mañanas felices de vacaciones parte 2

pamelita ya iniciada me ayuda con su hermanita lucia, mi hija biologica.
pamelita se estaba acostumbrando a venir todas las mañanas a la cama luego de mi mujer se fuera a trabajar, le gustaba despertarme con besitos en la cara, chupándome el pene, masturbándome o haciéndome cariño en los testículos, mi favorita era cuando yo me seguía haciendo el dormido y ella se sacaba sus calzoncitos y se sentaba en mi cara meneándose en mi boca y mi nariz, no recuerdo una sensación como esa, la pequeña vagina de mi hijastra estimulándose conmigo cada vez mas rápido, podía sentir su olor exquisito parecido al de su mamá pero mas dulce no tan ácido, sus juguitos cayendo por mi cara mientras con mi lengua abro sus labios y siento el calorcito de su vagina, lo recuerdo y me dan ganas de tener esa vaginita escondiendo mi falo.

Uno de esos días, pamela llego a mi pieza ocupando un vestidito transparente de mi mujer que a ella le quedaba hasta los tobillos,  y me dijo, -papá quiero ser tu esposa, solo yo soy tu esposa ahora, la mamá nunca está con nosotros, bueno?… mientras la escuchaba veía su cuerpo desnudo a través del vestido y mi verga se empezó a parar de inmediato, mi hijastra lo notó y me dijo que quería hacer el amor conmigo, -papi ya estoy lista para que hagamos el amor porque ahora soy tu esposa-, yo no sabía que mi esposa ya le había explicado el acto sexual asi que le pregunté a que se refería, -como eso hijita?-, a lo que me responde, -si papá ya estoy lista para que me metas el pene en la vagina, para recibir tu amor.- mientras se acercaba se tocaba su vagina y sobaba sus labios chiquititos abriéndolos, dejando el vestido mojado al rosar la entrada de su hoyito apretadito, me destape y deje salir mi pene erecto, venoso y lubricado de solo imaginarme penetrando a mi hijastra con su bendición, serio, le dije que subiera a la cama y no se quitara el vestido, me recosté y la guie para que sentara en mi, dejando que toda la longitud de mi pene pudiera entrar y ella controlara la velocidad, una vez encima empezó a bajar su cuerpo hasta chocar con la cabeza de mi verga que ya estaba poniéndose dura e hinchada, mientras mi hija bajaba su pelvis podía sentir como se abría el tunelsito de su vagina, lentamente bajaba y subía, yo sentía como el calor de sus labios abrazaba mi glande y mi tronco, su vagina cada vez mas dilatada, podía recibir mas profundo mi pene, pamelita gemía de dolor mas que de placer, le dije que bajara subiera y bajara mas rápido, como le estaba doliendo la acerque a mi pecho y empecé a moverme yo para penetrarla, primero lentamente sin introducir mi pene completo, ya podía sentir su vagina empapada y ya se quejaba menos asi que empecé a meterla mas rápido pero no hasta el fondo, para dilatar su entrada pero en la calentura del movimiento y la rapidez terminé introduciéndole mi pene hasta el fondo de su vagina, nunca había culiado una vagina de 9 pero ese día sentí ese fondo carnosito a donde el pene no debe entrar, en el momento que empecé a golpear su fondo, mi hijita se empezó a retorcer y a gemir muy fuerte, tuve que afirmarla fuerte para poder seguir penetrándola, seguí y seguí hasta que me empezaron a dar ganas de eyacular, en ese momento deje de meterla y sacarla tan rápido para sacarla y darle metidas profundas, con cada estocada mi hija sollozaba y lloraba mientras mi calentura desaforada solo podía pensar en llenar esa vagina chiquita de semen, seguí con las metidas profundas hasta que mi hija tuvo un orgasmo o quizás se desmayo, la saque de encima mío y deje su cuerpo estremeciéndose en la cama mientras tocaba sus pechos sin desarrollar y su vagina hinchada de tanto sexo, estoy en eso cuando escucho a mi hija lucía de 4 años venir a la pieza caminando llamándome, era de mañana y venia recién despertando, lucia aun dormía con pañales ya que aun orinaba su cama al dormir a veces. así que me levante desnudo con mi pene parao empapado en los jugos de mi hijastra a lavar a mi hija, nunca había tenido pensamientos oscuros al mudar a mi hijita pero ese día luego de reventar el sapito de mi hijastra y que lo aguantara como campeona, la intriga de saber como seria penetrar a mi hija que era mi princesa, corrompió mi mente, la lavé, le puse calzones y la acosté con su hermana, pamela estaba despertando y sola empezó a gemir, y moverse como si aun estuviera sintiendo placer, tiritaba y se tocaba su vagina mientras gemía y me miraba a mi  a su hermana menor, lucia que hacia todo lo que su hermana hiciera, empezó a copiar a pamela y con sus deditos suavemente tocaba su vagina mientras veía a su hermana hacer lo mismo.

al ver esa escena olvide que eran mis hijas o su edad.

le dije a pamela que acomodara a lucia para que le chupara su vagina y le metiera sus deditos para empezar acostumbrarla, pamelita acostó a lucia, le puso una almohada para que quedara cómoda y le paso su mamadera para que se tomara su papa, mientras le bajaba los calzones, mi vista era exquisita, del respaldar de mi cama podía ver como lucia tomaba su mamadera, mientras pamelita en cuatro, iba bajando los calzoncitos de lucia para lengüetear toda la vaginita de su hermanita menor, desde los pies de mi cama podía ver todo lo hermoso de la vagina abierta de pamelita y su culito de burbuja erguido dejándome ver entre el triangulo de sus piernas como le comía la vagina a su hermana menor, no pude aguantar mas, le tire varios escupos al culito de pamela para lubricarla y con mi pene le esparcí toda mi saliva en el vagina, empecé a meterle el pene de menos a mas, en esta posición podía llegar mas adentro y golpearla menos, asi que la embestí hasta que mis testículos golpearan como si fueran a entrar, mientras mi pamela recibía mis metidas, no dejaba de comer el sapito de su hermana menor que ya habia soltado la mamadera y tenia agarrada del pelo a su hermana, no podía creer lo que estaba viendo, mi hija dejándose chupar la vagina por su hermana mayor mientras yo la culiaba, entre metida y metida no pude aguantar y me empecé a correr, no quería terminar dentro de mi hijastra y aunque se me escaparon algunos chorros en su vagina alcance a sacar el pene y correr a pamela para eyacular en el sapito de mi hija menor, pamelita de celosa, me chupo el pene hasta que se me paro de nuevo y se trago todo el semen para que yo la quisiera solo a ella.