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Incestos en Familia, Masturbacion Masculina

Me cogí a mi prima y la embaracé – Parte 1

Mi prima Lilia, 3 años mayor que yo, me dejó probar su dulce miel.
Esta historia me la envió un seguidor, es tan buena que no puede dejar de ser contada.

Mi nombre es Rafael, en mi familia me dicen Rafa. Todo comienza por allá del año 2001, yo tenía 11 años y mis hormonas me estaban volviendo completamente loco, me quería coger cualquier culo que me pasara por el frente.
En aquellos años yo pasaba todas mis vacaciones en casa de mi abuela, allá vivía también una tia y sus 2 hijas, además de eso todos los días iba otra tía con su niña,  (era una nenita de 8 años, super rica, pero es historia para otro momento) la dejaba ahí y se iba a trabajar.

Y ahí con mi abuela vivía mi prima Lilia, de 14 años, a ella la había abandonado su mamá desde que era niña y nunca conoció a su papá. Así que imagínense, 4 culitos frescos paseándose por ahí y yo con la verga parada todo el día.

Lilia era delgada, estatura baja, morena clara, no era muy bonita pero tampoco era fea, tenía un culo riquísimo, antojable, tamaño medio pero bien paradito y firme, tetas pequeñas, con un pezón grande que se antojaba chupar en cuanto los ves.

Había empezado a descubrir la masturbación y me encantó, así que me la pasaba tirando leche a diestra y siniestra, pensando en mis primas. En una ocasión estaba mi prima Lilia inclinada y se le veía un culo delicioso, lo miré y no pude evitar hacer un gesto de excitación, me mordí los labios y me imaginé saboreando ese culo, solo que yo no me había percatado que frente a nosotros estaba un espejo jaja, mi prima volteó hacia el espejo y vio los gestos que yo hacía, deseando su culo.

Yo también voltee al espejo y vi que ella me estaba viendo, me dio pánico en ese momento, pensé que se iba a enojar o que le iba a decir a mi abuela, pero en lugar de eso solo se sonrió y paró un poquito más su culito rico.

Para mi fortuna, todos dormíamos en la misma habitación, mis 4 primas y yo, así que yo estaba ansioso esperando la noche para jalarme la verga, pensando en mis primas, me gustaba fantasear con que llegaban todas sobre mi, se empezaban a desnudar y me decían que querían que las enseñara a coger. Ya se imaginarán, mis sabanas terminaban llenas de leche todos los días.

Al siguiente día, traté de evitar a mi prima Lilia, porque, aunque no se tomó a mal que le estaba viendo el culo con descaro, me daba un poco de pena haber sido descubierto. Ese día, mi tía se llevó de paseo a sus dos hijas y en la casa de la abuela solo quedamos mi prima Lilia, mi primita de 8 años y yo.

Después de desayunar, mi abuela se fue al mercado, yo estaba viendo tv con mi primita y mi prima Lilia me dice:
Rafa, me voy a bañar, estoy esperando una llamada, si suena el teléfono tomas nota.

Yo solo asentí con la cabeza y seguí viendo tv y de vez en cuando le tiraba una miradita a mi primita, ella estaba sentada en un sofá a mi lado, con sus piernitas abiertas y se asomaba su calzoncito. Tenía que hacer un esfuerzo por reprimirme, me decía a mi mismo, no Rafa, tiene 8 añitos, contrólate!

Mi primita se cansó de ver TV y se fue a jugar, después de un rato regresa y me dice:
Rafa, dice Lilia que olvidó su ropa en la cama, que si puedes llevársela a la ducha.

Me llamó mucho a atención eso y pensé, será que Lilia me está enviando un mensaje? Está jugando conmigo?
Así que fui a la habitación a buscar la ropa de Lilia, entré a la habitación y vi la ropa sobre la cama, una blusa con tirantes delgados, un short super corto (me encantaba ver como paseaba su culo en ese short) y encima de todo, estaba una tanga diminuta.

Mi cabeza voló, yo ya estaba super caliente, pensando en Lilia bañándose y fantaseando con mi primita de 8. Mi verga estaba super dura, me la saqué y empecé masturbarme sobre la tanga, mi mente se llenó de imágenes de Lilia llena de jabón, chupándome la verga y después cambiaba a una imagen de mi verga en la boca de mi primita y así mi mente empezó a fantasear muy rico, mi verga seguía creciendo y se me puso durísima como nunca, sentía que me iba a estallar.

No podía dejar de masturbarme, el culo de mi prima Lilia y la panochita de mi primita me hicieron llegar al éxtasis, solté un gemido duro al venirme sobre la tanga, tiré toda la lechita caliente ahí. Estaba muy relajado y extasiado, en eso escucho un ruido, volteo, pero no vi nada, solo escuché una risita y las sandalias de mi primita al salir corriendo.

Me asusté un poco pero no le di mucha importancia, mas bien, me gustaba pensar que mi primita me había visto jalándome la verga que tanto deseaba meterle.

Tomé la ropa de mi prima Lilia y me dirigí al baño, toqué la puerta y mi prima abre y me dice: Por qué tardaste tanto?
Ah es que estaba viendo la TV le dije, ella abrió un poco más la puerta, y podía ver su cuerpo envuelto en una toalla delgada, era una toalla pequeña, apenas le cubría sus pequeñas tetas adolescentes y terminaba justo debajo de su culo.

Me dijo: Qué tanto me ves? dame la ropa!

Le di la ropa, con la tanga llena de leche, aunque obviamente lo limpié como pude antes, pero aún seguía húmeda y me fui a seguir viendo TV. No podía dejar de pensar en Lilia recien bañada, con esa toalla que apenas la cubría, y me torturaba pensando si había perdido una oportunidad en el baño con ella.

Por fin se llegó la noche, mi parte favorita jaja, en cuanto las luces se apagaban yo comenzaba a masturbarme, fantaseando con todas mis primas, yo dormía a parte en un catre, mi prima Lilia dormía en una cama ella sola y el resto de mis primas dormían juntas en una cama matrimonial.

Durante esa noche, no podía dejar de pensar en lo que había pasado, empecé a recapitular, primero Lilia se había sonreído conmigo cuando le vi el culo, después me dejó la tanga en la cama y me dejó verla en esa diminuta toalla, y a eso agregué que al parecer mi primita me había visto descargar mi leche. No podía resistir mas!

A mitad de la noche, con mucho cuidado, me levanté y me acerqué a la cama de Lilia, me aseguré que estuviera dormida y comencé a tocarla, ella estaba acomodada boca arriba. empecé tocando sus piernas, mi mano subía lenta y delicadamente porque no quería despertarla, tenía unas piernas ricas, torneadas, morena claro. Mi verga estaba durísima, pensé en sacarla y masturbarme ahí pero me daba miedo que alguna de mis primas despertara.

Seguí tocándola hasta llegar a sus tetas, ricas, pequeñas pero apretables. Ahí me detuve y regresé a mi cama, me acosté, iba a empezar a masturbarme, cuando siento un pequeño golpecito en mi hombro, era mi prima Lilia!

Me asusté bastante, no supe como reaccionar, solo me hice el dormido, ella se acercó a mi oído y susurró: eso no se hace eeh
pero con un tono entre juguetón y sexy. Yo seguía asustado, no dije nada y me quedé dormido.

Al siguiente día, casi no vi a mi prima, ella se fue desde temprano porque iba a trabajar medio tiempo en una farmacia cerca de la casa de la abuela y para cuando llegó, yo seguía un poco nervioso, siempre fui muy inseguro, así que mejor ya no moví ni insinué nada.
Para mi mala fortuna, estábamos a 2 días de regresar a clases, las vacaciones habían terminado y yo tenía que regresar a mi casa.

Cerca de un mes después, mi mamá me dijo que iba a ir a casa de la abuela, que si quería acompañarla. Yo moría por ver a mi prima Lilia, aunque fuera de lejos, necesitaba mas material para mis pajas, asi que accedí.

Ya en casa de la abuela, mi mamá estaba entretenida platicando con ella y yo me fui a ver TV en una habitación extra que mi abuela rentaba en ocasiones, esta habitación estaba un poco privada. Me senté en la cama y me saqué la verga, estaba super caliente. Mi prima estaba en la farmacia, pero ya no tardaba en llegar.

En la habitación había una ventana que me dejaba ver a lo lejos si alguien venía, asi que me dispuse a sobar mi verga mientras mi prima Lilia llegaba. Empecé sobando mi cabecita, imaginando que Lilia la besaba y poco a poco fui jalando mas y mas duro, cerré mis ojos para intensificar la sensación, estaba llegando al éxtasis pero me detuve, quería ver a mi prima antes. Abrí los ojos, giré mi cabeza hacia la ventana y allá a lo lejos estaba parada  mi prima, mirándome fijamente, al parecer estuvo todo el tiempo viendo como yo le dedicaba mi paja desde la ventana.

Desde su perspectiva, ella solo podía ver de mi pecho hacia arriba, aunque era bastante obvio lo que yo estaba haciendo.
Mi prima empieza a caminar hacia mi y yo rápidamente, cubrí mi verga con una cobija. Ella llega por fuera de la ventana, se asoma y dice:

– Rafa, qué haces primo?
— Estoy viendo una película (mi verga estaba piradísima y se notaba sobre la cobija)
– Seguro? Pensé que estabas haciendo otra cosa, con tus ojitos cerrados y esa sonrisa tonta en tu cara
— No, solo estaba viendo la película
– Qué tienes ahí abajo? Me dejas ver la película contigo?

No espero a que yo respondiera, fue y abrió la puerta de la habitación, entró y cerró con seguro.
se sentó junto a mi y me dijo, dame un poco de cobija a mi también.
Así que ahí estábamos los dos, cubiertos con la misma cobija, viendo la película, cuando siento como su mano se mueve por debajo de la cobija y empieza a tocar mi pierna.

No supe como reaccionar, me quede congelado, viendo la TV. Ella sigue acariciando y sube a mis bolas, las toca y las comienza a acariciar lentamente, mi verga se levantó completamente y voltee hacia ella, estábamos frente a frente a escasos centímetros, podía oler su aliento, y ella me dice: Por qué me tocabas en las noches?

No supe que responder, me quedé mudo, mientras ella seguía sobando mis bolas.

– Aaah, ahora eres mudo? dime, primo, te gusta sentir mis tetas? Por eso me tocas?
— si me encanta sentir tus tetas,
respondí
Ella subió la mano y toco mi verga, la cual ya estaba a punto de reventar, acarició mi cabecita y después tomó mi tronco completo con sus manos y empezó a masturbarme, arriba, abajo, arriba, abajo. Yo sentía que estaba en un sueño, uno de esos sueños que tanto había tenido y que tanto anhelaba.

– Te gusta lo que estoy haciendo primo?
— Uff me encanta Lilia, no sabes cuantas ganas tenía de esto
– Me imagino jajaja, no creas que no me doy cuenta de las miraditas que me hechas, el otro día que me llevaste la ropa al baño, mi tanguita estaba húmeda, dime, te pajeaste en ella, cabrón?
Yo ya estaba algo relajado, ella seguía masturbando mi tronco suavemente.
Si, le dije, tiré mi lechita ahí, prima, no pude resistirme

—  Jaja lo sabia! eres un puerco, me gusta! Así anduve todo el día sintiendo la lechita que dejaste en mi tanga cerca de mi conchita, deseando que tuvieras valor y te metieras conmigo en la cama durante la noche.
– Enserio? si lo hubiera sabido, créeme la hubiéramos pasado bien esa noche, Lilia

Cuando terminé de decir eso, ella bajó su cabeza, se metió bajo la cobija y comenzó a chupar mi verga suavemente, primero le dió unos besos a mi cabecita toda lubricada con mi liquido pre seminal y después se la metió a la boca. Yo me sentía en la gloria! Esto es el paraiso, pense. Era mi primera mamada, la primera vez que alguien me pajeaba, mi fantasía cumplida. No podía pedir mas

Como se podrán imaginar, yo con 11 años y en su primera vez, me vine después de unos minutitos, aguanté todo lo que pude pero era inevitable, mi verga estalló. Estalló dentro de su boca, nunca habia sentido eso, esa combinación entre extasis, felicidad, relajación, fue delicioso, solo de pensar en ello, se me puso la verga parada en este momento. Solté toda mi leche en la boca de mi prima, ella tragó una parte y el resto lo escupió en mi abdomen.

Subió la cabeza y comenzó a reir, jaja te gustó verdad primo? Que rica lechita
Lilia comenzó a lamer mi abdomen y a juntar con su lengua el resto de mi leche, la lamió toda, como una gatita puta y hambrienta
Yo estaba completamente extasiado pero también impresionado, no tenía idea de lo puta que era mi prima.
Ella se levantó de la cama, se bajó su short y quedó solo en tanga, se volvió a subir a la cama junto a mi, hizo su tanguita a un lado y me dijo, tócame ahora tu a mi,

Miré por la ventana, asegurándome que nadie viniera a interrumpirnos, todo parecía ir bien, asi que comencé a tocar su concha, completamente lubricada y rica, unos cuantos pelitos bien recortados. Tenía una panochita gordida, sus labios vaginales se veían super ricos, ella me guiaba con su mano, explicándome lo que le gusta y dónde le gusta

Me encendí completamente, un calor inexplicable me llenó de los pies a la cabeza, la tomé, la acosté en la cama, bajé su tanga y comencé a probar sus jugos, a sentir la piel desnuda de su concha en mi boca, en mis labios, en mi lengua. Su miel me sabía a gloria.
Ella se retorcía, su espalda se arqueó y comenzó a gemir, su respiración era cada vez más fuerte. Mientras mi lengua seguía disfrutándola, besaba sus muslos, su abdomen, volvía a su concha, tocaba sus tetas, recuerdo muy bien que sus pezones estaban duros, duros, nunca he vuelto a tocar y chupar pezones tan duros y ricos como los de mi prima Lilia.

Ella estaba super caliente, me dijo: – Rafa, cógeme, méteme la verga ya!

Pero mi verga aún estaba cansada, hacía unos minutos acababa de tirar toda la leche, nunca había tirado tanta leche en mi vida jaja Pensé que no iba a poder recuperarme, además me daba miedo de que nos descubrieran mi mamá o mi abuela.
Así que le dije, espera prima, quiero seguir disfrutando los jugos de tu panocha y seguí chupando su clítoris como un loco y tocándola por todos lados. amasaba su culo adolescente, rico y firme. Amigas y amigos, no tienen idea de cuanto lo disfruté

Cuando por fin sentí que me había recuperado un poco, me di cuenta porque al tocarla y besarla, mi verga comenzó a responder de nuevo, mi cabecita estaba llena de sangre, dura, firme y lista para otro round.

De nuevo eché un vistazo por la ventana, todo estaba despejado. asi que le dije, ven Lilia, la bajé de la cama, la puse en cuatro, con su pecho recostado en la cama. Era una posición que vi en una película porno y me encantó, a la fecha es mi favorita.
La acomodé y ella me dijo: – hazme lo que quieras primo, soy tuya, hoy soy tu puta! méteme la verga como cuando te imaginas y te masturbas por las noches.

No me lo tuvo que decir dos veces, le metí toda la verga, su concha estaba completamente mojada, así que mi verga entro de una, no puedo explicar la gloria de sentir su panocha completamente empapada y mi verga mojándose con sus jugos, así que recordé todo lo que había visto en las porno y comencé, adentro, afuera, adentro, afuera, era exquisito!!

Mi prima paraba su culito, arqueando su espalda, jadeando, ambos completamente desnudos y sudados. Recuerdo que la tomé de sus caderas y metí mi verga hasta adentro, ella tiró un gemido fuerte. Tuve que parar para revisar que nadie nos había escuchado.

Seguí metiendo mi verga en su vagina, entraba y salía taaaan rico! le pegué unas nalgadas y parece que eso la excitó más.
Sí, dame más fuerte primo, me decía. Y yo nalgueándola y penetrándola como un loco, hasta que no pude más y me vine dentro de ella.

La sensación fue divina, gloriosa, todo lo que había dentro de mi lo había vaciado dentro de esta puta adolescente, su panocha rebosaba de leche y caldito de su propia concha. Quedamos rendidos en la cama, y comenzamos a reir.
Nos limpiamos lo que pudimos con una toalla que estaba ahí y nos vestimos. Ninguno de los dos decía nada, solo nos tirábamos miradas.

después de unos minutos, ella se levanto de la cama y dijo: – Espero que lo hayas disfrutado Rafa, atesóralo en tu memoria para futuras pajas, porque esto no va a volver a ocurrir, solo quería quitarte las ganas y quitarme las ganas yo jaja

Abrió la puerta para salir, pero se detuvo y dijo: – Oye y no creas que no me doy cuenta también de las miradas que le hechas a Naomi eeh! (Naomi era nuestra primita de 8 años) a veces eres demasiado obvio, no seas pendejo, quítate eso de la cabeza, es una niña!
Yo solo reí y le dije — No se de que hablas, Lilia

Mi prima solo me miró, no dijo nada, se dio la vuelta y se fue. Yo solo vi como se alejaba, con ese mini short, que apenas le cubría sus nalgas sudadas que acababan de ser mías.

Y a pesar de que Lilia dijo que no se iba a volver a repetir, yo tenía esperanza de volverla a calentar y hacerla mía de nuevo.
Cosa que por supuesto sucedió, hasta me convirtió en papá jajaja. Vamos por la segunda parte, amig@s.

23 Lecturas/16 julio, 2025/0 Comentarios/por Leo Stinson
Etiquetas: amigos, baño, culo, mayor, primita, tia, vacaciones, vagina
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