Madre

Tuve suerte de tener una madre como ella.
Es la primera vez que escribo algo así… Espero que sea de su agradó, si al final les gusta, no se olviden de comentarlo.

Disfrútenla!

Mamá es realmente cariñosa, siempre enseñándome placeres y disfrutando una vida juntos.

Mamá es una mujer hermosa, terminó embarazada de mi a los 16 años. Fue una estupidez que hizo, porque el chico la abandonó cuando se enteró del embarazo, pero al menos decidieron tenerme.

Al nacer fue una vida alegre e inocente, como un niño jugando sin conocer el mundo. Pero al cumplir los 7 años, madre terminó haciendo algo que no esperaba.

Ella me violo, teniendo sexo con ella todos los días, al principio estaba asustado, pero cuando fue pasando el tiempo, lo fui disfrutando esa sensación.

Ahora cada vez que tenemos oportunidad, no dudamos y cojemos.

Así ha sido cada día.

De hecho, ella me ha hecho sugerencias. Haga confianza con algunas chicas de la escuela y que la traiga a casa para un trío.

Eso no es una mala idea, pienso intentarlo cuando haya una oportunidad, me llevo bien con varías chicas, tal vez no será complicado.

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«Mamá sigue» dije con suspiros, en estos momentos estoy disfrutando una mamada con los deliciosos y suave labios que ella tiene.

Con un «puff «ella despegó sus labios de mi pene.

«Sabes, ya debes de alistarse para ir al colegio» dijo para después, volver a meter su boca en mi verga, tragandola toda.

Teniendo leves escalofríos, seguía disfrutando la sensación.

«Solo un poco más, aún hay tiempo» coloque mis manos sobre su cabeza e hice que la tragara hasta el fondo.

Unos empujones más, me vine en su boca, solo vi como sus mejillas se inflan por la cantidad excesiva de leche.

Desconectandose, me miró y abrió su boca, un líquido blanco espeso que estaba siendo jugueteando con su lengua, y al poco tiempo fue tragado y sopló un vapor caliente.

Eso me excitó más, me levanté del sillón y la coloque sobre él, una pierna recargada en el asiento y sus manos firmes sobre la punta del respaldo.

Movía su trasero de un lado a otro tentadoramente. Al ya no resistirme más, sostuve con mi mano mi pene, y se la coloque en la entrega de su vagina, la fui penetrando lentamente, disfrutando la sensación cálida al penetrarla.

Ella jadeaba levemente, también disfrutando la sensación y poniendo un rostro de placer.

Llegando a tocar su interior, mi polla ya estaba dentro, nuestra respiración era agitada, pero no quiero esperar más.

Empecé a sacar mi pene lentamente y volverla a meter, unas cuantas repeticiones, el ritmo fue aumentando y el choque de la carne se empezó a escuchar.

Los gemidos de mi madre eran más fuertes, mientras que movía con rapidez mi cadera chocando con fuerza su interior llegando al fondo.

Me recargó sobre ella y estiró mis brazos, para que con mis manos empezara a masajear sus senos algo grande, tocando la punta y estirarla.

Ella solo gemía con fuerza por el placer, ella se volteó y me miró, también levanté mi mirada y la vi.

Nuestros rostros sudados, disfrutando el placer que nos hacemos, ambos nos acercamos como pudimos y nos dimos un beso en los labios.

Al poco tiempo, me vine dentro de ella, llenando su interior de una espesa leche caliente y cremosa. Sus senos soltaba un poco de leche materna mientras la sostenía y nuestros labios seguían unidos, dándonos un delicioso y suave beso.

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A los minutos después, ya me había vestido y estaba listo para irme a las clases.

«Mamá me voy» le dije y me acerque a ella, ella seguía aún en el sillón desnuda , aún con mi leche derramada en su interior.

Ella solo me vio y me dio una dulce sonrisa, «que te vaya bien, amor» dijo para después darnos un cálido beso.

Saliendo de casa, empezaba otro día, y empecé a hacer algunos movimientos con esas inocentes chicas de mi clase…

…continuará