Los ladrones (Segunda parte)

pero estaba muda, intentaba gritar y no podía..
LOS LADRONES (Segunda parte)

Yo me había quedado sin voz, no sé si de tanto gritar, si por el terror o qué, pero estaba muda, intentaba gritar y no podía.

No sé cuánto tiempo habrá transcurrido y bajaron riendo los tres, ataron la frazada y se llevaron lo robado, me dejaron atada y no podía pedir auxilio, despues de mucho forcejear me solté primero una mano y luego el resto…corrí al dormitorio desesperada.

Clarita estaba desnuda, acostada boca arriba jugando con su robot…no lloraba ni se quejaba.

La revisé lo más que pude, solo vi que tenía muy irritados los labios vaginales.
Clarita era como que no me registraba, pero si me miraba y sonreía…

No hice la denuncia, porque me amenazaron que, si lo hacía, volverían a matarnos.

Mi primo se recibió el año pasado de médico pediatra, así que la vestí rápidamente, me cambié y la llevé a su casa…Le conté todo lo que habia sucedido, me aconsejó que haga la denuncia, pero me negué por miedo.

La revisó de punta a punta, me dijo que ya no tenia himen y que había sido penetrada vaginalmente y que por suerte sin mayores daños.

Que sin lugar a dudas había quedado afectada psicológicamente (Clara no se desprendía de su robot)

Ya terminó la revisión médica, mi primo la sentó en la camilla y Clarita dejó el juguete un instante y apoyó su carita en el pantalón del médico como olfateando o como besando la bragueta de mi primo que se retiró espantado.

” Esto es grave prima, tenes que hacer que la vea un especialista”

A mí solo me importaba que Clari estuviera bien físicamente, en ese momento.

Me costó volver a una vida normal, había cambiado las puertas de ingreso por puertas blindadas y puse rejas en las ventanas y alarmas satelitales.

Puse una cama extra en mi pieza y allí dormía Clari…

Todo parecía ir hacia la normalidad hasta que una noche me despertó un sonido que parecía la risa de mi hijita, cuando encendí la luz vi algo inesperado…Clari habia encendido su robot y tenia uno se sus brazos íntegramente metidos en su cotorra y se retorcía como gozaría el sexo una nena mayor. Se lo quice quitar y se pudo furiosa, la tuve que dejar hasta que en un suspiro profundo me dio a entender que había logrado lo que necesitaba.

Mi hija de solo tres años se masturbaba con un juguete de plástico, nadie me lo creería.

Me puse a investigar en las redes y finalmente encontré un supuesto médico que hablaba de un tema muy similar.

Lo consulté telefónicamente, le resumí lo que había ocurrido y me aseguró que me podía ayudar.

Vino a mi casa un martes temprano por la mañana y charlamos un par de horas donde se enteró de todos los detalles, tomaba notas y sacó un par de fotos de Clari y sus juguetes, de los lugares donde ocurrió todo.

Me pidió que subiera a la nena a su habitación y allí la puso a Clari sobre la cama, que apenas se acostó se empezó a desvestir y cuando estuvo desnuda, abrió las piernitas y miro al tipo como esperándolo…

Él se sentó en la cama y comenzó a acariciar a la nena directamente en su monte de venus, le dije que se detuviera que no iba a permitir que haga eso…

Me dijo, “mamá, solo hay una forma de lograr que su hija vuelva a ser normal”

Clara se puso impaciente, tomo la mano del tipo y la puso entre sus piernas…como yo me opuse, se sentó en la cama y gateó para poner su boca entre las piernas del hombre…

No supe que hacer, le di autorización para que haga lo que habia que hacer.  Me preguntó si estaba segura, porque una vez iniciado el tratamiento no se debía interrumpir.

Despues de pensarlo y ver a Clarita como enloquecida le dije finalmente que sí.

El tipo saco su poronga por la bragueta, estaba muy dura y brillosa… Clarita se abalanzo y se la metió en la boca…Me contuve de no parar ahí la cosa.

 

Clarita movía su cabecita metiendo y sacando la pija del tipo, cada vez más rápido…

Se detuvo de pronto levantó la mirada y me dijo “¿Mamá?” señalándome que yo haga lo mismo “No Clari, mamá no puede” el tipo dijo con voz ronca “si puede y debe” apuntando hacia mí su poronga.

Estaba jugada, así que se la empecé a chupar, Clari me acariciaba el pelo y se sonreía, de pronto me empujo la cabeza con fuerza y me hizo tragar toda la pija completa…

Me sacó y siguió ella, Cada vez más rápido hasta que el tipo acabó…me di cuenta por sus músculos y porque a Clarita se le hinchaban los cachetes…despues nada…ya no habia esperma en ningún lado, estaba todo en el estómago de mi hija y ella parecía feliz.

Se vistió solita, se bajó de la cama y se puso a jugar con unos peluches…parecía mi Clarita normal.

Le pregunté al tipo si todo habia terminado, pero me dijo que el tratamiento sería largo y difícil.

No me quiso cobrar, pero me dijo que apenas viera algún síntoma extraño que lo llamara a la hora que fuera.

Pasaron dos días tranquilos y cuando pensé que todo quedaria en el olvido, me desperté sintiendo algo extraño entre mis piernas, levanté las cobijas y era Carlita besando mi papo.

La quice sacar y gritó enfurecida, tironeando del elástico de mi bombacha para que me la sacara, Tuve que hacerlo, porque se ponía cada vez más brava.

Despues metió su boquita entre mis piernas y me besaba y me mordisqueaba y lamia.

De pronto me invadió una sensación de cachondez, no me podía resistir al placer de sentir sus caricias… y tuve un orgasmo, “ya, Clari, mami acabó” le dije tiernamente, se bajó de la cama y se acostó…no sabía si llamarlo al tipo, pero decidí ver si podía controlar la situación.

Pero al día siguiente Carla me pidió leche, le preparé una taza y cuando se la serví la tiró, dijo “Leche, leche de los señores” casi me da un ataque al corazón.

Siguió toda esa tarde repitiendo la palabra leche y caminaba en cuatro patas, chocando los muebles, casi lastimándose.

Lo llamé al tipo que la trataba y sin darme mucha importancia me dijo que debía conseguir alguien que le diera semen en su boca… que buscara alguien…

¡Como si fuera tan fácil!  Clari estaba cada vez peor y no se me ocurrían ideas, decidí salir a caminar, afuera lloviznaba y a las dos o tres cuadras había un viejo andrajoso y medio borracho sentado bajo un alero.

Me arrime temerosa y le pregunte si quería ganarse algún dinero, mucho no me comprendió, pero le dije que si me seguía a mi casa le iba a dar diez mil pesos y el indigente me siguió.

Tenía olor a humo y sudor…

Clarita al verlo lo abrazó por la cintura y hundió su cabeza a la altura de la bragueta. El viejo entendió que era de cariño y le acaricio la cabeza, pero Clarita ya le había abierto el cierre y intentaba sacar su pija que en esos momentos estaba muerta…la ayudé, el tipo estaba desconcertado, pero se dejaba hacer…Clarita se puso el chorizo arrugado en su boca, el viejo solo atinó a decirle “¿Nena que hacés?” …Como así no se le paraba, empecé a pajearlo y a chuparle la pija y al rato tuvo una erección…lo sentamos en una silla y Carlita lo mamó.

El viejo en su media lengua de borracho me pedia que le mostrara una teta…me saque la ropa de arriba y le mostre las dos, me acerque para que pudiera tocarlas a ver si eyaculaba más rápido y me lo podía sacar de ensima, empezó a chuparme una teta y luego siguió con la otra, así estuvo hasta que se inclinó para atrás y me dijo “¡Saque la nena señora, estoy por acabar!”

Yo volví a estar cachonda, puse su sucio dedo en mi argolla y le dije que acabara en la boca de la nena, que no se hiciera problemas…

Clarita tragó y tragó…luego lamió y se puso su ropa y se fue a jugar.

El viejo me manoteaba el traste, se babeaba, me quería coger, lo zamarreé y lo llevé a la puerta le di los diez mil pesos y lo eché.

Clarita estaba totalmente normal, pero yo no, tenía la bombacha totalmente empapada de mi calentura…Creo que yo también habia perdido la cordura, porque me quité los calzones y le puse mi concha en la cara de Clarita, primero me rechazo, pero creo que el olor o el sabor de mi vulva le dieron ganas de lamer y chupar.  Acabé en su boca y me quedé así quietecita, sin entender lo que pasaba… al rato sentí el ruido del robot, cuando quice mirar ya Clari me estaba metiendo un pie del juguete en mi concha, el movimiento mecánico, sumando que Clari lo metía y sacaba, me hiso acabar otra vez.

Me quedé mirándola…lo de ella era un trauma, lo mío casi degeneración…
Señalo con un dedo su boca y me dijo “Leche”, tenia que volver a buscar una fuente de esperma…

Necesitaba una fuente permanente, algo que encajara con nosotros, busqué en varios chats, hasta que encontré un pedófilo que se ajustaba como anillo al dedo a mi necesidad.

Al principio no quiso creerme que tenia una hija de tres años adicta al semen, no le quice contar toda la historia, solo le dije que era una obsesión…

Me dijo que le encantaría darle de mamar su pija, mucho mas si se iba a tomar su eyaculación.

Tenia miedo que el tipo se extralimitara, pero habia que probar…

La que se extralimito fue clarita, que al poco de conocerlo le quería abrir la bragueta desesperadamente, el tipo se desvistió, tenía una hermosa poronga, nada fuera del promedio.

Le pedí que se acostara boca arriba, esperando que Clari venga a tomar su leche, pero la nena se acomodo sobre su pene y dejó que entrara de a poco, no sin dolor…el tipo me moraba asustado, tenia miedo por m reacción, yo me encogí de hombros resignada, y el tipo se cogió a mi hijita, aunque en realidad mi hijita se lo cogió.

Solo le dije que no acabara adentro, que se la diera en la boca…El tipo era un torpe, desde que saco la pija de la concha hasta que llegó a la boca de Clari, dejó un reguero de semen, apenas unas gotas en su boca, tuve que recoger con una cuchara lo mas que pude para saciar la sed de mi hija…

Le dije que volviera al otro día y se apareció esa misma noche, lo estaba por echar a la mierda, pero Clari lo vio por la ventana y se puso feliz…

El tipo venia drogado, me metía a mi la mano entre las piernas, le dije que él venia por la nena, pero no hacia mucho caso. Le baje los pantalones y me puso la pija en mi boca a la fuerza, casi lo muerdo de bronca.

Logré que se acostara y Clari quería que yo me lo cogiera, me hacia fuerzas para que me suba, le di el gusto sin muchas ganas, Clari se puso entre nuestras piernas y besaba sus huevos y mi cotorra, me metía un dedo en la cola a mi y otro al tipo que se ve que le gustaba.

“Esta vez no acabes hasta que yo te diga hijo de puta” le dije mordiéndole los labios con fuerza.

A los minutos dijo “me voy” me bajé volando y puse a mi nenita, esta vez fue toda para ella.

El tipo se durmió, no había forma de despertarlo, así que lo dejamos ahí y me fui a otra habitación…Estaba cansadísima así que me dormí sin siquiera decirle buenas noches a la pequeña.

Estaba entrando el reflejo del sol cuando escuche gritos desgarradores de Clari. Se habia levantado sin que me diera cuenta y se fue a la pieza donde estaba el tipo.

Cuando entré. La nena estaba boca abajo gritando y el tipo tenia mas de la mitad de su pija en el pequeño culo de ella.

Me abalancé sobre él y le empecé a pegar, primero con las manos y después con lo que encontraba, hasta con un cenicero de vidrio le di por la cabeza, casi lo mato, pero solo lo desmayé…Clari sangraba por su colita y no paraba de llorar.

Esta vez hice la denuncia llamando al 911, les dije que el tipo era mi amante y mientras dormía había abusado de la nena. Lo llevaron esposado y le daban patadas tras patadas.

La atendieron en el hospital, tuvieron que hacer sutura, pero por suerte Clarita se curó.

Se curó en todo el sentido de la palabra, nunca más me volvió a pedir ni leche, ni ninguna cosa rara… era una nena totalmente normal.

Solo yo me pajeaba soñando que la violaban que le hacían bukake y no sé cuántas cosas más…

Sobre mi mesa de luz tengo su robot sentadito, cada tanto lo meto en mi vagina y lo enciendo para que cuando está todo adentro mío mueva los brazos y los pies.

 

 

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