Los días de sofá III

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por daldieb1818.
¿Qué mierda hago en el maldito sofá? James no está ¿hay una cama libre y yo torturándome -físicamente- sin necesidad? Así que me fui a su cama.
El resto del fin de semana fue tenso, no es agradable estar en un sitio donde la mayoría de las personas te tienes aversión, el tema de mi “escapada” –así le llamaba Dayana- fue el meollo del asunto, ella envió las niñas con su hermana, quedando en casa solo Dayana y Gina.
Alterno entre ignorarme, matarme con la mirada y acusarme de muchas cosas, intento que revelara lo que había estado haciendo, al punto de que me acuso de haberme escapado con una puta sabrá dios donde, me grito.

Que vaya dios a saber que cochinada me habría pegado la zorra con la que me había visto.
Mi paciencia estaba al límite y no fue lo más inteligente provocarla, le dije que no se preocupara, que igual si me habían pegado alguna cochinada ella no la iba a tenerla, porque para eso habría hecho falta follar, y era algo que ya no le gustaba hacer, grite yo.
Claro respondió que quien iba querer tener sexo con un mujeriego folla-putas.
Le dije que incluso su coño estaba cerrado antes de haberme perdido por medio día, me pregunte en voz muy alta que si la escusa real y todas esas acusaciones sin sentido –dios, y que cerca y lejos estaba de la verdad- no venían por experiencia propia, y era ella la que estaba follando con alguien más fuera, porque seguro como l mierda- Gina no me dejo terminar, enseguida se metió en la discusión.

En fin, gritamos todos y quede yo como el mal tipo del asunto.
Di gracias a dios que los chicos no estaban.
Ella continuo gritándome la mande a la mierda y cerré la puerta de la habitación de James en la cara –no violentamente, dios no estoy en eso de pegar a mujeres.

El lunes no fu al gimnasio, anímicamente y físicamente me sentía pesado.
Richards me escribió y le conté algo de lo que estaba pasando.
Me llamo y le conté todo en detalles, estuvo de acuerdo conmigo en que almenas por los chicos, y en vista de Gina ya se regresaría la universidad debía bajar un poco los ánimos con respecto a las peleas, me distrajo contando algo sobre su primo en la ciudad, un sobrino de su padre buscando casa que se quedaría en su casa y al cual tenía que conocer y de que Matías había peleado con “Patie” la plástica y se regresaba casa hasta nuevo aviso.

La cosa de bajar los ánimos no funciono, ella no cedió y yo vergonzosamente tampoco.
La noche del martes tome una decisión rotunda después de ver durante un discusión a gritos la cara de terror de las niñas, y el retraimiento físico de James, le dije que me iba por unos días.
Ella me acuso de irme con la puta esa.

Me reí sin alegría, el nuestra habitación le dije a media verdad el motivo por los que había salido el viernes, era que necesitaba un respiro de ella, de su actitud para conmigo y no solo en el sexo.
La actitud de su hija, entre otras cosas, le dije que estaba cansado hastiado de todo.
Ella me acuso de no ser la única en la relación, que si algo malo había era tanto culpa mía como de ella.
Le di la razón, una relación es de dos, pero la nuestra se sentía como solo de ella.

Me despedí de las niñas, me destrozo el corazón ver lo asustadas que estaban de mí, fui la habitación de James y se me rompió por completo el corazón, rompí a llorar abrazando a mi chico, me pidió que no fuera que no lo dejara, que podía quedarme en su cama, que él se iba al sofá si quería, quédate quédate quedate, lloraba tirando de mi camisa.
Tome su cara entre mis manos y bese su frente y ambas mejillas, le dije que lo amaba, mucho, más que a la vida misma, pero que era mejor a largo plazo alejarme de su madre, que de él, y sus hermanas nunca lo haría.
En lo que me instalara lo llamaría, lo llamaría cada hora si era necesario.
Pero necesitaba que se quedara aquí por sus hermanas, que lo buscara lo más pronto posible.

Me iba a un hotel, uno barato pensé, no me podía dar el lujo de algo medianamente costoso si las cosas continuaban como pintaban, pensé que una separación definitiva sería buena, obviamente.

Llame Richards, le conté de la situación y me dijo que me fuera a su casa, que no pensara en hoteles y quedarme solo, le recordé lo de su primo y las habitaciones ocupadas, me dijo que siempre estaba el sofá disponible.
Resople-solloce-reí y acepte.

Llame a su puerta con maleta en mano, me abrió y me abrazo en el portal, le devolví el abrazo más fuerte, reprimiendo un sollozo, me hiso pasar y me sirvió un vaso de whiskey, me desahogue de nuevo con él, no le conté nada nuevo, solo hable y eso me libero, le dije lo mal que me sentía, lo culpable y lo aliviado.
Le di las gracias y lo abrase de nuevo, respirando su aroma, su esencia, bese su cuello.
el gimió su aprobación, así que continúe mordiendo su mandíbula llegando a su boca, fue un beso suave, anhelante, tierno, solo disfrutando de sus labios cálidos, amando su lengua, degustando su boca se separó y me miró fijamente absorbiéndome con esa mirada azul profunda.
Tomo mi mano, me guio a su habitación.

De pie, alzando ligeramente la cabeza para besarlo estaba en el cielo, caímos a su cama apenas separando nuestras bocas, fue solo eso, besar, hasta que lentamente fuimos quitándonos la ropa era más un ritual que otra cosa, alternábamos cada prenda con carisias y besos hasta que en su totalidad estábamos desnudos, baje a su ingle y acaricie su polla dura como una estaca, la frote en mis labios y mejillas mientras tenía sus ojos cerrados, lamí lentamente la punta, jugueteando con la punta de mi lengua por el contorno de su falo.
Mientras con un dedo exploraba su ano, cuando encontré su próstata su polla dio una especie de brinco al igual que meneo sus caderas, la masajee un poco más, agregando otro dedo, ganado más liquido pre seminal que devore como poseso, seguí y seguí hasta que con grito gutural, su ano apretó mis dedos y su salado semen inundo mi boca, lo trague, limpiando su polla sin sacar mis dedos, alcance un condón, me enfunde, subí en él, hasta su boca, compartiendo su semen con él un beso lento degustativo.

-Quiero follarte- le susurre al sepárame de su boca –lento, suave, por todo el tiempo del mundo, le dije, me paso un pequeño tubo de lubricante coloque un poco en mi polla, tome sus piernas y me coloque listo para penetrarlo, fue lento, resbaladizo, cálido apretado y delicioso, me moví lento, entrando besándolo y saliendo, alternando besos, carisias por toda su cara, lo ame lenta, suavemente coloco sus piernas alrededor de mis caderas, aun penetrándolo suavemente moviendo mis caderas mi frente descansando en la suya.
Hasta que me vine y el mundo se sintió en paz.

Después de un rato le pedí que me follara, me coloco boca a abajo y lamio mi ano, fue increíble sentí los bellos de mi nuca erizarse por la sensación de la lengua húmeda en mi culo, m estaba llevando la gloria, sentí su lengua entrar, estaba en la gloria, hasta que metió un dedo en mi culo.
Me dolió un poco, y me tense –Shss, shsss, relájate- me dijo, masajeo mis nalgas y la parte baja de mi espalda, me estremecí cuando sentí el frio lubricante caer en mi ano.
La flexión mejoro, el dedo entraba y salía de mi culo con mucha facilidad y nada de dolor, se sentía extraño, y placentero, estaba duro, manchando las sabanas con los jugos de mi polla, cuando agrego un segundo dedo no dolió tanto, para el tercero y estaba gimiendo, moviéndome hacia su dedo, le pedí que me penetrara, se colocó el preservativo y se dispuso a penetrarme.
El ardor que sentí con su polla fue estremecedor, apreté la mandíbula, el continuo masajeándome, instando que me relajara que me dejara llevar, que respirara profundo, lo hice pero incluso así dolía un poco, hasta que se movió, y luego más, y más.

El dolor fue remplazado por un sensación única era como estar al borde del orgasmo, pero sin córreme y cada vez que se movía entrando y saliendo de mi culo aumentaba mas esa sensación –sí, sí, sigue no pares, Richards follame, follme- le rogué, su polla entraba y Salía de mi culo una velocidad vertiginosa, me levante y me pegue su pecho, con mi mano tire de su cabeza hacia mi cuello, haciendo que me besar mientras me taladraba el culo, sentí su manos abrazar mi pecho, besar mi cuello y su polla entrando y saliendo de mí, comencé gemir más y más hasta que tomo mi polla con su mano me masturbo al ritmo de las embestidas me corrí fuerte, mi vista se nublo, cerré los ojos y me deje caer en su pecho, el siguió jodiendome.
Dos tres estocadas más y también se vino dentro de mí, caímos echo un lio en la cama.
Me dormí con el aun dentro de mí.

Durante la semana llame a James casi 5 veces al día, en las mañanas antes de que saliera a la escuela, ponía el altavoz y charlábamos el, sus hermanas y yo, durante la escuela y otras varas veces en la tarde, también contacte un abogado, y comencé los tramites de una separación de bienes, yo no quería nada en particular, la casa y todo lo demás, a excepción de mi coche, se lo dejaría a Dayana.
Tramite el establecimiento de la manutención de los chicos, el abogado me planteo la custodia, le dije que no podía, que lo más sano es que los chicos quedaran con su madre.

Ya para el jueves tenía la demanda hecha, y el viernes llame a Dayana y antes de los chicos regresarán de la escuela, hable con ella.
Le di la propuesta y se negó.
Me grito me insulto estaba furiosa, trate de llevar l fiesta en paz, pero se negó, le dije entonces que se las arreglaría con mi abogado.

En casa de Richards las cosas iban como la seda, su primo pospuso su visita, saber dios por qué, no me quede en el sofá, me quede en la habitación de Richards, follando con Richards, avece solo era dormir claro, pero lo sentía correcto a gusto, de vez en cuando Endri se unió, claro a escondidas porque al ser amigo de Matías la cosa se sentía incomoda si nos veía, lo hacíamos en esas ocasiones en la que él se perdía.
He de decir que las cosas con Matías estaban algo tensas, se notaba distante y osco, sabía que incluso me evitaba, Richard se percató.
Me sentí como viviendo con un futuro Gina.

Un jueves, bendito jueves, particularmente animado, Las niñas y James me habían venido a visitar, los lleve a conocer donde me quedaba en casa de un “amigo” Matías llego cuando nos despedíamos para llevar a los chicos a casa, fue realmente descortés.
Me desanimo.
Dios, pensé tal vez me vendría mejor buscar mi propio sitio, porque aunque las cosas con Richard iban como la seda su hijo sería una constante desagradable y no quería pasar por eso otra vez.

Cuan do regrese sentí ese aire de fatalidad, ni siquiera tenía ánimos de pedirle ir juntos al gimnasio, que era uno de nuestros untos de escape.
Richard me esperaba en la sala, junto Matías, uno sentado frente al otro, me pidió que me sentara, lo hice frente ambos no tomando partidos.
Puso los puntos claros sobre la “situación” pe pregunto a Matías, y sito; ¿¡que mierdas fue eso!?- casi en grito, me la vi venir una discusión, venga ya está, ero Matías solo aparto la mirada y bajo l cabeza.

Le dio ero una buena, critico su actitud, sus acciones, demando saber que coños pasaba, porque esto francamente era ridículo, demando saber que problemas tenia para conmigo porque desde que llegue el había notado su reticencia, era francamente ridículo, se estaba comportando como un niño celoso en busca de afecto y el como la mierda que no era así, me dio pen con el chico, le dije que se calmara, y levante y me senté junto a Matías y le pregunte a que si era realmente eso lo que pasaba.
No me respondió solo se sonrojo, maldita sea, en serio lo hiso, era algo hermoso de ver.

-¿Tengo que darte la charla de la diferencia entre las relaciones Matías?- su tono era extraño, casi triste- Javier es mi pareja, tu eres mi hijo, te amo, pero necesito un culo para follar bromeo, Matías intento decir algo pero callo.

Richard se sentó junto a él y le abrazo, beso su frente, coloque mi mano sobre la rodilla de Matías, le dije que quería a su padre, y que nunca tendría que temer que dejara de quererle porque siempre me hablaba de lo orgulloso que estaba de él y era francamente nauseabundo, lo que saco una pequeña risa de él, coloco su mano sobre la mía y la apretó, yo hice lo mismo.

Richard se levantó y fue a la cocina, a preparar la comida de los dos idiotas que tenía por hombre, me disponía a ir a ducharme cuando Matías me llamo.

-Mira, lo siento ¿sí? sé que es estúpido, pero… me sentí… no se… – ¿céselo?- le corte
-sí, digo es mi papa, siempre ha sido mío ¿sabes? siempre lo he sentido mío y, bueno tu llegaste y él se comporta todo animado y esa mierda contigo, tú le das cosas que yo quiero… digo que no… sabes a lo que me refiero ¿no?- estaba sonrojado era hermoso.
Levante la mano hacia si cara y me detuve, no sabía si se lo tomaría mal.
Cavile en lo que dijo; ¿cosas que yo quiero? –lo sé, te entiendo, eres la vida para tu padre, se de lo que hablo y créeme tú serás siempre su niño hermoso- no resistí y toque su mejilla caliente, era hermoso.

No lo soy dijo riéndose –sí, eres su niño- le reafirme- se rio de nuevo y me dijo.
–No lo de niño, lo de hermoso- oh por dios- ¿Qué, pescas halagos? lo eres, tú lo sabes.

Soy algo atractivo, me dijo en tono bajo, pero no hermoso, los hombres no lo son- claro que sí, le dije, tu padre lo es, él es hermoso.

-Es atractivo, y masculino ¿pero hermoso? no lo sé, él siempre está sonriendo y eso pero de eso a ser hermoso –Dudo
-Sabes hermoso no solo se refiere a suave, también en la rudeza hay hermosura- me reí -no es que él sea rudo todo el tiempo a veces es suave y lento.

-¿Lento? ¿Cómo lento? ¿Lo hace lento? – y allí me quedo claro, sé de qué iba y no estaba siendo nada sutil el niño, así que decidí no serlo.
Me sete de nuevo e inste a que él lo hiciera.

-no todo el tiempo, es más como la excepción y no la regla, a él le gusta follar duro sabes, claro va lento l principio pero después es una maquina sexual- lo vi morder sus labios y acomodarse en el sofá, para quedar frente a mí con un rodilla sobre el mismo.
Decidí hacerme el desentendido soltar información al azar- claro con la polla que tiene no es cosa que uno tome a la ligera, a mí me costó algo la primera vez, cuando me follo, claro después que mi culo se acostumbro fue fácil- mire a otro lado como aburrido -¿te follo?- me pregunto no ocultando su interés –y fue bueno? Digo, la follada ¿te gusto?
Oh sí, mucho cuando metió su polla en mi culo –hice un pausa teatral, dios casi me felicito a mí mismo- fue fantástico, sentí que me iba a reventar, pero después, metiendo y sacando esa estaca de mi culo… no hay nada igual o mejor.

Bueno tal vez su culo, que esta increíble- Deje el comentario al aire y lo mire, se veía ansioso, deseoso, coloque mi mano en su rodilla, tentado a ir más arriba – ¿nunca lo has visto follar?- pregunte como si tal cosa- dijo que no en un tono casi triste, subí un poco más mi mano me acerque su oído y le dije, esta noche no cerrare la puerta y puedes ver si quieres.
Me levante y lo deje pensando, me reuní con Richard e la cocina, Matías regreso al rato, algo nervioso pero radiante.

Esa noche entre al último a la habitación, como había prometido no cerré la puerta y no apague la luz y fui de lleno chupar la polla de Richard, le pedí que me follara.
a cuatro patas y con su polla enterrada en mi culo hasta los cojones mire disimuladamente hacia la puerta y bingo, vislumbre el movimiento, y comencé follarme a mí mismo, le pedí a gritos que me fallara mas, mas.

Mete esa polla hasta lo cojones, le pedí, el respondió como un semental, me todo de las caderas y todo pensamiento lógico salió de mi cabeza, mi polla se hincho, deje caer la cabeza me concentre en las estimulación de mi culo y me vine sin tocarme, el no paro, siguió con su ritmo castigador follandome, apretando mis caderas, me deje caer solo dejando en alza mi culo hasta que me puse duro de nuevo y me corrí fuerte de nuevo, esta vez en su mano.
Después que él lo hiso.
Agotado y saciado recordé nuestra audiencia, pero no había nadie en la puerta.
Me dormí agotado y feliz.

Al día siguiente no hable con Matías, no tuve la oportunidad, aunque de nuevo cuando pase con los chicos de regreso a la escuela -las niñas querían preguntarle de nuevo a Richard si en serio construiría una piscina- me saludo muy efusivo.
En la noche deje de nuevo la puerta abierta, pero esta vez fui decidido a ser el activo, lamí el culo de Richard hasta que estaba jadeante y estirado, el en cuatro, abierto con tres de mis dedos estirándolo rogaba que lo follara, que se la metiera ya o se iba morir.
Mire de nuevo la puerta y de echo Matías estaba siendo algo obvio, decidí tantear de nuevo el terreno, hale a Richard hacia mí, lo tome por el cuello y lo inste a darme un beso de espalda, su cabeza descansando en mis hombros al tiempo que lo penetraba sensualmente.

–Tenemos audiencia- le susurre, se tensó un poco y le dije que no volteara –tu pequeño nos ve.
Ve cómo te follo, como meto y saco mi polla en tu delicioso culo- le dije -él mira como tomo tu polla y la masturbo- El solo gimió.
-¿Te gusta eso?- Le pregunte, como única respuesta el movió ms las caderas follandose mas rápido -Él quiere follarte… o que tú lo folles, y se vino, duro, dejo salir un quejido increíblemente delios, e dejo caer contra mí.

casi pierdo el equilibrio, es más pesado que yo, lo deje caer en l cama, tire de el para que quedara perpendicularmente a l puerta, hice que sujetara sus rodillas con sus manos, me subí a l cama coloque mis pies los costos de su caderas y me agache para penetrarlo, dándole un espectáculo a Matías de mi polla follando el culo de su padre, daba especies de pequeños brincos, dejándome caer furiosamente en su culo, mi sudor corría en todas lados, Richard gemía al ritmo de mis estocadas, deliciosos aww, aww aww, en toda la habitación me llevaron al límite.
Me vine tratando de llegar lo más profundo posible en el culo de este hombre, me deje caer a su lado, respirando fuerte y con una sonrisa tensando mi cara.
Cuando me estabilice mira a la puerta y Matías no estaba.

-Eso fue cosa tuya- me dijo Richards- y amaste cada maldito segundo- le dije, solo se rio, acaricie su pecho y bese tiernamente su mandíbula.

Ese sábado quería pasar el di con los chicos, claro Dayana tenía otros planes, a los que James se negó –adoro a ese niño- por lo que pasamos un fin de semana solo de hombres, el, Richards y yo.
Fuimos al cine luego a comer, durante la comida me pregunto sin rodeos si estaba tratando de regresar con su madre, use un tono bajo, tratando minimizar el golpe, le dije que no.
Me dijo que lo sabía, entre risas que su madre le había comentado a su hermana, Egle la maldita, -eso lo dijo james, no yo- que yo estaba tratando de regresar con ella, cosa que le pareció extraña porque yo me veía mucho ms contento ahora que cuando vivía con ella.
Me desconcertó, le pregunte que si estaba de acuerdo en que no tratar de arreglar las cosas con su madre, él me dijo que lo sacar de esa casa antes de que el nuevo novio de su madre se mudara, me reí y le dije que trataría de hacerlo.

Al terminar la tarde, y después de dejar James en casa de Dayana nos regresamos a casa, Matías estaba en la cocina, haciendo cosas en su laptop, era el di de cocinar de Richard así que solo me instale en una de las sillas estilo bar de la barra a verlo cocinar y hablar con Matías, no había tenido la oportunidad de mencionar lo ocurrido antes, y no tenía forma de sacar el tema, así que fui por debajo sacando conversaciones de mil temas distintos hasta que se me ocurrió preguntar por Endri.

-Y dime Matías ¿cómo está tu amigo Endri?- mire de perfil a Richard que dio su patentada mirad de suspicacia – pues bien, ayer nos vimos en la clase de cálculo avanzado, no hable mucho con el pero en general está bien, dijo sin levantar la vista de su computadora.

-¿y su novio, que tal esta?- esta vez si levanto la vista -¿novio?-dijo algo confundido- él no es de tener novios- dijo riéndose y sacudiendo la cabeza –ah ¿no? Y ese chico bajito con quien lo vi en la fiesta, quién es? – ¿tipo bajito? Lo pensó.

-se llama Trace- agrego Richards como quien no quiere la cosa -se quién es trace, pero no era uno de los dos chicos con los que estaba follando ese día- Le dije

-Claro que si- me dijo Richards- no hombre- negué, los recuerdo y a trace, trace era el musculito, que tenía un pene algo pequeño por cierto, y ese chico con cara de bebe.
No era para nada Trace-

-¿Cara de bebe?- pregunto Richard- sí, ese chico, no sé cómo se llama, el que parece un niño crecido, de no haber llegado en el momento que llegaste seguro que me unía a Endri y su trio- mire a Matías y sacudí mis cejas como invitación

-Bueno, a saber, seguirle los pasos ese chico es tarea perdida- dijo Richard –aunque sí que folla como las bestias el pequeño, sabes a lo que me refiero no Matías- le dije guiñándole un ojo.

-yo no.
No lo he.
no he- lo corte – ¿no has follado con él?- y se sonrojo, dios, en serio lo hiso- ¿en serio lo dices? Es tu amigo, y se ve que es abierto a un buen polvo, no me digas que no lo has follado, o pensado en hacer.

-Sí, digo no, lo he pensado pero yo no soy de ese tipo- coloque mi mano en su rodilla y le pregunte e tono bajo – ¿de qué tipo? ¿De los que follan con amigos, o los que se dejan follar con amigos?

Trago visiblemente y no respondió, tome la delantera –¿sabes? cuándo una amistad es lo suficientemente fuerte el follar no es problema, solo tiene que ser algo físico, y tu amigo tiene un culo que vale la pena probar, créeme, y su boca también se ve apetecible, solo que de eso te puede hablar más tu padre que yo.
Richard se tensó, Matías solo abrió más los ojos mirando la espalda de su padre –¿tú lo has besado papa?- no, le dije, acercándome un poco más a el -ha metido su deliciosa polla en la boca de Endri- Matías me volteo a ver, su respiración trabajosa decía mucho

–o sé que disfruto más, tener mi polla enterrada hasta los cojones e su culo, o atragantarse con la polla de tu padre-

–pero… pero.
Ustedes son pareja- Le sonreí,- sí, lo somos, pero confió en tu padre y el confía en mí, lo nuestro no solo es físico, podemos estar con otros -subí mi mano por su pierna solo tocándolo con la punta de los dedos- y no comprometer nuestros sentimientos.
Solo hay otra persona por la que se siente algo más profundo que lo siente por mí, y eso está bien para mí- llegue a su entrepierna, el solo respiraba fuerte y tragaba audiblemente.

-Entonces Matías, no has follado con Endri, ¿pero has follado con otro hombre?- negó con la cabeza- ¿te gustaría hacerlo? – coloque mi palma en su entrepierna, el volteo a ver a su padre, yo hice lo mismo, Richards estaba viéndonos y si su cara no era indicativo que la situación lo tenía a mil, la tienda de campaña en su entrepierna lo era.
Le hiso un asentimiento a Matías, que volteo a verme y asintió, me levante y me coloque entre sus piernas abiertas, me fui a su cuello y lo bese, el gimió y echo su cabeza hacia atrás, baje abrí lentamente sus vaqueros, su polla salto, ya dura y goteante, era delgada y larga diría que unos buenos 19cm –wow, que hermosa- le dije y me la metí sin miramientos a la boca, el gimió de nuevo baje sus vaqueros aun con su polla en mi boca, era deliciosa, más rígida que la de Richard, igual de grande y de liosa, tome sus cojones con una mano y los hale, haciendo que se retorciera en el taburete alto, vi de perfil a Richard colocarse junto a nosotros, bajo un poco el pantalón de chándal dejando su polla al aire masturbándose, le hice señas para que se acercara más, quite su mano y lo masturbe, alternaba entre verme y ver a Matías.

Me lleve la polla de Matías lo más profundo que pude atragantándome, cuando me separe de su polla tomando una gran bocanada de aire, descanse sobre mis rodillas – dios, me duele el brazo, Matías ¿porque no ayudas a tu padre mientras me concentro en ti? No soy muy bueno y mamar y masturbar me enreda un poco- el dudo, ero estiro su mano y comenzó a masturbar a su padre, era hermoso, padre e hijo disfrutando.

Richard cerro los ojos y con su boca entreabierta dejo escara un gemido como de alivio, regrese a la polla de Matías, lo lleve un poco al borde del taburete, haciendo que quedara recostado en el pequeño respaldar, subí sus piernas aun enredado en sus vaqueros, humedecí un dedo y tantee su entrada, haciéndolo gemir más, lleve mi lengua a su culo y comencé a comérselo, olía caliente y sudoroso, lampiño, disfrute de él, hasta que era un masa maleable entre mis manos no estaba al 100% en la paja que de daba a su padre, lo que era buena señal, metí mi dedo en su culo, dio un pequeño brinco, necesitaba lubricante ero no quería irme, tome de la encimera un poco de aceite de oliva, unte mis dedos y su culo, meto otro dedo, y después otro hasta que estaba listo, me levante saque mi polla, tenía condones en mi cartera, quería meterme en su culo, rosado y estirado, lampiño, con sus pequeña nalgas, me enfunde en el condón, y se la metí lentamente, abriéndolo, resople cuando mi polla traspaso su esfínter, deje que se acostumbrara a mí.
Lo folle lento, entrando y saliendo, viendo mi pollas abrir su culo, coloque mis manos en los bordes del taburete y comerse a joderlo en serio, entrando y saliendo, pensé que el taburete se rompería por el peso combinado pero no me importo

–si, si, que culo tan rico- resople.
Matías solo gemía dando pequeños grititos cada vez que mi polla se enterraba por completo en su culo, la polla de Richard olvidad, aunque no importo porque se estaba pajeando viendo como me cogía a su hijo, como estrellaba mi pelvis en ese tierno culo, como le estaba abriendo, jodiendo, Richards se colocó detrás de mí y me pregunto al oído -¿puedo?- maldita sea, ¿que si podía? Yo malditamente lo quería, me Salí de él, saque un condón y se lo pase, coloco las piernas de Matías en sus hombros y se enterró en el, lo tomo por el culo y lo levanto, lo llevo a la encimera junto a nevera que era más baja y lo coloco allí, Matías descanso su espalda en la pared viendo a Richard los ojos, quien tampoco en ningún momento quito tus ojos de su hijo, lo llevo un poco más al borde aun con sus pantalones de chándal por debajo de sus nalgas lo judío lento, sus enormes nalgas contrayéndose con cada envestida a su hijo, quien estaba como ido, aumento más el ritmo, pensé que lo partiría por la mitad –¿quieres más? ¿Quieres más?- le decía Richard perdido totalmente en el culo del niño.

–Sí, papa, si, dame tu polla jodeme, soy tuyo, tuyo- Richards bajo su cabeza y lo beso, devorando su boca, desesperado, desordenado y caliente como el infierno, me estaba dando la paja más feroz de mi vida viendo como Richard taladraba el culo de su hijo, como violaba su boca, el chico mucho más pequeño enredo sus piernas en la cintura de su padre que no aminoraba el ritmo de la brutal cogida, sus movimientos se hicieron erráticos, sabía que Richard estaba al borde, comenzó pajear Matías, separado su bocas, el chico se dejó caer, se vino con un grito fuerte, casi femenino, vi su leche caer en su pecho, su barbilla, en la pared, y me vine también, Richard continuo como por cinco embestidas más hasta que gruño su orgasmo, dentro de culo de su hijo.
Dejo caer su cara en el pecho de Matías, llena de su leche, le vi lamer quedamente y tragársela, le dijo un apeas audible, -te amo- Matías respondió, yo también te amo papa.
Fue hermoso,

Me escabullí dejándolos solo, necesitaban tiempo a solas, se lo merecían, me fui arriba, tome mi celular llame a James , preguntándole que tal estaba como había ido, se rio y me dijo que no habían pasado apenas cuatro horas desde que nos habíamos separado, pero me dijo que estaba bien, se notaba contento, le pregunte por sus hermanas y que hacía, cuando terminamos de hablar Salí y me coste en la cama, esperando que Richard regresara, cuando lo hiso venía con Matías tomado de las amos, los do completamente desnudos, nos unimos en la cama, solo dormimos, con .
Richard en medio.