loco por mi sobrino parte 2

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por chicolisto08.
Antes de continuar quiero agradecer a la comunidad que se permitió leer mi relato, algunos de mis lectores comentan querer tener un sobrino como el mío, a lo que les respondo que es un complemento, una necesidad, un castigo y un demonio en mi vida, conforme sigan la lectura comprenderán de que les hablo.

Parte 1: http://www.sexosintabues.com/RelatosEroticos-26955.html

Esa noche, esa primera noche continuamos “jugando a las cosquillas”, la cabeza me explotaba quería seguir, pasar al siguiente nivel, dejarme perder por el placer pero algo no me lo permitía así que una vez cansado y mis demonios controlados lo sujete y lo acosté a un lado mío, el pequeño Andre esta cansadísimo, contemplaba su cara con los ojos entrecerrados y bostezando pero un sonrisa guardada en la comisura del labio.

No pude dormir tenía miedo, que ocurriría si mi primo se enterara, y si la próxima vez no me pudiera contener, que pasaría si cuando crezca me toma rencor, abrumado daba vueltas en la cama hasta que accidentalmente choque con el bracito de mi sobrino Andre, se encontraba perdidamente dormido, se había vuelto a poner su trusa, se veía hermoso y me perdí en su rostro dormido.

Nuevamente algo me domino en ese momento y sin pensarlo demasiado baje mi bóxer, tome su manita y la coloque en mi gran Falo, sentir su manita calentita sobre el tronco de mi pene era sensacional, Andre no reacciono, había terminado demasiado cansado, comencé un arriba y abajo de lento a rápido, pensaba en la ocasión que no me pudiera contener y lo hiciera mío para siempre.

Esa noche termine en su manita y con la misma playera con la que había limpiado el semen de su espalda antes, limpie su manita, acerque mis labios cerca de los suyos, su cara intacta, sus ojos cerrados, su respiración lenta y lo bese, con tanto cuidado como si se pudiera romper.

Por la mañana me encontraba desvelado por la incertidumbre de conocer la reacción de mi sobrino, Andre se levantó y me busco en la habitación, yo me encontraba acostado a lado de él viéndolo a sus ojos verdes hermosos y rápidamente me sonrió y se acostó encima de mí. Lo amo, y no lo dejare de hacer, -¿Cómo estas Andre? ¿Qué tal dormiste?- le pregunte mientras lo envolvía con mis brazos y sentía su pecho desnudo contra mi pecho –muy bien tío, hoy también me quiero quedar a dormir contigo- recostó su cabeza en mi pecho, sabía que me quería tanto como yo a él.

Esa mañana todo paso con normalidad, llego mi primo y se llevó a Andre, lo despedí con un abrazo y le susurre al oído –si no le cuentas a tu papa, volveremos a jugar a las cosquillas- lo bese en el cachete y lo vi irse en su carro.

Hasta este momento de la historia quizá genere alguna erección en algún lector, pero lo que en verdad deseo es transmitirles mi sentir y que puedan empatar con mis emociones.

Esa primera vez abrió paso a muchas noches juntos, veces en mi casa y veces en la suya, cierta noche mi primo me invito a tomar una cervezas en su casa ya que sus amistades lo habían desairado, accedí y me permití pedirle hospedaje por esa noche argumentando no tener que llegar a mi casa con mis padres borracho, a lo que el acepto.

Pasaron las primeras 5 cervezas y me sentía mareado, para mis 16 años en ese entonces ya era demasiado, pero mi primo continuaba, al otro lado del cuarto vi a Andre que nos veía, pero no era esa mirada picara y tierna de siempre, era una mirada de enojo, mi primo estaba que se caía en la mesa así que me levante diciendo que iría al baño y fui en dirección a Andre. – ¿Por qué estás tomando? ¿Quiero que te vengas a mi cuarto? ¿quiero que me lleves a dormir?- me decía mientras estiraba sus manos pidiendo que lo cargara, acción que realice en el momento y al voltear hacia donde se encontraba mi primo note que dormía sobre la mesa, así que lleve a Andre a su cuarto y lo acosté en la cama, el alcohol me había fatigado y quería dormir –no te duermas hay que jugar tío- decía Andre mientras tomaba mi mano y la colocaba en su pecho, -si quieres tío yo te hago cosquillas a ti- inmediatamente sentí su manita buscando el botón de mi pantalón, -Andre, que te parece si jugamos a las escapadas- yo me incorporaba rápidamente, sentía el demonio tomar mi cuerpo y la situación –eso como se juega- se apartó un momento de mi para escuchar la explicación –trae esas cuerdas para saltar la cuerda y yo te voy a amarrar a la cama y tú vas a tratar de soltarte al mismo tiempo que te hago cosquillas- mi pene esta durísimo – pero hay que jugar en calzoncitos – alargue mis manos hacia él y le quite su playera y su pantalón dejándolo en una trusita que tenía un pequeño agujerito en la nalga –ven acuéstate boca arriba y yo te amarro- Andre se acostó y abrió los pies dejando sus tobillos cerca de mis manos para poder sujetarlos con la cuerda a los postes laterales de su cama y me extendió las manos para hacerlo de la misma forma.

-Tío esta algo apretada la cuerda- me decía mientras se retorcía para poder escapar, empecé besando su pechito y lamiendo sus pezones, el comenzaba a reír, bajaba con mi lengua hasta su ombligo y jugaba alrededor de su ombligo y adentro de él, baje hasta su trusita y la baje hasta los testículos que recorrí solo con la punta de la lengua mientras que veía como se retorcía de un lado a otro Andre, cerrando los ojos y apretando la boca, despacio chupaba su pene una y otra vez, pero eso no suficiente esta vez, rápidamente me quite la ropa quedando desnudo frente a él, -tío tu pene está muy grande- asombrado dejo de moverse y me contemplo – si Andre algún día el tuyo estará así como el mío- y comencé a desatarlo-

Ahora vas a tratar de desanudarte boca abajo- una vez que quite los cuerdas de los pies y brazos lo acomode boca abajo y le quite la trusa, – Andre, ¿me quieres mucho?- acariciaba su espalda hasta sus nalgas redondeándolas con las manos, acercándome a su centro –si tío, eres el mejor- en un gesto de reacción paro el culito y encorvo la espalda frente a mi verga que pedía más, recargue parcialmente mi cuerpo encima de él y cerca del oído le dije –Andre, soy todo tuyo, te amo mi vida- con una mano tape su boca y con la otra dirigí mi pene a la entrada de su culo empujando ligeramente, sentía como se retorcía debajo de mí, sentía como levantaba su culo y lo bajaba tratando de huir, era excitante, no pararía hasta verlo feliz, continúe y continúe metiendo y sacando la puntita de su culito, comencé a sentir que ahora sus movimiento no eran fuertes, eran rítmicos a mi mete saca, estaba disfrutando por fin, solté mi mano de su boca y lo primero que salió fue un gemido, tenía los ojos cerrados y se encontraba entregado a mí.

Esa noche lo lleve al cielo, lo coloque boca arriba y levante sus piernas, mientras metía mi pene veía su cara, mordiéndose el labio, con las manos rasguñaba la sabana, sentía la tensión de sus piernas en mis hombros, veía su abdomen subir y bajar, sudaba, gemía, sonreía y me veía, descargue 4 chorros dentro de él y me separe, cayeron sus piernas en mis regazo, se veía agotado pero se veía feliz.

La noche termino, quedo dormido acurrucado en mí, y yo en él, compartiendo el ritmo en la respiración, por la mañana lo limpie y lo vestí, ya no era su tío, era su todo, el ya no era mi sobrino era mi vida entera, pasaron los años, creció nos abrazábamos, nos tomábamos de las manos, nos divertíamos y continuo creciendo hasta que se hiso adolescente y todo cambio.

CONTINUARA