Mi amiga Martha mi hijo y yo, que trío
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Yo quede viuda hace siete años y desde entonces he concentrado mi vida en mi hijo y no había tenido necesidad de hombre, cuando estaba muy alborotada me masturbaba, yo había tenido una vida plena de placeres con mi difunto marido. Mi amiga se había separado hacia un año así que conversamos mucho desde entonces.
Mi hijo tiene 20 años y saco la mezcla del papa y yo, es alto mide como 1.80, musculoso.
Después de la muerte de mi esposo yo me encerré y no volví a tener relaciones sexuales con nadie, como les dije cuando me alborotaba mucho me daba unas masturbadas bien buenas y se me pasaba.
Una noche mi hijo llego y me pidió que lo dejara quedar en la cama, no le vi nada de raro que mi hijo durmiera conmigo. Sin embargo se le volvió costumbre y una noche cuando sentí era que me abrazaba, me hice la dormida para ver hasta donde llegaba, sentí su respiración en mi nuca y su verga dura rozando mis nalgas, me quede quieta pero él no hizo nada mas, un día que yo estaba bastante excitada me masturbe y mis pantis quedaron todos impregnados con mis jugos, por la premura que tuve en la mañana los deje en el cesto de la ropa sucia, en la tarde cuando llegue y fui a lavarlo note algo raro en ellos, una mancha de semen los olí y efectivamente, olían a semen, me excite sobremanera, pero a la vez quede bastante preocupada, mis prejuicios no me permitían concebir que mi hijo se hubiera masturbado con mi ropa interior, busque alguna información al respecto y encontré que eso era más común de lo que pensaba, pero ni riesgo yo no podía estar pensando en eso, mi hijo teniendo sexo conmigo, nunca.
Le conté a mi amiga Martha quien lo tomo como siempre, todo en broma, incluso hizo alusiones de que ella se volvería loca con un hijo así, que corriendito se lo daría.
Las cosas siguieron pasando mi hijo seguía acostándose en mi cama y me abrazaba y ya su excitación alcanzaba a excitarme a mí también, lo enfrente y le dije que eso no estaba bien que él se metiera en mi cama excitado, que tuviera en cuenta que yo era mujer, pero que además le guardaba mucha fidelidad a su papa, el se sintió todo, me dijo que lo hacía no para ofenderme, sino que pensaba que yo necesitaba de un hombre y que él no me había conocido a nadie, discutimos bastante esa noche, así que le dije que se le acababan las dormidas en mi cama y que seguíamos disfrutando la compañía pero siempre relacionándonos como madre e hijo.
Mi amiga seguía haciendo broma con lo que yo le había contado, una noche ella me fue a visitar ya que estábamos las dos solas, y nos tomamos unos tragos, pusimos la tele y buscando que ver, encontramos un canal donde estaban pasando una película de contenido sexual, en el momento que sintonizamos el canal había un par de mujeres besándose y acariciándose, eso nos dio tema para charlar y nos preguntábamos que como seria esa sensación de sentirse acariciada por otra mujer, seguramente por el licor que ya estaba en nuestras cabezas mi amiga me propuso que la acariciara a ver que sentía, comencé a acariciarla como había visto en la película, ella se excito más de la cuenta y comenzó a acariciarme ella a mi también, nos dejamos llevar por el licor y la excitación y terminamos besándonos, entrecruzábamos la lengua mordíamos nuestros labios, ella metió mano por debajo de mi blusa y acaricio mis pezones que estaban duros, yo metí mi mano debajo de su vestido y acaricia su raja por encima del panty, se sentía ya húmedo, ella soltó la correa de mi cinturón y bajo mi pantalón y acaricio mis labios vaginales, me sentía en el cielo, algo que jamás había experimentado, ni siquiera en mi época de adolescencia loca, gemía, lamia sus labios, sentía sus dedos entrar en mi vagina yo igual sentía su vagina húmeda en mis dedos una delicia,.
Me acorde que mi hijo estaba por llegar, el me había dicho que llegaría como a las once, le comente a mi amiga, así que nos desnudamos rápidamente e hicimos un 69 espectacular hasta que tuvimos un orgasmo juntas, su legua acariciaba mi raja y sus dedos exploraban mi culito de una manera espectacular. Nos vestimos y seguimos tomando licor. Al poquito rato de estar ya vestidas mi hijo entro, nos saludo y dijo graciosamente que si lo invitábamos a la bacanal. Mi amiga se hizo la seria y lo regaño e incluso que le dijo qué era lo que pensaba de nosotras, pero bueno como mi amiga es tan bromista todo lo tomamos en broma le servimos un trago y nos pusimos a hablar de cosas sin trascendencia, que si la política, que si los partidos de futbol, mi hijo prendió la tele y claro en el canal estaban pasando otra película caliente mi amiga y yo nos miramos y lo miramos a él a ver que decía, solo esbozó una sonrisa de picardía y nos dijo ojo con esas películas porque no habrá consolador que sirva en esta casa, le dije que atrevido, mi amiga continuo con la broma y le dijo que menos mal que había llegado un consolador efectivo, seguimos bromeando, yo estaba un poco mareada y mi amiga no sé si hacia la borracha o de verdad lo estaba.
Le pidió a mi hijo que pusiera música y bailara con ella, y comenzaron a bailar, ella se pego totalmente a él y vi como a mi hijo se le comenzaba a notar el bulto que le crecía, además vi como mi amiga bajaba la mano y le acariciaba, note que el bulto se hacía más grande y me excite, pero no me atrevía a hacer nada. Seguimos tomando y ella dijo que quería volver a bailar y mi hijo se puso a bailar con ella y otra vez se le notaba bien crecido el bulto, me llamaron para que bailáramos los tres y fui a bailar con ellos, las dos le pasamos un brazo por el cuello a él, y el otro brazo lo pasamos por nuestros hombros, el puso una mano en la cintura de cada una, así que formábamos como un triangulo los tres, el tenia su cuerpo mas recargado hacia mi amiga de tal forma que le sobaba el bulto a ella, en un momento comenzó a moverse para un lado y para otro, no sé que me dio cuando sentí que mi hijo me tocaba con su verga dura, creo que me puse de todos los colores, seguimos bailando hasta que mi amiga Martha se paso, cuando vi fue que le abrió el cierre del pantalón a mi hijo y le saco su vergota y comenzó a sobársela, trate de separarme pero ella me apretó más fuerte y mi hijo también, así que su verga se incrusto entre mis piernas por encima del pantalón, mi mente no podía creerlo, estar en esa situación con mi hijo, se me salieron unas lagrimas y comencé a pedir que por favor no que eso era malo, mi amiga cogió la botella sirvió unos tragos y yo me lo tome de un solo sorbo, era la contradicción entre lo que mi cuerpo deseaba y mi mente me prohibía.
Seguimos bailando, mi hijo con su vergota afuera sobándola alternadamente a mí y a mi amiga, mi amiga de pronto deslizó la mano hacia mi blusa y la comenzó a desabotonar y le pidió a mi hijo que le bajara el cierre, ella tenía vestido con cierre a la espalda, yo ya tenía la blusa completamente desabotonada, pero me remordía la conciencia así que estaba llorando, mi amiga se quito el vestido y quedo solo en panty y brasier y me pidió que hiciera lo mismo, yo ya obedecía mas a mi cuerpo que a mi mente, me desnude también e igual lo hizo mi hijo. Mi amiga me dijo te lo voy a robar un ratico, se puso a bailar de frente con él, se abrazo a él , yo me abrace a ellos por un lado y me sorprendí cuando pase la mano por las nalgas de mi amiga bajándola hasta el muslo sentí la punta húmeda de la verga de mi hijo, me aferre fuerte a ellos, ellos se besaban, mi hijo le acariciaba los senos, se separaron un poco y mi hijo se voltio hacia mí y me abrazo también, me solté en llanto al sentir esa cosota entre mis piernas, el hacia movimientos y sobaba su punta por encima del panty por toda mi raja, mi amiga hizo como había hecho yo, se abrazo por un lado a los dos, cuando sentí fue que metió su mano por mi panty y comenzó a acariciar mis nalgas y metía sus dedos por la raja de las nalgas y llegaba a mi ano y lo tocaba, con que maestría que ya mi llanto se convirtió en gemido de placer sintiendo la verga de mi hijo rozar mi concha y los dedos de mi amiga explorar mi ano, fue tanta la excitación que bese a mi hijo y dimos rienda suelta a la lujuria.
Mi amiga le dijo a mi hijo que se sentara en el sofá que le íbamos a hacer un show, el se sentó y nosotras comenzamos a besarnos a tocarnos, ella chupaba mis pezones, yo se los acariciaba y cambiábamos yo se los chupaba y ella me los acariciaba nos abrazamos fuerte y movíamos las caderas para que se sobaran nuestras conchas que por lo húmeda que estaban hacían un ruido raro que a mi hijo le fascino porque decía eso mis diosas muévanse así.
Mi amiga se fue al sofá jalo un poco a m i hijo para que quedara a la orilla del sofá, se veía en todo su esplendor esa vergota, que provocaba, yo me arrime con ganas de devorarla, pero mi amiga manejaba la situación, hizo que le diera la espalda a mi hijo y pasara una pierna por encima, me fue empujando para que me sentara pero no encima de la verga de mi hijo sino en la ingle, cuando estuve sentada sentía la verga de mi hijo por toda mi raja, me moría de ganas por levantarme y metérmela toda de una vez, pero mi amiga me agarraba, le abrió la pierna a mi hijo lo que hizo que mis piernas también se abrieran ahí sentí mas rico la verga a todo lo largo de mi vagina, ella comenzó a chuparle las pelotas a mi hijo este se retorcía de placer y ella pasaba la lengua por todo el palo y se detenía en mi clítoris
ummmmmmmmmmmmmmmmmmmmm de solo recordarme, para mi hijo fue la sensación también más excitante, el sentir mis labios vaginales alrededor de su verga y la lengua de mi amiga lamiéndolo. Ella metió la mano debajo de mis nalgas y comenzó a hacerme presión para que me fuera levantando hasta que la punta de la verga de mi hijo quedo en toda la entrada de mi vagina, ella agarro la verga y la sobaba por toda mi rajita hasta mi ano una y otra vez ella lamia la punta, hasta que sentí que como que la había echado bastante saliva y la puso a la entrada de mi ano y comenzó a presionarme para que me fuera sentando, di un grito de dolor ya que nunca nada había entrado por mi ano, la muy malvada me dijo te están desvirgando gran puta yo moví la cabeza asintiendo y seguí dando griticos de dolor tanto que mi hijo me dijo si te hago daño mami no sigo, eso fue como un latigazo, trate de zafarme al recordar que estaba con mi hijo, pero mi amiga me agarro muy bien y no me dejo zafarme, y le dijo a mi hijo que me llamara por mi nombre o me dijera gran puta. Ella le echo mas saliva a la verga de mi hijo me la acomodo nuevamente en la entrada pero se paro delante mio me abrazo bien fuerte y me comenzó a empujar hacia abajo sin dejar mucha opción de movimiento, mi hijo agarraba su verga para metérmela por el ano, volví a sentir dolor y a dar griticos, pero mi amiga abrazada a mi me empujaba mas y mas y yo sentía esa vergota desgarrando mi ano y entrando a cada momento más, ya cuando estuve sentada sobre la pelvis de mi hijo ella se agacho y comenzó a meter sus dedos en mi vagina y lamer los labios vaginales, era una sensación extraordinaria, ella comenzó a darme mordiscos y yo me contraía, y eso le gustaba mucho a mi hijo que gritaba mas, mas, mas, mas, y gemía fuerte. Yo sentía la lengua de esa mujer explorando toda mi vagina, tocando mi clítoris, que en ese momento me comencé a mover y ufffffffffffffff que delicia sentir el roce de la verga entrando y saliendo de mi ano y la lengua de esa mujer en mi vagina, no sé cuantos orgasmos tuve. Mi amiga me dijo es mi turno, ella me acomodo para que hiciéramos un 69 ella arriba y yo abajo, sentía que le caín goticas de su vagina, tenían un sabor espectacular, la estaba lamiendo cuando sentí la verga de mi hijo abriéndose paso en su vagina, me estremecí del orgasmo que tuve en ese momento, en esa posición mi hijo le daba duro tanto por la vagina como por el ano
Yo me extasiaba acariciando sus pelotas chupándoselas, lamiendo su verga cuando la sacaba de la vagina de mi amiga, que olor y sabor indescriptible delicioso, el mete y saca de mi hijo duro un buen rato hasta que dijo me vengo, mi amiga salto como un resorte tomo su verga y comenzó a chupársela me invito a hacer lo mismo, lamiamos cada una por un lado la vergota, la chupábamos, hasta que sentimos que ya iba a eyacular y como si nos hubiéramos puesto de acuerdo nuestros labios se encontraron en la punta de su verga abrimos la boca juntando nuestros labios y la verga de mi hijo quedo dentro de las dos bocas y nuestras lenguas comenzaron a moverse y a tocársela hasta que sentimos el chorro de leche en nuestras bocas, me trague toda esa leche, era algo que me gustaba y a mi marido también le gustaba que me la tragara, nos dimos un beso con mi amiga, mi hijo se agacho y nos beso también, nos acariciábamos con las lenguas, nos recostamos en el sofá y nos quedamos dormidos.
Después de eso mi hijo siempre duerme conmigo en mi cama y mi amiga de cuando en cuando se nos une y se queda en mi casa.
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