Las tetas de mamá IX

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Vallekanito.
La vida de Pilar y Miguel seguía sus derroteros, vivían como un matrimonio, dormían juntos, su padre se había ido de casa, creían que con Silvia y ellos eran felices con su nueva relación.

Follaban todos los días, a veces más de una vez y eso les hacía estar en la gloria, Pilar nunca hubiese imaginado que le gustará tanto el sexo, pero se había vuelto una adicta.

Solo había un problema, el económico, Pilar era ama de casa y nunca había trabajado y Miguel seguía estudiando.
Pilar estaba preocupada, los ahorros se acababan y no sabía como solucionarlo, tendría que hablar con Miguel.

Una noche en la cama Pilar pensó que había llegado el momento, iba a empezar a hablar cuando sintió la polla de su hijo a través del camisón en la raja de su culo, era insaciable.

– Miguel, tenemos que hablar, dijo.

– Ahora no, mamá, cuando te eche el polvo hablamos.

– Venga, hijo, como quieras, fóllame y luego hablamos,.
Pilar ya tenía el coño húmedo notando la excitación de su hijo.

Miguel pasó su mano por dentro del camisón y empezó a acariciar el pecho de su madre, está se dió la vuelta y quedaron cara a cara.

– No me canso de tus tetas, mamá.

– Ya lo se, hijo, son todas para ti.

Miguel desabrochó el camisón por la parte superior y besó las tetas de su madre, ella se puso boca arriba, Miguel le subió el camisón y le bajó las bragas, empezó a follársela.

– ¡Ah, Miguel, cada día follas mejor!
– Si, mamá es que tengo una buena maestra.

Siguió moviéndose en el coño de su madre y con la cabeza entre sus tetas, cuando se iba a correr la sacó, no quería dejarla embarazada, por lo menos no todavía, un hijo-hermano pensó sería de lo más morboso, ese pensamiento hizo que se corriera, su semen cayó en los muslos de su madre.

Se quedaron los dos boca arriba, descansando y entonces su madre le contó su problema.

– Bueno, mamá, yo tengo una idea pero no sé si tú querrías.

– Lo que sea, hijo, la situación es desesperada.

– Bueno, pues podrías hacer lo que acabamos de hacer pero por dinero.

– ¿Follar por dinero, como una puta, con desconocidos?
– No veo otra solución, mamá, además yo conozco a alguien que estaría deseando follar contigo.

– ¿Conmigo, quién?
– Mi amigo Javi, está obsesionado contigo.

– Vaya, parece que tengo éxito con los jóvenes.

– No me digas que no habías notado nada, mamá.

– Bueno, veía que se fijaba mucho en mis tetas, pero pensé que era cosa de la edad y no le di más importancia.

– Pues se ha hecho pajas con tu ropa interior y con tus faldas.

– Vaya, a veces noté algo, pero pensé que habías sido tú.

– ¿Quieres que hable con él?
– Bueno, a ver que dice.

Miguel se reunió con Javi y no le fue difícil llegar a un acuerdo, Javi estaba deseando follarse a la madre de su amigo y no iba a desaprovechar la oportunidad, iba a pagar una buena cantidad de dinero por lo que puso sus condiciones.

– Bueno, dijo Miguel, hablaré con ella pero no creo que haya problema.
Luego te llamo.

– De acuerdo, dijo Javi que tenía ya una erección de campeonato pensando en que se iba a follar a Pilar.

Miguel llegó a su casa y se reunió con su madre.

– Bueno, mamá lo que yo suponía, Javi está deseando follar contigo, está misma tarde si tú quieres.

– Bueno, está tarde está bien, necesitamos el dinero urgentemente.

– Javi va a pagar una buena cantidad y ha puesto sus condiciones, pero tranquila son fáciles de cumplir.

– A ver, dijo Pilar.

– Quiere que te pongas una camisa con botones, una falda de cuadritos y que no lleves ropa interior.

– Bueno, vale.

– Además quiere que cuando llegues estés cocinando y no mientes nada de lo qué va a suceder, aparte de que no te enfades si te insulta.

– Vaya amigo raro que tienes, pero está bien, así lo haré.

– Además tranquila,yo estaré presente para que no te suceda nada.

,- Ya, lo que tú no quieres es perderte el espectáculo.

– Eso también mamá, eso también.

Miguel llamó a Javi y quedaron ese mismo día a las siete de la tarde.

A la hora indicada sonó el timbre, Miguel abrió la puerta y Javi entró, se dirigió hacia la cocina donde estaba Pilar.

– Hola.
Pilar ¿Que haces?
– Hola, Javi, estoy preparando la cena.

Javi se acercó por detrás y le agarró las tetas, frotándose contra su culo, Pilar notó su erección
– Vaya, veo que estás sin sujetador, eres un poco guarra.

– Es que me gusta tener las tetas libres.

– ¿Y el coñito como te gusta tenerlo? Dijo Javi levantándole la falda.
Vaya ya lo veo, también libre.

– Échate para adelante que te voy a follar que es lo que estás deseando guarra.

Pilar obedeció agarrándose a la encimera de la cocina, Miguel mientras tanto no podía más, ver cómo trataban a su madre le estaba poniendo a cien, de sacó la polla y empezó a Masturbarse al ritmo que marcaba Javi.

Al echarse hacía adelante las tetas de Pilar colgaban dentro de la camisa, Javi le metió la polla en el coño y empezó a empujar, le desabrochó la camisa y le estrujó los tetas.

– Vamos zorra, muévete.

– Si, Javi, si, pero no me aprietes mucho las tetas que me haces daño.

– ,Es lo que te mereces por puta.

Miguel mientras tanto no pudo más y se corrió, Javi no aguantó mucho más y echó todo su semen en el coño de Pilar, fue tan grande la corrida que le resbalaba por los muslos.

Javi todavía no había acabado.

– Vente conmigo al salón y sigue con las tetas fuera.

Pilar fue hacia el salón.

– Venga, siéntate.

Pilar obedeció, Javi que seguía con la polla fuera la acercó a sus tetas.

– Estas tetas tan preciosas merecen una buena polla.

Javi metió su rabo entre las tetas de Pilar y empezó a menearsela, Miguel estaba excitadísimo, pero decidió aguantar, ya tendría tiempo de desfogarse.

Javi estrujaba las tetas de Pilar sin ningún miramiento, su capullo asomaba y se escondía entre ellas a gran velocidad, cuando vio que se iba a correr apretó las tetas más fuerte lo que hizo que Pilar diese un grito, todo el esperma cayó en su cara.

– Bueno, creo por hoy ya tienes suficiente.
Javi sacó el dinero y se lo tiró a la cara.

– Toma, te lo has ganado.

Javi se vistió y se fue.

– Bueno, mamá, ya has visto que no ha sido tan difícil, seguro que hasta has disfrutado.

– Ha sido un poco violento, ¿Y tú has disfrutado?
– Yo me he hecho una paja viendo cómo te follaba, pero aún estoy burro.

Miguel se acercó a su madre con la polla tiesa y la arrimó a su boca.
Pilar la engulló y empezó a mamársela acariciándole las pelotas.

Miguel a su vez sobaba las tetas a su madre, se corrió enseguida y su madre se lo tragó todo, estaba empezando a gustarle el semen, sobre todo el de su hijo.

Cuando acabaron cogieron el dinero, era una buena cantidad con eso tenían para ir tirando un tiempo.