ME BENEFICIE DE LA INFIDELIDAD DE MI MADRE

Mi madre una mujer ardiente y hermosa que no pude dejar pasar sin conocerla.
Lo que les voy a narrar fue una sorpresa para mi cuando tenía quince años, por esa época gracias a internet el tema del sexo no me resultaba desconocido, pero imaginaba que muchas cosas eran solo una fantasía hasta que en el colegio un día se presentó un problema con el suministro del agua y todos los estudiantes regresamos a las casas. Por aquella época, mi padre siempre me llevaba en su auto al colegio y al final de la jornada mi madre me recogía. Pero ese día con un amigo que vivía cerca de mi casa decidimos irnos por nuestra cuenta, tomamos un auto bus y caminamos alguna distancia hasta la casa de cada cual.

Yo pensé en darle una sorpresa a mi madre para demostrarle que había sido capaz de viajar por mi cuenta desde el colegio hasta la casa. Como tenía llave de la entrada, abrí la puerta, entre y luego caminé hacia el segundo piso, esperando encontrar a mi madre, si ese día no había salido a atender algún asunto familiar. Pero el sorprendido fui yo, cuando comencé a escuchar gemidos que provenían de la habitación de mis padres y llegué a pensar ellos estuvieran disfrutando del sexo.

Pero la curiosidad me invadió y caminé discretamente hasta la puerta que estaba semi ajustada de manera que pude ver hacia el interior sin riesgo que notaran mi presencia. Al comienzo solo distinguí dos cuerpos desnudos, pero al afinar la vista me di cuenta que un cuerpo era el de mi madre y el otro de un vecino que tenía unos veinticinco años, un joven atractivo, según decían las mujeres que lo conocían. El vecino conmigo apenas el saludo y nada más, no teníamos nada en común por nuestra diferencia de edad.

Al parecer ese día apenas estaban comenzado de manera que a pesar de mi azoramiento por tan inesperada sorpresa, me tranquilice ya que ellos estaban en lo suyo por lo cual no iban a notar mi presencia. Jamás espere eso de mi madre, porque la consideraba una mujer muy recatada y siempre fiel a mi padre. Respire un poco y trate que volviera la calma a mi cuerpo, saque mi celular y empecé a grabar un video sobre lo que acontecía dentro de la habitación, buscando la forma que se vieran bien los rostros de mi madre y el vecino.

Después que me pasaron los nervios, entre en otra etapa que fue la de la excitación. Ver a mi madre totalmente desnuda, algo que nunca había sucedido y menos follando con otro hombre distinto a mi padre, con el que estaba disfrutando del sexo en todas las formas me produjo una tremenda erección.  Por momentos tenían sexo oral, donde él hizo que ella disfrutara un orgasmo al motivar su coño y en especial su clítoris con la lengua, luego cambiaron y ella metió la verga del vecino en su boca y la mamo por varios minutos hasta que él le pidió que se detuviera.

A continuación, el vecino la hizo acomodar en cuatro o de perrito como dicen, y la follo desde atrás tomándola por las caderas para clavarle su verga una y otra vez, entre tanto los senos de ella se balanceaban hacia adelante y atrás, más tarde él estimulaba su coño con la mano hasta lograr arrancarle un segundo orgasmo.

Luego él la acostó boca arriba y siguió follándola por unos cuantos minutos más hasta cuando él dijo… no aguanto más, me voy a correr, me voy a correr y ella le pidió que se corriera dentro de ella que no había riesgo que la fuera embarazar. Al concluir se quedaron pegados por al menos un par de minutos, él acostado con su cuerpo sobre el de ella, permaneciendo conectados por el sexo.

Apenas se separaron empezó a fluir por la parte interior de las piernas de mi madre el semen que él le acababa de dejar dentro, e imaginando que estarían por terminar me fui directo a esconderme en mi habitación pudiendo escuchar lo que sucedió afuera.

Cuando finalmente salieron de la habitación al hall, cruzaron algunas palabras, él le dijo… Princesa sabes follar como ninguna mujer en el mundo y ella le respondió… embustero, así le dirás a otras mujeres. Pero él le replico… No, no, es cierto por eso deseo que nos veamos pronto nuevamente. Y ella dijo… ¿Sí? ¿Y cuándo?

Yo desearía todos los días, pero tú estás casada y debemos ser discretos y ella le propuso que volviera el viernes a las nueve de la mañana y él acepto de inmediato.

Después que el vecino se fue, mi madre entro a bañarse y más tarde yo pude salir a esperar que ella me viera, imaginé que vendrían las preguntas sobre mi presencia en la casa a esa hora, quien me había traído, etc., etc., pero para eso, ya tenía preparadas todas las respuestas y efectivamente salí avante del interrogatorio.

Con esta información decidí simular el viernes que iba al colegio, mi padre me llevo en su auto y a cambio de entrar a estudiar regrese a la casa, dejando pasar el tiempo necesario. Efectivamente antes de la nueve me encontraba cerca de la casa, pero no entre, me quede a la expectativa para ver qué pasaba con el vecino y a las nueve en punto él estaba tocando la puerta, mirando para todas partes, y pronto mi madre le abrió, entro y cerraron la puerta.

Me quede atento, dejando pasar los minutos hasta que vi que las cortinas de la habitación de mis padres se cerraron, entonces considere que ya podía ingresar y si me encontraba con mi madre tendría que inventar alguna mentira, que me sentía enfermo o mareado y que alguien del colegio me había llevado a la casa. A continuación me dispuse a entrar,  fui al segundo piso y los encontré aun hablando, reían y empezaban a desnudarse, de manera que fui a mi habitación prestando atención para decidir en qué momento me podía acercar a verlos.

Pasaron al menos cinco minutos que me parecieron eternos y esta vez de solo imaginar lo que harían, empecé a excitarme y mi verga se fue poniendo dura como un riel, en esos momentos la curiosidad me daba ánimo para ir a observarlos.

Esta vez quien llevo la iniciativa fue mi madre quien dejándose desnudar por el vecino hizo lo propio con él y ella comenzó por darle sexo oral con mucha efusividad y luego cambiaron, el vecino se acomodó en medio de las piernas de mi madre y con su lengua la puso a gemir hasta que ella lo detuvo, hizo que él se acostara boca arriba y ella se subió a horcadas sobre él, y tomando su verga la dirigió a su coño y como quien disfruta de un delicioso manjar puso la punta de la verga del vecino a la entrada de su coño y lentamente lo fue desapareciendo en su interior hasta que sus pelvis chocaron, después de disfrutar esa maravillosa penetración comenzó a mover su cadera para dejar salir y entrar la verga del vecino y empezar a gemir como una loca hasta disfrutar de un estruendoso orgasmo, todo controlado por ella.

A continuación, vino una nueva sesión de sexo oral para él hasta cuando la excitación lo estaba acosando, entonces le pidió a ella que se acostara boca abajo y él se acomodó sobre ella para penetrarle el culo y aunque ella lo quiso frenar fue tarde porque él ya estaba dentro de ella. Ella le dijo, que estaba convencida que la penetración anal dolía, pero lo que estaba sintiendo era tan maravilloso que lo volvería a repetir muchas veces. De allí en adelante el vecino comenzó una carrera frenética de penetraciones hasta que le dijo a mi madre… No aguanto más, me voy a correr y ella le pidió que lo hiciera dentro de ella. Y así sucedió, se quedaron pegados por varios minutos en los que intercambiaron frases cortas que no logre entender. En este punto creí necesario desaparecer llevándome una maravillosa grabación de la follada de mi madre.

Cuando salían de la habitación escuche a mi madre decirle al vecino que le había gustado mucho la follada que le había dado a su culito y él le respondió, cuando quieras estoy dispuesto a repetirlo y los dos rieron.

Después de despedirse mi madre se fue al baño de su habitación y en ese momento aproveche para salir de mi escondite e irme a un parque cercano a disfrutar de las grabaciones.

Después de observar los videos mi verga estaba que explotaba, tenía claro que ella era mi madre, pero ahora la veía como una mujer a quien deseaba follar y en aquellos momentos en que pasaban por mi cabeza pensamientos locos decidí que ese cuerpo fuera mío y sin pensarlo dos veces le envié al correo a mi madre el primer video. Cuando llegue a casa en la tarde ella no estaba y en esos momentos de soledad pensaba una y otra vez si lo que estaba haciendo estaba bien o no, pero al saber que ella era infiel con mi padre no di reverso a mis intenciones.

Y antes que llegara mi padre al final de la tarde, llego mi madre y fue directo a mi habitación y sin mediar saludo me dijo… ¿Que esto que me has enviado?

Aunque me sorprendió, saqué fuerzas y le respondí… Lo que tú haces con el vecino, que me gusto y excito mucho y quería que lo supieras, además me fascino ver tu hermoso cuerpo desnudo.

Ella se quedó sin palabras y se retiró a su habitación, pero días después cuando le envié el segundo video me pregunto que pretendía con lo que estaba haciendo, le respondí que esos videos me excitaban mucho haciendo que la deseara.

Ella me respondió… pero soy tu madre, y yo le replique… si lo sé, también tú estás casada y no eres fiel. Ella se quedó muda y allí termino la conversación.

Una semana después llegaron mis vacaciones de estudios y mis padres decidieron ir a nuestra casa de campo, al lunes siguiente mi padre regreso a trabajar quedándome solo con mi madre y para distraerme me dedique a hacer ejercicio en la piscina y estando allí apareció mi madre con un sensual vestido de baño y me dijo… ¿me invitas? Le respondí… Si todo esto es tuyo no tienes que pedir permiso y lentamente ella entro al agua y al hacerlo, como el agua estaba algo fría, sus pezones se pusieron duros y se empezaron a marcar bajo la tela de su sujetador y yo dirigí mi vista hacia ellos. Al notarlo ella me pregunto… ¿En verdad te excita mi cuerpo?  Le respondí que sí, porque era muy sensual y me provocaba más estando desnuda.

Y ella consciente que nos encontrábamos solos comenzó a caminar hacia mí y por el camino me dijo… se hacía a donde se dirige tu mirada, por eso mira lo que voy a hacer, y dirigiendo la mano hacia su espalda aflojo el sujetador de su vestido de baño, apareciendo sus hermosos senos que aún conservaban su lugar y a cada paso que ella daba acercándose, me genero una erección imposible de controlar. Cuando estuvo pegada a mi cuerpo me dijo… ¿Quieres probarlos? No tuvo que repetir la oferta dos veces, porque enseguida acerqué mi boca a sus senos y empecé a mamarlos, cambiando de uno al otro. Esto creo la excitó, porque su respiración se agito y mientras yo me deleitaba con sus senos, ella deslizo su mano bajo el agua y pronto estaba palpando la dureza de mi verga.

Entendí que esto iba por el camino que yo deseaba y dejando de besar sus senos, rodeé su cintura con mis brazos y acercándola a mi cuerpo la empecé a besar en la boca y ella me correspondió mientras bajo el agua no dejaba de acariciar mi verga. Los hechos nos llevaron a un nivel de excitación que nos motivó a salir del agua e ir a su habitación, allí los dos terminamos de desnudamos y a continuación ella se acostó y separando sus piernas me ofreció su coño. Yo deseaba follarla penetrándola con mi verga, pero decidí alargar el momento y comencé a subir por en medio de sus piernas, besando sus mulos avanzando lentamente hacia su coño perfectamente depilado que estaba esperando las caricias de mi boca y de mi lengua. Allí me detuve hasta escuchar sus gemidos y movimientos que denotaron su excitación y finalmente su estruendoso orgasmo.

Dejé que ella descansara unos minutos, mientras tanto fui subiendo por su cuerpo hasta lograr que nuestros sexos quedaran enfrentados, en ese momento ella bajo su mano y tomando mi verga la lubrico en sus fluidos, para dejarla finalmente a la entrada de su coño. Sin ninguna prisa deje que mi verga penetrara ese suave coño deliciosamente depilado hasta pegarse nuestras pelvis. En ese momento ella busco mi boca y empezamos un largo y apasionado beso. Entre tanto mi verga disfrutaba del calor de su intimidad.

Pero mi deseo de disfrutar al límite la excitación que invadía mi cuerpo me llevo a iniciar movimientos de cadera para penetrarla una y otra vez y el nivel de excitación me llevo a movimientos con mucha fortaleza haciendo que se escuchara en la habitación cada encuentro de nuestras pelvis y esto al parecer a ella le agrado porque me decía… sigue, sigue, sigue así, me gusta, me gusta, que rico, uhmmm, uhmmm y cerrando los ojos movía su cabeza de un lado a otro como enloquecida y volteaba los ojos como si estuviera en trance, en ese momento comprendí que lo estaba haciendo bien y al presumir que ella había disfrutado un segundo orgasmo di rienda suelta a mi pasión explotando dentro de su coño dejando toda mi carga de semen del cual después vi aflorar un poco cuando nos separamos. Estando ya recuperados del esfuerzo me dijo… No imagine que podrías hacerme gozar tanto del sexo como lo has hecho, y a continuación me dio un beso y nos quedamos dormidos.

En esa semana al menos estuvimos follando unas cinco veces hasta el sábado que regreso mi padre y se suspendió la diversión. Esto lo escribo hoy lunes que hemos regresado de la casa de campo y tengo fresco en mi mente todo lo acontecido.