Los inicios con mi hermano ll
Sólo sentía cómo jugaba con mi tanga .
Ahí estaba yo con los ojos cerrados y con mis pechos de fuera recién lamidos por mi hermano que fue quitando las cobijas con las que estaba tapada, no sé si fue mala suerte mía o buena suerte para él pero yo estaba en ese momento con las piernas un poco abiertas sólo sentí cómo le dio una última chupada a unos de mis pezones y fue directo a poner una de sus manos por encima de mi pans en mi vagina y ahí la dejó un rato sin moverse, yo tenía los pezones duros por sus lamidas y por el frío que sentía pero no se porque no le decía nada sólo estaba sintiendo hasta donde llegaba, al poco rato fue subiendo su mano hasta llegar al elástico de mi pans y fue empujando poco a poco hasta llegar a mi tanga con la cual se puso a jugar moviendo de un lado para otro, yo me estaba poniendo húmeda con cada movimiento que hacía pero una vez que vio que yo no me desperté fue metiendo su mano palpando todo lo que podía (en ese momento yo estaba depilada ya que desdé secundaria tomé esa costumbre para estar cómoda con mis tangas), por un momento paso su mano por mi clítoris pero se fue directo a la entrada de mi vagina y se quedó otro rato sintiendo mi humedad, poco a poco metía sus dedos en mi de manera muy torpe pero fue suficiente para yo dejar me hacer sin que le dijera nada, así se la paso parte de la noche jugando con sus dedos dentro de mi y dándome una que chupada en los pechos, yo terminé humedad y cuando se casando de jugar conmigo me acomodo los pechos y mi pans.
Al día siguiente el se portaba otra vez de manera distante y no me quería hablar, así pasaron unas noches sin que me hiciera algo pero a la semana volvió a tocarme, yo me la pasaba acostada de lado para que se me salieran los pechos de la blusa y así los pudiera ver hasta que por fin metió su mano para sacarlos y chuparlos a su antojo, en el fondo sabía que esto estaba mal pero admito que me gustaba sentir esos masajes en mis pezones, está ves cuando termino de lamer mis pechos sé paró y me quitó las cobijas pero cómo estaba de lado se puso de tras de mi y me bajo el pans quedando con mi trasero de fuera sólo para el, al principio se la paso tocando todo, moviendo mi tanga y jugando con mis nalgas, otra vez metió sus dedos y lo hacía con más calma pude sentir que me abría a su antojo para poder ver dentro de mi interior igual se la paso picando la entrada de mi ano con sus dedos pero solo lo rozaba y no se animó a meterme un dedo, fue lo mismo se canso de jugar con mi cuerpo y me puso todo en su lugar.
Así fueron varias noches en las que se la pasaban jugando con mi cuerpo cada que el quería, cada vez se volvía más ágil al sacar mis pechos y bajarme la tanga para dedearme, esto se repito por un año hasta que una noche decide encararlo pero no sabía que eso terminaría en más placer para mí……
No contaría todas las noches que me hizo ya que siempre fue lo mismo pero después que lo encare cambiaron varias cosas entre los dos… si quieren que les cuente cómo cambiaron las cosas demuestren interés en el relato y también en el anterior. Todavía falta contarles cómo fue que mi padre poco a poco también se fue fijando en mi a tal punto que ahora yo soy la que se encarga de sus necesidades cómo hombre y eso me convirtió en la mujer de la casa sin que mi mamá se dé cuenta.
Me gusto mucho tu relato no lo dejes cortado.