermanas se fueron a la escuela de la cual me habían dado de baja por faltar cinco semanas (como si me hubiera ido de vacaciones).
Asi que tendría que quedarme en casa hasta que encontrara una nueva escuela.
Yo ya estaba desayunando cuando mi mama bajo con su cabello rubio suelto y recién cepillado llevaba una bata que le llegaba hasta los pies lo cual me desanimo porque estaba esperando ver su delicioso trasero.
Pero en eso recordé lo que yo podía hacer.
— “tengo que ir por jamón, huevos, y casi ya no hay mantequilla” —pensó mi madre viendo la nevera.
— “lo que tendrías que hacer es quitarte esa bata, hace calor y de seguro tu hijo quiere verte las bragas” —aconseje.
— “Noo, eso no estaría bien, es mi hijo y debe haber pudor entre nosotros” —pensó mi madre pero no me preocupe, mi hermana también se había resistido un momento.
Y después había accedido.
— “claro que estaría bien, aparte tu lo deseas profundamente, vamos quítate la bata” —aconseje.
Entonces me di cuenta del secreto.
Tenias que decirlo como si la persona que estabas controlando realmente deseara con toda su alma aquello que le estabas “aconsejando” hacer.
Funciono, mi madre se quito la bata y quedo en un conjunto rojo, que lucía genial su trasero paradito y sus dos grandes melones.
El tanga no era tan pequeño pero era muy sexy, al sostén le costaba trabajo mantener esos pechos en su lugar por lo grandes que eran.
Se quedo viendo hacia la nada por unos cinco segundos como si no recordara porque se había quitado la bata… pero entonces decidí que tendría que lanzarle un “consejo” tras otro a su mente para que no saliera del trance en el que se mantenía.
Asi que empecé la fiesta.
— “acércate a nico” —aconseje.
Aunque se le veía dudosa mi madre avanzo lentamente.
Su expresión era enigmática como si su mente estuviera en plena guerra civil.
Quedo tan cerca que podía oler su perfume a jazmín.
— “siéntate en sus piernas” —aconseje.
Mi madre no dio señal de moverse.
— “no… eso no estaría nada bien.
Es mi hijo” —pensó mi madre.
Y entonces paso algo raro.
Fue como si por un momento sintiera la confusión de mi madre dentro de mi cabeza como si ahora el mango de la sartén lo tuviera ella.
afortunadamente solo fue un momento.
Pero gracias a eso pude ver como controlarla completamente.
Ahora sabía que la cabeza de mi madre funcionaba como un reloj con muchos engranajes.
Y que mi habilidad me daba las herramientas para ser el mecánico y poder cambiar cada engranaje.
En cuestión mi error había sido tratar de meter engranajes a la fuerza, si bien podía dar pequeñas ordenes insignificantes y ella las obedecía, no podía meter rasgos que fueran tan ajenos a su personalidad sin antes desmantelar su propia forma de ser.
Lo que tenía que hacer era cambiar los que ya habían por los que yo preferiría.
Era como programar un robot.
Entonces lo primero era lo primero.
— “siéntate en la silla” —aconseje y ella obedeció.
Ahora sería mi turno de ver hasta qué punto podía controlar mis habilidades.
Me senté en la silla de enfrente y entre en su mente.
Fue una sensación de lo más extraña, era como ser un espíritu sabes que estas consiente pero no estás de forma física, no te sientes materializado ni real.
Estar dentro era interesante porque al fin veía algunos secretos de mi madre como por ejemplo por que no le gustaban los perros y la razón era porque cuando tenía siete años un perro casi le había arrancado el brazo.
Era como ver cientos de miles de videos de youtube al mismo tiempo.
Después de buscar un buen tiempo encontré lo que buscaba su “sentido del pudor”.
Pensé en desecharlo de raíz pero me imagine a mi madre dejándose ver y tocar por todos los hombres con los que se topara y entonces fue cuando cambie de opinión.
Solo tenía que alterarlo de tal forma que solo se mostrara desnuda frente a mí.
Que solo se dejara tocar por mí.
Después de unas breves visitas al sentido del deseo y de modificar su definición de antinatural por fin Salí.
Después de todo ese trabajo pensé en cobrármelo de lo lindo.
Mi madre se paro y me sonrió pícaramente y entonces le dije que tenía un culo fantástico.
— ¿enserio lo crees cariño? —dijo.
Sonrojándose.
— Definitivamente —dije — estas buenísima
Ella sonrió y se volteo hacia la ventana pero en eso se bajo la tanga dejándome ver su preciosa vulva.
Estaba depilada como la de una niña.
— Si tanto te gusta mas vale que te de una vista completa.
—dijo llevándose una mano a la vagina y fue entonces que supe que había funcionado… había convertido a mi madre en una puta lujuriosa.
Ya no tendría que aconsejarla ahora ella lo haría por voluntad.
Me acerque junto a ella y le toque una teta… primero suave y después violenta hasta que ella comenzó a gemir.
Ella se seguía tocando la concha.
— Si dale… hijo vamos —dijo mientras llevaba una de mis manos a su entrepierna— vamos hijo se que después de quince años estarás ansioso de volver.
Esas palabras me detonaron, me saque la verga y puse a mi madre contra la mesa de la cocina… se la metí de un solo golpe y ella soltó un gemido de placer.
—ahaaaaa si… si… dale.
Mas rápido MAS!!! —Gemía mi madre.
— ¡ cógeme como una puta!
Yo le estaba dando como si se me fuera la vida en ello… por fin estaba cumpliendo mi sueño de tirarme a mi madre.
Entonces le comencé a besar la espalda y morder las orejas hasta que pase a tirar de su cabellera rubia mientras ella gritaba de placer.
Hasta que los dos nos vinimos al mismo tiempo.
—Aaaaaaaaaa!!!! —grito mi madre con tal potencia que se debió haber escuchado hasta las afueras del vecindario.
Saque mi verga de su concha la cual goteaba de líquido vaginal y semen.
Ella estaba casi desfallecida.
Le dije que se vistiera antes de que llegaran mis hermanas.
Ella con una sonrisa eufórica sonrió y asintió.
Después continuare contando lo que mis habilidades me permitieron hacer con el mundo.
Nota de autor: primero que nada gracias por leer mi relato, me gustaría saber que opinan ¿debería tener una continuación?
Realmente estoy haciendo relatos eróticos como una pequeña practica para escribir un libro asi que me gustaría saber si mis historias son atrayentes en el principio de las mismas, ya que la mayoría de las personas que han leído mis historias coinciden en que mis comienzos al relatar no atrapan al lector.
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