Las tetas de mi sobrina, me hicieron eyacular mucho.
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Soy Carlos un hombre de 37 años, lamentablemente desempleado, perdí mi trabajo y no encontraba uno nuevo, tenia muchos gastos entre ellos la renta de mi departamento.
Le comenté mi situación a mi primo Javier, con él crecí como hermanos, por lo tanto me ofreció su casa en México por un par de meses hasta que yo pudiera encontrar un trabajo, restablecer mi economía y continuar con mi vida normal en mi ciudad.
Él es viudo y sólo tiene una hija de 17 años, la cual yo no veía desde hace 6 años.
Cuando llegué a su casa, toque el timbre, llegué un viernes por la mañana, era temporada de vacaciones así que me abrió su hija, mi sobrina Daniela…la vi, era toda una señorita, con su cabello largo hasta la cintura, obscuro y lacio.
Una piel blanca, unos ojos obscuros, unos labios gruesos y pintados de rojo.
Su cuerpo delgado, una cintura delicada y un gran par de pechos…me quedé sonrojado a lo que mi sobrina sólo dijo: -¡Tío Carlos, pasa te estaba esperando!.
me lo dijo con una sonrisa coqueta…Desde ahi noté que esta chica era una mujercita muy sexual, la forma en que hablaba y caminaba, incluso de vestirse la delataban.
El primer día comenzamos a platicar mucho, nos comenzamos a llevar muy bien me hizo de comer y me preparo mi habitación, su papá trabajaba y salía hasta tarde, por lo que el resto de las vacaciones y mientras yo viviera ahi, estaría a solas con ella diario.
Faltaban dos semanas para que ella regresara a clases así que para no estar de arrimado y aparte flojo, la ayudaba en cualquier cosa que se le ofreciera, incluso a mi primo, su papá, le hacia muchos favores, como lavarle uno de sus autos, o cortarle el pasto…y fue precisamente haciendo esto que comenzó la historia con Daniela, mi sobrina.
Un dia un poco nublado, decidí cortar el pasto, ya que hacerlo en pleno sol seria un poco cansado.
Así que me puse unos pantalones de mezclilla rotos y una playera que yo mismo le había cortado las mangas, esto era para estar fresco mientras cortaba el pasto…el patio daba hacia una de las ventanas de mi sobrina, mientras yo cortaba podia observarla, podia ver sus grandes tetas, que hasta en ese momento para mi eran intocables…ella siempre usaba blusas de tirantes mayormente blancas, realmente era muy excitante ver ese par de tetas e imaginarmelas descubiertas, con sus pezonsitos rosados, tocandolas, besandolas.
Seguí cortando y salió el sol, se puso bastante fuerte por lo que comencé a sudar mucho, mientras cortaba miraba su ventana, pero ya no la veía a ella, eso lo hice varias veces hasta que por atrás me llega mi sobrina y me dice: -¿Me estas buscando?, te hice una limonada fresca, a lo que sólo respondí gracias.
En eso me toca los brazos y me dice: -Tío, que brazotes se ve que vas al gym, ¿no te da calor con esos vellos en el pecho y este sol?…yo me muero de calor y eso que no tengo vello en mis pechos, y sonrío.
Ese comentario me excito bastante y el hecho de que comentara mi físico, me dio a entender que estaba al pendiente de el.
Pasó el rato y terminé de cortar el pasto, así que me fui a sentar un rato en la sombra, la verdad ya me invadían pensamientos de lujuria hacia ella.
Estaba deseoso de tener sexo, me preocupaba que fuera mi sobrina, me preocupaba equivocarme y ocasionar un problema con mi primo.
Por lo tanto trate de olvidar eso, me levanté, me quité la playera sudada y me metí a la casa, iba a ducharme.
el baño se encontraba a lado del cuarto de Daniela, tenia que pasar primero por su cuarto, cuando me estaba acercando comencé a escuchar unos gemidos suaves, una respiración agitada…Daniela se estaba masturbando….
oír e imaginarme que se estaba tocando, me provocó una erección, unas ganas enormes de entrar a su cuarto y cogermela, así estuve escuchando sus gemidos como unos 5 minutos mas, hasta que escuche el gemido final, Daniela se había venido, como pude me acomode la verga para que no se notara la erección y entré a su cuarto, esto lo hice para ver si estaba desnuda, la verdad me había excitado tanto escucharla que en ese momento olvidé que era mi sobrina, al momento de entrar ella estaba vestida, sólo sonrió y se mordió un labio, se puso nerviosa por lo cual confirme su masturbación, sólo me dijo: -Tío se te ofrece algo? que buen cuerpo tienes ponte playera no seas presumido, Yo sólo le respondí: – Si hago mucho ejercicio.
voy a tomar una ducha, en ese momento nos quedamos viendo en silencio y me fui.
Obviamente yo ya andaba muy excitado, tenia muchas ganas de masturbarme y así fue, me masturbe mientras me bañaba, pensaba en ella, en besar esas tetas, en que gimiera pero por tener mi pene dentro de ella, sin pensarlo comencé a masturbarme y comencé a gemir, olvide por completo que no estaba en mi propia casa y se escucharon mis gemidos de placer.
Terminé de ducharme, y salí hacia mi cuarto solo una toalla tapaba mis partes, salí con el torso desnudo y un poco mojado, de repente veo a Daniela en mi cuarto, me estaba sacando ropa limpia, y le digo: -¿Daniela que estas haciendo? a lo que ella respondió: -Te estoy sacando ropa limpia, vi que entraste al baño sin ropa limpia y decidí hacerte el favor.
-No era necesario respondí.
Pero lo que ella me dijo fue el principio de unas semanas de pura pasión, erotismo y al final sexo…Ella se acercó lentamente a mi, me puso su mano cerca de mi pene y jaló la toalla hasta dejarme desnudo, me dijo: -Te masturbaste mientras te bañabas, dime que estabas pensando en mi, porque yo me toque pensando en ti, hasta terminar, sólo me imaginaba cómo seria tener tu pene adentro de mi.
Todo eso me lo decía acercando su boca a la mía, yo inmediatamente tuve otra erección…ella lo notó y solo sonrío y salió del cuarto.
En ese momento se escucha el claxon, era su papá…Daniela corrió a abrirle, yo sólo escuchaba como lo recibía.
Yo seguía desnudo, muy excitado, con la erección, tenia deseos de cogermela, no podía creer lo que me había dicho, realmente me excitó eso y despertó mis deseos sexuales pero solo podría masturbarme.
Decidí calmarme y vestirme y bajar a cenar junto con ellos…pasaron las horas, ya era de madrugada, me desperté, había tenido un sueño húmedo con mi sobrina, estaba demasiado embarrado de semen, por lo que decidí ir al baño a limpiarme, mientras me limpiaba, no dejaba de pensar en ella, de hecho hacia muchos años que no tenia sueños húmedos, pero lo sucedido hace unas horas me dejo así excitado y por eso lo tuve, pensaba en meterme a su habitación, pero era riesgoso.
Así que volví a mi cama a dormir.
Al día siguiente, me desperté ya eran las 10am, mi primo, su papá, se iba a las 7am a trabajar, así que otra vez estábamos ella y yo solos, me levanté así, en boxer nada mas, sin playera, y otra vez pensando en ella, bajé a la cocina por algo de comer, y ahi estaba ella de espaldas, con un short muy pequeño, que dejaba al descubierto sus piernas…me calenté, de ver sus nalgas, de ver su espalda semi cubierta por su blusa sin mangas…así que como ayer me había dado a entender cosas sexuales, fui rápidamente a asegurarme que no estuviera su papá en la casa…cuando lo confirmé, lentamente le llegué por atrás, ella estaba lavando los trastes, le agarré la cintura y comencé a besarla lentamente, pero no románticamente, sino muy eróticamente, comenzamos a meter lenguas, empezamos a producir mucha saliva, y por fin, le agarre esas tetas, comencé a tocarla por encima de la ropa, ella sólo pegaba su culito contra mi pene ya erecto, ella se meneaba así en forma de círculos, realmente me estaba masturbando el pene con su culo, se sentía mucho erotismo, en eso ella se voltea y con sus manos mojadas me toca el pecho.
Yo noté que no traía brasier, traía los pezones bien parados, duros y comencé a besarlos por encima de su blusa, era un momento demasiado excitante, mi verga estaba muy dura, así que seguí, ahora tocándole su conchita por encima del short.
Le dije: -mmmm que calientita estas, que ricas tetas, te quiero desnudar, te quiero hacer mía, vamos a mi cuarto.
Camino a mi cuarto ella no dejaba de tocarme el pene por encima del boxer.
Cuando entramos a mi cuarto, la agarré por atrás otra vez, y comencé a desvestirla, ella sólo se mordía los labios y gemía delicadamente, se estaba excitando mucho.
Ya le había quitado toda la ropa y comenzó a moverse, a menearse contra mi pene, pero esta vez desnuda, yo sólo veía ese culito y ya quería entrar, ella se volteo, me bajó el boxer, y comenzó a tocarme el pene, solo lo acariciaba, me besaba el pecho y me comenzó a decir cosas excitantes: -Que rica verga tío, que cuerpo, me encantan los hombres así con pelo en pecho, así como eres, quiero que me acaricies, quiero sentir tu calor, quiero sentir tu verga encima de mi.
Yo ya no aguanté mas, la acosté boca arriba en la cama, y comencé a darle sexo oral, su conchita tenia un olor muy rico, su sabor era a delicioso, la empece a lamer un rato hasta que intenté meterle los dedos, pero no se dejó, yo ya traía la verga bien gruesa, lista para entrar, cuando me pide que no se la meta, que sólo le frote mi verga con su concha, y pues así le hice, comencé a frotar mi glande sobre su clitoris, ella solo gritaba de placer, se ponía muy roja, como yo estaba encima de ella podia besarle las tetas, eran grandes, blancas, sus pezones eran rosados como me los imaginaba, las besaba, las mordía , quería venirme ahi.
El nivel de excitación era muy alto ya me quería venir yo frotaba muy rápido ya mi pene contra su clítoris, ambos gemíamos de placer…ella me detuvo y me dijo que hasta ahi íbamos a llegar.
Sabiendo que lo que hacíamos estaba mal, acepté lo que me dijo, así que m levanté de la cama y me fui a masturbar al baño.
Así pasaron las dos semanas de vacaciones, rozando nuestros cuerpos, besándonos apasionadamente, todo ese tiempo no la había penetrado, siempre me dejaba con las ganas, tampoco eyaculaba encima de ella, me tenia que masturbar yo para sacar esa leche, en algunas ocasiones me masturbé frente a ella, sólo notaba como se excitaba al ver mi leche salir a chorros…todo era así diario hasta que ella tuvo que regresar a la preparatoria…cuando eso sucedió yo comencé a buscar trabajo, era tiempo de irme de esa casa, ya que sabia que eso que hacíamos era muy placentero pero no era bueno y que su papá nos podia descubrir…pasaron los días y ella y yo seguíamos haciendo lo mismo, ella nunca quiso que la penetrara, cuando ella regresó a clases siempre le decía que me excitaba verla vestida de colegiala, que a ver si un día de estos me sorprendía…Pasaron dos meses y encontré trabajo, ya era tiempo de irme de esa casa, hable con mi sobrina y con su papá de que ya me iba a ir en cinco días, les dije que gracias por la estancia, en esa platica Daniela hacia miradas muy cachondas, y se mordía los labios.
Dos días antes de irme, estaba en casa de ellos solo, recordando esos momentos de erotismo con Daniela, cuando decidí tomar una ducha…mientras me duchaba escuché ruidos.
Salí en toalla y bajé a ver que era, y era ella, vestida de colegiala frente a mi, estaba con su blusa muy pegadita y un poco desabotonada, sin brasier, sus tetas estaban a punto de reventar, y traía su falda muy doblada, para que le quedara cortita, en eso se voltea y me muestra las nalgas, sube una pierna al mueble, dejando un poco abierta su vagina y solo dice susurrando casi: -Metemela tío, la quiero adentro, quiero que te vengas en mi, quiero probar tu leche…ven ya, tengo mis braguitas muy mojaditas, por eso me las quité y traigo mis tetas muy calientes, mi pezones duros, solo de pensar en como me cogerías.
ven ya.
Sin pensarlo y con una evidente erección comencé como siempre, rozando mi verga en su concha, en su clitoris, y de verdad estaba muy resbalosa su vagina, y comencé a meter mi pene en ella, ella sólo gemía de placer.
Su vagina estaba muy apretadita, de verdad estábamos muy excitados, comencé a besarla, y ya no pude mas, le saqué la verga y comencé a besarle las tetas desesperadamente, me encantaban eran muy grandes para una chica de 17 años, cambiamos varias veces de posición, pero siempre me pidió que la penetrara, lo hacíamos sin condón así que me pidió que no me viniera adentro de ella, por lo que le respondí si podia venirme en sus tetas, que me gustaban mucho, que tenia ganas de acabar ahi…ella solo respondió casi gimiendo que si, que quería toda mi leche ahi…Seguimos cogiendo hasta que ya le pedi que se arrodillara que ya iba a eyacular.
Sus palabras me enloquecieron mas:
-Tio vente, quiero tu leche en mis tetas.
Mientras ella decía eso, se acariciaba los pezones y juntaba sus tetas para recibir mi semen, yo sólo me masturbaba hasta llegar a eyacular.
En eso mi sobrina dice: -No te masturbes, te la voy a chupar quiero probar esa verga gorda.
Y comenzó a chuparmela, en esos momentos ya no aguanté mucho y le avisé que me vendría…
-Ya me vengo Daniela, preparate…Ella solo respondía con gemidos…y por fin me vine.
Nunca en mi vida había eyaculado tanto, le repartí semen por la cara y más por sus tetas, ella sólo gemía y decía que que rica leche, y comenzó a chuparme la verga para dejarla sin una gota, después comenzó a esparcir el semen en sus tetas, aún seguía calientita.
Ambos quedamos satisfechos…después de eso ella se limpio con un poco de papel y se quedo desnuda viéndome acostada en el mueble…Yo sólo le dije que esta seria la ultima vez, que ya en dos días me iba a regresar a mi ciudad y que ya no podríamos hacerlo mas.
A lo que ella respondió, entonces en estos dos días voy a tener que faltar a clases para poder despedirnos bien, tú necesitas irte con los huevos vacíos de leche y yo con mi conchita o si quieres con mis tetas llenas de semen…
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