las zapatillas de charol me hicieron puta
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Resulta que yo tenía 14 añitos, pensaba en mi fiesta de 15 años, en un novio muy guapo, en salir a bailar, en ser linda, solo Manuel me había besado una vez y sentí como que algo explotaba en mí, me puse muy roja, esa noche me toque mi vagina que estaba húmeda, pero enseguida la deje, me dio cosa. Un día mi mamá Elena se fue con mis primos y nos dejó a mi Dady Hubert y a mí en casa, yo me fui a mi habitación y él se quedó en la sala, leyendo el diario.
Después de dormir un rato bajé a ver si me invitaba algo de comer, pero antes de entrar a la sala escuche que decía: Así perrita, con esos tacones de charol te ves muy linda, muévete perra! me quede paralizada y sin que me viera me asomé con mucho cuidado por la ventana, vi a mi Dady, tenía su verga en su mano, subía y bajaba, me quede sorprendida, la tenía muy grande, en realidad nunca había visto una. Hubert miraba una película porno, una chica con un uniforme de colegiala, portaba una falda escocesa corta y tableada, una blusa transparente que le permitía ver sus senos, unas calcetas blancas hasta las rodillas y las zapatillas de tacón negro en charol con correa y hebilla, se veía muy sexy, pero yo me estremecí, la chica bailaba y enseñaba su trasero y pechos, se hizo a un lado su calzón rojo y mostró sus labios vaginales, mi Dady decía: así perra, así! yo silenciosamente, me fui a masturbarme a mi cuarto, toque mi vagina y vi que era muy similar, mis pechos no eran menos chicos, y mi culo era más redondo y levantado, mis piernas más gruesas y mis labios más hinchaditos, yo me vería mejor esa perra, que su única virtud era ser güera y yo morenita. Me seguí masturbando, pero me canse y me quede dormida. Mi madre llegó y fuimos a cenar.
Dos días después salí con mi papy al mercado a comprar algo para comer, y al pasar por una zapatería vi los zapatos de charol que portaba la chica de la película, la altura del tacón, negros de charol, con correa, hebilla y suela café, como le excitaron a mi dady, y le dije:
Vanessa.- ¡Mira Hubert que lindas zapatillas! ¿Me las compras? (él se puso rojo y me dijo)
Hubert.- Aun eres muy chica…
Vanessa.- Anda si, que sean mis primeras zapatillas…
Sin pensarlo me introduje a la zapatería y le pedí a la dependiente que me trajera un par del 3.5, para medírmelos.
La dependiente trajo los zapatos, me los medí, y de reojo veía que eso excitaba a mi Dady, de hecho no pudo evitar tomarme una foto con sus celular, cuando me veía al espejo. Mi Dady pago, los dos nos fuimos muy excitados, por la compra, yo ya quería ponerme las zapatillas, y Hubert quería que me las pusiera, pero tuvimos que disimular. Ese día yo cabe poniéndomelas en la noche y tocando mi vagina y cuando estaba a punto, me dieron ganas de hacer pipí… me las quité fui al baño y me dormí.
Tres días después mi Mamá Elena se fue con mis tías y otra vez Hubert y yo nos quedamos solos, yo me fui como siempre a mi cuarto y Hubert se quedó en la sala, apenas cerró la puerta mi mamá y yo me puse mi falda escocesa, mi blusa sin sostén, mi tanga roja, mis medias blancas de cole, y por supuesto mis zapatillas. amarre mi cabello en dos colitas sexys, y como supuse, al ir a la sala mi Dady, veía su película, miraba a la chica con obsesión, mientras acariciaba su enorme verga y decía, que lindas se te ven tus zapatillas, como las de Vanessa, muévete perra! Así las cosas me lancé al ruedo, no podía más, estaba muy húmeda,…
Vanessa.- Qué ves Dady?
Hubert.- Nada…. es qué… pero es qué…
Vanessa.- ¿Te gusta cómo se ven mis zapatillas?
Hubert.- Pero Vanessa. ¿Por qué haces eso?
Vanessa.- descubrí como veías a esa chica y creo que yo estoy mejor, además de ser real ¿No te gusta?
Hubert.- Vanessa, pero es que…( Rojo de mil colores, me miraba… seguía sentado y había escondido su verga, no pudo detener la película)
Vanessa.- Mírame! (me empine en su cara, abrí las piernas y le deje ver mi vagina húmeda)
Mientras en la tele, un hombre besaba los senos a la chica, Hubert hizo a un lado mi tanga y comenzó a mamarme mi vagina, que rico, que deliciosa lengua tenía, se me enchinó todo el cuerpo, sus manos abrían mis nalgas, me acariciaban mi culo. Abrí los ojos, la chica en la tv se hinco y el hombre puso su rica verga en su boca. Se me hizo agua la boca, quería mamarle la verga a mi Dady, y cuando le hiba a decir, sentí su verga entrar en mi vagina, me rompió toda, sentí su cabeza en mis labios vaginales y luego de un solo golpe toda su verga, casi me desmayo,
Hubert.- Toma perrita,! toma toda putita!
Vanessa.- aaahhh! no sácala sácala!
Hubert .- Toma perra, toma!
Mi dady se movía dentro de mí el dolor se convirtió un placer indiscriptible… su verga era muy gruesa y mi vagina se hinchaba, entraba y salía con mucha fuerza, mientras sus manos apretaban mis senos y abrían mis nalgas, rompió mi calzón sentía sus huevos rebotar con fuerza en panochita,
Hubert.- Perra, puta perra que deliciosa estás. Que rico aprietas mamacita hermosa.
Yo solo gemía era muy rico para poder hablar, en la Tv. La chica era penetrada de a perrito, mi Dady se sentó y me jalo de las caderas cayendo deliciosamente en su verga que se metió hasta los huevos que rico que rico, comencé a moverme a placer en esa rica verga, mis tacones sonaban en el piso, ese sonido me enervaba, de pronto tuve ganas de orinar le comenté a mi Dady pero no me soltó y esas ganas se hicieron explosión en mi vagina, en mi estómago y tuve mi primer orgasmo, le llené de leche su verga a mi papy, era un líquido blanco, tenía sed y sentía que me desmayaba cuando mi papy me cargo, me tiro de espaldas en el sillón y comenzó a bombearme muy fuerte, sentía que me rompía, yo tomé mis tacones con mis manos dejando abierta mis piernas y mi panocha ardiente, a él le gusto esto.
La metía y la sacaba muy rico cada vez más rápido, volví a tener un orgasmo y casi desmayada de placer, mi papy tomó mis pies, los junto puso su verga entre mis zapatillas y comenzó a sacar litros de leche espesa que llenaron mi falda, mis pechos, mi cara y por supuesto mis zapatillas de semen, era delicioso. Se estremeció, se quedó un rato quieto y acto seguido metió su verga en mi boca, para venirse otra vez, yo probé su leche, sabia raro, como sal, tuve ganas de vomitar pero me aguante. Me dejó descansar un rato, apago la cámara del celular, me había grabado cogiendo. Me tomó una foto más, puso su verga en mi cara una foto más, tomó una foto más a mis zapatillas llenas de semen
Asi me culeo a mi tia. A ella le encanta que le llene de semen las sandalias