Logré tener sexo con mi tía
Siempre me gustó y soñaba con estar con ella, su trasero lo veía con deseo aunque ella era muy recatada, poco a poco nos fuimos acercando hasta tener una relación .
Hola, les contaré como llegué a tener sexo con mi tía, comenzaré desde los detalles de como se fue dando todo, los nombres serán inventados.
Soy un chico delgado en aquel entonces tenia 16 años estudiaba la secundaria, en plena adolescencia me despertaba las ganas de tener sexo algo normal a esa edad.
Mi amor platónico era mi tía me gustaba, ella tenía unos 47 años aun con su edad tenía buen físico era un poco llenita con pechos grandes y buen trasera de 160 de altura, con piel clara.
Ellos no tienen hijos, no pudieron tener.
Iba muy seguido a su casa porque algunos días trabajaba con mi tío, ahí nos empezamos a tener más confianza cabe aclarar que ella es muy fiel y muy conservadora, llegó un año en el que mi tío entró a un trabajo que le consumía mucho tiempo así que cada que visitaba estaba mi tía sola, me dijo que le enseñará a usar su celular nuevo y así, así que iba más seguido por eso, nos íbamos a sentar a la azotea por comodidad una noche solo había un banquito así que me puse de cuclillas a su lado y le dije ya me cansé a lo que me responde siéntate, le conteste qué prefiero que ella esté sentada en eso me dijo de broma
-siéntate en mis piernas.
-estoy pesado mejor yo me siento y tu te sientas en mis piernas
Ella : No se puede, soy tu tía mayor que tu por que me sentaría en tu piernas, en cambio si tu lo haces es como consentirte.
Así sonreímos y estuvimos un rato más
Ella: vamos a la banca mejor ahí nos sentamos los dos
Llegando a la banca me sente y me dijo
– siéntate en mis rodillas si aguanto tu peso
Yo me puse muy nervioso, estábamos en la azotea a oscuras sólo con la luz de la pantalla y podrían vernos los vecinos pero termine accediendo, después de un rato le dije
– yo tambien aguanto siéntate en mis rodillas ahora vas tu.
Ella no quería pero termino accediendo, al sentarse sentí sus trasero cobre mis piernas y ocupó todo el espacio, se tendía tan blando y me excité y me puse muy nervioso a tal punto que mi cuerpo temblaba un poco,uno de sus pechos rosaba mi hombro y sus labios tocaban mi frente, así estuvimos por un buen rato sin mediar palabra, entonces con mi mano izquierda abracé su cintura y ella se acomodó más sobre mi, me giré para verla y ella levantó su cabeza de tal modo como si accidentalmente mis labios rodaron su megilla, al devolverme hacia ña derecha esta vez rosaron nuestros labios a lo que ella río nerviosa y le dije
-otro
Nuevamente me giré y ella rozó sus labios con los mio y así una vez más.
En mi mente dije esto puede que no suceda más así que con todos los nervios del mundo y con el cuerpo tembloroso levante mi mano derecha pata tocar su pecho, sólo se lo agarré y lo acaricie, a su edad estaban muy firmes no son enormes pero tampoco chicas de buen tamaño.
Después de un buen rato decidimos bajar antes de que llegara mi tío, me despedí y me fui, no podía creer lo que acababa de pasar y pasaría una vez más, en fin al llegar a mi casa ella me marca diciéndome
Lo que hice está mal, olvidalo por favor, disculpame por lo que paso y por favor no le digas nada a tu tío
-A mí me gustó, no te preocupes, guardaré el secreto
Ella- No está bien lo que paso hay que olvidarlo.
Así nos despedimos ese día.
En el siguiente relato continuó con lo siguiente qué sucedió.
Espero la parte en que tenga sexo con la tía