Lorena se va de casa, Día 7 “El autobús”

Mi primita de 6 años se iba de casa, ya la había disfrutado de todas las formas que su pequeñito cuerpo celestial lo permitían, un autobús casi vacío ayudó mucho..
Vacaciones Decembrinas 1997.

El día había llegado, el autobús donde mi familia y yo, con excepción de mi papá por su trabajo, nos iríamos al pueblo a pasar las fiestas decembrinas y regresar a su casa a Lorenita. De ninguna manera estaba triste, pues seguiría estando con ella 15 días mas en casa de los abuelos y podría hacerle las mismas cosas que en mi casa, solo con más precaución.

Nuestro autobús salía a las 12:45 del día, mi hermano y mi mamá estaban en los asientos a un costado de nosotros, casi a la mitad del autobús, Lori y yo íbamos juntos, ella del lado de la ventana. Desde que me subí note que iba muy vacío el autobús, y de hecho atrás de nosotros no había nadie, era un escenario perfecto para mi plan que rápidamente vino a mi mente. A los pocos minutos de salir entramos a un túnel oscuro por el cual se tardaría aproximadamente un minuto en salir, no lo pensé y aproveché, metí mi mano en el short de mi primita, le hice a un lado su ropa interior y le pasé el dedo en su panochita, ella actuaba como si nada, en plena oscuridad nadie podía vernos, cuando estábamos a punto de salir del túnel saqué mi mano y lleve mis dedos a mi nariz para disfrutar de ese olor que tan loco me volvía.

Poco después de salir del túnel se encendieron 2 televisores de esos antiguos que  son muy voluminosos comparados con los de ahora, uno estaba al frente del autobús y otro 2 lugares atrás de nosotros y proyectaron la película de Aladdin en dibujos animados y me vino la mejor idea del mundo, le dije a mi mamá que me iba a ir con Lori a los asientos de atrás por que ella quería ver la película y la pantalla del frente estaba muy lejos, me pare con ella y nos sentamos casi en los últimos asientos, lejos de la vista de mis familiares y los demás pasajeros.

Y era en serio, Lorenita si quería ver la película, estaba muy emocionada viéndola mientras yo no le sacaba la mano del short dedeándole su panochita, mi verga estaba durísima pero obviamente de ninguna manera la iba a intentar penetrar ahí, era mucho el riesgo, pero tampoco la iba a sentar sobre mi con la ropa entre nosotros solo tallándole el pito en sus nalguitas, necesitaba más.

Le dije que se parara un instante para meter mi mano en sus nalguitas y su ropa interior y después que se sentara, de todos modos, si alguien venia tendría tiempo suficiente para reaccionar y solo debía sacar la mano y actuar como si nada. Con mi dedo mayor alternaba entre dedear su culito y su panochita por debajo, me llamó la atención lo caliente de su culito ese día en especial, así que le metí el dedo mayor en el culito poco a poco, ella me miró y me sonrió cuando lo hice ehehehe, ya con todo lo que se podía del dedo dentro de su culito ella empezó a subir y bajar discretamente para hacer el mete y saca del dedo en su culito, mi verga casi explotaba pero sabía que no podía hacer más, solita se estuvo matando con mi dedo hasta que le dije que era suficiente ya que la postura era muy incómoda y ya me estaba doliendo el brazo.

Cuando le saqué el dedo si venía algo sucio de lo único que se podía ensuciar, tomé unas servilletas de mi mochila y me limpié mi dedito, y a los pocos minutos que terminó la película de aladdin nosotros llegamos a nuestro destino.

El resumen de las vacaciones en la casa de los abuelos fueron muchas mamadas de panocha y culito a Lorenita, unas 8 culeadas por su culito entre la casa y el cafetal, unas 6 veces que me la mamó hasta tragarse mi leche y un chingo de dedeadas rápidas.

Y así mismo se resumen los años 1998, 1999 y quizá principios del 2000 en las vacaciones de semana santa, los momentos o hasta días que podíamos pasar solos cogíamos de lo lindo y hasta hartarnos o hasta que me quedara sin leche, recuerdo unos días en mi casa que cogimos tanto que ya no me salía leche al venirme, de igual manera hubo varios intentos de penetración vaginal sin éxito, pero como en el relato anterior muchas veces le llené su vagina de leche sin penetrarla, sin duda los mejores años de mi vida, pero como todo empieza, debe terminar.

Continuará…

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